Connor.

Estoy aburrido de esos dos, si no es Tristan echándose a morir por que mi hermana esta fuera del país—Y más le vale que siga así porque si no le cortaré el pene—, es George diciendo babosadas de Cristine. ¡Cállense ya!

—¡A ella jodidamente le encantó!—exclama George emocionado—. Creo que me gané unos cuantos puntazos con esa cita

Observo a Bart al otro lado de la cueva de planes, él rueda los ojos, yo lo imito.

—¿Creen que es demasiado pronto para pedirle que sea mi novia?

Bart y yo despertamos de la ensoñación, porque él lo mira con una sonrisita pícara y mis cejas están levantadas de la sorpresa.

—¿Otro intocable más cayó?—pregunta Bart con burla—. ¿Quién iba a pensar que en tan poco tiempo esto iba a suceder?

—Dice el segundo al que le robaron el corazón—puya de vuelta Tristan.

—Pues yo creo que deberías esperar un poco más. No seas tan lanzado, apenas salieron en su primera cita oficial—razona Louis con su portátil en el regazo—. Cristine es lista y te dirá no al instante.

—Gracias, Louis—la respuesta sarcástica de George me hace sonreír.

—Yo creo que debes lanzarte. Una caricia por aquí, otra por allá y, ¡kaboom! ¡Tienes nueva novia!

—Me gusta más esa respuesta de tu parte, Bart. La de Louis sigue siendo la más asquerosa. ¿Tristan?

—Pues pasé años ignorando a la chica que he amado desde siempre y ahora ella está muy lejos de mí. Creo que debes aprovechar el tiempo.

—Esa es la cosa más tierna que ha salido de tu boca—George le hace ojitos a Tristan, luego me mira—. ¿Connor?

—Solo hazlo, sino funciona la primera vez inténtalo una segunda vez.

Es en ese momento que el teléfono de George empieza a sonar. La sonrisa de idiota que pone nos da una pista a todos de que es Cristine.

—Hola, bonita—saluda al contestar—.Tengo que admitir que es una sorpresa una llamada tuya a las... ¿ocho de la mañana?

Sí, son las ocho de la mañana y aquí estamos, trabajando en una broma.

—¿Qué?—Al ver el rostro confundido de George todos lo miramos extrañado. Luego pasa a estar enojado—. Espera, espera, espera, ¿tu hermano es ese engendro del demonio que estaba toqueteando a mi hermanita?

Oh, el chico que abrazaba a América en la sala de su casa. Tristan nos contó todo entre carcajadas mientras que George solo refunfuñaba. Estoy feliz por Mer, tal vez su obsesión por mi terminó.

—¡Pues él estaba toqueteando a mi hermanita!—Oh oh, hay problemas en el paraíso—. ¡Es mentira!... Solo quiero proteger a mi hermana, ¿vale? No quiero que la lastime un idiota, ella solo tiene catorce años... Cristine, es mi hermana de la que estamos hablando así que te pido que no te metas. Y dile a tu hermano que no se acerque a ella porque ahí si va conocer al verdadero George. Hablamos luego.

Oh, ¿qué diablos acaba de suceder?

—¿Qué pasó?—pregunta Louis.

—¡Nada, no ha pasado jodidamente nada!

George se levanta y sale de la cueva de planes dejándonos a todos con la boca abierta.

Hola, hola, perinola. ¿Cómo están?

No me extenderé mucho, solo diré que este capítulo es corto porque he estado toda la tarde escribiendo y quería dejarles algo por acá.

Capítulo dedicado a Sarah, espero que te guste :)

Sin más que decir, nos leemos <3