El rosario de las 108 cuentas ha sido restaurado ¿pero a que costo? El sacrificio del antiguo caballero de virgo dio fruto para que esta armar queda ventaja a Athena sobre el ejército de Hades de la lucha de igual a igual

Pandora, Ceros y los demás caballeros veían a Aurora quien lloraba de la impotencia

– Es una lástima Athena, que de igual forma su sacrificio haya sido en vano – dijo Pandora, Aurora se levantó, se limpió las lágrimas y apretó el puño

– ¿en vano? Ser en vano para ti pero para nosotros ya es una victoria sobre su inmundo dios – dijo Aurora mirando con ira

– ¿este cosmos...? – pensó Pandora y vio los ojos de Aurora, esos ojos zafiros azules limpios como el cielo, como se transformaban a un negro completo

– ¡aurora! – exclamo sorprendido Damián

– ¿pero qué sucede? – dijo Dohko, el cosmos dorado de Aurora comenzó a tornarse rojo carmesí, era algo sorpréndete

– Con tu ira no solucionaras nada Athena – dijo Pandora

– Sé que con esto no devolveré la vida a mi maestro Shaka pero... al menos – Aurora se lanzó hacia pandora - ¡PODRE MATARTE! – en un movimiento rápido apareció delante de pandora, cuando estaba a punto de tocarla alguien apareció - ¿TU?

Todos se sorprendieron por la persona que apareció, no podían creer, que aquella persona volvería al santuario vestido de un sapuris

– ¡CAIN! – exclamo Aurora apretando el puño

– Cálmate Aurora te estas dejando llevar por el enojo, sé que es una muerte más que llevas en ti, pero cálmate, compórtate como una diosa – dijo Caín

– Tu cállate, quien eres para hablar de esa forma – dijo Aurora y se lanzó a Caín este rápidamente la agarro del puño y la lanzo

– ¡Athena! – exclamaron y Damián junto con Adara, Evan y Abel se acercaron a socorrerla

– ¡déjenme! – exclamo Aurora pero Damián la agarro

– Tranquilízate – dijo Damián, Pandora quien aprovecho la situación, se acercó al niño

– Mi señor, debemos irnos – dijo a punto de poner su mano en la mano del niño, pero Aurora, a una velocidad rápida, agarro a Alexander y se alejó de el – deja de ser entrometida Athena, entre más lo hagas, solo lastimaras ese cuerpo, entiéndelo, el destino de este niño estaba escrito en ser el cuerpo de mi señor

– Eso es mentira, tu señor fue el que dio esa orden, pueda que este niño tanga mejor futuro, algo que los dioses de seguro prepararon para el – dijo Aurora

– Señorita Aurora – pensó Alexander

– Pase lo que pase defenderé a Alexander, incluso de la maldad de Hades – dijo Pandora

– Además es nuestra ventaja contra ustedes – dijo Cloth, cosa que a Aurora le enojo, lo miro con ojos llenos de rabia

– ¿por quién me llamas Cloth? No soy ese tipo de persona, jamás protegería a alguien solo para mi bien propio, ¡¿Quién piensan que soy?! – exclamo Aurora dejando callados a todos los presentes – si ustedes piensan de esa forma o actúan así, no merecen ser llamados caballeros – dijo ultimo y Cloth, se arrepintió de sus palabras

– ¿a quién engañas Athena? – dijo Pandora

– Lo que digo es la verdad Pandora – dijo Aurora – aunque no crean, ¡no soy, como tu dios!

– Si así lo quieres – dijo Pandora, Caín comenzó acercarse a Aurora

– ¡aléjate! – exclamo Leónidas y todos se lanzaron hacia Caín, pero Pandora, nuevamente clavo la lanza en el suelo, esta vez, logro inmovilizar a todos los caballeros – ¿pero... que...?

– Ingenuos – dijo Pandora – o a las buenas, o a las malas Athena, tu decídelo – dijo Pandora a Aurora quien no dejaba de emanar su cosmos – este cosmos que posee, no es el mismo de antes, aunque su aura haya cambiado, este cosmos posee valor, humildad, no es el mismo cosmos de su hermana Acantha, ¿será que...? Athena no puedo creerlo, que clase de diosa maldita eres, a este paso sabes muy bien que puede terminar esto en tragedia, ¿pero qué pretendes?, aunque a pesar de todo, este cosmos, aunque no es de Athena si no de la mortal, es muy poderoso, rebasa todo lo conocido, por ello deberé tener cuidado con ella, pero... aquella vez... hace 18 años...

(Recuerdo):

Pandora se encontraba en el castillo de Hades sin dejar de tocar el arpa, en eso sintió una presencia, dejo de tocar el arpa, se levantó y se arrodillo:

– ¿a qué se debe su visita mi señor? – dijo Pandora

– Pandora... llama a un grupo de espectros y diles que destruyan la villa de Rodorio, la villa esa cercana al santuario – dijo la presencia

– Señor Hades pero... ¿por qué? – dijo Pandora

– No me cuestiones, no estaré tranquilo, hasta que ese cosmos desaparezca – dijo la presencia y desapareció, Pandora se levanto

– ¿pero por qué dio esa orden? – pensó Pandora

(Fin del recuerdo):

Pandora no dejaba de ver a Aurora y al pequeño que se encontraba en su detrás, en eso levanto el tridente:

– Ya veo... por eso mi señor ordeno ello – pensó Pandora y dijo – Athena, como veo, que no lo harás de buena forma, tendré que hacerlo a mi manera – Pandora clavo de nuevo el Tridente en el suelo, en eso, una descarga eléctrica se descargó en el cuerpo de Aurora

– ¡Ahhhhh! – exclamo de dolor Aurora, pero ella estaba un en pie aunque la descarga eléctrica la estaba afectando mucho, la descarga desapareció, los ojos de Aurora cambiaron al color zafiro que eran y su cosmos se desvaneció y cayo inconsciente

– ¡Athena! – exclamaron los demás y Alexander rápidamente se acercó a Aurora

– Señorita aurora... por favor... - pensó Alexander moviéndola – señorita aurora ¡responda! – exclamo muy preocupado

– Es increíble, aunque mi ataque fue dañino, ella siguió en pie, eres de admirar en serio – pensó Pandora y comenzó a acercarse al niño, cuando estuvo en su frente le hablo – vamos mi señor – extendió su mano, pero Alexander con su mano alejo la mano de Pandora

– ¡aléjate! Maldita... lastimaste a la señorita Aurora – dijo apretando el puño Alexander

– Mi señor... - susurro Pandora

– Aléjate, o juro que te destruiré – dijo Alexander

– Niño... - susurro Leónidas, en eso Pandora al querer agarrarlo a la fuerza, un aura rodeo al niño

– Pero este... es un cosmos – pensó sorprendida Pandora al ver que un cosmos desprendía del pequeño – este cosmos... no puedo creerlo, sin entrenamiento, sin ser nada desprende un cosmos grande... de ser así, en esta situación, podríamos maltratar el cuerpo de mi señor, no me queda de otra – pensó Pandora, en eso, un cosmos obscuro envolvió el santuario

–
¿Pero qué...? – dijo Evan, y cayo inconsciente al igual que los demás, Pandora emano su cosmos, y en su mano apareció un collar con un dije en forma de estrella, y en el media, tenia de escrito "tuyo siempre", emano su cosmos y el collar apareció en el cuello de Alexander quien de igual manera estaba inconsciente

– Señora pandora – dijo Caín

– Debemos irnos – dijo Pandora

– Pero señora pandora, teneos ventaja ahora, matemos a Athena y... - dijo Ceros

– Ceros, silencio, si matamos a Aurora, el alma de mi señor quedara abrumada, nadie se acordara de todo esto que paso, ahora marchémonos – dijo Pandora

– Pero señora pandora – dijo Ceros

– ¡silencio! – exclamo Pandora y ceros se calló – no me cuestiones – dijo, subieron al carruaje y se marcharon...

A la mañana siguiente, los caballeros comenzaron a despertar, Damián, al ver a Aurora en el suelo, y junto a ella a Alexander, rápidamente corrió hacia ellos, alzo a Aurora y esta comenzó a despertar

– ¿Damián? Pero... ¿Qué...? – dijo Aurora

– Ni yo lo se... no recuerdo nada – dijo Damián, Alexander comenzó también a despertar

– Señorita Aurora – dijo Alexander

– Pequeño – respondió la mencionada, vio hacia su cámara, y vio algo dorado, rápidamente se levantó y corrió al lugar

– Aurora – dijo Damián, pero esta no le hizo caso, al llegar, vio el rosario en la armadura de virgo, derramo una lagrima y levanto el rosario

– ¡caballeros! – exclamo Aurora dándose la vuelta y viendo que sus cabaleros ya se habían incorporado – el sacrificio de uno de los más poderoso caballeros de la antigua generación que no sea en vano, Shaka dio su cosmos para restaurar este rosario, para darnos la ventaja sobre el ejercito de Hades, que este sacrificio ¡no sea en vano! – exclamo

– ¡sí! – respondieron los caballeros

Horas más tarde, Aurora, se dirigía a su templo, la casa de escorpión, en eso, Alexander quien la vio, corrió hacia ella

– Señorita Aurora – dijo el pequeño

– Alexander... ¿Qué haces por acá? – pregunto Aurora

– Eh... tomado una decisión... - dio Alexander intrigando a Aurora – eh decidido, pelear junto a usted, quiero... ¡convertirme en un caballero! – dijo sorprendiendo a Aurora

– Pero tu... - dijo Aurora

– Sé que no me gusta la violencia ni la sangre, pero el pensar que usted se sacrifica por nosotros, me ha dejado en claro que no puedo dejarla sola – dijo Alexander con firmeza – por favor, también quisiera, que usted, fuese mi maestra – dijo sorprendiendo de nuevo a Aurora – le prometo dar todo de mí, y juro sacrificarme en la batalla

– Pequeño, tu misión no es con la muerte, es con la vida – dijo Aurora, ambos se miraron por unos segundos hasta que Aurora hablo – está bien

– ¡enserio! – dijo muy feliz

– Pero prométeme algo – dijo Aurora

– Lo que sea – dijo Alexander

– Vive, por todos... por favor – dijo Aurora – porque esa... es nuestra misión, vivir por los demás y morir por ellos también, pero te pido, que vivas... - dijo Aurora

– Lo prometo – dijo Alexander y se arrodillo ante Aurora – por usted, diosa Athena