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Recargada contra una de las paredes Marinette miraba a aquella débil figura encadenada, su mirada estaba neutral más sus ojos reflejaban a su corazón manipulado por él odio, ¿Cuánto tiempo llevaba observándole? No tenía ni idea estando en esa oscuridad donde apenas un par de velas lograban iluminar un poco le hizo perder la noción del tiempo.

Una jaula dorada estaba aún lado de la azabache, dentro se encontraba otro kwami parecido a una pequeña tortuga.

-Tienes un buen rato ya sonriendo viejo estúpido ¿Qué planeas? – hablo directamente, él apenas alzo su mirada a Marinette.

-Todo a su tiempo querida, todo a su tiempo.- le dijo aun sonriendo, Marinette arrugo la frente, odiaba que ese viejo le hablara de esa forma, cada vez le era más difícil sacarle información.

-Sabes.- comenzó a decir ella tomando el libro que descansaba sobre la pequeña mesita donde las velas les iluminaban.- aun no consigo descifrar todo el libro más me eh encontrado con algo interesante. Los kwami están conectados con sus portadores de una forma muy curiosa lo que pasa con ellos le pasa a su protegido.

-Es por eso que quieres que te diga el secreto de la página faltante, el que claramente dice que y cómo hacer para que ambos se fusionen eternamente.- le respondió audaz, Marinette sonrió sin si quiera dirigirle la mirada, las cosas estaban marchando de acuerdo a su plan.

-Sé que no hablaras muy fácil, eh intentado de todo y me eh contenido por hacer que hables pero ahora...tu gran guardián ya no eres de mi interés, tengo un objetivo nuevo a la vista.- sus orbes azules se centraron en la jaula dorada donde estaba el kwami, Fu le miro con el ceño fruncido sabía que Wayzz no hablaría a pesar de lo que fuera que ella le hiciera.

La puerta de esa prisión se abrió, la luz natural le irrito los ojos a Fu quien aparto su mirada, la puerta fue cerrada rápidamente, y la figura de Adrien comenzó a distinguirse en la oscuridad, Marinette seguía ojeando el libro como si este fuera más interesante que lo que pasara a su alrededor, sonrió al detenerse en una página.

-Sabes viejo tonto, cuando mi bichito pone esa dulce sonrisa en sus labios es porque algo "bueno" pasara.- dijo Adrien, extendió algo lo cual la azabache tomo en sus manos.

-Gracias mi gatito.- su tono de voz fue un poco aniñado, sus gestos infantiles que para Adrien fueron gratos a Fu le causaron cierta incomodidad, así como intriga por saber qué nuevo "juguete" de tortura le trajo esta vez.- me intriga saber si lo que dice este libro es verdad.

Marinette se inclinó ante el quedando a unos cuantos centímetros de él, Fu abrió los ojos de par en par al ver lo que ella le mostraba.

-Esto será divertido.- exclamo Adrián tomando la pequeña jaula dorada con el kwami y lo colocaba por arriba de las llamas de las velas.

-Los kwami no son inmunes a nada y el libro me revelo algo muy curioso pongámoslo a prueba.

-¡Detente!- exclamo Fu, ambos le miraron con sonrisas triunfantes en sus rostros.- Les diré lo que quieren saber.- dijo desganado.

-Por desgracia antiguo gran "maestro" ya no podemos fiarnos de tus palabras.- Adrien se mostraba serio y sumamente frio, incluso la misma Marinette se sentí incomoda cuando él tomaba esa faceta.- Marinette

La azabache asintió caminado hasta donde el kwami dejo caer un par de pétalos dentro del a jaula, para después comenzar a quemar el pequeño ramo que Adrián le había entregado, Wayzz se ha susto al ver de qué tipo de flores se trataba, tenía que ser fuerte, no podía traicionar a su maestro. Más su poder no serbia de nada estando en esa jaula que le reprimía su energía.

La risa de ambos resonó en todo cada rincón de esa prisión.

El sonido de objetos siendo movidos los comenzó a despertar, Adrien fue el primero en abrir sus ojos por el extraño ruido recordando en donde estaban, los sonidos de los escombros lo alerto.

-Marinette despierta.- la movió la azabache apenas comenzaba abrir sus ojos lentamente y al igual que a Adrien el sonido de escombros termino por despertarla.-¿Qué pasa?

-Creo que este lugar esta por venirse abajo, tenemos que salir rápido de aquí.- dijo él salieron de la tina que les sirvió como cama improvisada ambos kwami entonces se apresuraron a llegar con ellos poniendo sus manitas en los labios de sus protegidos.

-No salgan es peligroso.- advirtió Tikki preocupada mirando en dirección a la puerta.

-¿Qué sucede?- pregunto Adrien Plagg aplico un poco más de fuerza sobre su boca para hacerlo callar.

- Shh! Afuera hay un par de sujetos, creo que han venido a sacar las cosas de valor que sean rescatables de este lugar.- dijo rápidamente Plagg.

Marinette afino el oído afuera del baño podía escuchar levemente algunas voces.

-Pero esos sujetos no se ven de confianza, traen armas por lo que logramos ver, tenemos que salir de aquí.- Marinette tomo a Tikki entre sus manos regresándola a su escondite en su bolsita y lo mismo hizo con Plagg.

-La única salida disponible es la puerta.- Marinette parecía asustada.

-Tengo una idea pero es arriesgado.- dijo él, Marinette le miro fijamente esperando continuara.- todo el mundo le teme a nuestros otro yo de este mundo, si nos transformamos y actuamos como ellos podríamos asustarlos.

-Pero eso alertaría a los que gobiernan este lugar.- Plagg se asomaba de la bolsita de Marinette junto a Tikki .Era cierto pero otro opción no tenían.

El pomo de la puerta comenzó a moverse, ambos se quedaron sin respiración tenían que pensar en algo y rápido, Adrien tomo de la mano a Marinette y se colocaron de lado contrario a donde la puerta se abría. Esta fue abierta tras un pequeño rato de forzar la, un sujeto alto robusto y lleno de tatuajes con muy mal aspecto entro inspeccionando el baño, ambos chicos aprovecharon para salir sigilosamente por la puerta.

Intentaron dirigirse a la cocina y salir por donde entraron el día anterior, más se detuvieron de golpe al ver que otro sujeto idéntico al primero que vieron estaba buscando cosas por ese lugar.

-Marinette.- susurro Tikki, ella miro a donde la kwami le señalaba... un pequeño hueco entre los escombros.

Tomo a Adrien de la muñeca y se dirigieron a ese lugar para que ambos cupieran apenas, el lugar era muy pequeño, y de no ser la situación en la que se encontraban Marinette ya bien podría estar desmayándose o diciendo un centenar de incoherencias pues en esos momentos Marinette se encontraba sentada sobre las piernas de Adrien.

No sabían cuánto tiempo duraron en ese lugar, sabían que fue un largo rato el mismo que intentaron hacer que sus respiraciones pasaran lo más desapercibidas posible, Marinette fue la primera que salió de ese lugar una vez que Plagg les dijera que ya era seguro.

-Eso estuvo cerca.- Adrien estiraba sus piernas, las sentía dormidas por haber permanecido tanto tiempo en esa posición.

-Creo que por la inseguridad de este mundo las personas sobreviven robando casas.- dijo Marinette con pesar, la situación era cada vez más peor de lo que imaginaba.

-Tenemos poco tiempo antes de que otra cosa pase, debemos buscar más información y regresar donde...-guardo silencio por un segundo, estuvo a punto de decir "regresar donde mis padres están" más lo recordó ese no era su mundo, esos no eran sus padres.- donde Hawk Moht.

Marinette asintió, y como si ese día no pudiera ir a peor, cuando ella intento comenzar a caminar su pie se atoro con un par de escombros haciéndole caer de forma brusca al suelo.

-¡Mari...nette!-El rostro de Adrien enrojeció de golpe, Marinette recargo las manos sobre el suelo el golpe fue duro, se sentía avergonzada por su torpeza.

-Marinette... tu falda.- le dijo Tikki, la azabache no entendió sus palabras en el momento, su rostro enrojeció después, llevo ambas manos tras de si, al caer la falda de su vestido se había levantado por completo.

Adrien le daba la espalda estaba más rojo que el traje de ladybug, había visto la ropa interior de una chica, no solo de una chica, de Marinette que es a lo mismo ver las bragas de ladybug, no sabía si sentirse alagado o apenado por el incidente y por lo que sus ojos miraron, la ropa interior de Marinette era de color negro con un patrón de huellas verdes, algo parecidas a la huella que se formaba en su anillo cuando se transformaba. Pero ¿Qué le decía ahora?

El silencio fue incómodo.

-¿E-estas bien?

-S-si – rápidamente se puso de pie esta ves teniendo más cuidado.- M-mejor nos vamos.

-S-si.

-No sabía que eras fan de Chat Noir.- dijo Plagg algo divertido por la situación Marinette podría jurar que su rostro era más rojo que el carbón cuando se encontraba ardiendo al máximo.

-Plagg ahora no.- regaño Tikki

-Pero si no hay nada de malo en eso.- se defendió, el kwami levito hasta quedar aun lado de Adrien al cual el color ya le estaba bajando.- El duerme con una de esas almohadas raras de ladybug japonesas donde la imagen viste bien y del otro lado está en ropa interior.

Ambos detuvieron sus pasos de golpe, Adrien sintió prácticamente lo que era estar dentro de un volcán y al mismo tiempo sentir una cubeta de agua helada caerle a la cabeza, Marinette abrió la boca sin emitir sonido alguno clavando su mirada en Adrien que estaba más pálido que nada un poco más y juraría podría ver a través de él.

-N-no es lo que piensas.- intento excusarse, si las miradas mataran Plagg ya estaría muerto.- S-si es una almohada pero no es de esas lo juro yo no soy de ese tipo.- Marinette seguía sin lograr articular palabra alguna.- ¡Demonios! Es... un objeto de edición limitada... bueno es- es...

-E-esta b-bien.- logro decir después de mucho esfuerzo.- b-bueno yo tengo mi habitación casi... forrada de tus fotos...-confeso tal vez eso no aligeraba el bochorno pero era mejor a quedarse muda o eso creía.

Marinette y Adrien no cabían de si por la información recibida, el efecto de la Salvia Divinorum era potente contra los kwami Fu miraba con impotencia el suelo, ya no había esperanzas, por otro lado el kwami seguía hablando dentro del a jaula, el episodio psicótico que presentaba le hizo soltar la lengua de inmediato.

-Ya es suficiente.- ordeno Marinette, Adrien alejo la jaula del humo toxico que la Salvia estaba generando, coloco al kwami al otro extremo de la habitación dejando dentro de la jaula una infusión con hojas de arándano el aroma de ayudaría a desintoxicarse.

-Es por eso que parecías muy feliz.- exclamo el rubio una vez aun lado de Fu.

-¡¿Cómo demonios llegaron?!- demando saber ella, apretaba los puños con fuerza, Wayzz confeso en sus alucinaciones la presencia de otros kwami y sus protegidos de otro mundo que llegaron a derrotarlos.

-Escucha esto Fu, los vamos a encontrar y aremos que tu sonrisa desaparezca teniendo la cabeza de esos dos frente a tus ojos.- los ojos de Adrien reflejaban el ser poseído de forma sobre natural por la energía negativa.

Ambos abandonaron la prisión para poner en marcha su plan, pero ¿Por qué quedarse en ese mundo si cabía la posibilidad de dominar otros más?

Notas finales:

Antibug y Chat Blanc se saben que hay otros dos dispuestos a derrotarlos, por otro lado Adrián anda de pervertido loquillo xD

Salvia Divinorum esta planta por consumo accidental en dosis altas genera un estado alterado de conciencia que puede derivar a alucinaciones terroríficas, automutilación, episodios psicóticos puntuales y en algunos casos permanentes.

En este caso yo me base poniendo que el humo que genera esta planta era toxico para el kwami y le hizo decir todo lo que sabe, si estoy mal en algo por favor corríjanme. Y en cuanto a la infusión de moras, pues es una receta de té para desintoxicar el cuerpo por eso lo puse n.nU.

Espero les gustara este capítulo.

Dudas, preguntas, aclaraciones lo que sea todo es bien venido.

Hasta la próxima actualización.

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