Capitulo 35: "Emboscada"
"Prometer ... nunca te olvidare, como vencer? Como amarte sin caer ... Por ti? Te miro y puedo decir, mis dudas se van de alguna manera ya no están"
-A thousand Yeras de Kevin, Karla y la Banda
Narra Starfire
Acune la cabeza de Veloz entre mis brazos, y deje que mis lágrimas bañaran su piel. Intente contener el llanto, pero broto sin remedio, mas como un lamento que como un sollozo.
Ya lo se. Otra despedida. Susurre en mi mente, y había compasión en mi voz. Compasión por mi: eso también era una despedida.
_Starfire?_ pregunto Cyborg.
Únicamente sacudí la cabeza, incapaz de responder.
_Creo que llevas aquí demasiado tiempo_ comento. Sentí su mano, metálica y cálida de nuevo, aun lamentándose con suavidad. _Estas molida_ insistió. _Ve a lavarte, estira las piernas. Come algo_
Le dirigí una mirada hostil.
_Estará Veloz aun aquí cuando yo vuelva?_ masculle entre lagrimas.
Sus ojos se entrecerraron con ansiedad.
_Eso es lo que quieres?_
_Quiero tener la oportunidad de despedirme. Es mi amigo_
Me dio una palmadita en el brazo.
_Lo se, Star, lo se. Yo también. No tengo prisa. Ve a que te de el aire y vuelve después. Veloz estará durmiendo un rato_
Leí su rostro cansado y creí que había sinceridad en mi amigo Cyborg. Asentí y volví a depositar la cabeza de Veloz cuidadosamente en la almohada. Quizá si me marchaba un rato, encontraría una manera de enfrentarme a esto. No estaba segura de como, porque no tenía experiencia en despedidas verdaderas. Con mi familia no hubo tiempo. Veloz nunca volvería a ponerse en pie a mi lado. Me encontré con la mirada de Aqualad durante un segundo largo y después me apresure por el corredor de color negro ébano que, incluso así, me pareció más alegre que su expresión.
La torre estaba en silencio, el sol aun no había salido. En el gran living, los espejos reflejaban el gris pálido del despuntar del alba. Mi escasa ropa limpia estaba en mi habitación. Entre a hurtadillas, triste de saber que no encontraría a Robín ahí esperándome ni en ninguna otra habitación. Pero Chico bestia estaba profundamente dormido, acurrucado en la esquina superior del colchón redondo. Generalmente no solía dormir así, pero ahora tenia una razón: Los pequeños Mas y Menos estaban dormidos en el resto del espacio, con los pies y las manos fuera del bordo de mi cama, cada extremidad pendiendo por todos los lados.
Por alguna razón, esto me provoco una hilaridad histérica. Tuve que ponerme un puño en la boca para reprimir la carcajada mientras recogía mi uniforme purpura. Me di prisa para salir al corredor, todavía conteniendo las risitas. Justo cuando las puertas se cerraron, Raven apareció en el corredor.
_Estas un poco loca_ me dijo Raven. _Necesitas dormir un poco_
_Ya dormiré mas tarde. Cuando ... _ no pude terminar la frase. Recupere la seriedad de forma instantánea y todo volvió a estar en silencio otra vez.
Aun iba de prisa cuando me dirigí hacia el baño. Confiaba en Cyborg, pero... Quizá podría cambiar de idea. Tal vez Aqualad se opondría a mis pretensiones. No podía estar allí todo el día. Antes de tocar la puerta del baño sentí que necesitaba algo mas que solo una ducha, algo que me volviera a la vida y me hiciera sentir viva.
Así que decidí que tal vez necesitaba bañarme en el mar helado, volví a "nuestra playa privada" mia y de ... Robin. Volé a toda prisa, pues tenia que regresar pronto.
Crei escuchar algo detrás de mi cuando llegue a la intersección en forma de pulpo en el sitio donde confluían los corredores. Mire hacia atrás, pero no pude ver a nadie en la penumbra de la Torre. Tal vez ya han despertado los demás. Pronto seria la hora del desayuno y un nuevo dia de trabajo. Quizá podría encontrar algo de tiempo para traer algo de pizza y tofu para chico bestia, pero ... seria mas tarde.
Seguí la conocida ruta que hemos recorrido Robin y yo en su motocicleta, con la mente puesta en un millón de otras cosas. No parecía ser capaz de concentrarme en nada en particular. Cada vez pasaba algo por mi mente una y otra vez: Robin, Veloz, el desayuno, el Glock, Slade, instantáneamente un nuevo pensamiento me apartaba. Raven tenía razón, necesitaba dormir. Estaba totalmente confundida todos mis pensamientos aun giraban en torno a Robin, pero tampoco podía transformarlos en una línea coherente.
Ya estaba acostumbrada al frio del mar. Las tinieblas que lo envolvían no me perturbaban más: era tal abundancia de rincones negros, rincones negros llenos de recuerdos que pase aquí junto a él. Nuestra primera vez juntos, pero era un recuerdo opacado por la última vez que estuvimos aquí ... cuando dijo que ya no me quería a su lado.
La mitad de las horas del día la pasaba en la oscuridad. Había estado aquí ya tantas veces y nunca había sentido nada acechándome bajo la superficie del agua, esperando para arrastrarme hacia el fondo.
Sabía que no disponía de tiempo para nadar un poco más. Los demás se levantarían pronto, y algunos preferían comenzar el día limpios. Tenía que poner manos a la obra. Suspire y Salí a vestirme. Había dejado mis prendas limpias en las rocas sueltas de la esquina mas lejana.
Estaba metiendo los pies en mis botas moradas cuando mi suerte cambio.
_Toc, toc_ exclamo una voz familiar detrás de una gran roca.
Oh, Jason, como podía seguir vigilándome? Espero que no lo hiciera mientras estaba nadando.
_Buenos días, Jason_ conteste. _No puedo creer que aun sigas aquí, sigues vigilándome?_
_Jason no está cerca de la ciudad ahora_ respondió la voz. _Y como estoy segura de que eso no va durar para siempre, es mejor que terminemos con esto de una buena vez_
Unas astillas de hielo se me clavaron en las articulaciones, impidiéndome todo movimiento. Tampoco podía respirar.
_Te dije que vendría por ti, Starfire_
Ya antes lo había advertido, pero me había olvidado durante largas semanas de la ausencia de Jason. Zatana y Jason no solo tenían un gran parecido en la estatura. El aire se resistía a entrar.
Zatanna Estaba frente a mí, con heridas severas, la cara rasguñada y las ropas rasgadas, frente a frente ninguna de las dos tenia escapatoria posible.
"Esta viva..."
Intentando concentrarme a través del miedo que me atravesaba la garganta con un millón de finísimas agujas de hielo.
No podía oir nada. Zatanna estaba en espera de una respuesta? Se estaba deslizando alrededor de mi. Escuche con mas atención a la espera de su ataque, pero el ruido de la corriente de las olas del mar anulaba los demás sonidos.
Luchar o huir.
Desesperada, intente liberar a la Starfire agresiva, dejarla salir, pero no encontraba la manera, no podía hacerle daño, pero porque quería ella atacarme? Porque aun seguía odiándome?
Mis manos continuaron siendo mías, fuertemente cerradas en puño con mis starbolts que podría usar como armas.
Una vez mas, no lograba escuchar otra cosa que no fuera el mar. Estaba Zatanna sola? Alguien mas acechaba detrás de ella para atraparme cuando ella intentara atacarme?
Los vellos de brazos y piernas se me erizaron. Había en el aire ciertos cambios de presión, como si pudiera sentir sus movimientos tan cerca de mi. Lejos de cualquier cobardía decidi que no valía la pena. La Torre. Me di media vuelta, apresurándome en la dirección por la que había venido, lejos de Zatanna.
Ella no podría aguardar ahí para siempre. Lo poco que había dicho revelaba que tenia prisa. Mis amigos podrían aparecer en cualquier momento, Raven veria esta situación, aunque las probabilidades estaban a favor de Zatanna.
Otro ruido. Escuche que me seguía o era solo una jugarreta de mi imaginación? Cuanto había durado este silencioso compas de espera? Era incapaz de calcular cuantos minutos o segundos habían transcurrido.
Prepárate. Sabía que la cacería se aproximaba a su fin.
Zatanna no resultaría una luchadora efectiva, ni aun cuando fuese capaz de intentarlo. Además Zatanna me doblaba en habilidades de lucha según me había dicho Robin, era una luchadora impredecible y, desde luego su magia era un alcance mucho mayor.
Alce las manos con los Starbolts y apunte hacia una montón de rocas acumuladas. Quizá podía hacerle creer que intentaría esconderme y esperar para un ataque sorpresa. Lance un puñado de Starbotls pequeños y me aleje del ruido cuando repicaron contra las rocas.
De nuevo otra respiración en otra dirección contraria, el sonido de un paso ligero, en dirección a mi señuelo. Me pegue contra la pared lo mas sigilosamente que pude.
Y que hare si son dos?
Si lograba despistarlos, creía que podría volar mas rápido que Zatanna. Era mas ligera y mas veloz ...
Escuche un paso, esta vez con gran claridad, que irrumpió. Un formidable chapoteo hizo añicos la tensa espera. El agua me roció la piel, haciéndome jadear. Zatanna con su magia salpico contra el muro, en una oleada de sonido húmedo.
Vacile durante un precioso segundo. Sus delgados dedos atenazaron mi pantorrilla y mi tobillo. Yo me debatí contra la presión, arrastrándome hacia adelante. Tropecé y el impulso de mi caída me desprendió de sus dedos, asi que se aferro a mi bota. Yo me la quite de una patada.
Estaba derribada, pero ella también. Eso me dio tiempo suficiente para levantarme con dificultad, raspándome las rodillas contra la piedra rugosa.
Zatanna gruño y su mano volvió a agarrar mi talón. No había nada a lo que pudiera asirse y me solté de nuevo. Me lance otra vez hacia adelante, forzando mis pies y con la cabeza baja, arriesgándome a caer de nuevo porque mi cuerpo se movía casi paralelo al suelo. Logre mantener el equilibrio solo apelando a un gran esfuerzo de voluntad.
No había nadie mas. Nadie que pudiera atraparme. Salí como una exhalación, la esperanza y la adrenalina se incrementaban en mis venas. Irrumpí a toda velocidad donde estaba el rio que daba al mar, con la sola idea de llegar algún túnel. Podía escuchar la pesada respiración de Zatanna a mis espaldas, muy cerca, pero no lo suficiente para alcanzarme. Cada zancada me impulsaba con fuerza en el piso, alejándome de ella.
Un dolor lacerante me recorría la pierna, contrayéndola. Sobre el borboteo del rio, escuche primero el golpe y luego el rodamiento de dos piedras pesadas, las que ella había arrojado con su magia para derribarme. Mi pierna cedió y me hizo caer de espaladas, de inmediato ella se me vino encima. Su peso me proyecto la cabeza contra la roca en estruendoso golpe, y me mantuvo aplastada contra el suelo. No tenia palancas.
Cuando trate de encender mi comunicador T mi grito fue como un ulular de sirena, que nos tomo por sorpresa a las dos. Mi alarido sin palabras resulto mas fuerte de lo que esperaba: alguien tendría que haber recibido mi llamada, pero extraño que la señal del comunicador estaba deshabilitada, algo estaba pasando en la Torre, de seguro no era la única que tenia problemas. Rogué por que alguien viniera, porque ese alguien fuera Robin. Por favor ... vuelve. Aunque fuera imposible. Lo llamaba en mi mente.
_Uff_ protesto Zatanna. Su magia era lo bastante fuerte para cubrir todo mi rostro. Su palma se aplasto contra mi boca, cortando de tajo el grito.
Luego se giro, pero el movimiento me tomo tan de sorpresa que no tuve tiempo de sacar ventajas de ella. Me asio con fuerza y me alzo por encima de su cuerpo, bajándome de nuevo. Estaba mareada y confundida, la cabeza me daba vueltas y no comprendi nada hasta que mi rostro impacto contra el agua.
Me agarro la nuca y me obligo a sumergir la cara contra la corriente de agua fresa que se abria camino hacia el estanque. Era demasiado tarde para retener el aliento y ya había aspirado un gran trago de agua.
Mi cuerpo se lleno de pánico cuando el liquido entro a mis pulmones. Me debatí con mas fuerza de la que ella hubiera esperado, mis extremidades se sacudían y agitaban en todas direcciones y su tenaza resbalo de mi cuello. Intento sujetarme mejor, pero algún instinto me obligo a empujarla mas que apartarme, como ella esperaba que lo hiciera. Solo pude acercarme unos centímetros a ella, pero con ello conseguí sacar la barbilla del agua y vomitar parte de lo que había tragado, además de inhalar una buena bocanada de aire.
Ella luchaba para meterme a la corriente pero me retorcí y me encaje debajo de ella, de modo que su propio peso comenzó a trabajar en contra de su objetivo. Todavía seguía reaccionando al agua que me había entrado en los pulmones con tos y espasmos descontrolados.
_Ya basta_ gruño Zatanna. Se aparto de mi y yo intente arrastrarme lejos. _Oh, no, no lo haras_ escupió entre dientes.
Todo había terminado y yo lo sabia.
Algo le ocurria a mi pierna herida. La sentía adormecida y reacia a obedecer. Solo podía impulsarme en el suelo con los brazos y la pierna sana. Pero seguía tosiendo mucho y eso me impedía hacerlo adecuadamente. Tampoco me permitia gritar de nuevo y llamar a mis amigos.
Zatanna me cogió de la muñeca y me levanto del suelo. El peso de mi cuerpo hizo que me fallara la pierna y me derrumbe contra ella. Me retorcí y patee el aire con la pierna ilesa.
_Acabemos ya de una vez_
De una zancada salto la corriente pequeña y me condujo hacia el sumidero mas cercano. El vapor del caliente manantial me baño la cara.
Me iba arrojar por aquel agujero ardiente y oscuro y dejaría que el agua hirviente me arrastrara hacia abajo mientras me cocia.
_No, NO_ grite, con voz demasiado tenue y ronca para ser escuchada.
Me revolví frenéticamente. Mi rodilla tropezó con una de las viscosas columnas de roca y trabe el pie en ella, buscando algo para liberarme. Ella me arranco de un tiron con un gruñido impaciente.
_SUELTAME ..._ lucho por soltarme a golpes y con ello libere una de mis muñecas para lanzarle un Starbotl. Enlace su cuello con ese brazo y me aferre a su grueso cabello.
Si habría que caer en aquel negro rio, ella me acompañaría.
Zatanna siseo y dejo de tironear mi pierna, lo necesario para golpearme el costado.
Jadee de dolor, pero entonces le agarre el pelo también con la otra mano.
Me envolvió con ambos brazos, como si en vez de estar trenzadas en una lucha a muerte, estuviéramos abrazadas. Comencé a quedar con mechones de pelo entre las manos, pero ella solo rugía y tiraba con mayor ímpetu. Podía oír el agua hirviente que corría muy cerca, al parecer justo debajo de mi. El vapor se elevaba en una nube espesa y por un instante no pude ver nada, salvo el rostro de Zatanna, rabiosamente contraída, bestial, despiadada. Sentí como cedía mi pierna herida. Intente apretarme a ella como pude, pero su fuerza bruta estaba ganando terreno a mi desesperación. Conseguiría liberarse de mi en algún momento y yo caería en aquel torrente en ebullición para desaparecer.
Robin, Robin, el pensamiento, la agonia, precedían de ambos: de mi y de Robin. Jamas sabria lo que me había ocurrido. Ni Jason, ni Chico bestia, ni Raven, ni Cyborg, ni Veloz, no podría despedirme de ellos.
Repentinamente, Zatanna dio un salto en el aire y cayo en un golpe seco. El impacto surtió el efecto deseado, mis piernas se soltaron.
Pero antes de que pudiera sacar ventaja, el golpe trajo otras consecuencias. El crujido fue ensordecedor. Crei que la caverna entera se venia abajo y el suelo temblo bajo nosotras.
Zatanna Jadeo y salto hacia atrás, llevándome consigo, pues mis dedos aun aferraban sus cabellos. Crujiendo y retumbando, el suelo de roca bajo sus pies se empezó a desmoronar. Nuestro peso combinado había roto el frágil reborde del agujero. Mientras Zatanna trastabillaba, la grieta seguía sus pesados pies, corriendo con mayor rapidez que ella.
Un trozo de piso desapareció debajo de uno de sus talones y ella cayo con golpe sordo. Mi peso la empujo aun mas atrás y su cabeza se estrello limpiamente contra un pilar de piedra. Se desvaneció y sus brazos, laxos, se separaron de mi. El agrietamiento del piso se detuvo con un crujido sostenido. Pude sentirlo retemblar bajo el cuerpo de Zatanna. Yo yacia sobre su pecho. Nuestras piernas pendían sobre el vacio y el vapor se condensaba en nuestra piel en miríadas de gotas.
_Zatanna?_ no hubo respuesta.
Tenia miedo de moverme.
Lloriquiando de miedo, demasiado aterrorizada para pensar por mi misma. Libere mis dedos del pelo de Zatanna y me arrastre con cautela sobre su cuerpo inconsciente, utilizando el pilar como anclaje para impulsarme hacia adelante. Me sentía demasiado afianzada, aunque el suelo aun retumbaba bajo nosotras.
Me impulse mas alla del pilar, hacia el terreno detrás de el. El suelo permanecia firme bajo mis manos y rodillas, pero todavía repte mas lejos, hacia la seguridad del túnel de salida.
Hubo otro crujido y eche un vistazo hacia atrás. Una de las piernas de Zatanna se hundió un poco mas al ceder la roca que la apoyaba. Escuche el chapoteo cuando el trozo cayo al rio. El suelo se cimbro bajo el peso de Zatanna.
Se va a caer, comprendí.
Zatanna podría desaparecer de una vez por todas y cuando eso sucediera, cabria la posibilidad de que nadie volveria a confiar en mi nunca mas. La pierna me punzaba y el dolor comenzaba a reemplazar el entumecimiento. Un tibio fluido me goteaba en los labios. Sin pensarlo lo probe y me di cuenta que era mi propia sangre.
Desde mi sitio podía sentir la tierra estremecerse. Otro trozo de piso chapoteo en el rio. El peso de Zatanna se desplazo, aproximándose unos centímetros mas al agujero.
Me quede mirando fijamente el rostro de la chica que también amaba a Robin, que iba a morir, aquella que quería verme muerta. Sumida en la inconsciencia, el rostro de Zatanna ya no era el de un furioso animal. Estaba relajada, casi en paz.
Me arrastre hacia ella sobre manos y rodillas, lentamente, probando el suelo con cautela antes de avanzar cada centímetro. Estaba demasiado asustada para ir mas alla del pilar, de modo que afiance en el mi pierna sana, nuevamente a modo de ancla y me tendí en torno a ella, pasar pasar las manos bajo los brazos de Zatanna y abrazar su cuerpo.
Tire con tal fuerza, que sentí desprender mis brazos, pero ella no se movio. Escuche un sonido siseante, como el de un reloj de arena mientras el terreno seguía desmoronándose en trozos menudos. Di otro tiron, pero el único resultado fue que la velocidad del correr se incremento. Desplazar su cuerpo desintegraba el suelo con mayor celebridad. Justo cuando pensé en esto, un gran pedazo de roca se precipito al rio y el precario equilibrio de Zatanna se rompió. Comenzó a caer.
_NO_ grite y otra vez la sirena ululo en mi garganta. Me aplaste contra la columna y me las ingenie para apoyarla contra el otro lado, apresando su amplio pecho con mis manos. Me dolían los brazos.
_AYUDENME_ grite. _SOCORRO. AYUDA_
Hola de nuevo a todos espero que el capitulo fuera complaciente para ustedes y le hayas agradado bastante. Otra vez volvi a escribir en mi laptop y sigue sin gustarme hacerlo, aun sigo en busca de otro medio para hacerlo, prefiero la comodidad de un móvil la verdad. Por esa razón también no estare actualizando tan seguido como lo hacia antes, les pido de su paciencia y cooperación compartiendo la historia y votando por ella ;)
Con respecto a la historia ya hice un pequeño inventario de mis notas y avances y creo que en total serán como unos 60 capitulos para "Por Siempre Joven", asi que aun me falta mucho por escribir ;)
Contesto cualquier pregunta que ustedes deseen hacerme ya saben que soy muy accesible.
En el siguiente capitulo creo que narrara Robin, ya es momento de estar al tanto de lo que esta pasando con Dick, asi que prepárense por que en el capitulo 36 tengo planeado que Robin haga una visita al hospital psiquiátrico donde esta internada a Barbara para ver sus evoluciones.
En cuanto a Jason creo que el saldrá en el 37 que será narrado por Starfire.
Sobre la muerte de veloz a un lo tengo pendiente creo que eso lo resolveré en el 38.
Bueno creo que esos fueron bastantes avances, por que apartir de ahora ya no hare mas avances como los que hacia antes.
Espero que nunca dejes de leer esta historia que me acompañen en este proyecto hasta el final.
Sin mas por el momento gracias por leer ;) ... AnneCst
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top