Todoroki la miraba sorprendido, realmente no se esperaba que hubiese cruzado aquel límite.

-No quise hacerlo...- sus ojos volvieron a empañarse- estaba en un callejón, seguía una pista, un chico con quirk interesante había desaparecido. La organización que te secuestró había contratado a un pequeño grupo de matones para encargarse de aquello. Los busqué, quería interrogar a uno pero no salió bien... Logré pillarlo por sorpresa cuando estaba solo, salté sobre él para enfrentarlo pero apareció su compañero- la chica apartó la bufanda que cubría su cuello, tenía una cicatriz bastante fea.

El joven se acercó a ella y puso su mano sobre aquella marca.

-Podría haberte matado.

-Estuve a punto de morir, sí, por suerte en ese tiempo mi regeneración aún funcionaba. Su compañero me había apuñalado así que rápidamente usé mi cola para atravesar el estómago del primer hombre así podría enfrentarme a quien me había herido... Pensaba curarle al terminar pero supongo que me tomó más tiempo del que pensé. Cuando logreé noquear a mi objetivo fui a sanarlo... Te juro que quise hacerlo pero... estaba muerto- Las lágrimas brotaban de sus ojos sin parar- traté de reanimarlo, no quería ser una asesina- la pequeña temblaba aterrada- Cada vez que veo mis manos puedo verlas cubiertas de sangre, da igual lo mucho que las limpiase desde entonces... n-no puedo eliminar esa imagen de mi cabeza... Si cierro los ojos le veo en el suelo, apenas puedo dormir por las pesadillas, ¡SOY UNA ASESINA!

La joven estaba entrando en pánico cuando Todoroki la abrazó con fuerza.

-No fue culpa tuya.

-YO LO APUÑALÉ, ¡LO MATÉ!- gritaba mientras lloraba desconsoladamente en los brazos de Shoto.

-Fue un accidente, te estabas defendiendo- el chico trataba de calmarla acariciando su cabeza.

-Yo... yo quería ser una heroína... quería luchar al lado de todos los de clase, defender a los demás... SALVAR VIDAS... y en su lugar... le arrebaté la suya...

Todorki se apartó ligeramente para poder mirarla a la cara, apoyó sus manos sobre las mejillas de la chica y la miró fijamente.

-Tú ya eres una heroína. Si no hubiese sido por ti habría muerto, estoy seguro de ello... Si he aguantado tanto fue pensando en que quería volver a verte y aún con eso en mente podía sentir que no me queda mucho tiempo, cada día se me hacía más difícil... En el momento en que mi voluntad colapsó e incluso acepté mi muerte, apareciste... como un ángel caído del cielo, me da igual si tus alas o poderes no son como eran, me da igual si al final no te gradúas en esta escuela. Tú eres y siempre serás mi salvación, mi heroína.

Nozomi le miró sorprendida a la par que sonrojada.

-Gracias...- sus lágrimas cesaron, cerró los ojos con una gran sonrisa.

De pronto su cuerpo se vio en envuelto en una cálida luz blanca, sus alas se abrieron por cuenta propia y las plumas empezaron a brotar sanas y fuertes como si de un cerezo en flor se tratase.

Todoroki observó aquella hermosa escena completamente embelesado, entonces la chica cayó sobre su pecho mientras su cuerpo todavía brillaba.

-¿Nozomi? ¿te encuentras bien?- iba a tratar se despertarla cuando toda aquel brillo cesó. Pudo ver su cuello, aquella horrenda cicatriz ya no estaba. De hecho, ninguna de sus cicatrices había dejado rastro.

-Eso ha sido realmente hermoso- Nezu estaba de pie en la puerta, tras él estaban Aizawa y los padres de la joven.

Shoto miró hacia la puerta bastante confuso sin comprender del todo qué había sucedido.

-Has hecho un gran trabajo, has logrado que ella perdone sus propios pecados- Se acercó a los dos, aún estaban en el suelo y Nozomi permanecía inconsciente- haber sanado tantas heridas además de regenerar sus alas... debe estar agotada.

-¿Cuánto tiempo llevan ahí?- estaba tan concentrado en la joven que no había notado la presencia de los demás, que como cabía esperar, los siguieron al poco después de que salieran corriendo.

-El suficiente- Raiden lo miraba serio- creo que cuando llegué mi pequeña te estaba pidiendo que te quites de encima- su sonrisa era realmente aterradora.

 Al pobre Todoroki le dio un escalofrío.

-Cariño, este chico es la persona por la que nuestra niña daría su vida y que- lo miró enternecida pues aún sujetaba a Nozomi con sumo cuidado- daría su vida por ella.

Raiden suspiró resignado.

-Gracias por lo que le has dicho antes, realmente la has ayudado- se cruzó de brazos, aún parecía algo molesto- cuida de ella, pero no te pases.

-Sí señor...- Todoroki no entendía bien la situación pero ese hombre le daba un poco de miedo...

-Tenemos algo de prisa... Nozomi-san, siento no dejarte descansar más- Nezu le daba toquecitos en la cara para despertarla.

-Oye, ustedes los vigilan en los apartamentos esos, ¿verdad?- Raiden preguntó a Aizawa.

Tomori se aguantaba la risa.

-Sí... les prestaré especial atención.

-Te lo agradezco.

Shoto los miraba cada vez más confuso.

-¿Director Nezu?- la pequeña al fin despertó.

-Buenos días jovencita, tienes que despertar, antes de poder incorporarte a la UA debes dar una rueda de prensa aclarando algunas cosas.

-¿Qué? Si están aquí deben haberlo oído, he matado a alguien, aún si no fue mi intención... ¿Cómo voy a seguir estudiando en la UA?

-Simple- Nezu sonrió calmado- no le mataste. Te hemos seguido la pista, y aunque eres bastante escurridiza la mayoría de los crímenes que has confesado ya los sabíamos. Sobre aquel hombre que mataste... no murió. Es un miembro de una banda cuya quirk le permite hacerse el muerto, su ciclo cardíaco se detiene completamente por unos minutos, podríamos decir que es como una zarigüeya. Ya dio algún que otro susto a otros héroes en el pasado, sin embargo como lo heriste pudo ser detenido mientras huía, ahora está en prisión cumpliendo condena sano y salvo.

Nozomi lo miró por unos segundos algo incrédula. Se levantó tambaleándose un poco por el cansancio.

-LO BUSCO Y LO MATO.

Todoroki le agarró de la mano para que se calme.

-No sé si alegrarme, llorar, enfadarme, o matarlo- de pronto empezó a reír- es surrealista, tanto tiempo con esta carga... y resulta que... pff- de sus ojos brotaban lágrimas aunque seguía riendo- Supongo que es un alivio.

-¿Aceptas tu incorporación entonces?

Nozomi miró a Shoto con una sonrisa.

-Por supuesto.

EN EL PROXIMO CAP: EL FINAL

ENTREVISTA A NOZOMI, POR FIN SE REVELARÁ QUÉ PASÓ EL DÍA DEL SECUESTRO.