❏ 𝑳𝒂 "𝒇𝒂𝒎𝒊𝒍𝒊𝒂" 𝒏𝒐 𝒔𝒊𝒆𝒎𝒑𝒓𝒆 𝒍𝒐 𝒆𝒔

Unos años atrás

Era temprano por la mañana, incluso se escuchan pájaros cantando y el viento chocar con las hojas de los verdes árboles, haciendo que se sacudan. Era primavera, la época perfecta para que los árboles retoñen en todo su esplendor y las aves canten con toda la intensidad posible. Aunque, lo que resalta más es la voz de un hombre adulto junto a la de una adolescente.

--¿Qué quieres, Boglōv? --preguntó la adolescente con el evidente mal humor en su tono de voz.

--Quería decirte algo, sobre nosotros --empezó a contar con calma, sabiendo que el cansancio y el hambre son las que están hablando por ella debido a todo el trabajo que ha tenido estos meses.

--No hay ningún nosotros --sentenció ella sintiendo sus manos un poco temblorosas teniendo sus brazos cruzados con mal humor.

--Me refiero a lo que sus padres no les dijeron, sobretodo los tuyos --expresó él con tacto provocando que ella sólo rodara los ojos al saber a la perfección a lo que se refería--. Sé que tu padre te quería mucho, pero no te dijo que somos familia, Alexa --explicó con cuidado.

--Sé perfectamente a lo que te refieres, Henrik --habló ella.

--Déjame terminar, por favor --le pidió haciendo que ella lo conceda sin cambiar su postura ni expresión.

Seguía enojada con él por haber asesinado a su hermanas menores. Sus muertes la convirtieron en la líder del equipo, provocando que tenga un corto espacio de tiempo libre durante el mes. Así que, al final del día, terminaba muy cansada hasta el punto que ni siquiera le quedaban energías para tomar una ducha o cambiarse de ropa, o de ir a su habitación. Su hermano mayor, al saber su situación, le ayudaba en lo que podía y la llevaba a su habitación para que descansara en la comodidad de su cama junto a él, eso le ayudaba y la relajaba para dormir con mayor tranquilidad.

--Somos familia de sangre, Alexa --anunció sin obtener respuesta de ella más que una ceja alzada--. Una de las hermanas de tu madre era mi esposa, Alex --exclamó frustrado al ver su falta de reacción--. No se los dijeron porque sabían que era peligroso --finalizó sin obtener alguna reacción de ella.

No era algo nuevo para ella, su papá siempre se aseguraba de que ella supiera todo lo necesario para que no se atormentara con el juramento con su madre que había hecho.

--Di algo, ¿quieres? --le pidió cansado de ver su expresión.

--Ya lo sabía --afirmó ella provocando sorpresa en aquel hombre--. Mi padre se aseguró de decirme todos los secretos que mi madre y su familia ocultaban --señaló con seriedad--. O, al menos, de los que teníamos fácil acceso --murmuró mirando hacia otro recordando la dificultad de lo que tenían que hacer para poder conseguirlos.

Tal vez para ella no era nuevo, pero sí se sorprendió de que él mismo se lo dijera. Sabía que quería que se sintieran como en casa, pero ella sabía que eso nunca podría ser posible sobretodo porque sus acciones no demostraban aquel sentir que él tanto deseaba, claro, ellos sabían que sólo lo decía de labios para afuera pero no era verdad. Y por esa misma razón, ella lo odia a muerte. Al igual que el lugar donde los obligan a vivir.

Actualidad

Taller del equipo A

Poor salió de la oficina dejando a Alexa dentro, sola. Está recordando los archivos que le dio su prima, en uno de ellos se mostraba cómo es que varias de las chicas que forman aquel grupo no son de la Tierra, sino de Dark. El tan sólo recordar esa imagen de sólo 10 milisegundos la hizo enojar, pero tomó una profunda respiración para poder tranquilizarse y salir como si no hubiera pasado nada.

Una vez logró tranquilizar hasta el latido de su corazón, ella salió de la oficina ideando rápidamente un plan para poder hablar con aquel grupo, sentándose junto a su novio para poder comer. Aunque notando a Omar más amable de lo normal con Heather, incluso compartiéndole sus alimentos y su bebida. No le dijo nada, porque, al igual que ella, Omar notó lo delgada que se puso Heather al no comer por miedo de lo que le pudiera hacer su padrastro.

--Alex, quería invitarte a mi casa para probarnos un poco de ropa, ¿qué dices? --habló Ana al subir con esperanza de que aceptara su propuesta.

La oportunidad perfecta para que se entere su equipo del plan, mientras lo parafraseaban algunos para aquel grupo.

--Optime fore puto si ad nos venerint loqui de quadam imagine quam in Vanessa schedulis vidi. Die Saturni post prandium --articuló ella para su equipo en latín haciendo que todos la miren con asombro y deteniendo su actividad.

¿De verdad quería eso? ¿O sólo lo dijo para evitar esa actividad después de que la hicieran sufrir con el cabello por el tipo de peinado que le hicieron? Probablemente era la segunda.

--Es certus? An tu id cavere dicis? --preguntó Dylan con inseguridad tratando de asegurarse de lo que acaba de decir su hermana mayor.

--Tutissimum --declaró mirándolo con seriedad, provocando que todos se dieran cuenta de lo que sucede.

--Perdón --interrumpió Maxine interrogando de lo que pudieran estar hablando, mientras Heather come con duda en su rostro por las palabras inentendibles que acaban de pronunciar--, pero no entendí de lo que están hablando --declaró tratando de obtener una respuesta por parte de alguno de ellos.

--Alexandra dice que mejor vayan a su casa para platicar un rato y comer algo --informó Omar recordando con dificultad el seudónimo de su hermana menor--. El Sábado, después de la comida --agregó viendo la sorpresa de Heather, Ana y Maxine en su rostro.

--De acuerdo --aceptó Ana con alegría--. Estaremos ahí a esa hora, ¿Heather, nos llevas? --le preguntó haciendo que ella las mire con duda--. Tu sabes dónde vive Alex, ¿no?

--Sí --admitió ella una vez que pudo pasar la comida que aún tenía en su boca--. Yo las llevo, no se preocupen --agregó haciendo que Alexa asienta convencida de que eso pasará y satisfecha porque incluso ella está participando en aquel plan, aunque después se lo aclararía.

Con eso, Maxine y Ana se marcharon dejando a Heather con aquel equipo para poder informarle a sus amigas acerca del hecho, provocando que un grito de emoción resuene por todo el taller.

Poco después, el grupo de varones subieron al mismo lugar, para poder hablar con los chicos pertenecientes al equipo A.

--Oigan, chicos --habló José interrumpiéndolos y provocando que todos soltaran un gruñido en forma de queja por no dejarlos comer en paz--. ¿Quieren ir a mi casa el fin de semana? Vamos a jugar unos video-juegos que acabo de comprar en la semana --invitó haciendo que todos le den un vistazo rápido a Alexa para conocer su opinión.

--Claro, pero mejor llévalos a mi casa, tengo una pantalla nueva que acabamos de comprar --ideó Marcus haciendo que sus amigos lo señalen para darle la razón.

--Es cierto, es la más reciente que salió. Demasiado cara, Asterin, hubieras comprado otra --confirmó Hardin saliéndose un poco del papel para reclamarle por haber gastado tanto dinero en algo que ni siquiera utilizan, haciendo que absolutamente todos lo miren con reproche por lo mencionado.

--Hice lo que creí que era correcto --agregó él con inocencia bien fingida.

--El Sábado después de la comida pueden ir --informó Omar sabiendo la perfecta oportunidad que podrán aprovechar para hablar claramente con ellos.

Eso confundió a Heather, pero no dijo nada pensando que tal vez tenían algo planeado para ese Sábado y, así, poder evitarlos, aunque prefirió no hacer ninguna suposición y después preguntarlo cuando estén solos.

--De acuerdo --aceptó el mismo bajando con sus amigos detrás para hablar con las chicas.

Una vez que Alexa terminó de comer, decidió juntar la basura que ella había acumulado y ponerse de pie para anunciarles que estaría en su auto mientras ellos reparan la camioneta, obteniendo una afirmación por parte de todos los presentes.

Bajo de aquella plataforma, pasó por un lado del grupo de amigos dirigiéndose específicamente al auto que la espera con la laptop trabajando y la memoria conectada en la misma para poder descifrar la encriptación completa y ver los archivos adjuntos que Henrik colocó en ella.

Al entrar del lado del piloto, la tomó entre sus manos y la colocó en sus piernas para poder empezar a trabajar, verificando que la desencriptación vaya correcta según el tamaño de la misma.

Pero la presencia de otra persona dentro del auto le interrumpió la concentración que necesitaba para aquella tarea a realizar, por lo que volteó a mirarla demostrando una alta molestia por la interrupción presentada, notando a su prima sentada a su lado.

--¿Qué quieres? --le preguntó demostrando el comienzo de su enojo en su voz.

--No, tú ¿qué quieres? --debatió Vanessa--. O, más bien, ¿qué planeas? --cuestionó conociendo una mínima y muy importante parte de su prima--. Jamás en tu larga vida invitarías a nadie a tu casa, sobretodo a chicas que quieren probarse ropa contigo, eso no va contigo --explicó haciendo que ella le muestre una sonrisa sarcástica.

--Eso no te incumbe, Vanessa --le contestó--. Sólo ve y punto.

Una órden clara, específica y sencilla de realizar de su parte. Realmente era algo anormal porque siempre le daba órdenes complicadas a su equipo, incluso para la misión más sencilla que pudieran tener;  pero, eso, Vanessa no lo sabía en lo absoluto.

Así que, sólo asintió para acatar la órden de la chica que la está a punto de ayudar a escapar de su padre. Aunque ella misma ocultaba un objetivo muy oscuro, algo que no deseaba que nadie se enterara y, del cual, sus hermanos estaban de acuerdo.

Esperen, ¿cómo que Vanessa tiene un objetivo oculto para pedirle ayuda a sus primos? Bueno, creo que eso era de esperarse sabiendo que odia a sus primos a más no poder.

Yo digo que es comprensible sabiendo que su padre los educó a manera de que sus acciones siempre tengan un plan oculto y una justificación.

Pero, bueno, ya está aquí el capítulo 41 con más información del Equipo A, o el equipo Cranger como me gusta llamarlos, para que hagan sus teorías. Los leo >>>

D.L.