(Pv Jacob)

Los días pasaron rápidamente y regresamos a clase, fue difícil al principio ahora que estábamos en horario nocturno pero logramos agarrarle el truco.

Richard y Mikael también estaban agitados con el nuevo tomo de la revista, cuando salió al mercado fue un éxito rotundo pero de la nada comenzaron a salir protestantes que acusaban a la revista de pervertida, depravada e inadecuada, los seguidores de la revista la defendieron asegurando que aunque vendan objetos sexuales era un arte erótico, total que la situación obligó a Richard a dar una rueda de prensa asegurando que aunque fuera un catálogo de juguetes sexuales, era un arte en movimiento que se había esforzado en crear.

- Todo depende del cristal que se mire.- aseguró.- Las estatuas griegas son un ejemplo perfecto, yo puedo ver una estatua desnuda y considerarla arte, pero otros la verán como una perversidad sólo porque muestran un hombre con pene y testículos, lo cual es perfectamente normal, entonces ¿Es el cuerpo humano una perversidad o una obra de arte ansiosa por mostrarse ante el mundo?

Durante muchos días estuvo en tela de conversación y debate en los medios; Mikael aseguró que aunque la prensa intentó perjudicar a Richard le salió el tiro por la culata ya que las ventas de las revistas, mercancía e incluso de tomos anteriores estaba por las nubes, superando las ventas de Playboy; Josep comentó que como la cosa no salió como los reporteros querían buscarían una noticia jugosa con qué hacer que la gente lo olvidara, por desgracia no contábamos que la próxima noticia sería un escándalo peor.

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Durante la primera semana de Octubre, un video de Kaoru y Richard almorzando en el parque y besándose salió a la luz, en eso la noticia abarcó todos los noticiarios.  

Ella trató de no prestarle atención hasta que tuvimos el desfile de otoño; la gente compraba mis fotografías y Kaoru recibió buenas críticas y ventas. Todo estaba bien hasta que una mujer se acercó a nosotros cuando despedíamos a los invitados.

- Muchas gracias por venir.- decía Kaoru sonriendo.

- De nada, aunque admito que esperaba algo mejor.- dijo la mujer sonriendo con burla.- Supongo que la "Novia de turno" de Richard R. no puede gastar el dinero que le da su Amo.

- ¿Eh?

- Avisame cuando se canse de ti.- diciendo eso se alejó arrogantemente dejando a mi amiga confundida ¡¿Pero quien coño era esa tipa?!

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Por desgracia la situación no acabó ahí. Algunos compañeros de las clases diurnas comenzaron a aparecer en la universidad para molestarla, otras veces mientras estaba de compras unos reporteros la seguían y publicaban sus movimientos en internet. Todas de la peor manera.

"Kaoru Shin no hace la ropa de Richard R. ¿Los gustos no son iguales?"

"Kaoru Shin, de mesera a diseñadora ¿Tuvo algo que ver la fortuna de Richard R.?"

"La novia de Turno de R. vive en un pobre departamento al Sur de la Ciudad, parece que sus gastos no cubren la vivienda"

Todo eso me estaba hartando y sacando de mis casillas. Una noche luego de terminar las clases  se nos acercó una chica que estudiaba comunicación social.

- Shin quería hacerte unas preguntas.

- ¿Sobre qué?- dijo molesta

- No te enfades, querida.- dijo la chica en un tono arrogante que me dio mala espina.- Queremos saber si es cierto que eres una esclava sexual.

- ¡¿QUÉ?!

- Sabemos que eres la novia de turno de Richard R.- dijo la chica.- Para que alguien como él se fije en ti tuviste que vender tu cuerpo ¿Cierto? Después de todo trabajaste en un café hasta hace unos meses, no hay manera que una muerta de hambre como tu hubiera conseguido tanto dinero de la noche a la mañana, el collar que tienes es la prueba de ello ¿Cuánto ganas? ¿Te vendes al mejor postor o Richard te intercambia con sus amigos?.....

No pudo seguir hablando cuando Kaoru le jaló del cabello y la arrojó al piso, ella gritó haciendo que la gente nos mirara, algunos chicos trataron de intervenir pero les bloquee el paso. 

- ¡Suéltame maldita puta!- gritaba mientras Kaoru la agarraba del cuello.

- Tal vez lo sea.- gruño en un tono tétrico.- Pero a diferencia tuya yo gano dinero con mi trabajo, no dependo de nadie para sobrevivir....y si vuelves a decir una sola palabra de todo esto...bueno, tu cara no se verá tan bonita cuando te fulmine a golpes.

Había llegado a su límite, Kaoru estaba tan furiosa que podía llegar a lastimar a la gente de verdad. La tomé de los hombros para calmarla, ella me miró y se alejó de la chica, pero antes de que pudiéramos hacer algo volvió a gritar.

- ¡Tu eres igual que ella!- me gritó.- El collar que tienes significa que también eres un esclavo sexual ¡Ja! ya había rumores de ustedes dos pero ahora sabemos la verdad, no me sorprende de un maricón como tu ¡Los dos no más que putas que les ponen el culo al mejor postor!

Estaba a punto de golpearla, pero Kaoru me sostuvo negando con la cabeza. Nos fuimos de la universidad para calmarnos un poco, estábamos tan furiosos que no hablamos hasta que llegamos a nuestros departamentos; pero cuando me acosté en la cama pensé, si esto me había enfadado ¿Cómo estaría Kaoru?

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(Pv Kaoru)

- Los odio

Seguía llorando desesperada sujetando mis peluches con fuerza, ya no puedo más. No dejan de molestarme sólo por salir con Richard, si la gente supiera que en realidad si soy una sumisa todo será peor.

- ¿Qué puedo hacer?

Todo esto me estaba haciendo daño, últimamente sentía mareos y cuando comía terminaba vomitando, tengo que relajarme o cuando Richard me vea se sentirá aún peor.

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Al día siguiente fuimos a comprar tela, por suerte en el trabajo a nadie le importaba mi vida, tal vez porque muchos de mis modelos habían pasado muchos problemas consiguiendo un trabajo por su falta de experiencia o no tenían el cuerpo que muchas revistas requieren, como sea estaba agradecida de que no me preguntaran sobre eso.

- ¡Srta Shin!

¡No otra vez por favor! 

- ¡Queremos hacerle unas preguntas!

Antes de darme cuenta había un montón de reporteros a mi alrededor, le di las telas a Jacob y salí corriendo, si seguía así perdería la poca cordura que me quedaba así que huí lo más rápido que pude.

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Corrí unas cuantas calles sin detenerme, hasta que paré en un semáforo para recuperar el aliento.

- ¡Arf! ¡Arf! vaya, creo que ya perdí los dos kilos demás que tenía.- decía agotada tratando de secarme el sudor de la frente.

- ¡Srta. Shin!

¡¿Pero qué Coño?!

- Queremos saber sobre su relación con Richard R. ¿Cuánto tiempo llevan juntos? ¿Cómo logro tener una relación con un hombre así? ¿Cómo es su relación? ¿Por qué no diseña su ropa?

Por favor...déjenme en paz....basta ya...

- ¿Me permiten pasar?

¿Eh? ¿Esa voz?

Los reporteros abrieron paso a Katerine, todos parecían haberse quedado en shock ante el aura de poder que desprendía.

- ¡Ah! Aquí estás Elizabeth.- se acercó a ¿Saludarme?- ¿Qué tal el pedido que te encargué?

- ¿Qué?- estaba tan nerviosa de verla que olvidé a los paparazzi

- Aurora ha perdido peso en estos días, creo que sus medidas no son iguales.- dijo como si nada.- ¿Qué tal si vamos a mi casa? Así le tomas las medidas y seguimos platicando.

Acaso.....¿Me está ayudando? Espera.....¿Ella....me invitó a su casa?

- D-Disculpe Sra Blaze.- un hombre se acercó nervioso.- U-usted ¿Conoce a....?

- ¿Acaso no pueden dejar de estorbar?- preguntó haciendo que todos retrocedieran y sonrió arrogantemente antes de mirarlos a todos.- Pero aprovecharé la oportunidad para decirles que dejen de molestar a Elizabeth. No les interesa saber donde vive o lo que hace en sus ratos libres, ella ha luchado sola para ganar todo lo que tiene ¿Acaso ustedes viven en una mansión de lujo? 

K-Katerine......realmente...me está defendiendo....es increíble....

- Bueno, ya debemos irnos Elizabeth.- dijo tomándome del brazo.- Aprovechemos el almuerzo, Aurora y Shina deben estar en casa.

- Si.- estaba tan impresionada que solo pude asentir mientras iba con ella.

Sentía las miradas de los reporteros detrás de mi, pero al ver a los guardias de Katerine sentí un deja vu que me dio escalofríos.

- Elizabeth irá con nosotros.- dijo Katerine cuando dos de sus guardaespaldas se acercó a abrir la puerta de la limusina. 

 - Entendido Sra. Blaze.- dijo el más fornido.- Me alegra verla Señorita, ha crecido mucho desde la última vez y felicidades por su desfile.

- G-Gracias Sr. Huber.- dije al reconocerlo.

Subimos al auto y el Sr. Huber se subió al asiento del conductor, cuando su compañero se sentó a su lado arrancaron, dejando a los paparazzis impactados.

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Dentro del auto no estaba segura de lo que debía hacer, no había estado tan cerca de Katerine en mucho tiempo, verla frente a frente me hacía temblar pero tenerla justo al lado era mucho más atemorizante.

En eso se escuchó el sonido de mi celular, lo revisé encontrando una docena de mensajes.

Kaoru ¿Donde estás? Por favor llamame

Kaoru ¿Estás bien?

Casi todos eran iguales, Jacob debía estar muy preocupado. Vi los últimos mensajes y reconocí el número de Richard.

Elizabeth, llamame por favor.

Seguramente estaba preocupado por mi.

- D-Disculpa Katerine.- le dije.- Necesito hacer una llamada.

- Adelante.- dijo indiferente revisando su celular.

Le di las gracias y marqué el número, dos tonos después respondió.

- ¡Elizabeth! ¿Estás bien?

- Estoy bien Richard, un poco adolorida por tanto correr pero nada de qué preocuparte.

- Me dijiste que esa gente te estaba molestando pero no pensé que llegarían a tal extremo, lo siento mucho gatita, debí protegerte.

- No te preocupes, supongo que se veía venir.- dije sinceramente.- Era sólo, cuestión de tiempo...

- Elizabeth, te lo pido por favor, no me dejes. Buscaré solucionar las cosas pero por favor, no quiero perderte. Tu no eres mi novia de turno, quiero que seas mi novia definitiva...

- Richard.- me sorprendí al sentir el miedo en sus palabras.- Tu no tienes la culpa, se que dices la verdad y confío plenamente en ti.

- ......Gatita.- lo escuché sorbiendose la nariz.- Gracias, no sabes lo feliz que me hace escucharte decir eso. Yo...quiero verte...avísame cuando regreses de casa de tus madres...

- Está bien, también tengo que avisarle a Ja....un momento ¿Cómo sabes que voy para allá?

- ¿Eh? Lo acaban de subir al Twitter de casi todos los diarios.- explicó sorprendido.- Deberías revisar.

Me despedí y revisé mis redes sociales, sintiendo que el alma se me caía a los pies.

"Kaoru Shin y Katerine Blaze ¿Amigas?"

Cuando nuestro equipo intentó preguntarle sobre su relación amorosa con Richard R. fueron sorprendidos con la presencia de la Reina del Poker, Blaze es conocida por su indiferencia ante la prensa pero no sólo llamó a la Srta. Shin por su nombre real sino que además la defendió.... 

- Ay no.- dije antes de ver a Katerine.- L-Lo siento.

- Ya estaba preparada para eso.- dijo con indiferencia.- Estaba al pendiente de las noticias por culpa de Aurora y Shina, pero cuando te vi tan asustada pensé que ibas a lanzarte contra los autos.- me sorprendí al escucharla.- Al verte arrinconada sentí una rabia que hizo que tomara una decisión, sino hacía algo ibas a correr y tal vez te hubiera pasado algo, por eso intervine.

- .....Gracias- dije sonriendo.- Yo....prometo devolverte el favor.

- Creo que ya sé cómo puedes hacerlo.- dijo sonriendo mientras buscaba un cigarro y abría la ventana.- Tus madres quieren volver a verte, así que puedes ir a visitarlas los fines de semana.

- ¡¿D-De verdad?!- no pude evitar abrazarla sorprendiendola.- ¡Gracias Katy!- al ver su mirada de sorpresa me alejé avergonzada.- Lo siento....Katerine

Ella tosió y se dio la vuelta encendiendo el cigarro.

- Está bien.- dijo.- Parece que sigues siendo la misma mocosa de siempre, sólo por ser hija de mis chicas te dejaré que me llames por mi nombre.

Sonreí agradecida, este era el primer contacto que tenía con ella y estaba tan feliz que mi corazón saltaba en mi pecho.

- Bueno, siempre me llamaste Lisa.- dije recordando las veces que mencionaba mi antiguo nombre.- Creí que no te gustaba que Kazumi me registrara con el tuyo.

- Y ese también es tu nombre.- dijo sin mirarme.- Esa niña que encontré en las calles se llamaba Lisa y murió cuando la llevé a casa, te llamas Elizabeth porque simplemente ese fue el nombre que escogieron tus madres, fin de la historia y no se hable más, Elizabeth.

Asentí mirando por la ventana, pero la sonrisa de mi cara no desapareció. Lo que no sabía es que ella también sonreía igual que yo.

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(Pv Jacob)

Estoy bien, no te preocupes. Katy me llevó a su casa!!!!! <3<3<3<3<3

El mensaje de Kaoru estaba tan lleno de corazoncitos que parecía una novia enamorada, debía estar muy feliz por ver a sus madres y al parecer había olvidado que estaba estresada, me alegra mucho.

A mi no me molestaban tanto más que nada porque sabían que era gay y que Mikael era mi novio, él y Richard ya tenían su propia fama y más cuando salió a la luz que era modelo de juguetes eróticos, su padre intentó arruinar su carrera y seguramente fue parte de los que alzaron las voces en contra de la revista.

El sonido de mi celular me sacó de mis pensamientos, lo reviso y es un mensaje de texto...anónimo.

El tiempo pasa, deben deshacerse de los naipes antes que el traidor se haga más fuerte.

 Otro mensaje, como Kaoru y Mikael ya estaban muy estresados no les había dicho que recibía un mensaje de números anónimos, todos relacionados con los Ases.

Traidor ¿Se referirá al naipe del Joker? Es lo más probable, pero algo había cambiado en los extraños mensajes, ya no decían nada sobre un naipe falso ¿Por qué ya no mencionaba eso? De pronto tengo una llamada, otra anónima. Si esa persona sabía tanto ¿Por qué no me lo decía?

- ¿Hola?

- Si no resuelven el misterio pronto morirán...

- ¿Por qué en vez de darnos acertijos no nos dices la verdad? No sé porque nos adviertes y me llamas en secreto ¿Por qué no das la cara?

- Los portadores de los Naipes no deberían mostrar su identidad, eso incluye a sus propios compañeros.

- ¿Sus propios...? Entonces tú eres....

- Clown Wizard.

Lo sabía.

- ¿Por qué sabes tanto sobre los Naipes?- pregunté.- Cuando volví a ver a los señores Lanoir se sorprendieron cuando les dije que mi cuerpo cambió de forma, dijeron que eso se supone aparece un par de años después de tener el naipe, pero tú no pareces sorprenderte con nada.

Un mes antes tuvimos un combate en la universidad, unas chicas se convirtieron en Lamias y atacaron a todos los chicos, Kaoru, Mikael y yo tratamos de detenerlas pero una trató de atacar a Kaoru y de pronto Clown se interpuso en el ataque. 

Terminó muy herido pero justo cuando Kaoru lo tocó su cuerpo se recuperó por completo, como si ella hubiera desarrollado más poder igual que nosotros, el único que no se sorprendió fue Clown quien nos protegió con bolas de billar que derrotaron a las Lamias fácilmente.

- Aquel día, parecías preocuparte más por Miss Heart que por tí. 

- ...Miss Heart tiene el poder de la Regeneración, yo puedo curar heridas, pero Heart tiene un poder mayor. Master le teme no sólo por eso sino que además el poder se incrementa cuando la portadora es una mujer. Heart tiene un corazón puro a pesar de todo lo que ha sufrido, por eso su magia es más fuerte, de hecho es por ella que ustedes tienen ahora más poder.  Si despierta su verdadero poder puede purificar el mundo si lo desea, y el poder oscuro que lo creó desaparecerá para siempre.

- Significa...¡¿Que esta vez si podríamos derrotar a Master?!

- Sólo si Miss Heart mantiene su corazón puro intacto. Pero tal vez, si es posible terminar esta cadena de dolor y muerte..... 

Hubo un silencio en la otra línea, pensé que me había colgado pero volví a escucharle.

- En el museo de la ciudad....habrá una exposición de las tribus antes de la llegada de los conquistadores.

- ¿Eh?

- Uno de los objetos....un altar de piedra, dice una leyenda que el hombre que se enamoró del siervo de Master rogó en ese altar para poder volver a ver a su amado, tal vez tenga algo que ver.

- ¿Un hombre? Creí que era la hija de un tabernero.

- Ella encontró al ave, pero fue el hijo menor quien lo cuidó con cariño y esmero haciendo que el demonio se enamorara de él, cuando perdió a su amado uso el altar con la esperanza de salvarlo en una próxima vida....condenandolo a reencarnar una y otra vez hasta encontrarlo....

Colgó la llamada dejándome con más intriga de la que tenía. Si lo que me decía era cierto entonces el final se acercaba, debía investigar más sobre el altar.

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(Pv Master)

- La encontré.

Slave Bell desapareció por varios días y regresó con buenas noticias.

- ¿Acaso ya sabes quien es Miss Heart?- preguntó Queen Joker

- La lista se hizo mucho más corta desde la última vez.- explicó.- Pero para confirmarlo, quiero hacer un pequeño escándalo en la ciudad

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(Pv Kaoru)

Todo el miedo que viví en estos días desapareció.

Cuando entré a esa casa luego de tanto tiempo, todos los recuerdos volvieron a mi mente, las primeras palabras de Kazumi, los cuidados de Shina y los abrazos protectores de Aurora, aquella noche fue como un bálsamo que sanó mis heridas y me dio una razón de vivir.

Shina nos dio la bienvenida pero al verme salió corriendo y me abrazó con fuerza, Aurora llegó y también me abrazó, estaba tan feliz que no podía dejar de llorar mientras me llenaban de besos y mis oídos se deleitaban con sus risas.

Ambas le dieron las gracias a Katy quien se metió a su despacho diciendo que tenía que trabajar. Mis madres y yo nos sentamos en la sala y hablamos mientras comíamos dulces y té, luego de una hora Katy llegó y sentó a beber con nosotras.

- No te dejes intimidar por la prensa, mi niña.- decía Shina abrazándome.- Esa gente sólo les interesa ganar dinero a costa de los demás.

- Así es.- dijo Aurora.- Uno no puede ni comer un helado en la calle porque enseguida hacen un escándalo.

- Lo sé.- les dije.- Sé que no debo dejarme intimidar por ellos, pero cuando pienso en todas las cosas que hacen para tener una noticia...el otro día cuando bajé a votar la basura me persiguieron y se me cayó la bolsa, los encargados me amenazaron que si seguía causando problemas debía irme, tuve suerte de no vomitar en ese momento.

- ¡Esos bastardos!- gritó Aurora furiosa.- ¿Cómo se atreven a hacerle eso a mi niña?

- Elizabeth.

La voz de Katy resonó con fuerza, su mirada estaba en su celular pero sentía su atención a mi alrededor.

- Ya eres una diseñadora reconocida en la ciudad.- dijo.- Si te caes ante la prensa no te dejarán en paz, tienes que hacerles frente y callarlos definitivamente. Esta tarde estabas apunto de ponerte a llorar ¿Crees que hubieran dejado de molestarte?- negué con la cabeza.- Exacto, hubieran tenido una muy jugosa noticia que propagar. 

- Así es, haz como Katy.- dijo Shyna sonriendo.- Ellos le tienen miedo porque saben que si la hacen enojar lo verán muy caro.- se echó a reír mientras Katy bufaba.- Eso me recuerda cuando querías imitarla para ser tan fuerte como ella.

- ¡S-Shina!- me puse roja al escucharla ¡¿Cómo sabía eso?!

- ¿Me imitaba?- preguntó Katerine sorprendida.

- ¡Oh si! En las noches cuando le tocaba lavar se vestía como nosotras y trataba de imitarnos.- decía Aurora muy divertida.- Una vez tomó nuestros sostenes y se los puso diciendo que quería tener un cuerpo como el de nosotras.

- ¡Aurora!- ¡Qué vergüenza! Creí que nadie sabía sobre eso

- ¡Se veía tan adorable! Kazumi lo grabó y me pasó el video.- dijo Shina revisando su teléfono.- ¿Quieres verlo?

- ¡NOOOOO!

Katy revisó su teléfono y escuché mi propia voz adolescente.

- ¡Woah! Son muy grandes, mamá Kazumi tiene un cuerpo increible...

¡Ay no! ¡¿Porqué a mi?!

- Mamá Shina usa unos sostenes tan bonitos, no son tan grandes pero se le ven tan bien ¡Oh! este es de mamá Aurora ¡Casi me queda! ¡Auch! tienen varilla ¿Eh? Son los de...Katerine

¡Eso no! Corrí para tratar de agarrar el teléfono, pero ella me esquivó y caí sobre sus piernas ¡Me va a matar!

- Es tan hermosa e imponente, hasta sus bubis son perfectas.....ahora me siento mal, ni siquiera me queda bien con la ropa puesta...mejor lo lavo antes de que se entere mamá Kat.... ¡¿Qué estoy diciendo?! Se enojara si le digo así...

Quería entrar en un agujero y morirme ¡Por Dios! Ahora debe estar enojada.

- Tal vez te queden un poco mejor ahora.

- ¿Qué?- la miré confundida.

- Necesitas salir de compras.- dijo antes ¿Reir?- Y claro que mi cuerpo es perfecto, ¿Cómo esperabas que una niña de quince años se compare conmigo?- estaba tan sorprendida que no sabía qué decir.- No te asustes, no estoy enojada contigo, la verdad estoy sorprendida que también me llames madre ¿A pesar de todo....me ves como una?

Me sentí muy nerviosa ante sus palabras, pero ya no tenía el miedo que solía sentir al hablar de ella, aunque no estaba en la mejor posición...debía decirle la verdad.

- Admito, que siempre me sentí intimidada ante ti.- comencé.- Eres tan fuerte, impresionante y talentosa, yo no era más que una niña de las calles, sentía que no debía compartir el mismo lugar que tu.- bajé la mirada y escondí mi cabeza en el sillón.- Pero, cuando te enfermaste aquella vez que tenías tanta fiebre y estaba sola, no dudé en hacer hasta lo imposible por ayudarte...supe que no eras tan inalcanzable como pensé, aquella vez temí perder a la persona que más admiro en este mundo; Deseaba no sólo ser como tú sino que pudiera estar a tu nivel y poder llamarte así sin que me vieras con desprecio.

Se lo dije...realmente se lo dije....seguramente me echará de la casa otra vez y esta vez será para siempre

De pronto y sin previo aviso una fuerte nalgada me hace gritar asustada cayendo al suelo estrepitosamente.

- Ahora que ya me estás mirando a la cara.- dijo seriamente.- Quiero que repitas cada palabra.

Estaba sorprendida al ver su rostro, no parecía enojada ni nada parecido, más bien quería confirmar que le decía verdad. 

- ¡Dilo fuerte y claro!- exclamó

- ¡Sí señora!

Repetí cada palabra lo más alto que pude, cuando terminé estaba de pie frente a Katy lista para recibir una réplica que nunca llegó, en lugar de eso sentí los fuertes brazos de Katy abrazándome..aquel abrazo maternal que siempre desee.

- Eres una tonta.- dijo en un tono tan amable que me hizo sonreír mientras lloraba.

- Lo sé.- dije respondiendo al abrazo.

- Deja de llorar.- dijo fingiendo molestia.

- S-Si señora.- pero no pude, estaba tan feliz que mis ojos no se detuvieron a pesar de la orden.- L-Lo siento, no p-puedo obedecer ahora.

- Aun te falta aprender muchas cosas, pequeña sumisa.- dijo dándose la vuelta.- Hablaré con tu Amo para que puedas venir a visitar a mis chicas, ellas te enseñaran ¿Cierto?

- ¡Sí Ama!- exclamaron a pesar de que ellas también estaban llorando.

Katy se fue a su despacho y nosotras seguimos llorando, las tres nos abrazamos y dejamos que todo el dolor se fuera. Por fin, todo lo que tenía oculto en mi corazón salió a flote, me sentía tan libre que terminé riendo mientras mis madres seguían hablando de los buenos tiempos y las cosas vergonzosas que hacía a escondidas.

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Lamentablemente llegó la noche y tuve que despedirme, pero antes Katy se acercó a mi.

- Richard dice que solo le avises cuando quieras venir y te traerá sin problemas.

- Gracias. 

- Y una cosa más.- sacó un pequeño paquete de su bolsillo.- Kazumi lo tejió para ti hace mucho, dijo que tenías talento y que seguramente encontrarías un buen Amo para ti.

- ¿Qué?- confundida abrí el paquete y vi un hermoso collar azul bordado con un cascabel plateado.- Un...collar de sumisa...

- Típico de Kazumi.- dijo Aurora mirando el cuadro donde mi madre japonesa sonreía.- Se adelantaba a las cosas y por alguna razón siempre acertaba ¿Qué clase de brujería habrá hecho?

- No importa, nuestra bebé consiguió un buen Amo y eso es lo que importa.- decía Shina divertida.- Ahora vamos a conocer a nuestro yerno.

Bajamos a la planta baja y encontramos a Richard en la entrada hablando con el Sr. Huber, al vernos sonrió antes de correr y abrazarme fuertemente.

- Mi gatita.- decía.- No dejaré que vuelvan a lastimarte.

- No te preocupes Richard, estoy bien.- dije sonriendo.- De hecho estoy mejor que nunca, gracias a esas personas pude volver a ver a mis madres.

Sonrió divertido antes de acercarse a Katy.

- Antes que nada quiero darle las gracias, no sólo como Amo sino como pareja.- dijo seriamente.- Usted ha protegido a Kaoru y ahora me toca a mi, por eso quiero quiero pedirle formalmente que me acepte como el Amo de su hija.

- ¡Richard! ¿Qué estás diciendo?

- Tienes más agallas de lo que pensé.- dijo Katy con arrogancia.- Es cierto que hasta hace unos años Kaoru era algo así como una sumisa sin dueño que estaba bajo mi mando.- Aurora y Shina la miraron molestas con los brazos cruzados.- Bueno, era la sumisa de mis sumisas ¿Sirve así?- ellas movieron sus manos diciendo "más o menos".- En fin, ahora ella es oficialmente mi hija y de mis chicas, está muy mal entrenada y consentida.

- Lo sé, eso me gusta.- respondió divertido.- Pero he trabajado duro en entrenarla en lo necesario, del resto me gusta verla revelarse.

- Interesante respuesta.- dijo Katy.- Bien, por ahora es lo más cercano que tendrás de mi aprobación, si quieres casarte con ella tendrás que pedirlo formalmente.

- Así lo haré.

¡¿Casarme?! ¡Ay Dios! Estos dominantes, sentí que se subía la sangre a la cabeza mientras Aurora y Shina decían cosas más vergonzosas que simplemente no quise escuchar.  

Salimos del edificio y caminamos hasta un estacionamiento cercano donde Richard había dejado su Alfa Romeo, pero antes de entrar nos rodearon varios periodistas.

- ¡Señor R! ¿Podemos preguntarle sobre su relación?

- ¿De donde conoce a la Sra. Blaze?

- ¡Suficiente!

Richard se interpuso entre los periodistas de forma amenazante.

- Kaoru no es ninguna novia de turno ni nada parecido, es mi prometida oficial.

Siguieron haciendole preguntas hasta que me acerqué a ellos.

- Mi vida privada no le interesa a ninguno de ustedes.- dije firmemente.- Soy una diseñadora y sólo responderé preguntas relacionadas a mi trabajo, no les interesa saber con quien salgo o quienes son mis amigos y si siguen insistiendo me veré obligada a demandar a sus cadenas por difamación y acoso ¿Me expliqué bien?

Me alejé de ellos y Richard me siguió, no iba a dejar que me perturbaran nunca más. Como Katy dijo los enfrentaría de una vez y por todas. En el camino Richard me alabó emocionado diciendo que merecía una recompensa, así que pensé en algo.

- ¿Dejarías que me ponga esto?- le mostré el collar tejido y se sorprendió al verlo.

- Es precioso.

- Mi madre Kazumi lo hizo para mi. Puedes ponerle una placa si quieres.

- Claro, pero no quiero que se arruine ¿Quieres estrenarlo esta noche?

Asentí sabiendo a lo que se refería. Al llegar a su casa me di un baño y le avisé a Jacob donde estaba, cuando Richard me puso el collar me sentí muy feliz aunque no llevara nada más encima que los juguetes que mi...Amo...quiso que usara. Lo hicimos varias veces esa noche y terminé muy cansada, pero la sonrisa en mi rostro no desapareció en ningún momento.