1. Salvación
Corrías con un pan en la boca, con tu uniforme escolar y ese día mientras corrías alguien te gritó «¡Cuidado!» Era una voz femenina, no era muy aguda, pero tampoco era dulce o monótona. Ahí pensaste que te habías confundido, ya que no se te hacía familiar su tono. Ambos eran completos extraños.
Así fue como ella te describió, un extraño. Nunca supe si eras hombre o mujer, ella era buena evadiendo ese tema. Por eso en este momento prefiero tratarte cómo un tú. Aunque supongo que yo soy la única persona aquí, prefiero tratarte como ella lo hacía frente a mí. Yo no soy cercano a ella, para nada y tampoco es importante conocerme, así que seguiré contando este relato que no es mío si no de Maya; una chica que no conozco muy bien y espero entender en lo que dure esta historia.
Tú que no entendías que era lo que pasaba, te viste en una situación inesperada y giraste un poco la cabeza. Ahí viste que un auto se aproximaba hacia ti, era un camión y pensaste "¡No quiero morir!" supongo, pero esa voz que tú no reconocías, no hizo nada para detener tu posible muerte. Ella me dijo que no podía hacerlo y nunca se planteó salvarte, ya que sólo gritó por la emoción del momento y tampoco pensaba que la escucharías. Después de todo ya era hora de que ella dejara de preocuparse por ti, se le hacía tarde para llegar al colegio y se fue.
Ahí fue donde te diste cuenta que la gente sólo piensa en sí misma y estabas preparado para aceptar tu destino que era ser atropellado por un camión aquel día, pero justo ese rato cuando tu vida pasaba frente a tus ojos y aceptabas tu destino de morir aquella vez, sentiste cómo una mano se posaba en tu hombro y te jaló por detrás. Evitaste esa muerte que habría sido muy cliché ahora que lo pienso. Bueno, quizás te hubieras convertido en personaje que viaja a un mundo de fantasía o alguna de esas otras situaciones de las que tanto hablaba Maya cuando estaba conmigo.
Maya era una chica normal después de todo y no puedes culparla por no haberte querido salvar ese día. Las personas son así después de todo, siendo que hay pocos quienes hacen una buena acción sin interés alguno. Y para hablar con sinceridad, yo tampoco te habría salvado, más aun sabiendo quien eras y lo que harías.
Aunque Maya nunca olvidaría y esa sería la vez que ella se diera cuenta de que tampoco haría nada de importancia en su vida. No salvaría a una persona y tampoco se sentiría tan mal por eso, ya qué luego se enteraría que no moriste y que la persona que te salvó sería importante para ti, tanto como para ella.
Es decir esta sería la razón para que ella me contara esta parte de su vida, creo.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top