- Luego de la demanda hecha por Richard R. los miembros del canal 101 se disculparon públicamente por el acoso hacia su familia, ambos bandos acordaron no ir a juicio y evitar cualquier pago, con la condición de que si se revelaba alguna noticia sobre R. o Kaoru Shin fuera del ámbito laboral o acosaban a su hija, el canal se vería obligado a ir a tribunales...

- ¿Demandaste al canal?- Mikael miraba sorprendido al hombre desde su sofá mientras su hija gateaba persiguiendo a Macrapé.

- Me sobra dinero y poder para hacer eso.- dijo arrogantemente.- Ya estaba harto que hablaran de Kaoru como "esposa de turno" o recibir llamadas de mi suegra mayor por que un fotógrafo quería acosarla a ella, a mis otras suegras o a mi bebé.

- Entonces....¿Nos dejarán en paz?- Kaoru lo miraba esperanzada desde el sillón.

- Dalo por hecho gatita, y este será un ejemplo para los demás si intentan acosarnos otra vez.- dijo sonriendo. 

Kaoru se levantó y sorprendiéndonos se sentó en las piernas de Richard y lo abrazó, este respondió al abrazo sonriendo dulcemente.

Sonreí más tranquilo ahora que las cosas habían mejorado.

- ¡AO!- mi adorable sobrina se había sentado frente a mi extendiendo sus brazos para que la cargara.

- Ya voy pequeña traviesa.- dije cargándola mientras Mikael me miraba divertido.- ¿Qué? Me sirve de práctica para cuando tengamos uno.

- Lo sé.- dijo levantandose y entrando conmigo a la cocina.- Decidamos qué vamos a preparar para la comida ¿Qué quieres comer Yurika? ¿Pollo? ¿Zanahorias? Tus tíos harán algo especial para ti.

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- Hasta que hiciste algo cabrón.

- Mira quién fue a hablar Frank.

Luego de una semana, fuimos a la mansión de Josep para darle la bienvenida luego de su viaje, Frank y su familia vinieron a ayudarnos a preparar todo junto a Katy y sus chicas.

- ¡Que lindos!

Kaoru había hecho un disfraz de gato con un suéter azul para Yurika con un gorrito con orejitas y una cola que le quedaba hermoso, en cuanto subió la foto, Perla y Sofía le pidieron que hiciera uno a Thomas pero de oso ya que era su animal favorito, por lo que ambos nenes jugaban en un corral improvisado mientras las mujeres les tomaban fotos.

- ¡Kaoru le queda de maravilla!- decía Sofía saltando de alegría.- Thomas suele ser muy tímido, no se parece en nada a su padre. 

- Menos mal porque sino tendremos que lidiar con que traiga novias cuando sea adolescente.- dijo Perla divertida.

- ¡NOOOO!- exclamó su esposa.- Mi bebé es muy lindo para que venga una vieja malvada y nos lo quite.

- Normalmente suelen decir eso de las niñas.- dije entre risas mientras les ofrecía refresco.

- No te creas, Frank es muy sobreprotector con él.- dijo Perla.- El otro día que una niña le pegó en el maternal, su padre enfureció más que nosotras. 

Thomas era muy tranquilo y lloraba muy poco, por lo que cuando lo llevaron al maternal esperaban que se relacionara con otros niños, pero una niña lo empujó y sin querer terminó golpeándose contra la pared y tan pronto Frank lo fue a recoger se armó la gorda.

- Pero parece estar muy a gusto con Yurika.- dijo Perla al ver a su pequeño tocar un tambor de juguete junto a su compañera y balbuceando entre ellos como si tuvieran una importante conversación.- Puede que algún día sean pareja.

- ¡ESO NO!

Los padres dominantes estaban colgando adornos hasta que escucharon la última parte.

- ¡Mi hija es un ángel perfecto! ¡No dejaré que ningún malvado se la lleve y menos un hijo de semejante mamarracho!

- ¡Mi hijo es muy guapo como para irse con la hija de un tarado!

- Me reiré de los dos si sus hijos terminan con parejas del mismo sexo.- dijo Katy sirviendo alitas de pollo.- Apenas son unos niños, déjenlos experimentar hasta que decidan qué quieren en su vida.

Ambos padres se miraron molestos antes de seguir con lo suyo, aunque no faltaron oraciones entre ellos diciendo las mismas frases. 

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- ¡Sorpresa!

En cuanto Josep abrió la puerta los recibimos con serpentinas y confeti, sorprendiendo a la pareja.

- ¡Whoaa! ¡Gracias chicos!- dijo June emocionada.

- Dijeron que su negocio de ropa interior salió muy bien, así que preparamos una fiesta para celebrar.- dijo Richard abrazando a su amigo.

- Gracias chicos.- respondió el rubio.- Pues si el negocio fue mejor de lo que esperaba, pero también dejamos un proyecto especial en el país, y hoy finalmente lo conseguimos.

- La verdad llegamos ayer en la tarde pero tuvimos que terminar el papeleo de adopción y comprar muchas cosas.

-......¿Adopción?

Fue entonces cuando me di cuenta que había alguien escondido detrás de June, todos miraron a una figura pequeña fuertemente abrazada a la chica temerosa de acercarse.

- Vamos linda, no te asustes.- dijo June tomando su mano.- Ellos son nuestros amigos y ahora son los tuyos. 

La figura se acercó a nosotros y nos miró, era una niña de unos tres años, estaba muy delgada y tenía ojeras muy profundas para su edad, me sorprendí al ver moretones en sus piernas como si le hubieran golpeado, llevaba un vestidito azul claro hasta las rodillas y una sandalias blancas que hacían juego con el cintillo sobre su cabeza rubia, entonces me fijé que su pelo estaba muy corto aunque tuviera un peinado de niña.

- Quiero presentarles a mi hija.-dijo colocando su mano sobre la cabeza de la pequeña.- Adrian.

- M-mucho...gusto.- dijo susurrando y temblando de pies a cabeza.

Todos parecían estar nerviosos por cómo tratarle al darse cuenta que en realidad era un niño. Así que tomé la iniciativa y me acerqué extendiendo mi mano hacia ella.

- Mucho gusto Adrian, yo soy Jacob, un amigo de tus padres.- el pequeño miró a los otros dos antes de responder al saludo.- Me gusta vestirme de mujer de vez en cuando, aunque sea un hábito muy raro.

Me miró sorprendido.

- Y-yo...también.- dijo torpemente.- ...no me guta ser niño...p-por eso...mamá June dijo que aquí habían muchos como yo y...¡Nadie me gopeará por eso!

- Eso es cierto.- dijo Mikael acercándose al niño.- Yo soy Mikael, Jacob y yo estamos casados, y si necesitas algo puedes contar con nosotros.

- Bueno no se queden ahí como idiotas, hace frío y la niña se puede enfermar.- dijo Katy cerrando la puerta.- Creo que puedo pedir un pastel para los niños, sólo hay para adultos asi que mejor llamamos a la pastelería ¿Te parece Aurora?

- ¡Claro Katy!

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El ambiente se volvió más relajado y todos le dieron la bienvenida a Adrian, quien se sintió más tranquilo. Josep insistió en que le presentáramos a los bebés y estos parecían felices de jugar con él, Macrapé quien había estado jugando en el jardín lo olfateó antes de lamerle la cara y hacerle reír.

Tuvimos una gran fiesta y pronto las madres comenzaron a hablar de llevar a Adrian de compras y toda clase de locuras que hacen las mujeres.

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- Me sorprendiste amigo, no esperaba que adoptaras tan rápido.

Josep, Richard y yo estábamos lavando los platos y preparando un poco de caldo de camarón para cenar ahora que los niños se habían dormido. 

- Yo tampoco la verdad.- confesó Josep.- Pero ¿Recuerdas que hace un mes tuvimos un percance con el carro?

- Ahora me acuerdo, dijiste que por poco te chocan.- dije molesto.

- Sip, June se asustó mucho cuando trataron de robarnos.- dijo seriamente.- Debe ser por que recordó la vez que nos secuestraron, después de ir a la comisaria pasamos frente a una casa hogar y decidimos que podíamos calmarnos si veíamos algunos niños para adoptar más adelante. 

Nos explicó que no tenían nada en mente para adoptar, pero ninguno de los bebés le convencieron y entonces vieron a un niño escondido en un cuarto dibujando en un cuaderno, June se le acercó curiosa y vio que dibujaba una niña vestida con un tutú rosa.

- Le preguntó si era su novia y aunque al principio le costó responder, dijo que le gustaba el ballet.- dijo Josep sonriendo nostálgico.- Antes de darnos cuenta pasamos mucho rato hablando con él y descubrimos que tenía el mismo problema de June.

- Una niña atrapada en el cuerpo de un niño.- dije mirando hacia las escaleras hacia el primer piso, donde los pequeños dormían plácidamente.

- Al verlo tan lastimado supe que no podía dejarlo ahí.- afirmó colocando el plato limpio dentro de la gaveta.

- Ya ves que si puedes actuar como hombre a veces.- dijo Richard tirandole el trapo para secar en la cabeza.

- ¡Serás!- comenzaron una pelea fingida hasta que Frank vino a regañarnos.

- ¡Ya sé!- exclamó el rubio.- Para celebrar mi comienzo como padre ¡La próxima semana vayamos a mi bar al sur de la ciudad!

- Yo me pido la jaula.- dijo Frank.

- ¿Se puede apartar?- dijo Mikael entrando emocionado.- ¡Entonces quiero el escenario!

- ¡NI LOCO!- grité aterrado.

- No te hagas Jake.- se burló Mikael.- Te encantó que medio bar te viera siendo penetrado hasta el fondo.

- Es cierto, fue un buen espectáculo.- se burló Frank.- Al principio muy tímido y después ¡Bailando desnudo en el tubo!

- ¡Jaja! y después Mikael haciendo su entrada de ¡El es mío perras!

Todos rieron mientras Mikael actuaba como un boxeador que había ganado el cinturón de oro....mientras yo quería esconderme en un hoyo.  

- ¡Eso fue por la droga!- exclamé avergonzado tratando de echarle la culpa a algo.

- Sigue engañándote a ti mismo.- dijo Josep haciendo que todos estallaran en risas.- La droga de mi bar sólo te ayuda un poco a deshibirte, del resto lo hace la persona llena de lujuria.

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Pasé toda la semana pensando en mi situación.

 Lo peor era que, esa noche estaba consciente de lo que hacía pero estaba tan lleno de lujuria que no me importó. Encima había desarrollado varios fetiches esa noche que no podía decir delante de los demás.

- Todos sabemos que ahora te gusta que te vean tener sexo Jacob.

- ¡AHHHH! ¡Kaoru!

No me habia fijado que estaba detrás de mi mientras pensaba en mis problemas.

- Y  la última vez se te antojó lo de la lluvia dorada, que asco.- gruño molesta entrando a mi cuarto.- Estás advertido.

- Si, ya entendí.- dije furioso mientras buscaba ropa interior para vestirme ya que apenas había salido de la ducha.- Fue sólo una vez, no voy a hacerlo dos veces.

- O hacer algo más asqueroso, si lo haces no quiero que te acerques a mi bebé hasta que te bañes en cloro.- gruño haciendo que me sintiera peor.

Bajo ningún concepto haré algo así. 

- ¡AHH!

- Si ya te vi desnudo no hace falta la toalla.

- ¡Kaoru!

Me había quitado la toalla que tenía en la cintura y antes de que pudiera atraparla salió del cuarto riendo como loca, haciendo que la persiguiera por mi departamento.

- ¡DAME ESO CHIFLADA!

- Lindas nalgas, deberías dejarlas al aire más seguido.

- Ya se lo he dicho, pero a veces se pone en plan puritano.

- Mikael, aunque su relación sea de medio sumisión, debes imponer tu autoridad a menos que diga su palabra de seguridad.

- Mira quién fue a hablar Ric, ahora eres un mandilón.

No me había dado cuenta que Richard y Josep y estaban en mi departamento ¡¿Por qué hablan de mí desnudo como si fuera algo normal?!

- Por que ya estás acostumbrado, admítelo.

- No leas mis pensamientos.- gruñí quitándote la toalla a la loca de mi amiga.

- Bueno, Josep mis abuelos vendrán a pasar sus vacaciones un par de días antes de irse a Las Vegas.- decía Richard tomando una taza de café.- Dijeron que cuidarían a los niños sin problemas.

- Adrian es muy tranquila, denle pintura, crayones y un cuaderno de dibujo y no se moverá por mucho tiempo, y tiene talento mi pequeña.- dijo Josep antes de quitarme la toalla.

- ¡HEY!

- Ya quédate así, tarado.- dijo como si nada.- Necesitas sol niño.

- Sientate Jacob.- me dijo Mikael tocando su regazo, ya qué. 

Terminé sentándome en las piernas de mi esposo totalmente desnudo delante de cuatro personas más, ya estaba muy avergonzado como para mirarles de frente.

- Entonces mañana nos vamos al bar.- dijo Richard divertido mientras Kaoru hablaba por celular.- Frank dijo que Sofía extrañaba ir pero con lo del embarazo y su terquedad de que estaba gorda no ha ido en mucho tiempo.

- Katy dijo que también va.- dijo Kaoru guardando su celular.- Ahora me da más vergüenza ir.

- Lástima, tus madres van a verte desnuda y callada, eso si es un reto.- me burlé de ella.

- Y también te verán a ti colgando de un tubo mientras tu marido te coge.- dijo antes de sacarme la lengua.

Yo le respondí de la misma manera  mientras los otros se burlaban de nuestra inmadurez.

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El sábado a las seis de la tarde estaba otra vez desnudo, sólo que esta vez estaba a cuatro patas sobre la cama mientras Mikael colocaba un vibrador en mi trasero.

- ¡E-Es...Es muy temprano!- gemía mientras temblaba de miedo.- ¿Por qué vamos a ir ahora?

- Cariño, nosotros tenemos acceso VIP a las instalaciones antes de que abran.- explicaba mientras terminaba de ajustar el vibrador.- Luego me puso un anillo en el pene y después buscó un arnés para ajustarlo a mi cuerpo, pero antes me pasó una media largas, guantes largos y una tanga negra.- Esta vez quiero que uses ropa interior de mujer.- dijo entre risas.- Es más divertido cuando la usas. 

No me quejé para nada, desde que me casé con Mikael había cumplido su promesa de dejarme usar ropa de chica en la casa, desde vestidos, baby doll, hasta sólo una braguita. Al principio me daba vergüenza pero luego me di cuenta que estaba contento de hacerlo y que me gustaba andar así por la casa. 

A veces usaba bragas para ir a trabajar o tangas cuando salía con Mikael y a él le gustaban, lo que hacía que muchas veces termináramos en el baño de cualquier local y cogiéramos ahí.

Cuando terminé de ponerme todo, Mikael me quitó el collar que tenia para ponerme uno de púas igual al que tenía, luego me ayudó a colocar el arnés que tenía un decorado con alas en la espalda, idea de Kaoru.

Mikael sólo se echó a reír antes de ponerme unos pantalones de cuero y una camisa de seda. 

Salimos del departamento y fuimos al estacionamiento, Mikael había comprado una moto hace un par de meses ya que le gustó la sensación cuando fuimos con Katy.

- ¿Sabes? Tal vez podamos hacerlo sobre la moto.- dijo mientras la encendía y me colocaba detrás de él.

- Sólo si estamos en un sitio donde nadie nos vea.- susurré antes de abrazarlo fuertemente.

- ¡Ese es  mi marido!- dijo antes de arrancar la moto.- Te amo mi caballero.

- Ya cállate y conduce, príncipe masoquista.

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- ¡Jaki! ¡Te ves divino!

June nos recibió usando un corsé rosa chillón y una tanga blanca con mallas a juego con el corsé mientras Josep sólo tenía un boxer negro con botas hasta las rodillas y un arnés en el pecho.

- Gracias June.- dije tratando de no sonar muy avergonzado.

Tan pronto entramos al bar Mikael me quitó la camisa y los pantalones para dejarlos en un locker junto a su camisa, dejándose un par de jeans desgatados antes de que nos llevaran a la zona VIP.

- 10 dólares a que cuando empiece a beber va a quedar en bolas.- dijo Josep divertido.

- Hecho.- dijo Richard quien tenía un pantalón negro con un cinturón bastante largo, una chaqueta de cuero abierta y en la cabeza tenia ¿unas orejas falsas?

- ¿Y tu gatita Ric?- preguntó Mikael mientras se sentaba al lado de su socio.

- Bajó a buscar unas bebidas junto con Perla.- dijo señalando la ventana polarizada.- Frank está con Sofía buscando qué probar primero antes de que lleguen los demás.

- Vamos a bajar nosotros también.- dijo June antes de sacarme a rastras del lugar.

El lugar era un enorme subterráneo muy bien escondido en un callejón al sur de la ciudad, luego de los lockers y los vestuarios, había una gigantesca sala circular de tres pisos, en la planta baja estaba el bar, mesas de dos sillas cada una y dos escenarios, uno tenía un tubo para stripers y otro tenía varias funciones desde jugar a la subasta de esclavos hasta castigos; el segundo piso estaban las máquinas de juguetes, espacios pequeños donde había sillas para el fisting y espacios para la lluvia dorada(donde por desgracia terminé por ultima vez) había incluso un balcón con piso de cristal para la exhibición de sexo; el tercer piso estaban los salones "privados" para tener sexo en diferentes cuartos, pero las paredes era de vidrio polarizado para que cualquiera viera el espectáculo. 

- ¡Chicas! ¡Ya llegó Jaki!- saludó a las dos mujeres que estaban en el bar.

- ¡Hola Eve!- dijo Perla al verme.

- ¿Qué?

- Así te conocen en este mundillo.- dijo Kaoru sosteniendo una charola con varias bebidas de colores.- En realidad te conocen como Eva por andar encuerado y tentar a Mikael, que también le dicen Adán, pero como eres hombre te dicen Eve.

- Ya, pero con esas mallas y esa tanga ya le van a decir como es.- dijo June divertida.

- Gracias por burlase de mi, que buenas amigas tengo.- me quejé.

Perla tenía un brazier con forma de ostras marinas y una falda larga color verde con una sandalias blancas, parecía una especie de sirena y en su cabello suelto tenía un cintillo con estrellas de mar. Kaoru en cambio llevaba un brazier blanco con forma de huella de gato y una minifalda que revelaba casi en su totalidad una tanguita blanca con pantimedias blancas y por detrás le salía una cola de gato.

- Ni se te ocurra decir nada.- me dijo entre dientes.- Fue un regalo de Richard junto con el collar nuevo.

- Mañana tendrás un peluche perfecto para ese conjunto.- dijo June. Para las sesiones más intensas.

- Bueno Eve no seas maleducado.- dijo Perla.- Lleva las bebidas.

Aunque me quejé termine llevando la charola, así subimos y vimos que Frank y Sofía estaban esperando a Perla en lo que parecía ser una mesa de cirujano para los trios.

- ¡Ya vamos a empezar!- llamó Frank.

- ¡Nos vemos luego!- Perla se fue casi saltando de felicidad.

El bar se estaba llenando cuando volvimos a la sala VIP, Josep hablaba por teléfono mientras nuestros esposos nos ordenaron sentarnos en sus piernas, dejé la charola y me coloqué de espaldas a Mikael quedando mis piernas abiertas mientras sentía la enorme erección de mi pareja frotando mi trasero. 

Kaoru dudó un poco pero al final se colocó frente a Richard dejando la cola de gato al frente. June en cambio se lanzó hacia Josep y este la sostuvo con su mano libre antes de colgar y besarla como si le fuera la vida en ello.

Se escuchó música en el bar y el ruido de voces que poco a poco pasaron a ser gemidos o gritos de placer. En eso comenzamos a beber hasta que algo llamó la atención de Josep y miró por el ventanal.

- La Reina ha llegado.- dijo señalando a Katerine quien llevaba a sus chicas en cada brazo.

Las tres mujeres podían tener más de cuarenta años, pero sus cuerpos eran impresionantes y el aura que emanaban era de un control absoluto. Shina tenía una falda roja amarrada de medio lado y un top con cuentas junto con un velo semi transparente del mismo color y tenía varias pulseras doradas. Aurora tenía un vestido negro de tirantes corto con pantimedias de mallas negra y tacones negros. Katy en cambio tenía un pantalón blanco hasta el obligo, un top gris brillante y una chaqueta blanca con botas altas. 

Todos en el bar las saludaban con mucho respeto y admiración. Sin duda era una Reina en toda la extensión de la palabra, llamando la atención como la mujer más poderosa pero siendo arrogante cuando le convenía.

- Ella es...tan impresionante.

Kaoru tenía una mirada de felicidad al ver a las tres mujeres caminar las escaleras.

- Joder, tener que competir contra la misma Reina no es fácil.- dijo Richard abrazando a Kaoru.- ¿Qué tengo que hacer para que me admires así?

- Richard, no puedo evitar admirarlas.- se quejó la única chica del grupo.- Pero eso no significa que tengas que competir, ambos tienen su propio espacio.

- Traducción: Ellas son sus mamis y tu eres el que la coge.- dije divertido haciendo que Kaoru se levantara para golpearme.

- ¡IDIOTA!

June se acercó a golpearnos por pelear, pero Josep empezó a animarnos como si fuera una pelea verdadera antes de que Richard nos llamara para que bajaramos.

Katy y sus chicas se estaban besando en un rincón mientras Sofía, Perla y Frank tenia un trío en el segundo piso, algunos cuartos también estaban ocupados al igual que las jaulas y cepos. 

- Vamos Kaoru, tengo el juego perfecto para nuestros atuendos.- dijo Richard llevandola a las escaleras.

- Josi, juguemos en el potro.- dijo June saltando de la emoción.- Ya mi amiguito quiere jugar y se siente solito sin tus toques.

- Claro mi princesa.- dijo llevandose al chico travesti a cuestas.

- ¿Una bebida mi caballero?- preguntó Mikael ofrenciendome más alcohol del que ya tenía en la sangre.

- Ya que.

Vine a este lugar a divertirme, así que si termino haciendo un espectáculo no me importa, no había reporteros aquí y no podías entrar con celular, de hecho antes de entrar debías pasar por detectores de metal y dejar todo lo que no fueran juguetes en los lockers. Por suerte no había forma que alguien me juzgara mientras todos estaban ocupados bebiendo, bailando, follando, exponiendo todo su cuerpo antes otros o usando objetos obscenos.

- Deja que te ayude.

Me sentó sobre la barra sorprendiéndome ante sus palabras y me di cuenta que mi erección se mostraba por encima del trozo de tela y mi novio comenzó a besar mis piernas haciendo que gimiera delante de los demás, en eso pasó su lengua por la tela que apenas tapaba mis testículos y sopló sobre esta haciéndome temblar y jadear; finalmente acercó sus manos a cada lado de la tanga y lentamente me la quitó, dejándome totalmente expuesto y jadeante  usando sólo mallas delante de la gente, exitandome todavía más.

- Muy guapo tu chico Adán.

Dijo un hombre sentado en la barra que miraba mi cuerpo de forma pervertida.

- Gracias, pero no lo presto a cualquiera.- dijo levantándome de la barra para abrazarme mientras mostraba mi trasero a los demás. 

- Tranquilo no te asustes, yo tengo el mío y me gusta que sean más sumisos, el tuyo me puede picar los ojos.

- Si, es un cuervo muy peligroso.- dijo besándome salvajemente.- Un caballero con alas de cuervo ¿Podría ser más excitante?

Sonreí mientras nos tocábamos desesperadamente, podía sentir miradas lujuriosas sobre mi, pero no me importaba, quería que todos nos vieran y supieran que Mikael era mío y solo mío, sólo él podía excitarme así, hacer que me derritiera a sus pies y gimiera su nombre como perra en celo, esa sensación de control y placer, humillación y castigo, se sentía tan bien entre nosotros que quería más y más de él.

Sus manos apretaron mis nalgas con rudeza antes de encender el juguete y hacerme gritar, escuché su risa y le mordí el hombro en protesta.

- ¡Auch! ¿Lo ven? Es todo un salvaje.

Sentía risas cómplices a mi alrededor, pero sólo tenía ojos para el tonto de mi pareja, quien me tomó de la mano llevándome a alguna parte.

 - Mira Jacob, una pareja de gatos están peleando.

Frustrado mire a mi alrededor y vi el segundo piso, ahí en una jaula con barras de metal, estaban Richard y Kaoru encadenados en cada extremo, el espacio era muy pequeño pero las cadenas los dejaban un poco colgados, lo que hacia que ambos se besaran y mordieran mientras se rasguñaban como bestias, ambos prácticamente estaban desnudos usando sólo las orejas de gato, el cinturón y el pub de gata, por lo que todos a su alrededor lanzaban vítores y aplausos como si vieran una pelea verdadera de gatos. 

- Mira a la gata, tan santurrona que se la da.- se burló Mikael abrazándome mientras acariciaba mi trasero.- Ahora está teniendo sexo delante de otra gente.

Kaoru había "perdido" la pelea y ahora estaba arrinconada contra la jaula siendo "atacada" por Richard, incluso desde aquí podía escuchar sus maullidos.

- Hacen mucho ruido.- me quejé.- Hagamos más que ellos.

Mikael se echó a reír antes de que subiéramos al escenario que acaban de desocupar. En eso la música fue más erótica y me aferré al tubo antes de mover mis caderas.

- ¡Eso Eve! 

- ¡Adán va por tu manzana!

- ¡Más bien le va a dar su plátano!

- ¡Pero si no es chita!

No sé si estoy gritando o riendo, las palabras de todos y sus miradas me enloquecían, quería más de eso, así que comencé a bailar mientras Mikael me tocaba y masturbaba, cada vez que levantaba mi trasero recibía una nalgada en compensación.

Me alejé del tubo y me di la vuelta para ver a Mikael y este sonrió antes de pasar su dedo sobre mi erecto pene, el cual ya tenia líquido pre-seminal, gemí y aferré mis manos al tubo, pero antes de darme cuenta, me habían encadenado con un par de esposas.

- ¡Bien mis colegas depravados! ¿Qué sugieren que haga con este lindo caballero alado?- Mikael miraba al público mientras pasaba sus dedos por mis pezones.- ¿Qué castigo sugieren?

- ¡Métesela duro!

- ¡Azotalo!

- ¡Rómpelo!

Mikael sonrió mientras le pasaban un vaso con alcohol y bebió un poco antes de besarme haciendo que bebiera el extraño líquido, sentí la misma droga de antes, estaría a punto de correrme si no fuera por el anillo. Pero entonces mi pierna fue levantada y Mikael sacó el juguete y metió un hielo en mi agujero.

Gemi y me sacudí al sentir el frío en mi interior.

- ¿Qué pasa cuervito? ¿No te gusta el frío?

Temblé de excitación al escuchar la voz de Josep detrás de mi, quien sostenia mi pierna. Más voces sonaron a mi alrededor y Mikael metió otro hielo antes de clavarme el juguete en mi interior y encenderlo al máximo.

Grité totalmente perdido entre las sensaciones, el frío del hielo derritiendose más y más en mi interior, el plástico del juguete vibrando salvajemente, las manos de Josep y June recorriendo mi cuerpo lascivamente y los besos penetrantes de Mikael....todo me estaba volviendo loco pero no era suficiente. 

June se acostó frente a mi ya sólo usando el corsé y Josep me dejó caer al suelo soltando mis manos del tubo, pero luego las ajustó a mi espalda antes de tirarme frente a June, quien me besó lascivamente mientras acariciaba mi cuerpo.

- ¿Dejarás que se corra, Adán?

- Todavía no. Se ha portado mal, hay que darle un castigo por tocar sin permiso.

No tenia necesidad de entender sus palabras, no podía ocultar mi sonrisa o mi expresión de lujuria, las manos de June eran muy pequeñas y no eran suficientes para mi.

- ¡AHHH!

Mi grito fue ocapado por las ovaciones de la multitud, entonces me di cuenta que Mikael estaba detrás de mi y me había azotado con algo. Un sonido cortó el viento y sentí otro azote ¡Un látigo!

- Mi caballero debe aprender a no tocar sin permiso de su principe.- sentí sus dedos tocar el lugar donde me habia azotado.- Debes aprender a obedecer.

- June, ayudale a entender.

El chico travesti sonrió antes de ayudarme a ponerme de rodillas para luego colocarse a cuatro frente a mi y tomar mi pene para colocarlo en su abertura.

- Ahora Jake, hazlo.

Sin ningún tipo de lubricación, metí mi pene en el interior de June, quien gritó de felicidad, no podía llevar el ritmo con las manos atadas, pero los azotes de Mikael hacían que me moviera y June estaba totalmente quieta gimiendo y gritándole a su Amo para que la viera, todos a nuestro alrededor ovacionaban el espectáculo y eso me excitaba todavía más.

En eso Josep se arrodilló frente a nosotros mostrando su erecto miembro, June se acercó y comenzó a lamerlo.

- ¿No quieres, Eve?

- No me han...dado...permiso.- gemí tratando de ocultar mis jadeos.

- Bien dicho.

Mikael se acercó y me quitó el juguete, mi trasero estaba caliente por los azotes y sentía como el agua se escurría por mi entrada, finalmente sentí el pene de mi hombre desgarrar mi interior.

- Debes tener mucha sed, no desperdicies la leche, cariño.

Sonriendo divertido, acerqué mis labios al pene de Josep y junto a June comenzamos a lamer mientras seguiamos en nuestro mar de placer. Ya estaba al borde del orgasmo pero el anillo me tenía totalmente atrapado y miré a Mikael rogando por que me liberara.

Mi príncipe me alejó de June para quitarme esa cosa y esta vez June se levantó para tomar mi pene y meterselo dejando su trasero frente a Josep, quien no perdió un momento antes de penetrarla conmigo haciendo que el chico gritara de placer al tener dos miembros en su interior, callé sus gritos con un beso mientras nuestros esposos nos obligaban a seguir su propio ritmo  hasta que finalmente los cuatro nos corrimos llenando el escenario de semen y gritos. 

- Vamos Eve, la noche apenas comienza.- susurró Mikael en mi oído.

- Si, Adán.

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Al día siguiente.....

No siento mi cuerpo..

La fiesta se salió de control para mi, no tengo idea de cuantas veces lo hice pero no negaré lo bien que me sentí exhibiendome así ¡Diablos si hasta camine a cuatro patas desnudo actuando como perro!

Pero ahora no puedo mover mi cuerpo y no sé donde estoy.

- Hola Jake.- con mucho esfuerzo levanté la cabeza a un lado y vi a Kaoru desnuda junto a mi y detrás de ella estaba June abrazándola por la cintura.- Estamos en la habitación de Josep, aquí terminamos luego del espectáculo de anoche, ya te imaginarás haciendo qué.

- ¿Cuantas orgías tuvimos?- mi voz sonaba totalmente rasposa y me dolía la garganta.

- No sé.- respondió Kaoru gruñendo mientras trataba de darse la vuelta.- Tu muchas más que yo, después los seis terminamos aquí y June insistió en que lo hiciéramos todos. Ya de ahí no sé cuantas veces.

- Jiji, unas tres antes de que Richy volviera a su modo posesivo.- respondió June levantándose como si nada.- Me encanta jugar con ustedes chicos ¡Hagamoslo muchas veces más!

- June, apenas me estoy reponiendo de la doble penetración que me hiciste junto a Richard.- gruñó Kaoru.- Y tu también tarugo.

- A mi no me culpes que estabas igual de caliente que yo.- bufé tocando mi adolorido trasero mientras recordaba todas las sesiones que tuvimos.- Nunca antes pensé que iba a tener sexo con una mujer y menos que yo sería el pasivo.

- Fue bueno comprarles el consolador doble.- dijo June sacando de bajo la almohada un enorme consolador rosa.- ¿Qué sentiste al tener pene Kaoru?

La chica se sonrojó tomando la almohada y apretándola antes de decir un "bien" apenas audible.

En eso los tres demonios causantes de nuestros dolores aparecieron con bandejas de comida.

- ¡Buenos días!- saludó Josep antes de darle un beso a June.- Que buena fiesta chicos, todos hablan maravillas de mi bar.

- ¿Cómo te sientes gatita?- dijo Richard mientras Kaoru se acercaba a cuatro patas hacia él.- ¿Ves? te dije que esa pastilla era mejor que cualquier condón, aunque claro también usamos muchos.

- De todas maneras no está demás que me haga una prueba.- respondió mientras su marido la levantaba y se sentaba sobre un enorme sofá antes de darle de comer en la boca. 

- ¿Y tú Jake? ¿Crees que quedaste embarazado?- me preguntó Mikael entre risas mientras tomaba una crema sobre la cómoda y llenaba sus manos antes de pasarlas por mi hinchado trasero.

- ¡Ay!- me queje.- Si así hubiera sido, habría perdido al bebé con tanto ejercicio.

Todos se e