Irene se encontraba con Alan en Sunny Ice, tenían tiempo sin salir juntos y él le había escrito para hacerlo. —Puede que me guste Charlie. —Le dijo ella, Alan asintió y tomó una cucharada de su helado.

—Eso es lindo. —Le sonrió. —A mí me gusta Sierra.

—Eso ya lo sé, Alan. —Él suspiró. — ¿Se lo dijiste?

—Ayer lo hice. —Sonrió sonrojado recordando lo que había sucedido luego de eso. —Fue grandioso. —Irene le sonrió, le gustaba ver a su mejor amigo feliz, incluso aun cuando seguía ese pequeño ardor en su pecho. Pero estaba bien con eso, quería su felicidad y al parecer ya estaba sucediendo. —Charlie me contó que se confesó. —Ella asintió sonrojada. —Tengo que informarte que hice un plan con él bastante bueno.

— ¿Para enamorarme?

—Claro, linda. —Le dijo. —Charlie está bien entrenado, dale dos semanas para que veas como estarás sonriendo como idiota cuando hables de él.

— ¿Sonreiré igual de idiota así como tú lo haces cuando hablas con Sierra?

—Oh, cállate. —Ambos rieron. Alan revisó su teléfono y sonrió. —Debo irme, Sierra me está escribiendo para ir a su casa un rato.

—Está bien. —Le dijo—Suerte con tu novia. —Alan negó.

—No es mi novia. —Se acercó a ella para despedirse con un beso en la mejilla y revolverle un poco el pelo para luego irse del local. La castaña tomó lo que quedaba de su helado y al terminar decidió tomar el autobús hasta la casa de Charlie.

Tocó el timbre y esperó, el hermano menor del castaño abrió la puerta. —Hola, ¿Eres amiga de mi hermana? Eres linda. —Le sonrió coqueto, Irene levantó una ceja y rió.

—No, soy amiga de tu hermano. —El chico se rió, la castaña lo miró seria sin entender.

—Espera, ¿Es en serio? —Irene asintió, él la miró sorprendido y volteó hacia dentro de su casa. — ¡Mamá! ¡Tenemos un 33-12! —Gritó y luego le sonrió. —Pasa, linda.

Irene lo miró incómoda por su extraño coqueteo y caminó hasta la sala en donde se encontraba Charlie con su mamá y su hermana. —Hola. —Les dijo ella. Charlie le sonrió incómodo. Su hermano rodeó el cuello de Irene con sus brazos.

—Te sientes incómoda, lo sé. Pero debes entendernos, este chico. —Señaló al castaño. —Es el individuo más callado que hay en el mundo y que la primera persona que él traiga a casa sea una mujer, es algo bastante shockeante para nosotros. —Charlie negó y se paró del sofá para acercarse a Irene.

—Nosotros iremos a mi habitación. No nos molesten. —Les dijo y tomó la mano de Irene para caminar hasta su cuarto. Una vez dentro, Charlie cerró la puerta y volteó a verla. —Disculpa eso, mi familia ama avergonzarme frente a chicas lindas.—Irene le sonrió y se acercó a besarlo. — ¿Por qué fue eso?

—Porque quería hacerlo. —Le dijo y volvió a besarlo, esta vez más lento y relajado. 

N/a: No le entiendo una deblin a mi profesor de estadística. Ayuda.