Santuario - Filadelfia (Pensilvania, EE.UU.).

Andrés es llevado por Ben, Henry, Erick y Mario a un sitio que desconoce, sin embargo, el alfa deja de caminar, por lo que los demás lo ven sin entender.

Andrés: ¿A dónde me llevan? Le tengo miedo a esas caras —los ve con algo de temor.

Henry: Vaya, alfa, ¿le tienes miedo a cuatro chicos inocentes que solo te quieren dar la mejor noche de tu vida? —Andrés traga grueso—. No pienses mal, no será ninguno de nosotros quien te la dé.

Erick: No vamos a mentir, eres muy atractivo, pero respetamos a Ilan —todos concuerdan—. Sigue derecho —le señala el jardín al santuario—. Llega hasta el lago —el lobo aún desconfía.

Mario: Hombre bien tonto, camina y usa tu olfato, mañana nos agradecerás. Buenas noches —todos se despiden mientras lo empujan hacia el jardín y cierran la puerta.

Andrés: ¿Qué les habrá picado a este cuarteto? —en eso capta un olor y corre hacia el lago—. ¡Ojitos—el menor voltea, le hace seña de que entre a la tienda de dormir, a lo que el lobo accede—. Querías acampar, me hubieras avisado y... —el menor lo calla dándole un beso, el alfa le corresponde abrazándolo por su espalda baja, siente cómo Ilan le quita la camisa—. ¿Ojitos?

Ilan: Yo quiero estar contigo —le quita la camisa al alfa y procede a besarlo en el pecho—. Soy tuyo en mente y espíritu, ahora también quiero serlo en cuerpo —los ojos de Andrés cambian a azul—. Ven —hace que el alfa se acueste, el ojiverde se sienta sobre él y comienza a quitarle la ropa, pero el lobo lo detiene—. ¿Hice algo malo?

Andrés: Despacio —le susurra al oído—. Sé que es tu primera vez, por lo que te quiero dejar claro que no te daré sexo, voy a hacerte el amor —le aclara, besa a Ilan de forma suave mientras acaricia sus caderas y glúteos—. Gracias por confiar en mí, ahora disfruta —se acuesta sobre el ojiverde para comenzar a retirar su ropa y a dejar besos húmedos por todo su cuerpo.

Mientras tanto, los cuatro complices están del otro lado de la puerta, haciendo la última prueba.
Ben: El hechizo funcionó, no se escucha, vámonos... ¡Cris! —todos se asustan cuando ven al vampiro detrás de ellos—. Por favor, no salgas así, pensé que era otra persona.

Cristhofer: ¿En qué andan metidos ustedes cuatro? ¿Dónde está Ilan? —intenta pasar, pero ellos se meten en medio—. Umm, sospechoso. Ilan no está, y el olor de Andrés está por acá, dos más dos: cuatro; qué escurridizos. Supongo que ahora comprarán mi silencio.

Erick: No digas nada, a cambio, Ben hará lo que quieras, ¿verdad? —el canguro asiente.

Cristhofer: Perfecto —sonríe maliciosamente—. Tienen mi silencio —toma a Ben para irse a su cuarto.
Al día siguiente, en la tienda, Ilan está profundamente dormido sobre Andrés, el alfa se despertó por la alarma del celular y ve que son las siete.

Andrés: Chiquito, ey, despierta, tienes un entrenamiento en dos horas —le habla suave mientras lo sacude delicadamente, Ilan suelta un quejido, se aferra más al alfa haciendo que este se ría—. Juju, ojitos, si es por mí nos quedamos acá para toda la vida, pero hay responsabilidades.

Ilan: Tengo sueño —su voz suena ronca—. Gracias por esperarme y no presionarme —lo besa en el pecho—. Te amo, eres el mejor. Gracias por lo de anoche —el lobo lo besa, ambos deciden levantarse para acomodar todo y prepararse.

Ya son 10:00 a.m. Todos, después de desayunar, se van a hacer sus labores; los cazadores van a seguir investigando, Gael se va hacia Londres a buscar información de libros de magia, las parejas destinadas de nuestros héroes se les ha asignado ayudar a los cazadores, ya que necesitan apoyo, porque todos son el blanco de Arles ahora. Sin embargo, los cómplices están hablando en el sitio de entrenamiento.

Mario: Jajaja, uy, pero qué ardiente resultaste ser: cuatro rondas, creo que creamos un monstruo —todos se ríen, Ilan ya no tiene pena como antes—. ¿Ya no hay más detalles? —el menor se baja el cuello de su suéter de tortuga y les enseña algo.

Ben: Te marcó—el menor asiente, posee una pequeña marca de colmillos en su músculo trapecio izquierdo—. Ilan, felicidades… Espera, ¿se lo pediste en un orgasmo, verdad? —este asiente—. Bueno, ya lo hecho hecho está.

Travis: ¡Benjamín! —todos se voltean viendo al general que está muy serio—. Te di órdenes estrictas de que fueras a investigar lo de la pieza del tigre de jade en China, creo que a los tres se les ordenó —ve a Erick y a Henry—. No los quiero ver en cinco.
—Sí, General —responden Ben, Erick y Henry al mismo tiempo, el elfo abre un portal y se van.

Mario: Vamos, ya es hora —señala a los guías, aliados y los demás elegidos que vienen al sitio—. Muy bien, ya estamos todos.

Rai: ¿Nos enfrentaremos a ellos? —señala a sus aliados.

Cederic: No, al general Travis —le entrega un bloqueador—. Con este artefacto no podrán detectar el aura u olor del general, ya que el aura de Scars es indetectable, y al General lo hemos equipado con técnicas parecidas a los Jueces del Apocalipsis. Ronald y los demás solo observarán. Bien, ya saben las reglas —se va con los demás guías, Heyden, Ryan y los aliados a un lugar cercano.

Travis: Bueno, muchachos, si no tiran a matarme no conseguirán nada, ya creo que sus maestros se lo explicaron desde que inició su entrenamiento hace dos años —todos asienten—. Muy bien, comencémos —lanza una bomba de humo, Nasim usa el viento para dispersarlo; el general desaparece, los chicos intentan sentir su aura, pero es imposible.

Ryan: Se escondió, ya sé qué es lo que quiere probar. ¿Y ahora qué harán, muchachos? —piensa.

Nasim: No hay interferencia en el viento, por lo que no está arriba. ¿En los árboles? —Ilan niega—. ¿Agua? —Mizu también niega—. Atrás tampoco, entonces… Lance.

Lance: Sí —se concentra hasta que siente el movimiento bajo la tierra, el moreno se voltea hacia la derecha—. ¡Rugido terra! —golpea el suelo, este se rompe causando un gran temblor que derriba a los chicos, los cuales se sorprenden; el cuerpo del general Travis sale volando, se recupera y cae de pie—. General Travis, lo encontramos —sonríe.

Cederic: Buen trabajo, Lance —sonríe orgulloso.

Mizu: Debo comportarme cuando esté frente a Lance, de lo contrario terminará matándome —analiza en sus pensamientos.

Travis: Veo que les enseñaron bien —sonríe viendo a los chicos—. Él concentra toda su energía en su puño para liberarla de un solo golpe, algo como eso requiere un control muy elevado y preciso de su elemento y su aura mezclada con la fuerza descomunal que tiene; pero hay más ondas cerebrales, también son enviadas a su puño y son liberadas, ya que dentro de él hay una parte del poder de Edward, El Rey Vampiro. Puede llegar a tener mejor dominio de la tierra que la misma Elaine —analiza en sus pensamientos—. Muy bien, ahora es mi turno.

El general estira sus brazos junto con su capa, de esta saca una gran cantidad de navajas con pequeñas bolsas atadas a ellas, y las lanza hacia los elegidos. Los chicos saltan esquivando sus ataques, pero cuando las bolsas se rompen, liberan una gran cantidad de cuchillas que van hacia los muchachos; gracias a su aura, el general Travis controla los cuchillos y hace que persigan a los elegidos. Rai y Eidan disparan fuego y electricidad, pero esto solo hace que los cuchillos absorban sus poderes y sigan adelante.

Eidan: ¡Rayos, son demasiados! —se barre esquivándolos, en eso, Nasim sale al frente—. ¡Nasim!

Nasim: Yo los detendré —saca sus alas y vuela cerca del suelo directamente hacia los cuchillos—. Sentir las corrientes del viento —cierra sus ojos y se concentra escuchando los cortes del viento—. ¡Lo tengo! —esquiva con gran velocidad y precisión los cuchillos, logrando pasar, dejando a todos impresionados—. Ahora de regreso. ¡Guadaya explosiva! —envía un gran tornado directamente al general Travis, el cual lo esquiva con dificultad.

Kiara: Perfecto, Nasim, sigue así —sonríe mientras lo ve.

Travis: Siente las corrientes del viento, así como los cortes; esto le da la habilidad de una evasión perfecta, ya que sabe en qué lugar las armas dejan espacios en blanco, además, tiene el poder de congelar el aire cuando el espacio es muy pequeño. Manipula perfectamente el aire, al igual que el poder de Melion, El Gran Lobo —Nasim va hacia él—. Pero yo aún no termino —crea una barrera que evita el ataque del rizado—. Vamos por más —genera rayos de plasma a través de sus manos lanzando una gran cantidad hacia los elegidos.

Eidan: Nasim, sal de ahí —se transforma en kitsune y corre hacia donde está el general Travis, la cola de kitsune se vuelve llamas y comienza a girar formando nueve espirales de fuego, las cuales evitan que los rayos del general los alcancen, y no solo eso, estos son devueltos de donde volvieron.

Heyden: ¡Hijo, estoy orgulloso, me has sorprendido! —se le sale una lágrima.

Travis: Ahora, no solo es capaz de alterar la genética de su cuerpo, si no que también en capaz de crear un contra escudo, que funciona de forma defensiva y ofensiva, pero ese color amarillo en el centro de las llamas es el vivo ejemplo que manipula a la perfección el poder de Hilda, La Bruja Legendaria, y es capaz de regresar todos los ataques posibles —analiza, carga energía en sus manos—. Voy —corre a gran velocidad esquivando las llamas, pero un rayo se interpone.

Rai: ¿No sabe que un rayo es tan rápido como la velocidad de la luz? —saca su lanza y comienza a atacar al general Travis, quien con sus manos rechaza el ataque—. ¡Lo tengo! —expande una onda eléctrica, pero el hombre desaparece y aparece detrás de él, sin embargo, el rubio desaparece antes de que sea tocado—. Sorpresa.

Travis: Convierte todo su cuerpo en plasma, dándole la facilidad de moverse rápidamente; puede escapar y sorprender al enemigo, ya que es como una teletransportación, pero incluso más —ve que Rai desaparece y siente un moviendo sobre él, a lo que esquiva un gran rayo—, porque a la velocidad que lo hace, aquel que no tenga un nivel de detección estará acabado. La caída de los relámpagos es veloz y precisa, como la de un halcón; Baphomet, El Emperador Demonio, está tras esto —sonríe—. ¡Invocación de figuras!

Travis lanza al cielo una gran cantidad de aves hechas de arcilla, estas toman un tamaño real y van directamente a atacar a los elegidos. Lance les envía rocas, pero al hacer contacto con las aves estas últimas explotan liberando ondas de energía que atacan a nuestros héroes, quienes saltan o crean escudos para protegerse. Luego, Travis crea más figuras, pero esta vez son unos velociraptores que van hacia los chicos.

Mizu: Eso es arcilla, significa que puedo disolverla sin hacerla explotar —piensa mientras aumenta su aura—. Concentro la energía —varias nubes se forman— y luego la libero —las nubes explotan, las gotas caen a gran velocidad acabando con las aves; el agua está hirviendo, por lo tanto la arcilla se derrite—. Voy —las gotas también destruyen a los dinosaurios.

Niall: Felicidades, Mizu, has logrado un nuevo nivel —ve al chico orgulloso.

Travis: Ya veo, ahora puede generar nubes y convertir en agujas las gotas, pero hay más. Dentro del agua están esos colores que representan la aurora boreal; Mizu, con esto, puede ser capaz de manipular la temperatura del agua a su voluntad, desde hacerla un témpano de hielo, hasta calentarla a tal grado que podría derretir a cualquier ser vivo, y también es capaz de crear descargas con esa energía para aumentar el poder del agua. Jerathel, El Ángel Guerrero, apostó todo con este chico —en eso siente que alguien va hacia él—. Ilan, veo que no te quedas atrás.

Ilan: Nou —aumenta su aura, su cuerpo se vuelve pétalos lilas y dorados, los cuales se dispersan encerrados en esferas de color verde. Las hojas rodean al general Travis, el menor hace que dichos pétalos se muevan como en una especie de baile, y cuando pasan cerca del general Travis, cortan partes de su uniforme; el cazador hace explotar una cortina de humo y escapa. El cuerpo del menor se regenera—. Parece que lo sorprendimos, jejeje.

Mario: Buen trabajo, Ilan, no esperaba menos de ti —aplaude muy feliz.

Travis: Él divide sus células para convertir su cuerpo es esporas, las cuales toman forma de pétalos; cuando está en ese punto, se acerca al enemigo en una especie de danza que suelta un polen que causa una especie de parálisis. Aurora, El Hada de la Vida, tenía una técnica muy similar. Pero además, el movimiento de los pétalos te da una especie de confusión visual o algo hipnótico, esto es gracias a magia médica combinada con sus tres especies. Definitivamente, Ilan es de admirar, nadie ha logrado esto a tan corta edad —analiza en su mente—. Veo que sus maestros les han enseñado más que estrategias.

Rai: Así es. Una confesión, nosotros tenemos un vínculo, no importa cuánto tiempo nos separen; al estar juntos nuevamente, somos dinamita. Ahora, ¡vamos! —todos asienten.

Los seis corren hacia el general Travis. Nasim genera pequeños tornados en sus manos, delante de él, están Rai y Eidan. El rizado lanza su ataque contra sus dos hermanos, los cuales quedan dentro de los tornados; el rubio y el kitsune generan sus elementos dentro de los tornados creando uno de electricidad y uno de fuego, ambos tornados van hacia el general Travis, este salta, sin embargo, la explosión lo afecta y sale volando; el cazador se recupera en el aire y lanza bombas hacia los remolinos elementales que lo acechan.

Ilan aparece detrás de Travis y le lanza varias patadas, pero el hombre le hace perder el equilibrio y el joven cae al suelo. El cazador siente una presencia cerca, Lance va hacia él y le lanza un golpe que Travis esquiva con dificultad; el golpe del moreno rompe el suelo causando una gran conmoción. Mizu convierte su cuerpo en agua y se divide en seis esferas, las cuales salen disparadas en poderosos chorros de agua, el General los esquiva con gran habilidad, pero a la vez se ve que se le dificulta un poco esta acción. El cazador saca su pistola, disparando una gran cantidad de balas que hacen que los ataques de Mizu retrocedan.

Nasim: Atrás de mí. ¡Viento cortante! —envía varias cuchillas hacia las balas, el viento las corta creando una explosión—. No está —en eso, el General aparece detrás de él, a lo que el rizado se mueve rápidamente.

Ryan: ¡Alto! —avisa—. Ya vimos suficiente. Rai, te felicito, has conseguido un nuevo nivel —le da un abrazo—. Todos lo han conseguido. Queríamos era observar esas técnicas donde deben alterar sus cuerpos o temperaturas. Felicidades a todos, superaron las expectativas —los seis sonríen—. Ahora es importante que estén atentos, ya que estos enemigos son semidioses.

Ronald: Los felicito, y tú me haces sentir orgulloso —abraza a Mizu para darle un beso en la frente—. Sabes que te quiero como un hermano menor.

Nahiara: Han mejorado mucho. Henry nos pidió esto, que se los entregaramos —ella les acerca las joyas que les permiten llevar sus trajes—. Les hizo modificaciones.

Lenalee: ¿Y ahora cuál será el siguiente movimiento? —pregunta en general.

Mario: Vamos a esperar qué tienen los demás. Mientras tanto, Ilan, acompáñame a hacer una autopsia, es hora de que me demuestres que esta parte de tu entrenamiento conmigo no fue en vano —el menor asiente.

Noel: Te amo, estoy orgulloso de ti —abraza a su hermano—. Más tarde hablaremos de algo —le susurra, y el ojiverde lo ve sorprendido—. No nací ayer, te conozco, jejeje.

Cederic: Muy bien, andando. Ahora van a ayudarnos a analizar las evidencias, los que no vayan al laboratorio.