James Lake Junior.

¿Porqué la perfección debe ser una palabra y no tu mirada?

James Lake Junior.

Un nombre un poco peculiar ¿No creen?

Era un delgado y un poco bajo para su edad, cabello negro y lizo que brillaba a la luz. Manos cálidas y gentiles, que hacían la promesa de nunca soltarte. Una sonrisa por lo general muy tímida o discreta. Puede que te enamore con su cocina por lo fascinante y exquisita que es y sentirte como en la mesa de la realeza al probar cada bocado.

Pero lo que mas destacaba de todo en él, eran sus ojos.

Unos deslumbrantes ojos azules.

Si, existían ojos de ese color, incluso tonalidades diversas; pero los de él, los de él reflejaban más de lo que sus palabras decían.

Era tan exquisito ver aquellas hermosas gemas azules de forma tan detallada el cómo se expresaban.

A veces aclamaban un te amo a su amada.

Susurraban un gracias a sus aliados.

Confesaban un te extraño a su amigo.

Aparentaban un estoy bien a sus queridos.

Sollozaban un adiós a los caídos.

Ese azul comúnmente se describe como uno frio, duro, sin sentimientos. Su mirada como el cielo logro lo que muchos nunca hicieron, se volvió en una cálida, en una segura, en una combinación perfecta de él.

James Lake Junior. Aquel nombre resonaba en la cabeza de muchos, pero sus colores quedaban en pocos. 

ˇ•→𝐿𝑜𝑠 𝑐𝑜𝑙𝑜𝑟𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑚𝑖𝑟𝑎𝑑𝑎←•ˇ

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top