Me quedé helada, literalmente.

Eros limpiaba y ordenaba mientras yo estaba quieta observándolo.

No sabía si sentirme ofendida porque prácticamente dijo «competir» o halagada porque Eros quería estar conmigo.

¿Espera por qué halagada? ¡Es Eros! 

Definitivamente debía mantener distancia de ambos.

Dejé la cocina y me encerré habitación, asegurandome de que tenga cerrojo.

¿Qué carajos acaba de pasar? ¿Por qué me afecta tanto? 

¡Por dios, hace unos días estaba con Harry! 

«Pero, el idiota te engañó»

Pero...¿y si se arrepiente?

«No te volvió a llamar»

Le dije que no lo haga.

«¿Desde cuándo te hace caso?»

Carajo.

«Fijate si borró sus fotos juntos»

¿Lo hizo? Yo no entraba a instagram desde hace tiempo.

Tomé el móvil y entré a instagram: Grave error.

Las fotos que Harry tenía conmigo, ya no estaban. En cambio tenía fotos con Donna, fotos en fiestas, en cenas...y besandose.

Genial.

«Y tú pensando que él se arrepentía»

En mi perfil tenía unas cuantas fotos con él, asique decidí borrarlas.

7 fotos fueron borradas, pero me sentía fatal.

Tenía demasiadas solicitudes de seguimientos y algunos chicos me habían hablado al privado, cosa que ignoré.

Entré al perfil de Harvey y el video de que había publicado ya no estaba.

Algo se alivió en mí.

En el instagram de los chicos habían unas cuantas fotos mías y videos de aquella fiesta tomando chupitos, mierda que había revelado cosas íntimas.

La pantalla fue cambiada por una llamada entrante: Era Steve, mi mejor amigo.

Carraspeé.

—Hola —saludé.

—Ay, mi reina, lamento no haberte llamado antes. Estuve con un par de problemas  —comentó Steve, en tono preocupado.

—No pasa nada ¿Tú andas bien?

—Si, si.  Me enteré que te separaste de Harry —dijo en voz baja, como si estuviera teniendo cuidado de que nadie lo escuchara.

—Así es, lo dejé al enterarme que se besó con Donna.

—Espera ¿Tú lo dejaste?—soltó asombrado.

¿Por qué esa sorpresa? ¿De qué no me enteré?

—Mierda...no lo sabes —murmuró—. Todos creen que te cambió por Donna.

—En teoría lo hizo —admití.

—Bueno, ya sabes lo que diré.

—Es un idiota y no me merece.

—¡SI! Pero sabes que, nadie te merece. Eres demasiado para cualquiera, eres guapa, eres inteligente y buena en deportes. ¡Joder, Chloe! ¡Eres perfecta! —chilló Steve.

—Si, claro.

—¿Y qué tal ese Harvey? Es guapo, lástima que subió ese asqueroso video, que seguro sin que tú supieras.

¿Cómo sabe eso?

«Es Steve, número en chisme»

—Es un idiota —murmuré a regañadientes.

—Los que no parecen idiotas son los gemelos, pero hay uno en particular que subió una foto tuya y puso algo muy cute.

¿De qué carajos habla?

«Averigualo»

 —¿Uno o dos?—pregunté.

—Uno.

Sin pensarlo teclee el usuario de Eros.

«daringbrowm1:

Siempre tan bonita, en especial cuando usa mi chaqueta. 

Algún día serás mi novia. Anderson. 

Lo sé, lo sabes, lo sabemos»

¿Por qué sube estas cosas?

—Es un amor —agregó Steve, quien por un momento, olvidé que seguiamos en llamada.

—No puedo tener algo con él —dije seria.

—¿Por qué? ¿Por qué te separaste hace poco?

—Sí, y porque convivimos juntos. Los chicos quieren que me una al equipo masculino, además no lo sé, lo conozco hace poco.

—Entiendo, pero no parece un idiota que te vaya a lastimar.

—Es demasiado bueno.

—Debo irme —comentó—.Pero, no olvides que a veces te cierras tanto y te cuidas de que no te lastimen. Y al final, tú sales más perjudicada.