KazuhaxGorou

(Alerta spoiler, si no has visto o hecho la última parte de la batalla contra Baal "Shogun Raiden", vuelve cuando lo juegues XD)

Una presión obligaba al ejercito de la resistencia a protegerse, pero, ¿ qué había pasado?, en principio nadie sabía, aunque de un momento a otro todos comenzaron a abrir sus ojos y contemplaron como Kazuha había detenido el intento de asesinato contra Aether. No podían creer lo que sus ojos estaban viendo, había detenido su espada, y no solo eso, sino que también devolvió el ataque. 

"Increíble", pensaron, pero no duró demasiado. En menos de un suspiro la Shogun arremetió dirigiendo su ataque hacia el corazón de Kazuha, quien tuvo los suficientes reflejos como bloquearlo con su espada. Al hacerlo salió disparado hacia atrás y dejó caer la preciada visión de quién fue su amigo en vida, y a quién aquella misma imponente figura frente a ellos asesinó. El joven de cabello platino y rojizo mechón, se percató de que aquella visión se había despertado, entendiendo algo importante, aún no estaba todo perdido. 

Inmediatamente, todos el ejército se dispusieron a ir al ataque, pero Aether no les permitió acercarse, él sabía al igual que Paimon que estos no eran rivales para ella. Si alguno lo hubiera hecho, seguramente no lo habría contado, por lo que sin pensarlo dos veces, el viajero imbuyó su espada del elemento rayo, y se lanzó contra ella haciendo que esta lo llevara hasta el plano de la eutimia. Allí se libró una batalla de la que todos son conscientes, pero nadie sabe a ciencia cierta lo que realmente ocurrió, tan solo vieron como todas aquellas visiones incrustadas en la estatua de la arconte electro habían vuelto a su estado original y tomaron cada cual la suya. Esa noche muchos pudieron retornar a sus casas con la tranquilidad de haber conseguido su proposito, aunque no estuvieran satisfechos totalmente, al menos su misión había concluido de forma bastante sencilla y sin necesidad de perder a más personas en el camino. 

Al volver al campamento, todos se encontraban algo cansados debido a la fatiga mental, por lo que simplemente sería una ocasión para celebrar y relajarse, lo cual tanta falta hacía, aunque claro, cierta persona no estaba tan bien como aparentaba.

- Estoy... - Las piernas de Kazuha flaquearon un poco, lo que hizo que cayera hacia atrás, pero por suerte Gorou lo atrapó al vuelo. 

- No estás bien. Chicos me lo llevo a descansar, vosotros divertíos, os lo habeís ganado. - Decía sinceramente. Gorou por su parte era consciente de que él era el menos exahusto por lo que simplemente sería él quien cuidara del joven. Lo llevó hasta su tienda, la cual era la más apartada por lo que Kazuha podría descansar mucho más tranquilo, aunque este tuviera otros planes. 

En cuanto Gorou lo soltó sobre la cama, Kazuha lo agarró de su brazo y lo tumbó y besó. El pequeño de pelaje castaño estaba totalmente sorprendido, no sabía como reaccionar. Eran conocidos no muy cercanos, el pequeño reconocía al rubio como un increíble espadachín y un formidable guerrero, pero nunca imaginó que hiciera algo como aquello de la nada. 

Cuando Kazuha se separó y observó al otro, captó una visión extremadamente tierna. Mejillas sonrojadas, mirada perdida con sus ojos a punto de llorar, respiración alterada y por último notó que su pulso estaba acelerado. A la vista del rubio, Gorou parecía un cachorrito asustado.

- ¿ Por... qué?- Casi no podía articular palabra mientras escondía su rostro tras su manos.  

- Adorable... - Quitaba las manos del anterior agarrándolas por las muñecas para volver a acercar su rostro y volver a besarlo, pero esta vez de forma más intensa. Gorou intentaba deshacer aquel agarre haciendo uso de su fuerza, pero no lo conseguía, en su lugar Kazuha logró posicionar sus brazos sobre la cama por encima de su cabeza mientras continuaba alargando aquel beso. En un momento comenzó a usar su lengua para saborear la boca del pequeño, quien poco a poco comenzó a dejarse llevar, dejando así de resistirse. Tomando la oportunidad, Kazuha soltó el agarre y quitó sus guantes poco a poco mientras acariciaba cada centímetro del lugar. Mediante acariciaba con sus dedos aquella piel, iba acercando los suyos hasta los dedos ajenos, terminando por entrelazar ambos en una calidez que Gorou correspondió. 

Segundos después, Kazuha por fin paraba el beso. Al ver el estado del otro, no podía contenerse, quería más. Comenzó a besar el cuello de Gorou, este simplemente cerró sus ojos y se dejó llevar. Mientras jadeaba en voz baja debido al estímulo, sus oídos notaron los pasos de alguien más, se asustó y salió de aquel trance, pero como era de imaginar no fue el único en percatarse, pues el otro también lo había echo. 

Tapó la boca del castaño, mientras le instaba a guardar silencio mediante un gesto hecho con su dedo, para terminar de escuchar y percatarse de que no los molestarían. Aquellos pasos terminaron por alejarse, ambos suspiraron y Kazuha terminó por destapar la boca de Gorou. mirándolo a los ojos mientras comenzaba a quitar poco a poco aquel lazo correspondiente a la armadura que usaba el joven de cabello castaño. Incluso hubiera pasado lo anterior, al parecer alguien no estaba dispuesto a dejar para otro momento lo que estaban haciendo. 

- Espera, Kazu... - Antes de que pudiera decir alguna palabra más, su boca fue silenciada nuevamente, siendo despojado de la parte de la armadura que cubría parte de su cuello, pasando la misma persona a deslizar sus labios y lengua por la misma zona lentamente, bajando poco a poco hasta su abdomen. Gorou intentaba detenerlo con sus manos pero era inútil, Kazuha agarró una postrándola sobre la cama, mientras sostenía la otra para terminar mordiendo su muñeca, cosa que provocó una pequeña mueca de dolor al castaño, pero enseguida lo ruborizó al notar como lamía el mismo lugar que estaba un poco rojo además de marcado. Pocos segundos después Kazuha continuaba bajando mientras seguía desvistiendo al otro. 

Gorou al notarse desnudo, no hizo más que cubrir su parte baja con su cola, pero esto no detuvo al contrario, que al ver esto sonrió y giró al pequeño para tener a su vista la espalda del mismo. Mordió su hombro y comenzó a lamer su cuello de nuevo, girando su cara y volviendo a besar su boca mientras acariciaba el pecho. Rapidamente bajó su mano hasta el pene de Gorou, notando que ya estaba duro, lo cual aprovechó para acariciarlo lentamente y hacer que este temblara mientras dejaba sus labios y mordía sus orejas de forma suave. 

- Mis... ore...jas... noo.... - Decía Gorou con dificultad, al parecer eran bastante sensibles, pero en lugar de dejarlas tranquilas, el otro comenzó a acariciarlas incluso más con su mano libre. Tan solo necesitaba su pulgar y su índice para hacerlo, mientras que el pobre Gorou no era capaz de contener su voz, por lo que simplemente optaba por morder su almohada mientras se aferraba a la misma con sus manos. 

- Deja de morder, te asfixiarás. - Pero el otro no parecía escucharle, estaba tan concentrado en no dejar salir su voz que tan solo cerraba sus ojos y apretaba más sus dientes. Un par de lágrimas salían debido a la frustración de no ser capaz de hacer algo para detener aquello, pero no era porque el otro estuviera sujetándolo, sino porque él mismo no era capaz. Pensaba que aquello se debía a la pérdida de aquel amigo que luchó hacía no tanto por su misma causa, por lo que Kazuha se sentía triste y solo, y necesitaba alguna forma de dejar de pensar en esos sentimientos. Gorou notaba como sus fuerzas comenzaban a flaquear y estaba a punto de correrse, lo cual hizo poco después, y provocó que cayera de lado, soltando por fin la almohada. Respiraba con dificultad mientras miraba  a la lejanía, al mismo tiempo su cola se movía sola, lenta pero constante, como si después de aquello siguiera con energías. 

Gorou estaba quedándose dormido, cuando de pronto... - Ahora es mi turno... - miró a Kazuha sorprendido y descubrió que este se había desvestido y se avalanzaba hacia él, robando un beso de sus labios, mientras tomaba una de sus manos y la ponía sobre su cuello. Tras esto, bajó su mano y comenzó a tocar el pene de Gorou de nuevo para así ponerlo duro, pero este aún estaba sensible por lo que no tardaría en hacerlo. 

- Nooo, pa..ra. - Intentaba empujar a Kazuha, pero no tenía fuerzas, la ronda anterior lo había dejado indefenso. Al poco rato, Gorou ya estaba algo duro, por lo que Kazuha simplemente se levantó y agarrando al otro de la cintura comenzó a frotar su pene contra el contrario, creando una sensación tan intensa que Gorou tuvo que tapar su boca para no gritar. Lágrimas comenzaban de aquellos ojos azules mientras Kazuha continuaba con sus lentos movimientos. Este último se percató de aquellos ojos, por lo que de un momento a otro lamió aquellas lágrimas para limpiar y besó su frente sorprendiéndolo. En ese momento mostró una gentil mirada, tras lo cual lo besó. Gorou en lugar de seguir resistiéndose, colocó su otra mano en el cuello del contrario, acortando aún más la distancia entre ambos. Gemidos se escuchaban por parte de ambos, quienes no tardaron en correrse. 

Mientras intentaban recurar su respiración, Kazuha se separaba de Gorou, pero este último no lo permitía. Lo abrazó haciendo que cayera sobre él, lo cual hizo que el primero se sorprendiera, pero... 

- Tan solo descansa. - Al final solo correspondió el abrazo y se quedó dormido. 

Amanecía en la misma situación, seguía abrazando al pequeño Gorou,  quien no parecía querer dejarlo ir. Se  había aferrado a Kazuha enlazando sus piernas tras la espalda del mismo. En ese momento el joven de cabello platino pensaba lo lindo que era, por lo que simplemente dormiría un poco más ya que aún era temprano...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top