Hola!! Esta parte es opcional, corresponde a un final alternativo, plus para quienes decidieron adherir al muro de pago ♥

Les comento un poquito cómo surge: Los Colores de Jimmy fue escrito por primera vez hace unos tres años donde el final de esa versión pionera me dejó sumamente destruido y mal. Con el tiempo, decidí reescribir por completo la historia dando origen a la versión que ya tuvieron oportunidad de leer, habiendo cambiado algunas partes rotundamente, por ejemplo, el final.

Creo que merecen saber el primer final que tuvo la historia, por lo tanto lo incluyo en este capítulo.

ADJUNTO EN ESTA PARTE el penúltimo capítulo, ya que me parece esencial releerlo a fin de entender este final alternativo, a menos que aún tengan fresca la historia n.n

ADVERTENCIA: Este capítulo les romperá el corazón.

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Estoy en mi viejo sueño. Y recuerdo que en algún momento fui feliz; en ese tren viene el ser oscuro que me quería y buscaba algo de mí.  

Casualmente es de pelo azul, apuesto y de ojos negros, no gótico en su entereza como lo soñaba. Pues es maligno, verdad, un ser malvado. Miro hacia atrás y he dejado lo que quedaba de mi vida. El sujeto apuesto vuelve a ser alguien detestable que sabe de mi herida.

Me la descubre y quita el torniquete.

Vuelve a sangrar... ¡Y no le he dicho a mi madre que estoy sangrando! Que la herida duele y me voy a morir...

—¿Seguro que no lo sabía? —me pregunta el sujeto.

Curiosamente, éste lleva mi voz.

—¿Qué dices? —le pregunto lleno de indignación.

—Lo que oyes. ¿Crees que tu madre no sabía lo de tu herida? Pues sí, tu abuela también, tus amigos, todos lo saben. Sin embargo te dejaron sangrar porque prefirieron ignorar lo que te hacía daño.

Al principio intento negarlo todo, pero luego me permito reflexionar y sí...logra encajar si se lo ve de ese modo.

Mis abuelos sabían que me lo estaba pasando mal. Mis padres también y me echaron. Mis amigas también pero no se interpusieron.

—¿Cómo lo sabes? —le pregunto.

—Porque tú lo sabes.

—Explícate.

—Mírate—me impone.

A continuación lo observo a él. Se ha convertido en mí, pero tiene un aura oscura que me aterroriza.

Lo observo mejor y...

No es oscura.

Es clara. Este chico da luz, aunque siempre lo he observado como alguien malvado.

—¿Qué quieres? —le pregunto rompiendo en un repentino llanto al darme cuenta de quién es esta...cosa que tengo enfrente.

—Hacerte un favor Jimmy.

—¿Qué cosa?

—Sé que de chico jamás te enseñaron a dar un abrazo.

Oh, no, eso es algo demasiado privado y personal. ¿Cómo se permite decirme algo así? Pues... se supone que él es yo...

Y estoy en el tren.

Observo mi herida: sigue sangrando.

—¿Me curarás esto? —le pregunto con la voz quebrada.

—Algo mucho mejor.

Y me abraza.

Ese ser oscuro y lumínico se funde conmigo, yo en mí. Me encuentro a mí mismo y sé que ese tren no es signo de algo macabro sino la transición hacia mi muerte.

El intermediario resultó ser un abrazo.

Que sanó la más tortuosa de las heridas.

*****

—Creo que ha sido una buena decisión—murmura Meredith, y Britt se mantiene cabizbaja de brazos cruzados. Steve ya puede tomar asiento y caminar muy poco a pesar de que mejoró bastante desde la tragedia en el instituto hace casi un mes.

Jena lo ayuda a incorporarse y dar algunos pasos.

—Miranda está que arroja chispas—murmura la pelirroja—. La decisión del director de cancelar el baile de graduación le servirá de escarmiento. Además no puedo creer que te haya dejado en estos días que tanto necesitas su ayuda...

Steve esboza una media sonrisa.

—Yo sí que lo puedo creer—murmura.

Britt levanta la mirada y Meredith se pone tensa. Finalmente decide soltar algo que venía conteniendo hace tiempo:

—Les juro, les juro que yo no hice nada.

La muchacha se sienta en el borde de la cama de Steve, donde éste se ha encontrado en recuperación el último mes.

Todos la miran y esperan a que continúe:

—En verdad, lo que sabía no se lo conté a nadie.

Jena frunce el entrecejo.

—¿Podrías explicarte?—le pide—. Realmente no entendemos de qué estás hablando.

Steve suspira y dice:

—Yo sí entiendo...

Britt da un paso adelante:

—Yo también.

La pelirroja se queda anonadada y observa a todos como si fuesen unos completos extraños.

¿Qué es lo que ha estado sucediendo que a ella no le dijeron una sola palabra?

—McCough ha estado como una furia con tal de investigar lo que sucedió—murmura Meredith—, los ha andado intimidando a ustedes, sin embargo yo sé lo que realmente pasaba por la cabeza de Jimmy al momento que hizo lo que hizo...que terminó por...

La mandíbula de Britt tiembla mientras la joven de tez negra llora desconsoladamente y confiesa con angustia:

—Yo los vi, a Jimmy y a ti, Steve...seguramente él no soportó la idea de que...divulgue eso que presencié...

La rubia contempla al muchacho con algo de indignación.

—¿Tú y Jimmy finalmente tuvieron algo?—le pregunta sin saber si ponerse feliz porque su amigo pudo estar con la persona que amaba o enojarse porque éste prefirió no contarle.

Steve abre la boca pero las palabras no salen. Jena los detiene con las manos en alto.

—¿Están queriendo decir que a Jeremiah Black le gustaban los...?

—Sí, Jena, eso mismo, no es necesario aclararte que yo le atraía y él...a mí—confiesa Steve con un nudo en la garganta.

Es Britt quien arroja el pensamiento que se cruzó por la cabeza de todos los presentes a la misma vez:

—Pero intentó matarte.

—No—murmura el muchacho—. Yo le hice mucho daño y lo maté en alma antes de que terminase consigo mismo. Negué lo mío para estar con mi disfraz de heterosexual que era...

—Miranda—completa la frase la pelirroja quien finalmente logra atar cabos.

Se hace un profundo silencio. Pero Meredith lo rompe terminando con su discurso afligido:

—Él pensaba que yo...haría algo malo con lo que sabía...pero jamás hice nada. Jimmy se anuló a sí mismo del mundo para esquivar lo que podría avecinarse... mi cobardía y repulsión me limitaban a poder acercarme a él y explicarle que yo no interferiría en temas que les eran exclusivos.

Steve la mira y se le llenan los ojos de lágrimas. Está sorprendido y decepcionado.

—Pero el daño podrías habérmelo hecho a mí.

—¡Les pido perdón por no mostrar mi apoyo!—exclama la muchacha y sigue con sus gimoteos—. Jamás me había tocado vivir una situación así, al principio me causó asco, luego enojo y tantos sentimientos encontrados resultaron ser los que me atrofiaron y me impidieron hablar con ustedes dos.

Él le cree. Morgan piensa que si Meredith hubiere hablado con él y éste con Jimmy, podrían haber detenido lo...inimaginable. Lo fatal.

Britt nota que el muchacho comenzaría a torturarse por lo sucedido, sin embargo fue inevitable y ya estaba hecho todo, no habría vuelta atrás.

Steve es lo único que le queda a la rubia, de aquel muchacho quien fue en vida su mejor amigo.

—Chicas—murmura a sus amigas—, ¿me dejarían a solas con Steve un momento, por favor?

Semanas más tarde, el joven ya está recuperado aunque no plenamente; por lo menos camina por sus propios medios. Aún así Britt lo acompaña.

Habían pactado ir al cementerio.

Ambos se incorporan frente a la lápida de Jeremiah Blake y las lágrimas asoman a sus rostros.

Steve cae de rodillas frente a la foto de Jimmy en la placa de piedra y la abraza. Llora contra ella como si fuese a él quien tiene entre sus brazos.

Britt posa una mano en un hombro del joven.

—Calma—le dice con un hilo de voz.

Pasan unos minutos silenciosos y la rubia le ofrece una rosa rojiza al muchacho. Éste la observa y se pone de pie, con los ojos enrojecidos y las mejillas henchidas.

Toma la rosa y la deja sobre la tumba.

—Creo que Jimmy estaba aguardando por ti—le murmura al joven—. Ahora puede descansar en paz.

Le sonríe a Morgan y luego lo toma de un brazo mientras se dan la vuelta y empiezan a caminar dejando atrás el recuerdo de un muchacho que permanecería allí hasta que todo su amor sea consumido por la naturaleza.

—¿Sabes?—inquiere Britt con un halo de energía y esperanza en su voz—. Tengo un primo que quizá podría...interesarte.

Steve suspira y se limita a no emitir comentario al respecto. Aunque admite en sus pensamientos que no quiere saber nada al respecto, durante un tiempo. Es hora de pensar en universidades que lo reciban el próximo año...o bien, alistarse en el ejército.

—Te agradezco Britt... aunque por el momento quiero terminar en paz mi duelo.

—Te comprendo—murmura la rubia—, pero ¿crees que podrás encontrar el amor, aún después de lo sucedido?

Transcurre un momento.

Vaya, realmente Steve no ha tenido opción de pensar eso con anterioridad.

Algo se aniquila en su pecho durante un instante, pero no logra destrozar un sentimiento que contiene lo más puro y grandioso de todo ser humano...

—Creo—le contesta—que aún nos queda tiempo para conocer gente. Me alegra en cierto modo haber acompañado a Jimmy durante su...agonía. Las personas no nacimos para morir en soledad.

Britt sonríe y concluye:

—Es verdad, nacimos del amor para volver a éste.

Finalmente atraviesan los portones de hierro que dan salida al parque del cementerio, dejando atrás al muchacho que les brindará su protección y compañía...

Mientras durase la eternidad.

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#LosColoresDeJimmy

#CapítuloEspecial

#WattpadNextBeta

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