27

Esa tarde, Irene había decidido llamar a Bianca, así podían pasar una tarde de chicas. Ella aceptó tranquila, llegaría a su casa en una hora, tiempo perfecto para buscar varias botanas y películas para ver en la tarde. Bajó a la sala y se encontró a su hermano besándose con una chica que desconocía, seguro era de esas que traía a su casa al mejor estilo de Drake Parker— ¿Sabes en dónde mamá guarda las películas? —Le preguntó, su hermano se separó de la chica y volteó a verla.

—Ahí. —Señaló unas gavetas debajo del televisor. — ¿Vendrá Alan?

—Bianca, tarde de chicas. —Su hermano asintió y ella caminó hasta la gaveta que él había señalado. Decidió ver dos películas latinas, Permitidos y Azul y no tan Rosa, ambas eran del estilo de Bianca por lo que iba a estar emocionada al verlas. —Necesito la sala. —Le dijo indirectamente para que, o se fuera la chica o se fueran ambos de allí.

—Bien, llevaré a Wanda a su casa. —Pensó en un chiste muy a los padrinos mágicos pero prefirió no decirle nada y sólo asintió. Ambos salieron de la casa e Irene fue a la cocina para buscar algo de comer.

Bianca entró media hora después con varias bolsas encima. —Tengo todo un kit de belleza para pasar una tarde como suelen mostrarte en las películas.

— ¿Cómo así?

—Hablaremos de chicos, leeremos revistas, comeremos helado mientras vemos películas y nos pintaremos las uñas.

—Que cliché eres, Bianca. —Se rió su mejor amiga.

—Bruno te llaman ahora. —La miró molesta para luego sonreír. —Nunca he hecho eso y quiero ver que tal, si está en una película debe ser bueno ¿No?

—Bien, ¿Por dónde empezamos?

—Hablemos de Alan. —La castaña sonrió. — ¿Le dirás?

—Después del baile, no quiero que se entere tan apresurado.

—Si te soy sincera, siento que él ya lo sabe. —Irene la miró con el ceño fruncido. —Es Alan, él siempre se da cuenta de todo.

—Bruno me dijo que él no se lo imagina.

—Bruno pudo mentirte. —Dijo Bianca. —Es mi novio, pero puede mentir para ayudar a un amigo. Y más si ese amigo es Alan.

Irene la miró dudosa. —Charlie piensa que debo decirle a Alan todo antes del baile pero no quiero, si le digo y me rechaza, ya no irá conmigo y yo quiero ir con él, aunque sea como amigos.

—Ese es tu problema, quieres que él lo sepa pero no quieres decirle porque te da miedo.

—No quiero acabar con nuestra amistad.

—Tú acabaste con su amistad en el momento en el que él te empezó a gustar.

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