Narra Ava:

Bueno, han pasado días desde que Antón y yo llegamos a nuestra ciudad. Antón me respondió al mensaje que le envié diciéndome que hablaría con nuestros padres para que hoy, que es Sábado, hablen con nuestros hermanos y les digan sobre el negocio.

Él también me dijo que le llamó a su novia por teléfono, pues ella vive en Álamos y que le dijo que ya todo estaba bien por allá, es decir, que los Mondragón no han vuelto a molestar a mi padrino, lo cual me hizo pensar que a lo mejor ya supieron que destripé a su maldito aliado. 

Antón también me comentó que los Mondragón le pidieron al resto de los asociados de agricultura que ya no estuvieran peleados con mi padrino quién es agricultor, ya que se había comprobado que él no fue quién provocó el incendio en el rancho de Cutberto y que los asociados aceptaron la propuesta.

Le dije a Antón que le aconsejará a mi padrino que no se fiará de los Mondragón. Esa familia no es de fiar, son una familia de corruptos y viles ladrones que les roban a los demás rancheros. Y lo peor de todo esto es que ellos sobornan a todo Álamos con su cochino dinero para que no les hagan nada.

 En fin, todos estos días me la he pasado en clases y en constantes peleas con León por culpa de la insípida de su novia Machu Pichu. En este momento me encontraba en el baño de mi habitación que comparto con mi hermana Emi y nuestra amiga Keiko, cambiándome para ir a mi casa y sorprender a mis padres con mi regreso. ¿Pero saben cuál es el problema? Que tendré que compartir el auto con León y las guacamayas Meyer, no me refiero a Romi, sino a sus hermanas. En cambio, Romi me cae bien.

Me puse esto:

Salí del baño, guardé unas cosas en mi bolso y me fui a la entrada, todos ya se encontraban ahí. Así que me subí a la camioneta.

Narradora:

León: Hasta que por fin. – Molesto.

Ava: Cállate la boca si no quieres que te vuele los sesos de un sólo madrazo. – Lo mira mal.

León: – se queda callado.

Ulises: Bueno, pues vámonos. – Les dice a sus hermanos y amigos.

Lobo: Señorita Ava que sorpresa. – La mira. – el joven Antolín dijo que se había ido a Guaymas. –

Ava: Porque yo se lo pedí, ya que quería dar una sorpresa. – Sonríe. – vamos a casa.

Lobo: Por supuesto. – Arranca la camioneta y van rumbo a la casa. 

Ava iba mirando el paisaje, los demás se encontraban haciendo sus arguendes a lo cual ella no les dio importancia. Ella se encontraba en su propio planeta hasta que Lobo llamó su atención. 

Lobo: Señorita Ava, nos vienen siguiendo unas camionetas. – Le dice a Ava.

Ava: – Voltea a ver que si los están siguiendo las camionetas. – ¿Es la primera vez que las ves?

Lobo: No, nos han estado siguiendo desde que salimos del Like. – Mira por el retrovisor.

Ava: – Acelera, piérdelos antes de llegar a la casa. – Mira a Lobo. 

Lobo: Si señorita. – La mira y después mira por dónde iba.

Ulises: ¿Qué está pasando? – Ya que no entiende nada de la situación,

Ava: Si nos atacan, nos vamos a defender, ya es hora de que sepan del negocio. – Mira a sus hermanos y amigos.

Ulises: ¿Cuál negocio? – Mira a su hermana. 

Ava: El verdadero negocio de la fam....... – Fue interrumpida por un disparo de un arma. – agáchense. – Les grita a todos, agarra sus armas, las carga, baja el vidrio y comienza a disparar.

Toni: ¡¿Que es todo esto?! – Gritando y llorando.

Machu/Romina: – Se abrazan, pues estaban asustadas.

Ava: Malditos Mondragón. – Piensa en su mente con rencor, le dispara al chofer de la camioneta que se encontraba detrás de las demás, provocando que se vuelque. – Lobo te detienes en cuanto lleguemos a campo libre. – Le dispara a otra camioneta que se encontraba muy atrás que había rebasado la que se volcó en el tanque de gas, provocando que exploté en mil pedazos. 

Durante la pelea mortal, aparecen dos motocicletas que al parecer vinieron a apoyar a los Ruíz. Las motocicletas iban conducidas por dos chicas. Una de ellas era de la misma edad que Ava y sus cuatrillizos, tenía la piel blanca, ojos verdes y el cabello corto de color morado terciopelo. La otra chica era menor que ella. Esta chica tenía la piel clara, ojos cafés y cabello castaño con mechas de arcoíris, el cual estaba atado en dos chonguitos en cada lado de su cabeza (casi iguales a los de Romi).

La chica de cabello morado terciopelo iba a toda velocidad, alcanzando una de las camionetas que estaban atacando a los Ruíz, se pone de pie en su motocicleta en movimiento sin perder el equilibrio y hace un gran salto, subiéndose al capacete de la camioneta estilo araña, mientras que miraba hacia el cielo, pensando en alguien. 

XXX: Tengo al mejor maestro del mundo. – Piensa en su mente con una sonrisa.

Al llegar al capacete, la joven toma su arma y dispara contra él, matando al chofer y después salta devuelta a su motocicleta, observando que la camioneta se había estrellado contra un edificio, lo cual había hecho que los Ruíz lograrán llegar a campo libre donde la batalla continuaba.

Lobo: – Se detiene más adelante, se baja y se cubre con la puerta de la camioneta de la familia Ruíz.

Ava: Ustedes no salgan. – Les aconseja a sus hermanos y amigos, se baja de la camioneta y corre a esconderse detrás de un árbol.

Llega otra camioneta: – bajan los hombres quiénes se encontraban dentro de ella y continúan disparando, sin saber que se estaban dirigiendo a una trampa. 

Ava: – Les dispara a todos, creyendo que se han muerto.

Emi: – ¿Ya podemos salir hermana? – Baja de la camioneta y se dirige hacia su cuatrilliza.

Lobo: Señorita Emilia, cuidado. – Mira algo.

Ava – ¡¡Hermanita!! – Sale de su escondite, corre hacia su hermana, la cubre, pero se escucha un disparo.

Emi: – Ve a su hermana y trata de sostenerla. – ¡¡Hermana!! – llorando. 

La chica castaña con mechas de arcoíris seguía en su motocicleta hasta que se detuvo en un lugar seguro. Una vez ahí, ella se baja de su moto, abre el asiento de su propia moto y de ahí saca un dispositivo y sin que le temblará un dedo suyo, ella oprima el botón que se encontraba en medio de su dispositivo, haciendo las camionetas y quiénes les estaban disparando a los Ruíz y a quién le había disparado a Ava, estallarán en un solo segundo, matándolos a todos. 

Ava: – Mira a su hermana Emi – Una vez le salvé la vida a Antón, lo mismo haría con todos ustedes. – Sintiéndose mal.

Emi: – La abraza, siente que su ropa está húmeda, ve la cintura y de ahí a su hermana y llora más fuerte. – Hermanita, tienes sangre. – ¡¡Lobo, hay que irnos, hirieron a mi hermanita!! –

Lobo: – Arranca la camioneta. 

Silverio: – Se baja de la camioneta, carga a Ava y se suben todos a la camioneta.

Ulises: – Ava. – La mira. 

Ava; – Estoy bien. – Los mira. – deben cam... – Pierde el conocimiento.

Emi: – Hermanita. – La mira y llora.

León: – ¡¡Acelera Lobo!! – Preocupado por Ava. 

Lobo iba manejando la camioneta a toda velocidad. Ulises por su parte iba apretando la herida de Ava. Por fin llegan a su casa, abren el portón, Lobo ayuda al bajarse de la camioneta y abre la puerta de la mansión rápidamente y Silverio baja de la camioneta con su cuatrilliza en brazos.

Silverio: – Entra a empujones a la casa y acuesta a Ava en el sillón. – Háblenle a papá y mamá, ellos van a poder detener el sangrado. – Mira a sus hermanos.

Ulises: – Hace lo que su hermano le pide y entra al despacho de su padre, entra y ahí ve a sus padres hablando con Antolín. – Papá, mamá, necesitamos que vallan a la sala- mira a sus padres. – Hola Antolín. – Saluda a su hermano. 

Antolín: – Hola Ulises. – Lo mira.

David Rubio: – ¿Qué pasa Ulises? – Levitándose de su silla de escritorio.

Ulises: El Lunes regresó Ava junto a Antolín, sólo que ella pidió que dijéramos que se había ido a Guaymas porque quería darles una sorpresa. Hoy, cuando veníamos para acá, unas camionetas nos estaban siguiendo y de la nada nos comenzaron a disparar, Ava nos estaba defendiendo a todos y ella también comenzó a disparar hasta que Lobo se detuvo en un lugar seguro dónde la batalla seguía. Ava les disparaba a todos, creyendo que los había matado, le iban a disparar a Emi, ya que se bajó de la camioneta para acercarse a nuestra hermana y Ava la cubrió...............Ava vino herida. – Les explica rápidamente a sus padres y hermano. 

África Ruíz de Rubio: – ¡¿Qué?! – Grita a punto de llorar.

David Rubio: – Mi princesa ardiente. – Sale rápidamente y va a la sala. – Silverio sígueme, vamos a su habitación. – Mira a su otro hijo y sube las escaleras.

Silverio: – Carga a Ava, sigue a su padre, llega a la habitación de Ava y la acuesta cuidadosamente en su cama. 

África Ruíz de Rubio: – Llega con el botiquín de primeros auxilios y se lo da a David mientras que lloraba.

David Rubio: – Silverio, necesito que salgas y tranquilices a todos. – Lo mira, se pone unos guantes. – Tu madre me va a ayudar.

Silverio: – Está bien. – Sale y se va con los demás. 

África Ruíz de Rubio: – Se limpia sus lágrimas y empiezan a atenderle la herida a Ava.

Con los chicos:

Ulises: – ¿Porque tardan tanto? Ava va estar bien. ¿Cierto? – Con lágrimas en los ojos.

Antolín: – Si, ella está bien, Ava es fuerte. – Suspirando.

León: – ¿Pero porque nos empezaron a disparar? – Mira a Antolín.

Antolín: A ver, ahorita que bajen nuestros padres, todos vamos a hablar. – Los mira a todos sus hermanos.

Silverio: – Es lo menos que merecemos, merecemos saber lo que está pasando aquí. – Mira a su hermano.

Abel: – Llega a casa, entra a su hogar y ve a todos ahí, ve a Antolín y sonríe. – ¿Y Ava? – Abraza a su hermano.

Antolín: – Le explica todo lo que sucedió.

Abel: – Carajo, voy a verla. – Sube las escaleras. 

África Ruíz de Rubio: – Niños, suban, su hermana ya está bien y ya reaccionó. – mira a sus hijos desde el primer escalón. – tenemos que hablar.

Abel/Antolín: – Suben rápidamente sin chocar con su madre y entran a la habitación de Ava. – Princesa ardiente. –

Silverio: – Sube a la habitación de su cuatrilliza y entra. – Que susto Ava. – La mira.

Ava: – Hierba mala nunca muere hermanos. – Sonríe. 

En la sala:

África Ruíz de Rubio: – Machu, Toni, Romina, Claudio, Keiko y Erick, ustedes también suban, ustedes también tienen que enterarse de esto. – Entra a la habitación de Ava, los chicos suben detrás de ella y entran.

Erick: – ¿Porque nos atacaron suegra? ¿Porque Ava tiene armas? – Mira a los padres de su novia Emi.

Claudio: – Se sienta al lado de Ava y la mira. – Lo bueno es que no te pasó algo más grave.

Ava: Gracias. – Le sonríe a Claudio. 

Antolín: – Se pone celoso. – A ver ya. – Hace que Claudio se levanté y se sienta él en su lugar. – Así está mejor. – Todos se ríen, menos él.

David Rubio: – Es hora de que se enteren del verdadero negocio de la familia. – mira a todos sus hijos, incluso a los hermanos Meyer, Keiko y Erick. – No se los habíamos dicho en primer lugar por mantenerlos a salvo, pero hoy, era evidente que los querían desaparecer, por suerte es que mi princesa ardiente venía con ustedes y les salvó la vida a todos. Antolín y Ava se enteraron del verdadero negocio familiar porque accidentalmente escucharon una conversación entre su madre y yo, así que no tuvimos otra opción, más que decirles la verdad e involucrarlos, por eso los enviamos lejos a Álamos. –

Ulises: – Cuando veníamos para acá, Ava nos iba a decir acerca del verdadero negocio familiar, pero ahí fue cuando empezó la balacera y por eso ya no nos pudo decir nada. – Mira a su padre.

León: – ¿De qué se trata el verdadero negocio familiar? – Mira su padre y madre.

David Rubio: – Suelta un suspiro. – Somos nar....... – Fue interrumpido.

XXX: – Interrumpe a David al entrar a la habitación. – No puedes decirles sin que nosotros estemos presentes. – Todos voltearon a ver a la persona quién venía acompañada por más gente.

Esperó que les gusté el capítulo. 😊😊

Le dispararon a Ava. 😥😥

Pero por suerte se salvó. 👏👏👏

Al parecer Claudio está quedando atraído por Ava. 💖💖

Y Antolín está celoso. 😅😅

¿Quiénes le habrán disparado a Ava?

¿Habrán sido los Mondragón como ella piensa?

¿O habrán sido otros enemigos que ella tiene? 

¿Quiénes serán las misteriosas motociclistas que les ayudaron a los Ruíz?

¿Quién habrá interrumpido a David cuando él estuvo a punto de revelarles la verdad a sus hijos?

¿Y quiénes habrán llegado con la persona quién interrumpió a David? 

Esta es la mansión Rubio Ruíz. 

La sala: 

Y esta es la habitación de Ava.