Capítulo 12: El Pirómano Infernal


Los policías y bomberos se van, los chicos salen de la tierra, se ven sorprendidos.

Rai: ¿El pirómano infernal será un fantasma? -habla asustado.

Lance: Calma, gallina. Es solo un alias, no sabemos si es alguien vivo o muerto.

Nasim: Vamos a ver qué encontramos.

Caminan por el lugar y empiezan a observar cualquier detalle que les pueda servir, pero no consiguen nada. Mizu les grita.

Mizu: Oigan, aquí hay un montón de cenizas juntas -corren hacia donde él está y ven que efectivamente hay cenizas en el suelo.

Ilan: Qué habrá pasado aquí, ni idea. De lo que estamos seguros es que el pirómano infernal es nuestro hermano -asienten para luego marcharse.

Una figura masculina con capucha y pasamontañas los observa. Pasaron tres días y aún no tienen nada. Están en el comedor de la escuela planeando qué hacer.

Rai: Rayos, no tenemos ni un rastro del chico. Ni aquí se manifiesta -habla frustrado.

Lance: ¿Qué tal si nos separamos para recolectar buena información sobre el «pirómano infernal»? -les propone.

Nasim: Buena idea. Vayan, yo tengo algo que hacer -se levanta y los muchachos lo ven.

Mizu: ¿Qué harás? -pregunta con curiosidad. Nasim solo camina y ellos van a buscar información.

Nasim se mete por los alrededores de la escuela siguiendo a Eidan, lo ve por ahí. No sabe por qué, pero su instinto le dice que lo siga. Llega y se esconde por un basurero para observarlo. Nasim ve a Eidan que está cerca de los chicos más pobres de la escuela. Ilan está con ellos. Ha escuchado que hay veces que no tienen para comer. Eidan saca una bolsa con comida, de los arbustos que adornan el patio sale un pequeño zorro, se acerca a Eidan, este lo acaricia y le da la bolsa; el zorrito la toma con su boca y va hacia los chicos, ellos la toman sin desconfianza, la abren y luego sonríen, acarician al zorrito. Seguido de esto este se devuelve donde Eidan para lamerle la cara y luego esconderse en los arbustos.

Nasim está impresionado, pensó que el tipo era un ogro sin sentimientos, pero como el dice, no hay que juzgar un libro por su portada. Nasim sale de su escondite para encararlo.

Nasim: ¿Por qué aparentas ser tan frío? Lo que acabas de hacer es un hermoso gesto -le dice sorprendiéndolo un poco. Éste intenta pasar por su lado, pero Nasim lo detiene.

Eidan: Quítate o no respondo. Lo que haga o deje de hacer no es tu problema -lo amenaza.

Nasim: No lo pienso hacer, sé que no eres capaz de eso -Eidan lo ve con sorpresa -Tengo tres días en la escuela, desde que llegué me han dicho que eres un ser horrible, arrogante, que humilla a la gente; incluso cuando nos viste con desprecio pensé que era así, pero eso que acabas de hacer lo derrumba todo. Eres un ángel que usa apariencia de un demonio para que eso piensen, que eres malo, pero no lo eres -El pelirrojo baja la cabeza apenado. Bajó la guardia.

Eidan: Gracias por decir eso, pero igual me gusta mi soledad, solo me doy un poco con Ariel -Nasim asiente y le hace seña para que continúe -Solo te pido que no le digas nada a nadie, no creo que sigan aceptando la comida si saben quien se las manda. Perdóname por lo del otro día, tú me caes bien al igual que el moreno y el pequeño castaño, pero me cuesta darme con las personas. Ahora me voy -se va, pero Nasim le habla.

Nasim: Descuida. Tienes un amigo cuando quieras hablar, y con mis hermanos igual.

Eidan: Gracias -le da la mano para marcharse.

Los chicos se reúnen en el patio trasero, no entraron a clase. Para qué hacerlo si no van a estar mucho tiempo en la escuela; tienen que apurase para encontrar al próximo.

Lance: Según las personas, dicen que el pirómano infernal apareció más o menos hace un mes. Se dedica a hacer grandes incendios donde han muerto muchas personas, más que todo en fábricas abandonadas o lugares desérticos.

Rai: Sin embargo, aseguran que el fuego es de un color naranja puro. O sea, que éste no está alterado por gasolina u otro combustible o componente inflamable.

Mizu: Hablaste técnicamente, ¡OMG! Crecen tan rápido. I love you, papiii -lo abraza y finge llorar, todos se ríen -Ahora yo. El fuego tiene un sitio de exactitud, la llama no pasa a otros lados. Por ejemplo, si se quemara la escuela solo éste terreno sería afectado, no causaría daños a los edificios del lado.

Ilan: En conclusión, el pirómano infernal debe tener un poder mágico para controlar que el fuego no se extienda, ya que un humano no es capaz de hacerlo. El fuego se saldría de control.

Nasim: Ilan, aparte de los elementary, ¿qué otras criaturas mágicas controlan el fuego o demás elementos de la naturaleza? -pregunta.

Ilan: Hay criaturas que pueden dominar los elementos naturales, así como nosotros: ninfas, hadas, brujos elementales. Incluso dicen que los primeros descendientes de los licántropos podían dominar el fuego o hielo al conseguir a su pareja destinada y que sus colmillos salieran, pero criaturas que puedan dominar el fuego a ese extremo de pureza son los legendarios dragones o los casi extintos kitsunes -explica el menor.

Mizu: Por eso es que te amo, pequeño. Qué inteligencia. Disculpa si te traté mal antes, no sabía que era yo -lo abraza, el menor le corresponde.

Lance: ¿A dónde quieres llegar, Nasim? ¿Crees que el fuego es provocado por otra criatura?

Rai: Pero nuestras gemas brillaron cuando el incendio comenzó -opina -Además el fuego es puro.

Nasim: Sí, pero piénsenlo. Nuestro poder es puro, yo puedo purificar un aire que esté contaminado con humo o veneno, Rai los rayos de luz, Lance la tierra, Ilan los bosques y Mizu el agua. ¿Qué tal si el fuego se queda en un solo sitio porque más bien alguien impide que se extienda? -hace su incógnita.

Mizu: Claro, como usa mucho poder para mantener el fuego en un lugar, su poder purifica las llamas dándoles un color puro como el que tenía el incendio -dice serio -Wow, somos todo unos detectives, vámonos al FBI-dice gracioso, nuevamente se ríen.

Lance: Entonces, ¿qué criatura estará ocasionando los incendios y muertes?

Rai: No hemos sentido auras mágicas por acá, tal vez estén escondidos en la ciudad.

Ilan: Tengo otra teoría. Rai y Mizu, vayan con las amigas de Ariel, detallen sus prendas, collares y esas cosas. Ustedes no se hipnotizaron de la nada -asienten para luego separarse.

Rai junto con Mizu van a buscar a las chicas, pero antes ven a unos estudiantes robando algo del salón de química, luego estos chicos entran al salón del frente y lanzan algo. De inmediato un humo verde sale del lugar y la alarma de incendio empieza a sonar, ven al tal Eidan salir del salón tosiendo y en eso llega el director junto con la profesora de química.

Director: Bohórquez, otra vez haciendo de las suyas, ya no más. Serás expulsado de mi escuela -Eidan lo ve y solo baja su cabeza, no se defiende. Los chicos deciden participar.

Rai: Con todo respeto, señor Director, está cometiendo un error. Nosotros vimos a Reymer y León que tiraron el frasco con la mezcla al salón donde Eidan estaba. Él es inocente.

Mizu: Además, ¿qué no lo ve? Está tosiendo porque se trago toda esa cosa, de haberlo hecho él lo tira y se va, no se queda en el salón esperando a ser atrapado -Eidan se sorprende de que alguien lo defienda por primera vez, ni su novia lo hace.

Director: ¿Están seguros, jóvenes?

Rai: Sí, búsquelos y comparen. Son tan tontos que agarraron eso sin guantes. Comparen y se darán cuenta -El director se marcha junto a la profesora de química. Eidan se les acerca para agradecer.

Rai: Antes de que hables, quiero saber por qué no te defiendes, tú no hiciste nada. Aquí todo el mundo dice que eres un monstruo, pero lo que acabamos de ver nos dice lo contrario; no eres malo, incluso viste quienes fueron y no hiciste nada.

Eidan: No me creerían, todos dicen que soy una mala persona. Ya la mala fama ha llegado tan lejos que nadie me cree cuando digo la verdad -dice con tristeza -Gracias por defenderme.

Mizu: Igual, Eidan, no dejes que abusen así de ti. Tú no eres malo, eres un gran chico -le abraza.

Rai: No te das mucho con las personas, pero si te sientes solo aquí estamos, búscanos -también lo abraza. Luego se van para hacer lo que Ilan les pidió.

Más tarde se reúnen en el apartamento que tienen rentado para seguir atando cabos sobre el misterioso pirómano infernal.

Rai: Las chicas no fueron hoy, será hasta mañana que veamos lo que dices, enano -asiente.

Lance: Entonces, estamos en las mismas, sin nada de nada. Dicen que el pirómano infernal ataca cada cuatro días, habrá que esperar.

Nasim: Ni modo. Oye, pequeño, ¿crees que de verdad esas chicas hipnotizaron a éste par?

Ilan: Tengo esa teoría. Para hipnotizar debes tener un contacto visual fijo y ellas fueron las únicas que estuvieron con ellos ese día, así que deben de estar escondiendo su esencia con algo.

Sus gemas brillan otra vez con intensidad, luego escuchan unos gritos de ayuda, se asoman por la ventana y ven que una tienda de supermercado se está quemando. El fuego es cada vez más y más fuerte.

Mizu: Parece que no quiso descansar. Vámonos.

Saltan nuevamente la ventana yendo al tejado, la tienda está solo a una cuadra, solo les toma segundos en llegar. Ven como la llama se va purificando, su color es naranja brillante.

Rai: Ahí está la llama, cada vez es más pura -saltan hacia el suelo por la parte de atrás.

Nasim: ¡¡Miren!! -grita señalando una ventana. No pueden creer lo que ven, hay un zorro más grande de lo normal protegiendo al vigilante, él es quien purifica el fuego.

Ilan: ¡No puede ser! ¡Un kitsune! -dice asombrado -Es imposible, están casi extintos.

Lance: No solo eso, miren el collar de su cuello -posee un rubí brillante, sus gemas brillan también -Nuestro hermano es una criatura mágica desde que nació.

Rai: Mizu, necesitamos apagar este fuego. Lance, vete al estilo topo y forma una barrera para que el agua no les impacte -asienten ambos. Lance se mete bajo tierra.

Mizu: 'Ola de choque'.

La ola crece e impacta contra el edificio apagando las llamas de la parte de atrás, el kitsune voltea viendo como el agua viene hacia él pero ve que es protegido junto al vigilante por una esfera de roca que evita que el agua pase. Lance aparece de la tierra y voltea a verlo, el kitsune enseña sus dientes.

Lance: Tranquilo, no te haré daño, solo quiero evitar que te mojes. Gracias por todo lo que has hecho, sabemos que no eres el pirómano infernal. Has evitado que el fuego impacte contra la ciudad -El kitsune baja las orejas y cierra su boca -Eres bueno, confió en ti.

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