Capitulo 34: "Necesaria"

"Tengo la esperanza que el dolor, cambie y se transforme en tu perdón. Navegar en un mar sin fantasmas y la luz de tu amor sea mi mapa. Juro que es verdad no miento, que mi voluntad es el cambiar pero ... sola yo no puedo. No sé cómo lograr mi alma reparar y llorar no sirve de nada ahora que te perdí, te quiero recuperar ven sálvame, despiértame, rescátame ... del sufrimiento"

Narra Starfire

_Ya basta, Starfire. Raven dice que tu auto sacrificio es excesivo para tu bienestar_

Torcí el gesto.

_Y yo creo que tiene razón_ murmuro Chico bestia. _Por mucho que todos te queramos aquí, no serás parte de la Tierra hasta que no lo decidas tu también_

_Nunca podre pertenecer a este lugar. Robin no me quería aquí realmente, Chico bestia_

_Nosotros si_

No quise argumentar con él, pero no estaba equivocado. No mentía, porque el creía lo que me decía.

Cuando llegamos al living fue una sorpresa para mí. Raven estaba leyendo en el sofa y mi vieja amiga Abeja estaba horneando pan en la cocina, sonriéndome con compasión, mientras que los pequeños Más y Menos compartían una brillante y jugosa manzana verde. Se turnaban para darle bocados.

_Que gusto verla señorita Starfire_ me dijo Menos con sinceridad, cubriéndose la boca con la mano al hablar, porque aun tenía el ultimo bocado. Más asintió para saludarme, con los dientes clavados en la manzana. Chico bestia me empujo, intentando pasar inadvertido e indicándome que la gente si me quería. Que pasara por alto que no solo era sino cortesía, común y corriente.

_Le guardaron la cena?_ pregunto Chico bestia con interés.

_Si_ repuso Raven. Se inclino debajo del horno y saco una bandeja metalica. _Lo puse en el horno para que se mantuviera caliente. Probablemente ya no esta tan bueno, pero siempre es mejor que lo habitual_

En la bandeja había un trozo bastante grande de pizza. Se me empezó a hacer agua la boca, aunque rechace la porción que me habían asignado.

_Es demasiado_

_Recuerda que tenemos que comernos todos los alimentos perecedores en el primer día, Star_ me animo Chico bestia. _Todos comemos hasta ponernos enfermos, es la tradición_

Si, una tradición impuesta por Cyborg y ... Robin.

_Necesitas proteínas_ añadió rápidamente Raven para distraerme. _Hemos dependido durante demasiado tiempo de la comida de la SedeCentral. Me sorprende que no estemos en peor forma_

Me comí mis proteínas mientras Chico bestia me observaba con ojos de halcón cada bocado que viajaba de la bandeja a mi boca. Lo comí todo para complacerlo, aunque mi estomago se quejo por los excesos. Todos me acompañaron en la cena, ciertos ojos curiosos de Mas y Menos contemplaron la parte magullada de mi rostro, por las lagrimas de estos días.

_Porque vinieron los Titanes Este aquí?_ le murmure a Chico bestia. Ya hacía mucho que había pasado la hora de la cena.

Chico bestia me miro sin comprenderme.

_Bueno, pues para escuchar las historias de tu planeta y querían verte_ en su voz iban implícitas las palabras: "por su puesto".

_Te estás burlando de mi?_

_Ya te dije que nada cambiaria_

Me quede mirando fijamente hacia el angosto sofá negro. Y me di cuenta de que no estaban todos. Ni Cyborg. Ni Aqualad. También faltaba Veloz. Si hubiera llegado a considerar que alguien siguiese la rutina normal después de un día no tan normal.

_Cuéntanos sobre los delfines de tu planeta, donde nos habíamos quedado?_ pidió Raven, interrumpiendo mis inspección de espacio. Percibí que ella tomaba sobre sus hombros las responsabilidad de poner nuevamente las cosas en marcha, porque no creía que tuviera particular interés en los vínculos de parentesco de una planeta alienígena.

Todo muro me miro expectante. Aparentemente, la vida no había cambiado tanto como yo suponía que sería sin Robin. Tome una bandeja de panecillos de manos de Abeja y comencé acomodarlos en el horno. Empecé a hablar aun de espaladas de mi público.

_Asi ... hummm ... mmm, el ... eh ... el tercer conjunto de abuelos ... Tradicionalmente sirven a la comunidad, desde su punto de vista. En la Tierra, ellos serian el sosten de la familia, lo que salen del hogar para traer el sustento. En su mayoría, son granjeros. Cultivan una especie que crece como planta y que cultivan por su savia ..._

Y así, la vida continuo...

Chico bestia intento disuadirme de que durmiera en su habitación para evitar que estuviera sola, pero fue un intento poco convincente. La verdad es que no había ningún otro lugar para mi, que ... la habitación de Robin. Pero Chico bestia, insistía, como todos los días que dejara de hacerlo y que si quería podría compartir habitación con él. Me imagine que a Robin no le gustaría la idea, pero como no lo vería esa noche ni al día siguiente, ya no importaba.

Naturalmente, esas minucias carecían de importancia. Pero ahora Jason deambulaba por las calles de Jump City como Red X y, aunque obviamente tiene órdenes de parte de Bruce dejarme en paz, su expresión me dejaba en claro que repudiaba semejante mandato. Yo siempre estaba con mis amigos cuando lo veía a lo lejos y me pregunte si esa sería la única razón por la que se limitaba a mirarme a la distancia. Esto revivió la última vez que nos vimos y como sus labios habían aprisionado los míos con brusquedad. Pero algo mucho más importante que aquellas miradas obsesas de Jason llamo mi atención.

Las noches en el living, la cocina se llenaba, aunque no estoy segura de cuanto interés por mis historias y cuanto por las barras de chocolate que Cyborg nos daba. Yo reclinaba a tomar las mias, explicándole a un contrariado Chico bestia que me era imposible hablar y comer al mismo tiempo. Con todo, siendo tan obstinado como era, sospechaba que me aguardaría alguna. Aqualad había vuelto a la Torre junto a los Titanes Este, junto a Abeja y Cyborg hablaban en silencio apartados disparando mi curiosidad. Desde luego, ninguno de los demás, incluyendo a Raven, prestaba atención.

Una vez mas, Veloz estaba ausente.

Aqualad, me interrogaba por primera vez esa noche. Aunque yo intentara disimularlo, me sentía complacida porque aparentemente se había sumado al grupo de los que les interesaban las historias de "Tamaran". Pero no podía dar respuesta cabal a sus preguntas.

_Es que realmente yo no sé nada de Sanación_ admití. _Nunca acudí a un Sanador de Tamaran después... después de venir aquí. Jamás eh estado enferma. Todo lo que sé es que no hay nada que no podamos curar, desde una simple cortada o un hueso roto, hasta una enfermedad muy grave. Por ahora la única causa de muerte en mi planeta es la vejez. Además, supongo que también están los accidentes, aunque estos no le ocurren mucho a los Tamaraneanos. Somos prudentes_

_Así que no sabes que usan para curar las enfermedades?_ presiono Aqualad. _Que contienen sus medicinas?_

Sacudí la cabeza.

_Lo siento, no lo sé. No es algo en lo que estuviera muy interesada cuando tenía acceso a la información. Me temo que lo daba por hecho. La buena salud siempre ha sido una garantía en los planetas que he visitado_

Las coloradas mejillas de Aqualad se sonrojaron aun mas. Bajo los ojos con un rictus mohíno en la boca. Que había dicho que pudiera ofenderlo?

Abeja, sentada al lado de Aqualad, le dio unas palmaditas en el brazo. Habia un silencio elocuente en la habitación.

_Uh ... en cuanto a los gordonianos ..._ dijo Chico bestia, en un forzado intento por cambiar de tema. _No sé si me perdí esa parte, pero no recuerdo si alguna vez explicaste algo sobre la razón de su "crueldad" ..._

No era algo que hubiera explicado, pero estaba convencida de que realmente no le interesaba, si no que solo había sido la primera pregunta que se le había ocurrido. Las interrogaciones de Aqualad habían dejado preocupados a todos.

_Bueno, mañana tendremos que madrugar para arrancar con los patrullajes en la Ciudad..._ intervino Cyborg después de otro incomodo silencio, haciendo de sus palabras la señal de despedida. Todos se levantaron y se estiraron hablando en voz excesivamente baja para una charla trivial.

_Que es lo que dije mal?_ le susurre a Raven.

_Nada. Tienen muy presente la mortalidad_ suspiro.

Mi cerebro dio uno de esos saltos de comprensión que llamaban intuición.

_Donde esta Veloz?_ exigí, aunque seguía hablando en susurros.

Raven suspiro de nuevo. _Esta en el ala sur. El no se encuentra ... bien_

Veloz estuvo en la Torre todo este tiempo?

_Porque no me lo había dicho nadie?_

_Las cosas han sido algo... difíciles para ti estos días, así que ... _

Sacudí la cabeza con impaciencia ante la idea.

_Que le pasa?_

Chico bestia, que estaba a mi lado, me tomo el hombro. _Algunas fracturas de huesos... los tienes frágiles_ dijo muy quedo.

_Cyborg está seguro de que es cáncer terminal, según dice_

_Veloz ha debido soportar el dolor en silencio durante mucho tiempo_ añadió Abeja sombríamente.

Hice un gesto de congoja.

_Y no hay nada que podamos hacer? Nada en absoluto?_

Raven sacudió la cabeza, manteniendo sus brillantes ojos sobre los mios.

_Nosotros no. Aunque tuviéramos lo necesario aquí, no tendríamos con que ayudarle. Nunca hemos curado el cáncer_

Me mordí el labio para no seguir aquello que tenía en la punto de la lengua. Desde luego, no había nada que pudiéramos hacer por Veloz. Cualquiera que estos humanos preferiría morir lenta y dolorosamente antes que negociar su mente por la curación de su cuerpo. Y eso podía comprenderlo... ahora.

_Ha estado preguntado por ti_ continuo Abeja. _Bueno, dice tu nombre algunas veces. Es difícil saber qué es lo que quiere decir. "Chispitas" lo mantiene ebrio para ahorrarle el dolor_

_Cyborg también se siente muy mal por lo que el mismo ha bebido_ añadió Chico bestia.

_Puedo verlo?_ pregunte. _O les parecería mal?_

Chico bestia frunció el ceño y resoplo.

_Y no crees que si así fuera se lo estarían tomando demasiado a pecho?_ sacudió la cabeza. _Además, que importa? Si ese es el último deseo de Veloz?_

_De acuerdo_ admití. La palabra último me había anegado los ojos. _Si lo que Veloz quiere es verme, iré a verlo_

Sentí ansiedad, como si deseara mirar algún reloj. Para mí, el tiempo había perdido gran parte de su significado, y de repente sentía el peso de una fecha límite.

_Sera demasiado tarde si vamos esta noche? Lo molestaremos?_

_No esta durmiendo horas regulares, así que podemos ir a ver_

Me puse en marcha de inmediato, arrastrando a Chico bestia, que seguía aferrado a no dejarme sola. El sentido del paso del tiempo, del fin y de la temporalidad, me impelía hacia adelante. Abeja nos alcanzo pronto con sus largas zancadas. Raven decidió ir a su habitación, no deseaba estar presente, sabía que era demasiado duro verlo así. Demasiadas emociones encontradas. Naturalmente, le entristecía que Veloz se estuviera muriendo, pero era un desenlace que ella había aceptado desde el principio. Por el contrario, yo no era capaz de hacerlo, ni si quiera ahora. Veloz era mi amigo, no el suyo. La única excepción fue Aqualad, que había vuelto a desaparecer.

Nos recibió una de esas mortecinas luces azules cuando nos aproximamos al ala de hospital. Todos nos mantuvimos mas silenciosamente, deteniéndonos ala vez sin necesidad de ponernos de acuerdo.

Aborrecía esta habitación. Su oscuridad y esas extrañas sombras que proyectaba el débil resplandor la hacían amenazadora. Había un nuevo olor en el ambiente: hedía a podredumbre lenta, a alcohol y a bilis.

Dos de las camas estaban ocupadas. Los pies de Cyborg colgaban en la orilla de una: reconocí su ligero ronquido. En la otra, deplorablemente consumido y maltrecho, Veloz nos observaba avanzar hacia el.

_Estas de ánimo para visitas Veloz?_ susurro Abeja cuando sus ojos se movieron en su dirección.

_Ugg_ gimió el. En su rostro flácido las comisuras de sus labios se plegaban hacia abajo y su piel brillaba de humedad bajo la luz tenue.

_Necesitas algo?_ murmure. Libere mi manos, que revolotearon sin saber que hacer entre el espacio que faltaba entre Veloz y yo.

Sus ojos perdidos buscaban algo en la oscuridad. Di un paso hacia adelante.

_Hay algo que podamos hacer por ti? Cualquier cosa?_

Su mirada deambulo un poco más antes de encontrar mi rostro. De súbito logro enfocarla atreves de estupor de la ebriedad y del dolor.

_Por fin_ jadeo. Respiraba con dificultad y su aliento silbaba. _Sabia que llegarías su esperaba lo suficiente. Oh, Annie, tengo tantas cosas que contarte ..._

Me quede inmóvil y luego eche un vistazo sobre mi hombro para ver si había alguien detrás de mi.

_Annie Harper, era su hermana_ musito Abeja. _Ella no logro escapar del orfanato en el que estaban Veloz y ella_

_Annie_ insistió Veloz, haciendo caso omiso de mi reacción.

_Puedes creer que me dio cáncer? Como es el destino, verdad? Jamás en la vida me tome un día por enfermedad ..._ su voz se fue desvaneciendo hasta que ya no pude oírla, aunque sus labios siguieron moviéndose. Estaba demasiado débil para alzar la mano, sus dedos se arrastraron hacia el borde de la cama, hacia a mí.

Chico bestia me empujo hacia adelante.

_Que debo hacer?_ respire. El sudor que me aperlaba la frente no tenía nada que ver con el calor húmedo.

_El abuelo vivió ciento un años_ resolló Veloz, cuya voz volvía a ser audible. _Nadie ha tenido cáncer en mi familia, ni los primos. No fue tu tía Elena la que tuvo cáncer de piel?_

Me miro confiadamente, esperando una respuesta. Abeja me pincho la espalda.

_Mmm ..._ murmure.

_Quizá fue la Tía de Jhon_ me facilito Veloz.

Lance una mirada de pánico a Abeja, que se encogió de hombros.

_Ayúdame_ gesticule con los labios.

Me dirigió la mano hasta tomar los dedos de Veloz, que me buscaban. La piel de Veloz era traslucida y del color de la cal. Pude ver la débil circulación en las azuladas venas del dorso de sus manos.

Levante su mano con cuidado, preocupada por aquellos delgados huesos, de cuya fragilidad me había advertido Chico bestia. Sentí su extrema levedad, parecían huecos.

_Ah, Annie, que duro ha sido todo esto sin ti. Este es un sitio bonito, te agradara, aunque yo ya no esté aquí. Hay mucha gente para charlar, se cuanta falta te hace la conversación ..._ el volumen de su voz se vino abajo hasta que ya no logre percibirla, pero sus labios no dejaban de formar las palabras que deseaba compartir con su hermana. Su boca continuo moviéndose, incluso cuando cerro los ojos y su cabeza callo hacia a un lado.

Abeja encontró un paño mojado y comenzó a limpiar el brillante rostro de Veloz.

_No sirvo de mucho para esto de ... engañar_ susurre, observando que los labios de Veloz siguieran farfullando para asegurarme de que no me escuchara. _No quiero que se altere_

_No tienes que decirle nada_ me aseguro Abeja. _No está lo suficientemente lucido para que tengas de que preocuparte_

_Me parezco a ella?_

_Tal solo es el cabello. He visto su foto, era una pelirroja baja y fornida_

_Bien, déjame que haga yo eso_

Abeja me dio el trapo y limpie el sudor que resbalaba por el cuello de Veloz. Tener las manos ocupadas hacia que me sintiera mejor. El continuaba mascullando algo. Pensé que le había oído decir: "Gracias, Star, es agradable".

No me di cuenta de que Cyborg ya no roncaba. Su familiar voz surgió de pronto a mis espaldas, pero era demasiado amable para sobresaltarme.

_Como esta?_

_Delirando_ susurro Abeja. _Es el Brandy o el dolor?_

_Yo diría que es más el dolor. Daria mi brazo derecho por un poco de morfina_ Cyborg suspiro decepcionado.

_Quizá Aqualad pueda conseguir otro milagro_ sugirió Abeja.

_Ojala_ volvió a suspirar Cyborg.

_Si Robin estuviera aquí sería más fácil conseguirla ..._ Abeja no termino la frase, Cyborg la había silenciado.

Seguí enjuagando la pálida faz de Veloz, escuchando ahora con menos atención, pero no volvieron a hablar de Robin.

"No está aquí..." susurre en mi mente. "Solo ...". Pensé en la última vez que lo había visto, en el último beso, su indiferencia y su despedida ... "Quizá desea tener tiempo para sí mismo".

Abeja y Cyborg murmuraban quedo sobre cosas sin importancia, básicamente Abeja estaba poniendo a Cyborg al tanto de lo que sucedía en la torre.

_Que le ha pasado a Starfire en la cara?_ susurro Cyborg, pero le pude oír fácilmente.

_Más de lo mismo_ replico Abeja con voz tensa.

Cyborg profirió un suave lamento y luego chasqueo la lengua. Abeja le hablo un poco sobre la incomodad cena de esta noche y sobre las preguntas de Aqualad.

_Que bien nos habría venido que Un sanador Tamaraneano hubiera sido el que hubiera venido a la Tierra_ reflexiono Abeja.

Yo me estremecí pero como se encontraban a mis espaldas, probablemente no se dieron cuenta.

_Hemos tenido suerte de que fuera Starfire_ murmuro Cyborg en mi defensa. _Ningún otro ..._

_Lo se_ interrumpió Abeja, con su habitual tono bondadoso. _En realidad lo que quería decir es que es una pena que Starfire no tuviera interés por la medicina alienígena_

_Lo siento_ susurre. Habia sido negligente al cosechar los beneficios de una salud perfecta sin sentir curiosidad por la causa.

Una mano se poso en mi hombro.

_No tienes que disculparte por eso_ comento Cyborg.

Chico bestia estaba muy callado. Mire a mi alrededor y vi que se había acurrucado en la cama donde Cyborg se había echado un sueñecito.

_Es muy tarde_ anoto Cyborg. _Y Veloz no va a ir a ninguna parte esta noche. Deberían ir a dormir un poco_

_Vendremos mañana_ prometió Abeja. _Dinos que te traigamos, a ti o a el_

Baje la mano de Veloz, palmeándola con cuidado. De pronto abrió los ojos, y pareció estar más consiente que antes.

_Te vas?_ pregunto casi sin aliento. _Te tienes que ir tan pronto?_

De inmediato tome su mano otra vez.

_No, no tengo que irme_

El sonrió y entorno los ojos de nuevo. Sus dedos se cerraron alrededor de los míos con fuerte crispación.

Abeja suspiro.

_Puedes irte_ le dije. _No importa. Llévate a Chico bestia a la cama_

Abeja hecho un vistazo en torno, apunto con su barbilla la mano de Veloz que se cerraba sobre la mía. _Crees que vas a poder dormir así?_

_Si, seguro que puedo_

_Entonces, que duermas bien_ me sonrió, se volteo y alzo a Chico bestia de la otra cama.

Los silenciosos pasos de Abeja se desvanecieron a la distancia hasta que deje de escucharlos. Cyborg bostezo y se fue a sentar detrás del escritorio que se había improvisado y una puerta de aluminio, llevándose consigo la lamparilla. El rostro de Veloz estaba demasiado sumido en la penumbra para que pudiera verlo y eso me ponía nerviosa. Era como si ya se hubiera ido. Me consolaban sus dedos, aun rígidamente aferrados a los míos. Cyborg empezó a trasegar papeles, canturreando apenas para si mismo. Me deje llevar por el sonido de su dulce tararear.

En la mañana Veloz me reconoció.

No despertó hasta que apareció Abeja para acompañarme de vuelta al living. Le prometí a Cyborg traerle el desayuno antes de irme a una misión con los demás, El doctor luz era el único al que le gustaba dar problemas tan temprano. La última cosa que hice fue soltar cuidadosamente mis entumecidos dedos, liberándolos de la mano de Veloz.

Abrió los ojos.

_Starfire_ susurro.

_Veloz?_ no estaba segura de por cuánto tiempo me reconocería, o si guardaría algún recuerdo de los días que hemos compartido. Su mano se cerró en el aire, así que le di la izquierda, la única que un estaba entera.

_Has venido a verme y eso ha sido muy gentil. Ya sé que con la partida de Robin ... no debe ser fácil ... para ti ... tu rostro ... _ Parecía tener dificultades para articular los labios y sus ojos se enfocaban. Era tan bueno que las primeras palabras que me dedico fueron para manifestar su interés por mí.

_Todo está bien, Veloz. Como te encuentras?_

_Ah¡_ gimió suavemente. _No muy ... Cyborg?_

_Estoy aquí_ murmuro Cyborg muy cerca de mi.

_Tienes un poco mas de licor?_ jadeo Veloz.

_Por supuesto_

Cyborg ya estaba preparado. Sostuvo la botella de grueso cristal pegada a los flácidos labios de Veloz y cuidadosamente vertió en su boca el líquido dorado oscuro, en un goteo pausado. Veloz hacia un gesto de dolor cada vez que se quemaba la garganta con un sorbo. El líquido escurrió algo por un lado de su boca y cayó en la almohada. El olor me pico la nariz.

_Mejor?_ pregunto Cyborg después de verter una cantidad considerable de licor.

Veloz gruño con un gesto que no era de asentimiento y cerro los ojos.

_Mas?_ pregunto Cyborg.

Veloz hizo una mueca de dolor y gimio.

_Donde esta Robin?_ murmuro Veloz.

Me puse tensa al oír el nombre. El rostro de Veloz se hundió. Giro la cabeza de lado.

_Veloz?_ susurre.

_Le duele demasiado para permanecer consiente. Déjalo_ dijo Cyborg.

Sentí que se me inflamaba la garganta. _Que puedo hacer?_

_Lo mismo que yo, o sea nada. Soy un inútil_ la voz de Cyborg sonaba desolada.

_No te lo tomes así, "Chispitas"_ le oí murmurar a Abeja. _No es culpa tuya. El mundo ya no funciona como antes. Nadie espera mas de ti_

Mis hombros se contrajeron hacia adentro. No: su mundo ya no funcionaba de la misma manera. Un dedo golpeteo suavemente mi brazo.

_Vámonos_ musito Abeja.

Asentí y comencé a liberar mi mano de nuevo. Los ojos de Veloz se abrieron, pero no veían nada.

_Starfire? Estas ahí?_ imploro.

_Humm ... estoy aquí_ dije con inseguridad, dejando que sus dedos se cerraran sobre los mios. Abeja se encogió de hombros.

_Les traeré algo de comer_ susurro y luego se fue.

Espere su regreso con ansiedad, la confusión de Veloz me ponía nerviosa. Una y otra vez murmuraba el nombre de Annie, pero no parecía necesitar de mi, de lo cual me sentía agradecida. Después de un rato, quizá una media hora, comencé a oir los pasos de Abeja por los pasillos, preguntándome que la podía retrasar tanto. Cyborg estuvo al lado de su escritorio todo el tiempo, mirando hacia la nada con los hombros caidos. Evidentemente, se sentía inútil.

Entonces escuche algo, pero no era una pisada.

_Que es eso?_ le pregunte a Cyborg en un susurro. Cyborg se volvió para mirarme, ladeando la cabeza al mismo tiempo para escuchar con mas intención.

El ruido era un curioso redoble, un golpe rápido, suave. Me parecía algo mas fuerte cuando se alejo de nuevo.

_Que extraño_ dijo Cyborg. _Suena casi como un ..._ hizo una pausa con la frente fruncida, concentrado, mientras aquel sonido inusual se alejaba.

Estuvimos escuchando con atención, de modo que oímos las pisadas venir desde muy lejos. No coincidían con el esperado y uniforme paso de Abeja. Quien fuese venia corriendo, no volando a toda velocidad. Cyborg reacciono de forma inmediata al sonido que parecía anunciar problemas. Salió corriendo a su vez para encontrarse con Mas y Menos. Yo también quería averiguar que es lo que estaba mal, pero no quería perturbar a Veloz con un nuevo intento de liberar mi mano. Escuche tan atentamente como pude.

_Chico bestia?_ oi exclamar a Cyborg, sorprendido.

El ruido de pasos precipitados se detuvo apenas un segundo y luego reanudo, aunque ya no tan rápido.

_Los robots de Slade¡_ siseo Chico bestia impaciente, alterado, mientras se precipitaba por la puerta de entrada.

Cyborg lo alcanzo y sus largos dedos retuvieron el hombro de Chico bestia. _Que esta pasando, Bestita?_ pregunto Cyborg, con una voz próxima al rugido que jamás había escuchado.

Antes de que Chico bestia contestara, el extraño sonido regreso, pasando de suave a fuerte, para luego atenuarse otra vez, y tan súbitamente que nos dejo paralizados. Los golpes sordos se sucedían unos a otros, sacudiendo el aire cuando sonaban fuerte.

_Que es eso? Un helicóptero?_ inquirió Cyborg, susurrando.

_Si_ murmuro Chico bestia en replica. _Son los robots de Slade, nos atacan. Raven ha hecho un campo de fuerza alrededor de la Torre pero no aguantara mucho tiempo. Tienes que activar la seguridad de la Torre Cyborg_

_Estas seguro?_ pregunto Cyborg.

_Abeja los vio con toda claridad a través de los binoculares mientras sobrevolaban_

Cuando Cyborg activo la seguridad de la Torre, las aspas del helicóptero zumbaron a la distancia. Todos nos quedamos quietos, prácticamente sin respirar, hasta que desapareció. La mandíbula de Cyborg se tenso con un ligero sonido, como un chasquido.

_Starfire_ murmuro Veloz, despertando de su sueño alucinado. _Estas aquí_

Demasiado nerviosa para hablar simplemente le palmee la mano. Sus ojos nublados buscaron mi rostro, encontrando en el las facciones inexistentes.

_Duele mucho, Star. Duele muchísimo_

_Lo se_ murmure. _Cyborg?_

El ya estaba allí, con el Brandy en la mano.

_Abre la boca, Veloz_

El sonido del helicóptero volvió a zumbar en la lejanía, pero aun así, inquietantemente cerca. Cyborg se estremeció y unas cuantas gotas de Brandy se derramaron sobre mi brazo.

El helicóptero dio vueltas y mas vueltas. Algunas veces transcurrió mas de una hora sin que lo oyera y crei que ya se había marchado. Con Veloz delicado no podíamos arriesgarnos a luchas, solo nos manteníamos con la seguridad de la Torre. Pero el sonido regresaba, y veía en mi mente el rostro obstinado de Slade por matarnos, escuadriñando la Torre con sus ojos prominentes en busca de algún signo de pelea. Intente que mi voluntad lo alejara, concentrándome intensamente en mis recuerdos del cabello alborotado de Robin y su sonrisa, si el estuviese aquí, no me sentiría tan vulnerable y desprotegida. Con él me sentía fuerte. Recordarlo, recordar los momentos felices a su lado como si así pudiera asegurarme de que no viera nada más, hasta que los robots de Slade se fuera. Las cosas mejoraron cuando Abeja volvió con el desayuno y la comida al mismo tiempo.

Para el medio dia, Cyborg le había dado a Veloz lo que quedaba del Brandy. En lo que apenas nos parecieron unos minutos mas tarde, Veloz estaba retorciéndose, gimiendo, y jadeando en busca de aire. Sus dedos apretaron los mios hasta aplastarlos y dejarme moretones, pero si intentaba retirarlos, sus gemidos se convertían en chillidos agudos. Los gritos de Veloz apenas si sonaban humanos. El sufrimiento hundía el rostro de Cyborg. Veloz se tranquilizo después de que le hablara un momento, haciéndole creer que su hermana estaba ahí. Fue una mentira fácil, por compasión. Abeja hacia pequeños ruidos de irritación, pero yo sabia que hacia mal enojándose. Nada importaba, salvo el dolor de Veloz. Sin embargo, los gemidos y los espasmos continuaron y Abeja se fue al otro extremo de la habitación, a pasear de una lado a otro, intentando alejarse lo mas posible de los gritos. Cada grito de Veloz tallaba una línea profunda en su rostro, como si fuera una garra clavándose en su piel. Se diría que las lagrimas que corrian por sus mejillas eran la sangre que se derramaba de esos mismos arañazos.

Era extraño ver tal profundidad de compasión en un ser humano, particularmente en Cyborg. Ya jamás lo consideraría de la misma manera, luego de verlo vivir el dolor de Veloz.

_Has que pare, Starfire, haz que pare¡_ me suplicaba Veloz. Le limpie el sudor del rostro mientras me aplastaba la mano.

El tiempo pareció transcurrir lento y detenerse, aquella noche oscura parecía interminable. Los gritos de Veloz eran cada vez mas frecuentes y mas, mas atroces. Yo rondaba los limites del sueño, porque los gemidos y gritos de Veloz me impedían sumirme profundamente en el. Podía oir a Cyborg roncando a mi espalda. Estaba contenta de que hubiera podido evadirse por un rato.

No oi a Aqualad acercarse. Yo murmuraba vagas frases de aliento, apenas coherentes, intentando calmar a Veloz.

_Estoy aquí, estoy aquí_ musite mientras el gritaba mi nombre. _Shh, todo va a estar bien_ las palabras carecían de sentido. Se trataba simplemente de decir algo, pues parecía que mi voz calmaba lo peor de sus gritos.

No se cuanto tiempo estuvo Aqualad observándome con Veloz, antes de que me diera cuenta de que estaba allí. Debió ser un buen rato, pero cuando lo oi hablar su voz era tranquila.

_Cy_ dijo. _Cyborg levántate_ sus ojos me veian cuando sacudia el hombro de Cyborg, que dormía.

_Starfire, no te vayas¡ No¡_ el chillido de Veloz hizo que Cyborg se incorporara de un salto.

Yo volvi hacia Veloz, deslizando mi mano dolorida entre sus dedos que me buscaban.

_Shh, Shh, Veloz, estoy aquí. No me voy a ir. No me voy a ir te lo prometo_ el se tranquilizo, volvi a pasar el trapo húmedo por su frente y el sollozo se transformo en un suspiro.

_De que se trata?_ murmuro Aqualad a mis espaldas.

_Ella es el mejor analgésico que he podido encontrar_ dijo Cyborg con cansansio.

_Bueno yo eh traido algo_

_Encontraste algo?_

_Morfina, aunque no hay mucha. La habría traido antes si los robots de Slade no me hubieran mantenido alejado de aquí_

Cyborg se puso instantáneamente en acción. Tenia las manos ocupadas con una jeringa, y clavo la pequeña aguja en el pliegue del codo de Veloz, en el brazo que tenia aferrado a mi mano. Sin embargo, los resultados eran irrebatibles. En menos de medio minuto, todo el cuerpo de Veloz se relajo. Su respiración cambio de aspera y acelerada a sibilante y regular. Su manos se aflojo también de la mia.

_Cyborg no hay suficiente para eso_ mumuro Aqualad. Mire el semblante de Veloz, en paz por fin.

_Suficiente para que? No voy ahorrar nada para otro dia, Aqualad. Estoy seguro de que desearíamos disponer de mas, y pronto, pero no voy a dejar que Veloz aulle de dolor mientras tenga una manera de ayudarle_

_No es eso lo que quiero decir_ respuso Aqualad. Cyborg frunció el ceño, confundido. _Hay bastante para controlar el dolor quizá por tres o cuatro días, eso es todo_ continuo Aqualad. _Si se lo vas administrando en dosis_

No entendía a que se refería Aqualad, pero Cyborg si.

_No puedes salvarlo. Solo puedes ahorrarle el dolor, Cyborg_

_Lo se_ replico Cyborg, pero su voz se quebró como si estuviera conteniendo un sollozo. _Tienes razón_

Que esta pasando? Van a matar a Veloz? Hay suficiente morfina para darle sobredosis ...

Mi jadeo de espanto resonó en la silenciosa habitación, pero enrealida era apenas una inspiración. No levante la mirada para ver como reaccionarían Cyborg y Aqualad. Las que se agolparon fueron mis propias lagrimas, cuando me incline sobre la almohada de Veloz.

No, pensé. No. No todavía, no. No. Yo no ... no puedo soportar ... el final de todo. Es total, absoluto. No volveré a ver a mi amigo jamás. En otros planetas ... nunca antes he tenido amigos como estos.

Mis amigos de otros planetas se fundían todos en una confusa mancha en mi mente, los Tamaraneanos eran tan similares, en cierto sentido, casi intercambiables. Pero Veloz era distinto, en si mismo. Cuando el se fuera, no habría nadie mas que pudiera ocupar su lugar.

Hola Chicos, estoy de vuelta de nuevo, creo que tarde casi 15 dias en actualizar, espero que les guste el capitulo. Estare narrando capítulos en los que Robin y Starfire pasaran por cosas antes de volver a reencontrarse, no pierdan detalle, espero que estén mas entretenidos que aburridos. Mi intención con esta historia es siempre entretenerlos además que es como una especie de relajación para mi. Díganmelo en los comentarios que les pareció este capitulo si merezco estrellas de su parte.

Y no se preocupen esto aun no termina, aun tengo mucho mas que mostrarles en esta historia!

Gracias por leer J

AnneCst

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