Recientemente había llovido, las calles estaban mojadas.

Eren insistió mucho a Levi, para poder salir a dar un paseo a alguna plaza.

Levi lo permitió.

-Debes abrigarte, Eren. No quiero que te resfries-Buscaba las llaves.

-¡Si!-corría por todos lados, buscando un abrigo-¡Listo!-alzó sus brazos y se acercó al azabache, le tomó la mano-Je-sonrió alegre.

-Mierda, no compramos botas-Se fijó en el calzado de Eren-Procura no pisar charcos, mojaras tus pies y puedes resfriarte-

-¡Lo entiendo!¡No lo haré!-Abrió la puerta y salió primero.

Levi sonrió de lado, tomó su abrigo y se lo puso.

Salió de la casa, cerró la puerta con llave.

Alfa y omega caminaban por las calles mojadas.

Muy pocas personas se veían, pero poco les importaba.

-Mmh... Me gusta-susurró el castaño.

-¿Eh?¿Qué te gusta?-Miraba al castaño interesado.

-El olor al pavimento mojado, el olor a tierra mojada... al olor a pasto mojado-sonrió-Me gustan esos olores-

-Son agradables, aunque no mis favoritos-

-Lo sé-Giró su rostro-¿Le gusta la lluvia?-

-Más o menos, si llueve... No hay muchas cosas que se puedan hacer, ¿No?-

-Es un buen punto-miró hacia unos juegos infantiles-mira-apuntó-Hay niños jugando, ¿Eso está mal?-

-No, no esta mal, pero se pueden enfermar o caer en algun charco, deberian estar siendo acompañados por algun adulto respondable... pero no se ve nadie-

-Oh... Que mal-Suspiró-¡Vamos!-soltó la mano de Levi y comenzó a correr-¡No me alcanzas!-

-¡Eren!¡Cuidado!-Siguió al omega-¡Está lleno de charcos!-gritó histérico.

-¡Jaja!-Se detuvo en seco-Las ordenes estan en el pasado-dio un gran salto y cayó en un charco.

Se reía mientras saltaba, empapando por completo su ropa.

Levi lo miraba algo molesto, fruncia el ceño, pero dejó de hacerlo, al ver como Eren se divertía.

-¡Jaja!¡Levi!¡Salta conmigo!-Extendió sus manos.

-No, nada de eso-Cruzó sus brazos-Vas a tener una larga ducha con agua tibia y una cama caliente, no debes enfermarte-

-No lo haré-Le sonrió.

-¡No!¡No se la lleven!-

Ambos miraron de inmediato, por donde se escuchaba un grito desgarrador de una mujer.

-¡Elena!-Un hombre la tomó de la mano.

Habían agentes y oficiales del gobierno.

Llevaban a una niña.

-¡Mami!-Gritaba llorando.

-¡Es mi hija!¡No!-la mujer se soltó-¡Es mi pequeña!¡No se la lleven!-intentó recuperar a su hija, la cual resultó ser omega.

-¡Quitate!-Un oficial golpeó el rostro de la mujer con su brazo.

Ella perdió el equilibrio, cayó en un charco de agua turbia.

-¡Mami!-metieron a la niña dentro de una camioneta.

La pequeña golpeaba la ventana, lloraba con todas sus fuerzas.

-Elena...-Fue por su esposa.

-¡NO!-apartó a su pareja-¡Es nuestra niña!¡No se la pueden llevar!-gritaba-¡Mi hija!-se puso de pie y comenzó a perseguir la camioneta.

-¡Elena!-fue tras su esposa.

-¡Quiero a mi hija!¡La quiero de vuelta!-Cayó al piso, lastimandose las rodillas-¡Quiero a mi hija!-

-¡Elena!-Se agachó y la abrazó-Se la llevaron...-comenzó a llorar.

Levi observaba atónito, sintió como Eren lo abrazaba.

El omega temblaba.

-Le-levi... tengo miedo-susurró mientras lloraba.

-Mierda, Eren-Lo tomó en brazos y volvieron lo más rápido a casa.

Le quitó la ropa al castaño, lo llevó al baño y lo dejó con agua tibia.

-Lamento que hayas visto eso-Le acariciaba la cabellera castaña humeda.

-No es tu culpa...-Su cabeza estaba apoyada en el regazo del azabache-Ellos son unos monstruos...-cerró sus ojos.

-Eren...-

El castaño se puso de pie y abrazó al azabache, juntando su humedo cuerpo.

-Eres un gran alfa, Levi... Por favor, nunca me dejes-abrazaba con fuerza.

-Te lo prometo-correspondió el abrazó.

Envolvió a Eren con una toalla bien grande, lo tomó en brazos para llevarlo a la habitación, en donde puso calefacción.

Se quedaron abrazados por un buen rato.