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Akk regresa a casa. Cabizbajo. Escucha la máquina del torno y sabe que Mew está trabajando en una nueva figura. Maldice en bajo antes de entrar al estudio. -Llegué.
Su hermano detiene el torno. -Me alegra que sigas vivo. - Comenta antes de pisar el pedal. Creando ruido para ignorarlo y dejarle saber que está molesto. Akk chasquea los labios mirando de un lado a otro. «Cómo sea. » Susurra al voltear y el torno se detiene. -¿Dónde te quedaste ayer?
-Un amigo. - Él voltea.
-¿Finalmente dejarás de vender? Debes parar. ¿Ves cómo terminan los que son como tú en la televisión? ¿Quieres ser uno de ellos?
-¡Todo lo que haces es discutir, carajo! - Akk avienta la puerta contra la pared. Mew se reserva los comentarios y solo escucha. Su hermano menor sorba por la nariz. -No es tan fácil como crees. Si me salgo ahora, me matarán. No sólo trabajo para Kaise. Trabajo para toda una organización. Sé cosas de ellos. No me soltarán.
-Cómo sea, Akk.
Akk sorna y mira alrededor. -¿Te costaría mostrar lástima por mí?
-Vendes drogas. Y no he visto dinero ni una sola vez. ¿Qué haces con ese dinero?
-Estoy ahorrando.
-Ah. Claro. Ahorrando. Llevas "ahorrando" desde el año pasado. ¿Para qué?
-No sé para qué me moleste en regresar. - Akk se vuelve para regresar a la habitación.
-Okay. Encierráte en tu cueva con tus ahorros que nunca aportarán nada en esta casa.
Akk se detiene. Saca el teléfono y cerca, se lo ofrece. Mew mira el teléfono y luego a él. Le pregunta qué es lo que debe mirar. "Lee" responde Akk. El alfarero toma el teléfono y mira la imagen de una casa frente la playa. Una casa enorme. De esas que se ven en la portada de un artículo de diseño. El tipo de casa de un millonario.
-Quiero que vivamos ahí. También quiero que tengamos autos. Ya busqué locales para aprender a conducir y busque un local dónde montar mi negocio de masajes. Mm, no es mucho y el futuro es incierto, pero ya casi lo logro. Me saldré. Pero debes darme tiempo. Aún no es seguro. - Akk rasga el lateral de su nariz. -Quiero que nos sucedan cosas buenas, hermano--
Mew se levanta y lo abraza. Lo aprieta fuerte en sus brazos. -¿Sigues enojado? - Akk susurra. Abierto de brazos.
-Solo si me estás mintiendo. - Mew promete. Hunde su rostro en la curvatura de su cuello. -Me preocupas. Debes salir de eso pronto.
-Te lo prometo. - Akk le devuelve el abrazo.
🦋🦋🦋
Mientras tanto, Gulf le pide a su papá acompañarlo al trabajo y aunque a su papá le parece extraño, lo deja ser. Ya que le encanta instruir. En la oficina del padre hay una computadora táctil. Nadech está sentado en la oficina a la espera de los estudiantes y Gulf está sentado a su lado.
-La pantalla digital solo puede ser escrita con un marcador lavable. Este. - Gulf asiente y mira la computadora. Sintiendo interés por ella.
-Profesor Nadech. - Llama un hombre de la marina y Nadech se disculpa con Gulf para ir allá. Ambos salen del aula para discutir asuntos. Gulf enciende la computadora. La misma pide contraseña.
-Maldición.- Él murmura.
Pero las computadoras escolares tienen una contraseña simple. Él escribe "maestro" y entra. -Hasta un niño de dos años puede hacerlo. - Hace un puchero feliz y entra a Google luego al e-mail laboral. La computadora tiene dos e-mails. El personal y el laboral. Él ojea el laboral. Tiene un total de mil mensajes leídos. Pero no ve nada interesante entonces ingresa al personal. Comienza a leer y hay un mensaje que le llama la atención.
'Hola. Sí estoy interesado en verte. Pero busco algo serio.'
-Ahora quién demonios es este. - Gulf dice. Echa un vistazo a la puerta del aula e ingresa al email. Presiona la foto del usuario y es un hombre mayor. Luce humilde y sencillo. Swgún la foto hace senderismo. Tiene la edad de su padre y es increíblemente guapo. -Qué buen cutis. Quiero verme así cuando tenga cuarenta... - El chico acaricia su propia mejilla. -Cóncentrate, Gulf. Debo saber quién es este hombre. Quizás Nanon pueda descubrirlo.
Él saca el teléfono del bolsillo y fotografía el email. Cierra las ventanas y apaga la computadora. «Está bien, señor. Gracias.» Escucha a Nadech decir. Ha terminado la conversación. Lo escucha acercarse. La pantalla se enegrece con un círculo girando. -Ay no puede ser. Apágate ya.
Gulf no deja de mirar la puerta. Al ver la punta de los zapatos asomarse decide desconectar la computadora. Aceptando cualquier repercusión. Con tal de que el resultado fuera el mismo: que su padre no se enterase. Para cuando él regresa Gulf tira el cable. Ambos esbozan sonrisas amistosas.
-Bueno, hijo, las clases están a punto de empezar. Ya llegarán los estudiantes. ¿Listo?
-¡Nací listo!
Gulf asiente fuertemente. Le da dolor de cuello, pero no lo admite.
🦋🦋🦋
-Y eso es todo por hoy. Traigan sus asignaciones mañana. - Alcanza a escuchar y despierta. Al alzar la mirada los estudiantes se retiran. -¿Ouh?- Pregunta y se limpia un tramo de saliva.
-Dormiste toda la clase, hijo. - Nadech le sonríe con cariño.
«¡Rayos! Me quedé dormido. Debe ser porque ayer no dormí nada. Ya qué. No dormí por una buena causa.» Siente la mano de Nadech en su espalda. -¿Vamos a cenar?
-Sí. Tengo hambre-- - Al voltear, lo ve como el monstruo de petróleo. Goteante y sonoro. Siente su chaqueta mancharse de negro cuando no es así. Traga grueso.
Siente el teléfono sonar y al mirar abajo es un mensaje de Nanon. Ha conseguido algo. No puede esperar a saber qué.
🦋🦋🦋
Mew visita una función de ballet. En ella bailan un chico y una chica. Ambos son extremadamente guapos. Desconoce a la protagonista del baile, pero conoce al protagonista masculino. Es un hombre elegante. Siempre lo fue. Tiene una piel fascinantemente blanca. Los labios de una rosa y un cabello tan ardiente como el fuego. Su vestido no deja nada a la imaginación. Marca tanto su abdomen como todo lo inimaginable. Él la hace girar, brincar y la carga. Hacía tiempo que no veía este chico. Fue uno de sus clientes. El mismo dijo deberle un favor. Ahora cobrará ese favor.
La función termina. Los bailarines hacen reverencia y al enderezarse, el chico nota a Mew en el público. Esboza una enorme sonrisa y lo saluda con entusiasmo. Tanto que el aleteo de mano sacude sus hombros.
Mew sonríe en su dirección.
-Entonces, ¿quieres que le escriba a tu hermano? Cuando te dije que te debía un favor no pensé que era convertirte en mi cuñado.
El bailarín, James, está sentado en una mesa con Mew. Afuera de una cafetería.
-Sí. Lo siento por eso. Pero no necesito que sean algo serio. Solo debes seducirlo. O intentarlo.
-Eso me intriga. ¿Cómo alguien podría rechazarme?- James se cruza de piernas y bebe del té de burbujas con una sonrisa atrevida.
-Gracias, James.
-Qué comience la operación, bubú. Todo por el hombre que le hizo una increíble figura a mi abuela hermosa. ¡Brindis de burbujas!
-Oh no. ¿Me obligarás a hacerlo?
-Lo harás de todos modos, bubu.
Mew sonríe entonces sopla en el sorbeto y James también. Encorvados y soplando juntan los vidrios de los vasos. Luego continúan hablando entre risas.
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-Tal parece es un hombre serio y abuelo de dos niños. Su hijo tuvo hijos a temprana edad. Tenía una esposa, pero poco después hicieron público su divorcio. Eliminó todas las fotos de la mujer. Ahora sube fotos solo o con su hijo.
Nanon informa en su casa. Sentando en la cama junto a Gulf. Quién también está sentado a su lado. Al panorama se une Sasha. Cortando la tensión al masticar una papita. Gulf arruga el ceño y la mira sobre Nanon. Le pregunta por qué no ha terminado con ella mediante susurros. Nanon responde que son así. Que ya es costumbre volver luego de un tiempo distanciados. El costurero rueda los ojos para seguir analizando las capturas realizadas por teléfono.
-Él envío ese mensaje hace siete semanas. Ósea que no lleva mucho. ¿Crees que hayan salido?
-Bueno. Si me lo permites... Puedo hackear el teléfono de tu papá.
-Cómo, ¿con su email?
-Mjm.
-Amigo, eres un genio, pero me asustas.
-Tranquilo amigo. Los amigos no se hackean.
Gulf sonríe y su mejor amigo comienza a teclear como un dios tecnológico. Mueve los ojos de esquina a esquina alterando códigos o formulas que llueven como los créditos de una película. Un solo párrafo era todo un código.
-Entramos. - Él dice. Sasha grita euforica antes de besarle una mejilla. -¡Eres un genio!
-Gracias, amor. - Ríe para sí mismo.
-Eres un genio amigo mío. - Gulf le palmea un hombro.
Nanon anda con los ojos hechos medias lunas por la grosura de sus mejillas cuando los agranda. -¡Oh! Acaban de envíarle un mensaje de texto a tu papá.
Gulf se inclina hacia adelante.
Sargento: ¿Cómo va la misión?
-Habla de una misión. Pero mi papá ya no sirve a la marina como militar. - Gulf analiza.
Los tórtolos piensan en silencio.
Nadech: Reporte#21
La misión va bien, señor. Nadie sospecha nada. Pero la pandilla Nefet atacó a mi hijo el otro día. Huyeron de mí. Sin embargo, no sé por qué querían secuestrarlo. Por otro lado, la droga está a salvo.
-Gulf. No me digas que tu papá está implicado en drogas. - Nanon comenta sorprendido.
-¿O es algo así como Scarface? Qué miedo. - Sasha dice.
-No te preocupes. Yo te protegeré. - Nanon la abraza. Jugando al príncipe azul y siendo dramático. La chica lo mira con nada más que amor y aulla a sus palabras antes de abrazarlo.
-Yo ya no sé quién es mi papá. - Gulf dice. -Pero lo averiguaré. Expondré todos sus secretos.
El teléfono se desconecta de la computadora. -Cierto. Solo dura unos minutos cuando es por email, amigo. - Nanon dice.
-Descuida. Me ayudaste muchísimo. Oigan, ¿les gustaría ir a la casa del lago este finde? Hay dos cuartos de huéspedes.
Nanon y Sasha intercambian miradas. -¿Oíste eso, estrellita? Podemos ser salvajes. - Nanon ronronea.
-Rawr.
-Rawrrr.
-¡Rawr, rawr! - Ella mordisquea el aire antes de besarlo. Haciendo a Gulf sentirse invisible.
-Tomaré eso como un sí. - Él aborrece el rostro. Luego le cae encima el gorro irremovible de su mejor amigo. -¡Y esto como una señal para irme! Adiós, amigo. - Sale corriendo.
-¡Amfdios! - Nanon despide entre besos y aleteando una mano en el aire.
Gulf sale corriendo hasta desacelerar los pasos y sacar el teléfono. Marca a Mew y sonríe al escucharlo saludar.
-Hola, Mew. Te llamo para invitarte a la casa del lago este finde. ¿Pueden venir tu y tu hermano?
-Suena peligroso, ¿no lo crees?
-Yo nací listo para el peligro. ¿Y tu? - Reta con una sonrisa labial.
-El que tema a morir mejor que no nazca.
Ambos ríen.
|En el finde|
Gulf junto a sus padres y amigos (Nanon y Sasha) llegan en auto a la casa del lago. Estacionan al lateral. -Invitaste a muchos amigos, ¿no, cariño?- La mamá se encoge de hombros euforica.
-Esta vez un poco más, sí. - Gulf sonríe apologetico.
Los hermanos llegaron primero y aguardan al lado de ellos. Vinieron en autobús.
Quiero ver la sorpresa en tu rostro, papá. Y en la tuya, Akk.
-Qué raro. Se parece a un auto que conozco. - Akk menciona. Mew guarda silencio.
La familia abre las puertas en cámara lenta. Todos descienden y Gulf está más que sonriente. Nadech alza la mirada y su sonrisa decrece. Al igual la de Akk. Él observa estupefacto a los hermanos. Ha coqueteado con ambos. Solo que ya se acostó con uno. Ahora desea al otro.
Gulf rodea el auto para rodear de los brazos a su padre y presentarlo. -Este es mi papá. - Dice con toda la intención del mundo. -Nadech.
"Vió a su papá con un estudiante de su edad haciéndolo en un auto." Recuerda a Mew decir.
«Entonces sabe lo mío con su padre. No cabe duda.» Akk forma los puños. «Pero mientras mi hermano no lo sepa... Le seguiré el juego. Todo lo que tenga planeado para mí caerá.»
-Oh por Dios. Qué hombres tan guapos. - La madre rompe tensión. -Hola, qué bueno verte otra vez. ¿Es tu hermano?
-Sí. Su nombre es Akk. Él estudia Masaje Terapéutico. Si lo necesitan pueden consultarlo. - Mew presenta.
-Buenos días. - Él reverencia.
-Yo necesito un masaje. Ando algo, - Gulf saborea la expresión frustrada de Akk. -tenso.
-Bueno. ¿Por qué no? Acomodemos todo y te doy ese masaje. - Akk habla con la última muela de atrás. Intenta sonreír, pero no puede. Mew y Gulf vuelven a compartir miradas triunfantes.
Para cuando Gulf se acuesta en su propia cama sin camisa y Akk está sentado a su lado, este lo mira mal.
-¿A qué juegas? - Akk masajea su espalda y estira varios músculos en su interior.
-Un buen jugador jamás dicta sus movimientos.
Akk aprieta en el coxis y Gulf gime en alto. Sin esperar eso.
-No sé que planeas. Pero quiero que sepas algo,- Akk vuelve a hundir sus manos en el centro de su espalda y Gulf jadea. -tu papá anda muy colado por mí. Y así como no suelta a tu mamá, no me va a soltar a mí. Conozco a los de su clase. Nunca sueltan a sus mascotas. Solo les toman cariño.
Gulf va a voltear lleno de ira, pero Akk se sienta en su espalda y se le acerca al oído. -Acostumbrate a mí o cuentale a tu mami. Salgo ganando de todos modos.
-O eso te hago creer. - Gulf responde y Akk arruga el ceño.
-Akk. - Mew llama en la puerta. Al posar, su hermano finge darle un plácido masaje en los hombros y mira sobre un hombro.
-¿Sí, Mew?
-Ya desempaque tus cosas. ¿Ya terminaste?
-Qué oportuno. Ya termine. - El chico se levanta y se va. Mew lo sigue con la mirada hasta irse entonces se sienta al lado de Gulf.
-¿Estás bien?- Pregunta. Revisándolo.
-Creo que me quitó todos mis complejos de anciando en dos minutos. ¡Wow!- Se estira en grande. Mew ríe.
-¿No te dijo cosas hirientes?
-Algo. ¿Pero quién escucha lo que las abejas zumban? Listo para tu parte, ¿Mew?
Mew asiente repetidas veces, pero él le cubre el pecho a Gulf con la sábana. Gulf ríe sosteniendo la sábana.
-Es tierno que me cubras. No tengo nada qué esconder.
-No todos piensan igual. - Mew murmura. Gulf se le queda mirando. Intentando comprender la situación. -No le muestres eso a todos los hombres.
-Pero también soy hombre. - Apenas Gulf baja la tela, Mew la regresa. Gulf intenta bajarla otra vez y Mew vuelve a regresarla.
-Eso no importa. - Mew demanda.
Gulf, por diversión, la extiende para enfrente y Mew la regresa, pero el impulso fue tan fuerte que tumba a Gulf. Antes de tumbarlo, le cubrió la parte posterior de la cabeza con una mano y la caída en la cama es suave.
Se miran a los ojos. Ahora a centímetros del uno al otro. Los látidos del corazón de Gulf tamborilean en su oído. «¿Qué es esto? ¿Por qué mi corazón late tan rápido? ¿Será el movimiento repentino? Claro. Eso es normal.» Gulf piensa. Decreciendo su sonrisa.
Mew también piensa miles de cosas por segundo.
Atraerse, en condiciones como estas, empobrece la misión. Pero claro está: nada es perfecto. Y recordé que no solo a mí me gustaba desafiar al universo. Sino que también mi desgraciado rival.
Hola, hola, Sr. Amor.
Bienvenido y que tenga una buena estadía en mi corazón.
Mientras tanto, en uno de los armarios de la casa del lago, yace un anuario escolar. Dentro de, se encuentra una foto de estudiantes. En estos salen Nadech y el hombre del email.
*N/A: AHHHH. Ya en capítulos finales. Las miradas de Nadech y Akk, QUÉ MOMENTO GLORIOSO. Solo diré que desde aquí el juego solo es más peligroso y sexy~ 🙌🏾🤤 Ahora nuestros chicos se atraen. Jajaja son tan lindos 💖*
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