Santuario - Filadelfia (Pensilvania, EE. UU.). 12:00 a. m. Días después...

Ilan, te prometo que cuando cumpla la mayoría de edad vendré por ti —le dice un niño de unos seis años—, mientras tanto te quedarás con los abuelos, no te dejaré solo —una oscuridad se apodera de todo bloquenado la vista —Ilannnn —le gritan.

Ilan: ¡¡NOOOO!! —grita levantándose de la cama, ve su guardapelo donde está la foto de sus padres y hermano —¿Poorr quéé me sepaaarraron de ti? —dice llorando.

Rai: Pequeño, ¿qué pasó? —pregunta preocupado entrando con los demás chicos —Te escuchamos gritar —el más pequeño lo abraza —¿Qué pasó? —acaricia su cabello.

Nasim: ¿Tuviste otra pesadilla? —el menor asiente —¿Otra vez con tu hermano? —asiente.

Lance: ¿Qué te dice en el sueño?, ¿no sería como un déjà vu? —pregunta.

Ilan: Noo see —se calma —Tengo ese sueño extraño desde el atentado en Hawái —les explica.

Mizu: El cuarto de juegos posee aire acondicionado, podemos llevarnos las bolsas de dormir y pasar la noche o acampar afuera —propone.

Eidan: Afuera, mucho mejor —los demás apoyan —¿No han llegado los demás?

Nasim: Negativo. Los guías junto con los demás están viendo por qué razón hay tantos demonios de Duncan volando por acá. Bueno, a dormir —asienten saliendo del cuarto para ir afuera a dormir todos.

Pasan la noche afuera, Ilan no vuelve a tener pesadillas. Ya es de día, los chicos están dormidos aún, en eso suena un trompeta como las del ejército despertándolos a todos.

Rai: Levantado, mi sargento —se levanta en posición militar pegando los nudillos a su ceja.

Mario: No soy sargento, pero con ese cuerpo soy capaz de dejar que me hagas un stripper con uniforme militar —dice viéndolo sin remera.

Mizu: Qué sucio, pensé que ibas en serio conmigo —se pone la mano en el pecho —Nasim, Mario me dejó —lo abraza, simula como si estuviera llorando en su hombro.

Nasim: Tranquilo, papi, ya vendrá otro —pasa la mano por su cabeza —Pero ni modo, llora.

Mario: Jaja, cualquiera cae, el que no te conozca que te compre. Aunque con esos músculos no lo pienso dos veces, podrías ser mi esclavo sexual —le propone, también está sin remera.

Mizu: Mis servicios son caros, cariño. Si estás dispuesto a pagar buen billete lo negociamos y con una noche de sexo coronamos —le guiña el ojo.

Eidan: Bueno, después hablan. ¿Qué sucede?, ¿para qué nos despiertas como si fuéramos soldados?

Mario: Vayan a asearse. Tienen treinta minutos para estar en la sala, Cederic no está de buen humor, hay problemas —les ordena.

Van corriendo a bañarse y cambiarse, un Cederic molesto quiere decir peligro.

Llegan a la sala, ven a sus demás guías junto con sus amigos pero están con caras muy serias, parece que algo malo está pasando, se sientan y esperan que les den información.

Cederic: Menos mal ya llegaron, coman lo que Kiara, Paoly y Nahiara les prepararon mientras les explicamos, no quiero interrupciones. ¿Entendido? —habla serio, asienten empezando a comer.

Niall: Verán, chicos, desde que pelearon junto a Nahiara en Hawái ustedes fueron ayudados por una criatura desconocida que lanzó una flecha sagrada de gran poder. Una vez que esto pasó, Duncan mandó a sus sirvientes por todo Estados Unidos, México, Canadá y España en busca de éste ser causando grandes masacres, muchas personas han muerto —empieza.

Kiara: Nosotros nos dividimos y fuimos en grupos de dos a los cuatro países para rescatar a la las personas que podíamos, pero los ataques no paran —continúa —Vean lo que pasó en las montañas rocosas —crea una esfera en la cual se refleja una imagen, ven que los murciélagos van hacia la montaña, de ésta sale un resplandor dorado que acaba con todos —Ese ser está ahí, deben ir a ver de quién se trata. Ilan, hijo, tú pudiste sentir esa energía, ¿verdad? —el menor asiente.

Cristhofer: ¿Cómo fue exactamente? —le pregunta.

Ilan: Cuando peleábamos con la reina arpía ella me acorraló en un árbol, en ese momento sentí una presencia sagrada que estaba lejos y volteo, en cuestión de segundos una flecha acabó con las criaturas voladoras, de inmediato llegó la segunda acabando con los terrestres.

Paoly: Verán, chicos, tenemos una sospecha de que otro amigo de la alianza que dimos por muerto puede estar vivo; solo él es capaz de almacenar tanta energía en una flecha —les explica —Es un ángel, por eso Ilan pudo sentir su energía aún teniendo un bloqueador. Deben ir a esa montaña y ver si es él o es otra criatura.

Ronald: Sea él o no, Duncan está concentrado en matarlo por su poder sagrado —habla —Hace éstas masacres para retarlo y una vez que salga asesinarlo. Deben ir allá a ver quién es, nosotros no pudimos sentir nada en todo un día entero.

Nahiara: Con la ayuda de Ilan podrán dar con él. Todos los ataques de demonios van hacia las montañas rocosas en Canadá, ese ser debe estar ahí aún; sea nuestro amigo o no, esas flechas solo las puede lanzar un ángel y éste pequeño es el único que lo puede localizar.

Mario: Bueno, queridos, es hora de partir. Nos quedaremos aquí a descansar y cuidar de Filadelfia, esas criaturas andan por acá, Duncan parece querer encontrar el santuario —chasquea los dedos y los viste con pantalones y botines deportivos, gorras, remeras, chaqueta y bolsas con comida y agua—. Entren, cualquier cosa nos avisan —abre el portal, los muchachos entran, éste los deja en las montañas rocosas de Canadá, ven mucha naturaleza.

Lance: Éste lugar es enorme —se queja —Están locos si creen que vamos a buscar en toda la montaña —habla frustrado.

Rai: Te apoyo, una vez que oscurezca no podemos avanzar mucho, los demonios nos podrían tender una trampa —asienten.

Caminan poco a poco hasta que ven a un oficial de policía, intentan esconderse pero ya los vieron.

Oficial: Muchachos, no es conveniente que anden por acá, hay muchos demonios asechando —se dan cuenta de que es un hombre lobo —Por favor, vayan a sus casas.

Eidan: Tranquilo, señor. Podemos cuidarnos solos —le enseña su collar, los chicos también lo hacen con sus prendas, el oficial las reconoce, inclinándose —No es necesario, levántese.

Oficial: Perdonen. No sabía que eran los elegidos —se disculpa y los chicos le dicen amablemente que no hay problema —¡Vaya, sí que son humildes! Ojalá todos fueran así.

Nasim: Oficial, ¿podemos preguntarle algo? —pregunta amablemente, éste asiente —¿Sabe algo de unas flechas sagradas? —el señor se queda pensando y los lleva a otro lugar para contarles.

Oficial: Verán. No mucho, estos ataques comenzaron hace poco en todo el país y los países vecinos; muchos humanos y sobrenaturales han muerto, pero en estos días se corrió el rumor de que un monje está purificando a los malos espíritus en el lugar —los chicos lo escuchan con atención —Aparentemente nadie sabe de él, no habla, se comunican con él por medio de un ave blanca, no se sabe si es hombre, mujer, joven o viejo, anda con una gran túnica blanca que posee capucha con un rostro totalmente tapado, dicen que utiliza solo una flecha para eliminar un ejército de demonios. Se aparece más que todo por el centro de la montaña, o sea, por allá —señala un camino, los chicos se levantan.

Ilan: Gracias por contarnos, señor. Cuídese —le dan la mano para irse a caminar.

Caminan un rato contando anécdotas, riéndose y además, haciendo pequeñas carreras hasta que sienten presencias demoníacas. Ven hacia arriba y observan que la reina arpía viene con su ejército de aves monstruo, se escuchan unos gritos a unos metros, los chicos corren hacia esa dirección y ven que hay una mujer de unos 50 años con un chico de unos 23, están acorralados. Van en su ayuda.

Rai: 'Garra de trueno' —electrocuta a unas aves que iban a comerse a las personas.

Ilan: 'Flecha de la lira' —dispara su flecha al aire purificando a unas cien aves.

Lance: Quédense acá, no salgan —las personas asienten mientras éste crea una barrera de tierra para protegerse.

Saddy: Mis elegidos favoritos, ¿a qué debo el honor? No sabía que estuvieran aquí, ¿poseen clones en todos lados? —les dice burlándose.

Mizu: ¿Por qué demonios haces eso? —le pregunta con rabia —¿Ustedes inventaron lo del monje?

Saddy: Jamás haríamos algo así, al parecer en ésta montaña hay un monje que se encarga de eliminar a los malos espíritus —le responde —Solo que es un cobarde que no da la cara. Ataca a distancia escondiéndose como una rata.

Eidan: ¿Y para qué?, si en Hawái con solo una flecha les dio una paliza, cómo será si se hubiera aparecido. ¿Vienes a limpiar tu mala racha? —se burla.

Saddy: ¡Insolente! ¡¡ATAQUEN!! —las aves van hacia ellos —Tengo algo que hacer —en eso aparece un monstruo con cabeza de león, cuerpo de cabra y cola de dragón —Les dejo a mi amigo —se va.

Ilan: Una quimera. Hay que tener cuidado con su cola —asienten. La bestia viene hacia ellos, esquivan el ataque —'Hoja de acero' —lanza sus hojas, pero éste contraataca con fuego.

Nasim: Tú no escaparás —dice viendo a la reina —'Ataque aéreo' —sus alas crecen, vuela rápido hacia la reina, ella intenta golpearlo pero él se multiplica para luego atacarla, haciéndola caer a algún lado de la montaña.

Mientras tanto la quimera está peleando con los demás; lanza fuego, pero Mizu le contraataca con el dragón de agua, Lance usa su ataque bomba de fango pero ésta lo esquiva, tiene una gran velocidad. Rai usa su lanza de rayo, logra darle en una ala, sin embargo, no le afectó mucho. Eidan y Ilan tratan de destruir a las aves de rapiña junto con Nasim que llegó para ayudarles, las aves vienen cada vez en mayor cantidad. La quimera vuelve a elevarse, en eso Ilan siente una presencia y voltea hacia la montaña viendo un punto fijo.

Lance: Debemos acabar con la quimera —ve a Ilan —Chaparro, est... —no termina de hablar porque de los árboles sale un rayo de luz dorada en forma de flecha que acaba con todas las aves monstruo —¡¡Qué!! —exclama.

Mizu: Una flecha sagrada. El monje sigue aquí —les dice.

Ilan: Allá —señala a un pequeño barranco que está cerca, en el cuál se deja ver una persona con una tunica blanca —Es él.

En eso la quimera va hacia el monje, le lanza fuego pero éste no se mueve, los chicos se sorprenden al ver que creó un escudo poderoso; el monje salta a una gran altura contra la quimera, ésta intenta morderlo y él esquiva el ataque, saca su brazo, lo pone como si fuera una espada, dobla el codo a la altura de su pecho, una energía dorada aparece en él, va hacia la bestia y, finalmente, agita el brazo cortándole la cabeza y haciéndola desaparecer por completo. Ve a los elegidos, saca sus alas doradas, brilla cegándolos y se dirige a ellos brillando cada vez más, los elegidos no pueden abrir sus ojos por el intenso brillo, el monje pasa en medio de ellos volando y luego se eleva dejando de brillar poco a poco. Nuestros héroes se soban sus ojos para para poder ver con claridad nuevamente.

Rai: ¿Qué pasó? Pensé que nos iba a matar —ve que están todos menos Ilan —¿Dónde está el pequeño? —pregunta preocupado.

Nasim: Allá, él lo tiene —ven que el monje tiene a su hermano en los brazos como si estuviera desmayado —¡Suéltalo! 'Guadaya explosiva' —lanza su ataque, pero el monje crea un escudo que lo rechaza como si nada, seguidamente desaparece junto con Ilan —¡Nooo puede ser, se lo llevó!

Eidan: Maldita sea. Tenemos que encontrarlo, trataré de captar el olor del enano, su aura desapareció —asienten.

¿Quién será el misterioso monje?, ¿y por qué se ha llevado al pequeño Ilan?