Al día siguiente te levantaste y vestiste y les devolviste las varitas a los chicos. Bajaste al comedor del hotel a desyunar, cuando escuchaste movimiento en el cuarto que compartías con los Merodeadores. Apenas te sentaste a desayunar  cuando ellos aparecieron de repente en la puerta.

Tn: Buenos días, chicos

R, J y S: Buenos días, Tn.

Comenzaron a desayunar lo que había.

  Tn: Después iremos a empacar porque hoy nos vamos.

  R: Lamentamos haberte arruinado.....

  Tn: No me arruinaron nada, Remus. Ya fui a los lugares donde quería ir y ahora me vuelvo.

J: Oye queremos preguntarte de ese tal Harry Potter y del castillo en que nos encontraron....

  S: ¡A ese lugar te dirigías, por eso nos encerraste! ¿por qué?

Disimuladamente agarraste la varita de Remus y los apuntaste discretamente sinque se den cuenta.

  Tn:   ¡Obliviate!

El tema de Harry Potter no volvió a tocarse. Les borraste a los chicos el recuerdo de aquel castillo y de Harry. Ellos creían tu versión: se habían perdido en el castillo Disney. Al terminar de empacar las maletas bajaron a la entrada con estilo. Resulta que Sirius embrujó, accidentalmete, la valija de Remus y este salió disparando atropellando personas. Los 4, cada uno con su valija, encima de la valija de Remus, terminaron bajando a a golpes las escaleras.

Tm: ¡Chicos, por Dios! ¿están bien?

Se levantan riendo.

  Tn: Sí, mamá.

Dejaron las valijas en el baúl, se subieron a la limosina y esta arrancó directamente hacia el puerto.