Capítulo 5

Calma Clary, calma Clary, calma Clary...

Debes conservar la calma.

Mantenerla en estas circunstancias es primordial. Estoy tan angustiada, que no puedo ni sostener la grapadora en las manos sin que se caiga. La capacidad de razonamiento esta en cero, desde el viernes.

No puedo pensar bien. ¿Todavía existe los fines de semanas? Porque creo que se han olvidado del mío.

Ha pasado tan rápido, que no recuerdo que he hecho.

Leo Smith, es el fantasma de la opera al igual que... No, no puedo pronunciar esas palabras. ¿Cómo puede ser, que sea él? Lo recuerdo todo como si hubiese sido ayer, no es que haya pasado mucho tiempo. Pero...

¡¡¡Que estúpida soy!!! Sabía muy bien, que no me iba a librar de él tan fácil.

Y ahora ¿Que le diré a Eric?   No, él no se puede enterar. — Esto forma parte de mi pasado y ahí se va a quedar.

Furiosa, lanzo la grapadora en el cajón del escritorio y lo cierro. Ella no tiene la culpa de mis errores, pero no tengo con quien afluir la molestia.

— Adelante — Digo fuerte y claro.

 ¡Uy! que humor. ¿Se puede saber qué te pasa? Pregunta Amy tras cerrar la puerta.

— Nada, solo quiero acabar estos pedidos e irme a casa.  Me levanto y ordeno las capetas que se encuentran ubicadas en el escritorio.

— Clary, siéntate. — Dice Amy autoritaria Te veo muy mal, estas exasperada.  Me sujeta de hombros y me sienta en la butaca.

Tras pasar unos minutos, comento.

— No sé qué hacer. Me tapo los ojos, para evitar llorar.  Estoy confundida.

— ¿De qué me estás hablando? Pensé por varios minutos, si era una buena idea contarle a Amy lo que me está sucediendo. Y finalmente opte, por no decir nada. No estoy preparada para hablar de ese tema.  No puedo Amy, de verdad que no puedo.

— No pasada nada, Clary, si no quieres hablar de eso. Entenderé. Dice mientras sostiene mi mano derecha, para reafirmar lo dicho.  ¿Qué te parece si hablamos del baile de mascara? Estuve trabajando hasta altas horas, no pare en toda la noche. Eric es muy quisquilloso, tomamos fotografía de todo.

— Sí. Yo no tenía la menor idea que íbamos a cubrir la fiesta. Estuvo muy movida Exceptuando cierto evento, Pienso  ¿Y donde se habían metido ustedes? No los vi en toda la noche.

— Como ya te he dicho, Gael y yo estuvimos trabajando hasta tarde. Pero yo logre ver, a cierta persona... sacando a relucir sus dotes de bailarina Comenta mientras ríe.

Y ahí viene mi calvario, había logrado olvidar todo por un momento. ¿Por qué, tiene que sacar ese tema?

— Aja, sí. Solo bailaba. ¿Gael, no consiguió el amor de su vida? Pregunto para desviar el tema. No me apetece seguir recordando ese día.

— Como pez en el agua, no dejaba de mirar a todos.  Las dos reímos juntas.  Por cierto, Clary, he venido a decirte. Eric pide que pases por su despacho necesita hablar contigo. Yo te ordenare todo, hasta que vuelvas. Te dejare las fotos para la publicidad del señor Smith.

Y vamos otra vez con el señor Smith. ¡Uf...!

Me levanto y tomo mi móvil, salgo de la oficina dejando a Amy ayudándome con los pedidos. Camino por el pasillo hasta llegar a la puerta de la oficina de Eric.

— Clary Me dice Támara al llegar a la entrada.

— Sí, dime.  Digo tras tomar la manija y abrir.

— El señor Eric, esta ocupado. Pronuncia rápidamente.

Ya es muy tarde para añadir eso. La mitad de mi cuerpo, está dentro de la oficina. No me queda de otra, que terminar de pasar.

— Solo será un minuto  Indico con un dedo. Y cierro la puerta.

— Buenos días Saluda una voz grave.

Giro velozmente y, me encuentro con la mirada más azulada que he podido ver en mi vida. Me tiemblan las piernas. Creo que me desmayare, sino es que ya, estoy tendida en el suelo. ¿Sera este un sueño? Leo está sentado frente al escritorio de Eric sonriendo. Dirijo la mirada a Eric que me detalla en cada movimiento. ¿Se habrá dado cuenta? Es que soy tan obvia.

— Toma asiento, Clary, necesitamos conversar sobre la publicidad de Azumi Company  Me pasa varias hojas con correcciones Leo y yo hemos decido, cambiar algunas cosas de la promoción. Por ejemplo: Las modelos. Necesitamos por lo menos tres rubias para promover el producto. El color que has elegido no favorece el artículo. - Dice.

— Lo cambiare inmediatamente Digo con voz muy baja. Me siento algo intimidada, los ojos de Leo están posados en mí, desde que he entrado no ha parado de observarme. Como buscando algún cambio en mí.

Decido dejar mi mirada fija en Eric. Si volteo a mirar a Leo, estoy segura que le estampare una bofetada. Por cínico.

— Quiero todo listo para mañana Continua Eric Leo, ¿Deseas agregar algo más?

— Si, por supuesto. — Dice realizado un ademán -He dejado el maletín en la sala de reuniones- Menciona, levantándose de su asiento.

— Yo voy por el Leo, así aprovecho de hablar un momento con Tamara. — Veo pasar a Eric. Unos segundos después escucho, el sonido de los zapatos al caminar y el cerrar de la puerta.

Contengo el aliento por un rato, no quiero que nuestras oxígeno se mezclen — Es estúpido y no tiene nada de coherencia lo que digo Pero suele sucederme cada vez que estoy cerca de él.

¡¡Mierda! Nos hemos quedado solos. Cuatro paredes no bastaran para contener todo el enojo. Decido no hablar, será mejor hacer como si no estuviera.

Pero él se le ocurre la maravillosa idea, de conversar como si fuéramos los mejores amigos.

— Cla...

— No te atrevas a dirigirme la palabra Interrumpo enfurecida.

Me encantaría levantarme y salir corriendo, pero esa acción haría sospechar a más de uno. Cuando me vean tan alterada y con la mirada enrojecida por las lágrimas. Pasan unos largos minutos y todavía no sé, si preguntar y aclarar las dudas que tengo.

— ¿Qué es todo este show que has montado? Pregunto con voz aguda.

— No es un show, Clary. Es mi trabajo. Dice con calma y muy bajo. Es casi un susurro, como si no quisiera que nadie se enterara de ello.

 ¿Tu trabajo? ¿Desde cuándo, eres un empresario reconocido? Por dios leo, deja la farsa. Yo sé muy bien quien eres tu — Estoy perdiendo la calma. Lo sé, lo sé.  ¿Por qué te haces llamar Leo Smith? — Tengo muchas preguntas y tan pocas respuestas.

— Clary, quiero responder todas tus dudas. Pero este no es el lugar, ni el momento.  Me mira fijamente, esta tan cerca que casi puedo sentir el calor de su cuerpo.

— No me merezco esto, Leo. No imaginas todo lo que hice por ti, jamás supiste valorarme, ahora quiero dejarte en el pasado y nunca más acordarme de ti.  Un sollozo escapa de mis labios.

Me levanto del taburete, no puedo soportar estar más tiempo aquí. Pero justo cuando estoy tomado la manija. Su mano me detiene, con firmeza.

 ¡No me dejes!-Es lo único que sale de sus labios.

Y mis barreras se derrumban. Mi confusión crece, no comprendo lo que está pasando. Las lágrimas empiezan hacer acto de presencia.

Su mano sube hasta mi rostro y limpia una lagrima tras otras, me acaricia la mejilla en un gesto tierno.  Estoy perpleja mirándolo.  luego baja la mano y yo vuelvo a respirar.

Termino de abrir la puerta, pero justo delante de mí aparece, Eric, alucinado.

 ¿Ocurre algo? Pregunta extrañado, al ver mi rostro.

— Me iré a casa no me siento bien. Comunico, pasando por su lado.

— Espera, Clary. ¿Puedo llevarte?  Pregunta Eric.

— No te preocupes, sé que tiene cosas que hacer. Yo tomare un taxi. Camino hasta mi oficina, agarro mi bolso y salgo.

Extiendo la mano para detener el primer taxi que veo pasar. Me siento y le doy la dirección. Bajo la mirada y la dejo fija en el móvil, que todavía llevo en la mano sujetándolo con todas mis fuerzas. Y veo la lágrima que cae en el teléfono. Todas las emociones se las agolpa en mi mente. No resisto más...

Leo

Luego de que Clary saliera, decidí decirle a Eric. Que tenía una reunión importante a la que asistir. Tome mi maletín, me despedí y baje en busca de mi coche aparcado frente al edificio.

Al llegar abrí el auto con manos temblorosa, me senté y lance un portazo.

¡¡¡Que imbécil!!! Como he podido decirle eso. ¿Qué estoy haciendo? Doy un manotazo al volante.

Inclino la cabeza hacia atrás, y cierro los ojos. Necesito despejar la mente, y saber que voy hacer de ahora en adelante.

Lo único que me reconforta en este momento, es que ahora si tengo la seguridad de que me sigue queriendo. Si no hubiese visto ese brillo en su mirada aquel día en el baile, su manera de sostenerme... Y sus palabras de hace un rato, me han destrozado. Pero tengo que ser fuerte. Estaría mintiendo si dijera que no ha pasado por mi cabeza.

— La volveré a conquistar.  Digo voz alta Haré que me extrañe de tal manera que todo lo que vea a su alrededor sea mi recuerdo.

Pongo en marcha el auto, mientras marco unos dígitos en el móvil. Contesta al segundo pitido.

— Necesito tu ayuda...


                                                                                 ∞∞∞∞∞

Hola, linduras...

Gracias por los bellos mensajes, que me han estado dejando. Poco a poco les iré respondiendo a todos. Me alegro mucho que les este gustado mi historia, me motiva a escribir más...

Siento haber tardado tanto en subir, he estado atareada con las clases. Discúlpenme, no se vayan a acordar de mi mamá. Haha...

!Ha, por cierto¡ Me he creado un, ask. Para aclarar toda las dudas que tenga, o simplemente para saber un poco mas de mí.

http://ask.fm/Livesthousand


Nos leemos pronto. Besitos


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