(Pv Jacob)

Huí de nuevo

No puedo decirle, soy un cobarde. No puedo decirle la verdad...no puedo....

Me escondí en el salón de audiovisuales por un largo tiempo, cuando salí ya se habían terminado mis clases así que volví a casa.

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- Supongo que no es fácil  decirle la verdad.

Fui directo al apartamento de Kaoru, ahora que tenía tantos pedidos habíamos decidido pagar de una vez el almacén que sería nuestro estudio, así que nuestros departamentos estaban más vacíos luego de llevar todo nuestro equipo.

- Creí que ibas a regañarme por no decirlo.- dije apretando un cojín redondo del sofá que compartimos.

- Bueno, el que confiara en ti para decirte algo tan privado fue un gran avance.- dijo Kaoru.

- Creo que lo sabe.- dije con tristeza.- De seguro debe odiarme por engañarlo. 

- No lo sabrás si no hablas con él.- insistió pero yo negué con la cabeza.- Vamos Jake, hazme caso.

No pude decirle nada, estaba agotado mentalmente. Muchas cosas en mi cabeza y poco tiempo para analizar. No estaba en condición de tomar una decisión como esta.

El timbre de la puerta cortó el ambiente, mi amiga suspiró antes de levantarse del sofá y ver quien molestaba. 

- Un paquete para Kaoru Shin.

- Soy yo.

Cerró la puerta y trajo una caja cerrada, era un poco grande pero no parecía pesar demasiado, se sentó a mi lado y revisó el remitente.

- ¿Richard me envió algo?

Miré la caja con curiosidad, ella abrió la caja y lo primero que vimos fue una carta sellada sobre dos tomos de la revista Love and Pleasure . Tomé una de las revistas mientras Kaoru leía la tarjeta.

- Querida Kaoru.- leyó.- Gracias por ayudarnos aquella vez, les envío a ti y a Jacob un tomo de la revista edición platino con fotos adicionales que fueron rechazadas en la edición.

Abrí la revista y en la primera página estaban los autógrafos de Richard y el de Mikael, mi corazón se aceleró al notar que tenía una dedicatoria para mi. 

- Además de eso, les envío parte de la ropa que Josep quiere que usemos, es muy rico pero no tiene idea de como funciona el correo así que me pidió que se los mande.- nos miramos extrañados y revisamos la caja, fuera del montón de poliestireno que viene con estas cosas encontramos varios paquetes envueltos en papel burbuja.- Umm, veamos qué más dice.- dijo antes de leer lo demás.-Kaoru, no estoy seguro de tus preferencias pero si conozco tus....- se sonrojó al seguir leyendo.

- Déjame leer.- le quité la carta divertido y leí.- Si conozco tus medidas, así que te mando varios  modelos para que los pruebes y elijas el que más te guste.- miré a la chica quien miraba los paquetes avergonzada.- ¿Él conoce tus medidas?

- ¡Fue durante la sesión de fotos!- dijo colorada desquitándose con el pobre papel de burbujas y sacando...- ¡Pero qué coño!

Un vestido de cuero negro super corto con un escote muy pronunciado....

Estaba a punto de reírme en su cara cuando vi que había dos paquetes con mi nombre, saqué uno de inmediato y casi me desmayo.

Una camisa de seda blanca ajustada y pantalones de cuero tan apretados que era imposible llevar calzoncillos

- Que mierda.......¡Yo no voy a usar esto!

- Yo no voy a andar medio desnuda en una casa llena de gente.- dijo lanzando el vestido.- Por favor, esto tiene que ser una broma.

- Dile a tu novio que no me incluya en sus fetiches.

- ¡No es mi novio!- gritó

- ¿Entonces por qué no me dices lo que hicieron en esa cita?- le pregunté molesto pero ella desvió la mirada, lo que me dio una idea.- Apuesto que no pasó nada y solo estás avergonzada de no poder siquiera besarlo.

- ¡No es cierto!

- Apuesto a que se dio cuenta de que eras muuuuuy aburrida.

- ¡No fue así!

- Vaya, de haberlo sabido te hubiera retado a que si no tuviste nada con él usarías esta ropa por una semana.- dije señalando el otro paquete.- Supongo que eres una santurrona que sólo habla de sexo gay.

- ¡No me digas santurrona!- gritó furiosa.- ¡No tuvimos sexo pero si fui a su casa, bebimos y hablamos! ¡Si hubiera querido lo hubiera hecho y también podría usar esa ropa sin problemas!

- Demuéstralo.- la reté divertido

Ella estaba tan enojada que no notó la trampa, así que tomó el paquete y fue a su cuarto a ponerse la ropita esa, y luego yo soy el idiota jejejejejeje.

El timbre volvió a sonar y fui a abrir, para mi sorpresa June y Richard estaban en la entrada.

- Hola Jaki.- me saludó June.- ¿Les llegó el paquete?

- Hubieras llamado y ya.- dije divertido.

- Queríamos ver si les gustaban los atuendos.- dijo Richard.- ¿Sabes que los hizo June? Vamos a asociarnos para subir lencería a mi revista. 

- Así podré usar uno de esos conjuntos cuando Josep y yo vayamos a su bar a divertirnos.

- ¿Su bar?- pregunté extrañado.

- Él tiene unos bares "especiales" por todo el país.- dijo la chica divertida.- Pronto va a inaugurar otro cerca de aquí y espero que todos vayan.

 ¿Especiales? no entiendo a lo que se refiere.

- ¡Ahí tienes! ¡Te dije que podía usar....lo!

¡Ay no! ¡Me olvidé de Kaoru! todos la vimos salir del cuarto con un conjunto de medias largas, una tanguita y un corsé transparente con sostén que apenas tapaba sus pezones. Todo en un color blanco con detalles rosa.

Al ver a los otros se puso tan roja que pensé que iba a explotar, trató de volver a su cuarto pero June corrió hacia ella atrapándola de su escape.

- ¡Kaoru te ves hermosa!- exclamó dándole la vuelta.- Ese color es un poco simple para ti, pero el diseño te queda genial, mmmm tal vez uno en un tono más oscuro te quedaria mejor.

- J-J-June.- dijo completamente roja.- ¿P-p-por qué estás...? D-Debo cambiarme...

- De eso nada.

Richard se acercó a ellas y el ambiente empeoró para mi amiga ante la mirada depredadora del hombre.

- Me gusta cómo te queda.- dijo acercando su rostro al de ella.- De hecho con ese color pareces un angelito asustado ante el poder de un demonio.

- ¡Vaya miren la hora! ¡Ya debo irme!- June se alejó corriendo y me tomó del brazo antes de arrastrarme hasta la salida.- ¡Fiu! vaya esos dos están por sacar las garras.

- ¿No sería peligroso dejar a Kaoru con él?- pregunté un poco preocupado

- Déjalos, se nota que se gustan pero parece que ella está en una rotunda negación.- dijo con seriedad.- ¿Su último novio era muy cruel con ella?

- Ni idea, no quiere decirme.- dije resignado mientras iba a mi departamento.- Sólo sé que tuvo un problema con sus padres y se odian mutuamente, el resto no me atrevo a preguntarle. Se pone muy triste cuando lo dice. 

 June parecía preocupada, al parecer ahora eran buenas amigas y no quería que Kaoru resultara herida.

- Jacob.

Frente a mi puerta estaba Mikael, mirándome con seriedad.

- Vaya, ya veo que estorbo doble.- dijo June antes de irse.- No se maten por favor.

Cuando se fue sentí que estaba atrapado, no podía huir a ninguna parte y no tenia de otra más que acercarme a él.

Camine hacia la puerta y la abrí. Dejé que entrara a mi departamento y lo seguí sin decir nada. Encendí la luz y noté cómo miraba mis cosas con interés, en especial el equipo de fotografía que tenía sobre la mesita de la sala.

- Todo esto debe ser caro.- dijo mirando el trípode.- ¿Los compraste con lo que recibiste con las fotos de Richard?

- No, algunas cosas me las regalaron mis padres antes de entrar a la universidad, lo demás lo pagué con mi sueldo de camarero.- entré a la cocina y llené dos vasos con jugo de naranja.

- Entiendo.- se sentó en el pequeño sofá y aceptó el jugo, me senté a su lado.

Un silencio incómodo nos invadió, no me atreví a verlo a la cara y él sólo agitaba el vaso.

- Jacob...¿Vivías en Los Ángeles?

- Si, me mudé aquí antes de comenzar la universidad para buscar un departamento barato.- respondí sabiendo lo que vendría después.

- ¿En qué parte?

- En una comunidad llamada West travel's.

- Lo sabía.- me miró con seriedad.- Yo vivía por esa zona hace muchos años, ahí fue donde conocí a la niña de la que te hable. Aunque más bien debería decir, te conocí a ti vestido de niña.

Comencé a temblar, dejé el vaso vacío sobre la mesa y reuní todo el valor que tenía para enfrentarme a lo que venía. 

- ¿Por qué no me dijiste quién eras?- preguntó.

- ¿Y qué esperabas que dijera?- le repliqué.- Sólo jugamos por unos días antes de que te fueras, eras el único que me trataba amablemente, si te decía que eras un niño temí que me golpearas igual que los otros.- respire profundo.- Luché para venir aquí rogando poder encontrar a ese niño amable e investigué sobre tu familia, me emocioné tanto cuando supe que te gustaba las artes y supe que como me gustaba la fotografía te encontraría en la universidad. El primer día te busqué por todas partes y cuando te encontré....- me di la vuelta tratando de no llorar.- Te vi golpeando a un chico por ser gay.

--Flashback--

Ese día.....estaba tan emocionado, mi departamento estaba a media hora en autobús de la universidad, había conseguido un recorte de revista que hablaba sobre Mikael y lo mejor es que estaríamos en la misma universidad, él sólo era un año superior así que si le decía quien era desde el principio tal vez no le molestaría que yo fuera un hombre. 

Aún tenía una hora antes de mi primera clase, así que aproveché y lo busqué por todas partes, bajé hasta el jardín trasero de la universidad y vi un grupo de gente reunida, me pudo la curiosidad y me acerqué. 

Entonces lo vi....

Era más guapo que en las fotos, más varonil, pero sobre todo...

Más cruel...

Varios hombres rodeaban a un chico y se burlaban de él, entre ellos el hombre que tanto amaba.

- ¡Basta ya!

Una chica bajita llegó entre la multitud y le dio una patada en el estómago con tanta fuerza que lo derribó, los otros se miraron sorprendidos antes de tratar de atraparla.

- ¡Si tienen tantas bolas como para golpear cinco contra uno, ténganlas para siquiera tocarme!

Trataron de golpearla pero llevaba una pistola tester que usó para derribarlos a todos.

- ¡Oye y a ti que coño te pasa!

Mikael la miró con una furia tal que me estremeció. No...no puede ser él...imposible...

- ¡No puedo creer que en pleno siglo XXI ataquen a un chico por su preferencias sexuales!- le gritó ayudando al chico a levantarse.

- ¡Eso no es tu problema novata!- se burló.- Eso de que dos hombres se besen y se toquen.- se estremeció.-¡Es asqueroso!

- Pues...estoy segura que todos ustedes van a sufrir un terrible tormento.- se burló ella cruzando sus brazos.- Apuesto que antes de la graduación, todos incluyendote serán más maricas que él, teniendo sexo con hombres. El Karma cobrará su venganza con todas las de la ley.

Todos se burlaron de ella, pero la chica solo sonrió antes de retirarse como si nada ayudando al chico.

- ¡Antes de acostarme con un hombre lo hago con un perro!- todos estallaron en risas, pero yo estaba temblando.

Corrí lo más rápido que pude hasta el primer baño que encontré. Cerré la puerta y lloré.....

¿En qué estaba pensando? Todo fue una fantasía infantil, algo que deseaba yo y nadie más. Eso de que los enamorados se reencuentran después de tantos años y vivieran felices era un mito de los cuentos.

Ese niño...ahora era un hombre completamente diferente...no pensé que cambiaría tanto...si le digo la verdad será peor...podría matarme incluso...aunque...tal vez sea lo mejor

Escuché la campana de la primera hora, no supe cuanto tiempo estuve llorando pero no tuve otra opción que ir a clases, me lavé la cara lo más que pude y salí al pasillo. 

- ¿Te encuentras bien?

La chica de antes se me acercó asustada.

- Disculpa te ves un poco pálido.- dijo preocupada.

- Estoy bien.- le dije amablemente.- Yo solo...estoy asustado por estar aquí.

- Te entiendo, tambien es mi primer año y estoy nerviosa ¿Podemos ir juntos a los salones? Tengo clase de historia.

- Yo también.- dije divertido.- Me llamo Jacob.

- Yo soy...- suspiró resignada.- Bueno estoy registrada como Elizabeth Pierre, pero planeo que el mundo me llame Kaoru Shin.

- Pues, el placer es mío, Kaoru.

--Fin de Flashback---

- Sólo la amistad de Kaoru me dio fuerzas para seguir ese día.- no me dí cuenta que estaba llorando.- Pero esa imagen sigue en mi cabeza. A pesar de todo...No puedo dejar de amarte...Desde ese día luché por borrarte de mi mente e incluso salí con muchos chicos. Pero tú eras siempre lo primero en lo que pensaba cuando estaba con ellos.

- Jacob.- sentí una mano sobre mi hombro.

- ¡Suéltame!- le grité sin darme la vuelta.- No quiero tu lastima, burlate de mi todo lo que quieras, diles a todos que soy gay para que me golpeen como a ese chico. Olvídate de ese recuerdo, esa niña no existe...yo no soy como piensas....Es mejor que terminemos esto de una vez por todas.

Fui a mi habitación y revisé mi cómoda, ahí estaba el otro extremo del colgante. Lo tomé y se lo mostré.

- Si amas a un hombre, me alegra por tí.- rugí mientras abría la ventana.- Pero no vengas a decirme que de repente sientes algo por mí por que no te creo, es hora de poner fin a este recuerdo.

Lancé el colgante por la ventana

- ¡NOOOO!

Kaoru llegó corriendo aterrada al ver como el objeto caía hacia la calle.

- ¡¿Por qué lo hiciste?!- me gritó.

- Se acabó Kaoru, quiero terminar con esto de creer que de la noche a la mañana él se va a enamorar de mi.

- ¡No! Jacob.- dijo llorando.- ¡Has sufrido tanto! ¡No puedes rendirte ahora!

- ¡No me importa!- grité.- ¡Ese no es tu problema Elizabeth!

Abrió los ojos sorprendida, miró por la ventana apretando los puños.

- Aún así.- dijo con seriedad.- ¡Si te rindes ahora sólo serás un cobarde!

- ¡Cállate! ¡No eres quien para decirme nada! ¡Te he contado mi vida pero tú no me dices nada de la tuya! ¡Eres más hipócrita que él!

- Bien, entonces no volveré a meterme más en tu vida. 

Salió corriendo sin mirarme, Mikael estaba ahí paralizado sin saber qué hacer, sólo miraba la ventana sin poder creer lo que hice.

- Vete de una vez por favor.- le dije.- Ya no soporto más esto....

Mikael miraba la ventana, estaba atardeciendo y comenzaba a llover, al final bajó la cabeza y sacó su mitad del broche, lo dejó sobre la mesa y se dirigió hacia la puerta. Cuando se vaya todo habrá terminado, lo amo pero no soy plato de segunda mesa. No quiero que esté conmigo por un recuerdo...aunque eso signifique perderlo para siempre.