Tutu siempre inventa juegos divertidos, a veces jugamos Oculta oculta Yuko es la única que me busca a mí, por eso para que él nos encuentre ambos estamos juntos, aunque tampoco hay muchos lugares para esconderse. No podemos jugar donde papito jerry porque él se enoja fácil y no nos deja correr porque él tiene miedo de que Yuko se caiga como siempre y nos dice que no juguemos brusco. Tenemos cuatro años ahora y Lolo ya juega con nosotros. "Es lindo nuestro hermanito" es lo que ella dice a Lolo cada vez que estamos con él.

Lolo aprendió a caminar rápido y Yuko juega con él y conmigo. Recuerdo que más antes de que Yuko y yo cumpliéramos tres años mamá y papá tambien le organizaron una fiesta enorme pero sin payaso, ni piñata y mi hermano mayor tambien tubo una fiesta igual según las fotos del álbum que ellos nos mostraron pasado unas semanas de la "nuestra", porque él les reclamó de que no recordaba haber tenido una así. Según mis papás él no recordaba ya que era un bebé y normalmente hacen fiestas cuando tenemos un año. No sé porqué, pero a nosotros nos la hicieron cuando ella cumplió tres, aún no sé por qué.

Papito es ingeniero, no sé que significa eso todavía pero a ratos llega con un casco en la cabeza y otras veces se pone algo a lo que mi abuelo llama terno; lo sé porque una vez Yuko le preguntó que eran esas ropas que papito Jerry se pone. Ella pregunta muchas cosas e incluso a veces le dicta cartas a papito Max para que él se las dé a papito. Ella descubrió eso de las cartas en una telenovela ya que mamita Amelita cambia los programas en la noche y ellas se quedan viendo lo mismo a ratos y tambien ella aprendió sobre los poemas de esa manera, ya que un día en una de esas series con personas vimos a un señor que le comenzó a decir palabras bonitas a una señora y ella le preguntó a la abuela qué era eso y mamita respondió que estaba recitándole poema y desde esa vez ella anda recitando poemas a todos mayormente al abuelo "Te quiero más que a la luna, más que al mar, mas que a todo papito Max" eso es lo único que nos dice a todos, sólo cambia el nombre.

Un día una de nuestras tías vino a conocernos a todos. Ella le preguntó a Yuko cómo se llamaba una de sus muñecas y ella no supo que responder cuando teníamos tres años. Mi mamita Ayumi le dijo luego, que respondiera que su muñeca se llama Ana y así todas sus muñecas pasaron a llamarse de esa manera. Tutu está un poco harto de decirle que no todas sus muñecas se pueden llamar así y que no llame a sus soldaditos de esa manera. A mí no me importa mucho ya que tenemos los mismos juguetes aunque a ratos papito Max se lleva a Lolo de nuestro cuarto cuando lo ve jugando con Yuko. Él dice que los hombres no pueden jugar con muñecas.

Nosotros siempre estábamos juntos en las mañanas hasta la noche con todos mis hermanos hasta que un día antes de cumplir tres años. Mi abuelo entró diciendo unas palabras extrañas sobre que Jerricito tenía que ir al colegio y se lo llevó a un lugar donde aprendió los números y a lo que él llamaba suma y restas; tambien multiplicación y división. Luego nos enteraríamos que eso no era un colegio, sino que era un Kumón. Un lugar donde preparaban a los niños para el colegio. Papito Max se jactaba frente a uno de mis tíos que Jerry era un genio como su hijo y que cuando creciera tambien sería ingeniero y que Yuko sería doctora o politóloga como su hija de la cual mi hermanita lleva su segundo nombre que es Marianela, ambos los puso mi papá. Mi mamá a ratos se queja de que no le dejó elegir los nombres de su única hija. Ella quería llamarnos Noelia y Noel porque le gustaba la canción y porque nacimos en noviembre. Yo me llamo Elías porque ese nombre lo escogieron mis abuelos, según Yuko.

Mi hermano entró al colegio a los cuatro años por esa razón de lo del Kumón. Mi abuelo lo quería meter al colegio donde estudió papá. Sin embargo no lo querían aceptar directo en primaria según lo que contó mi abuelo. Así que lo metió a un Kínder conocido, pero ni ahí lo querían aceptar al principio porque el cumplía cinco años en marzo y las clases empezaban en febrero. Por esa razón le tomaron un examen y pues, lo pasó. Por eso ya no lo vimos cada mañana. Además que se saca diploma cada año por ser el mas listo de su clase.

Mi abuelo es estricto, pero muy bueno porque siempre carga a Yuko y baila con ella en la sala de fiestas. Incluso hace un tiempo trajo un colchón gigante para que aprendamos a dar volteretas. Yuko no puede hacerlo bien, pero Lolo si puede y bueno yo tambien. Además que hace un tiempo tenemos una cosa a la que Edguitar tío llama futbolito y él Juega con Tutu desde hace un tiempo y él es mayor que Tutu por 10 años y nuestro hermano tiene 6 años ahora.

La verdad escribir esto es complicado ya que tengo que recordar muchas cosas y a ratos ficcionalizar unas cuantas. Cómo el hecho de los poemas y la verdad no sé cómo Yuko aprendió eso y es posible que no sea por la razón que puse arriba, aunque tambien es posible que sí. Porque ella y yo veíamos mucha tv cuando éramos niños y algunas cosas supongo que las normalizábamos. Y bueno, como ella tampoco lo recuerda bien del todo, sólo que papito Max siempre le decía y le dice que es muy inteligente y que se parece a nuestra tía en eso.

Nuestra tía murió joven a sus 24 años al tener a su hijo que tambien falleció después de unas 24 horas de haber nacido. La abuela culpa mucho al esposo de mi tía que nunca conocimos, pero ella lo describe como un viejo malvado pakla (calvo), que estaba divorciado y que tenía dos hijas como de la edad de la tía Marianela desde antes de conocerla. Por eso la abuela tambien se opuso a que mi papá le pusiera su nombre a Yuko, por temor de que ella tambien fuera a terminar así y eso nos lo contaron desde que éramos pequeños.

A nuestra mamá no le gustaba hacernos creer en las hadas o cosas como el ratón Pérez, por eso a nuestros cuatro años ya sabíamos sobre la muerte y sobre como mas o menos nacían los bebes. La razón era que una vez mamita Ayumi trajo un juego de mesa que explicaba acerca de ese tema, que no entendíamos muy bien del todo, pero nos gustaba jugarlo y nacer cada vez. Ya que a veces llegábamos incluso más antes que nuestro hermano Jerry. Recuerdo que Yuko lloró la primera vez que lo ganamos, porque no quería que Jerry terminara mal como ella por culpa de los doctores.

Nuestra mamá ni siquiera en Papá Noel nos dejó creer por mucho tiempo, porque ella organizaba la fiesta de navidad donde nos estregaban nuestros regalos junto con los abuelos que son sus suegros. Después de un tiempo ella nos dijo que no quería que creyéramos en esas cosas porque a ella su mamá la había engañado durante muchos años al decirle que el chocolate estaba hecho de sangre y que los hombres te podían embarazar con sólo su olor. Aunque a Yuko tambien la engañó Jerry con eso de la sangre, pero eso tenía que ver con el Kétchup. Y así crecimos mas o menos pudiendo diferenciar lo falso de lo real. Siendo que igual no más, creemos hasta ahora en cosas paranormales por los cuentos orales de papito Max. Nuestra mamá tambien tiene historias parecidas a los del abuelo, por cierto.

Mi abuelo es bueno en muchas cosas como cortar el cabello; es bueno con las plantas y los cultivos; era bueno domando caballos chúcaros; es bueno pintando y dibujando (Estudió eso en Argentina cuando era adolescente y siempre ayudaba en materias como artes plásticas). Él era estadístico de profesión y tuvo muchos trabajos. Sin embargo, de eso les contaré más luego personitas de Wattpad que deben estar pensando que ese tipo de persona que nombro cómo mi abuelo no puede ser real, pero él es así tal como lo describo y esta parte no es ficción. Si quieren le pueden preguntar a mi editor, ya que hasta él lo conoce. Aunque una cosa tengo que decir sobre él para no vanagloriarlo demasiado, ya que con todo eso y muchas cosas más. Él, no es ni fue una persona perfecta. Ya que aunque mi papá lo quiera un montón por que papito Max es su padre, a ratos lo escuchábamos que se quejaba con mi mamá de que él se volvió otra persona desde que nacimos nosotros y cuando digo eso me refiero a mis hermanos más. Él cambió mucho su carácter de lo que era antes e incluso mamita Amelita sigue maravillada por eso de que él ya no pasé tiempo con sus sobrinos y sobrinas.

Esto, estoy seguro de que mi editor me mandará rehacer esta parte, porque según él esta historia tiene que ser apta hasta para el publico infantil y no rompe infancias. Siendo que la verdad no fuimos niños muy normales que digamos en mi familia. Tambien de todos, Uriel fue el más normal, junto a mi que soy un tanto ignorado, pero ahora él es el que parece el más listo de entre mis hermanos. Eso que él no fue al Kumón como Jerry, aunque su inteligencia está en las letras y no tanto así en los números. Por nuestra parte, mi hermana y yo, somos destacados en el arte como nuestro abuelo. El arte de las charlatanerías según mi papá.