ACTO II (Diecisieteava Escena)
Escena XVII: El segundo intento de suicidio de Lopio
Fecha: 19 de marzo del 2021 (Tarde)
Lugar: El baño principal
Personajes:
· Lopio Lonel Bunel
· Erina Lonel Bunel
· Burta Bunel
(Descripción del lugar: El baño principal es un espacio pequeño que consta de las siguientes características. En el lado izquierdo, se observa una ducha metálica que carga una superficie metálica donde se halla un jabón blanco, una cepille para depilarse la piel y un sobre de shampoo. La ducha se halla oculta detrás de una cortina blanca gruesa. Delante de la cortina, se halla un inodoro de color blanco que tiene un botón para que el excremento o la orina desaparezca. Arriba del inodoro, se encuentra un estante blanco que contiene una puerta blanca con dos manijas de color celeste. Adentro de esa puerta, se muestran dos pisos que contiene varios paquetes de jabones y demasiados rollos de papel higiénico. En el lado derecho, se muestra un lavamanos blanco que contiene un espacio para poner el jabón. Arriba del lavamanos, nos podemos percatar de que hay un espejo que posee un pequeño espacio para poner los cepillos de dientes. Debajo del lavamanos, nos percatamos de un estante blanco que almacena el sistema de cañería y más rollos de papel higiénico. Al costado del lavamanos, se encuentra una puerta marrón que es la entrada al baño)
(Se abre el telón) (Ingresa Lopio Lonel caminando al escenario por el pasillo izquierdo y se dirige al público)
Lopio: (deprimido hacia el público) ¿Qué acabo de escuchar? Ese profesor se puso de acuerdo con Orfiono para humillarme. Nunca me sentí tan decepcionado de mí, ya que veo la escritura como lo más apasionante que puedo hacer. Mi vida no es valiosa, porque yo no soy totalmente maravilloso en ningún aspecto. Nadie me entiende excepto mi madre, pero ella vivió situaciones difíciles distintas a las mías.
(Lopio se sienta en el inodoro y coloca su brazo debajo de su mentón para reflexionar sobre el comentario constructivo del profesor)
Lopio: (deprimido hacia el público) Entiendo que no soy la mejor persona, pero quiero sentirme valioso en la sociedad. Si fuera capaz de eliminar mis errores, entonces tendría una vida tan tranquila y armoniosa para siempre. No puedo contener mi tristeza, aunque la quiera ocultar. Estoy tan agotado de seguir las reglas de Orfiono. No es justo que él me trate así, porque yo no le hice nada malo.
(Ingresa Erina Lonel caminando al escenario por el pasillo derecho del escenario y observa a Lopio con curiosidad)
Erina: (agotada) Hermano, veo que andas muy triste y me da curiosidad. ¿Qué está pasando por tu cabeza? Estás angustiado como si te encontraras en peligro. Me doy cuenta que eres más infantil de lo que deberías ser. Un joven universitario no estaría lloriqueando como tú lo haces.
Lopio: (deprimido) Erina, mis intentos en esforzarme fueron en vano. Me siento defraudado y avergonzado por el tipo de persona o estudiante que soy, porque no soy especial. ¿Quiero saber cómo haces para reprimir tu angustia por saber que eres imperfecta?
Erina: (agotada) No me hagas preguntas estúpidas, Lopio. Creo que necesitas meditar o intentar canalizar tu tristeza en otras actividades como el yoga, el fútbol, la meditación y otros deportes recreativos. De todas maneras, parece que no te funciona, porque eres inentendible para mí.
Lopio: (deprimido) Solo tengo motivación para ahorcarme el cuello hasta que mi cuerpo ya no tenga vida. Asimismo, desearía volver a mi infancia cuando me sentía contento todos los días. Cada momento era una aventura para mí, porque me hacían sentir especial y ahora ya no es lo mismo.
Erina: (agotada) Lopio, deja de ser tan dramático y enfócate en cambiar tu actitud. Piensa de forma positiva y deja de ser un idiota que no sabe aguantarse su tristeza y explotar su felicidad. Se nota que no aprendiste a controlar tus emociones y eso da vergüenza. Nuestra madre puede ayudarte, pero no sé si estará desocupada.
(Lopio coge un rollo de papel higiénico y lo enrolla alrededor de su cuello)
(Lopio coloca sus dos manos en los dos lados de su cuello y comienza a ahorcarse para intentar suicidarse)
Erina: (altera) Lopio, ¿Qué haces? Te estás matando de la forma más ridícula que he visto en mi vida. Además, ni siquiera eres tan fuerte o resistente para atragantarte con tu cuello hasta provocar tu muerte. Definitivamente, no podrás realizarlo, porque ni siquiera deseas morir en realidad.
Lopio: (deprimido) ¿Y cómo lo sabes? Tú solo paras concentrada en sus asuntos como tus clases o las reuniones escandalosas con tus amigas. No creo que tengas tiempo para fijarte en mí. Eres tan fría conmigo y siento que no conozco nada de ti. Mamá ha intentado ayudarme, pero tú ni siquiera te ves interesada por mí
Erina: (agotada) Lo que pasa es que te veo en tu escritorio todos los días. Escucho tus comentarios hacia Orfiono y me está preocupando. No debes aceptar realizar las tareas de ningún chico, porque esa es su responsabilidad. Aceptaste ser su ayudante a cambio de que él te diera cuarenta soles. Te garantizo que Orfiono solo te manipuló para que le hicieras sus deberes.
Lopio: (deprimido) Ese compañero solo me critica por mis errores. Dice que soy un chico que da lástima a los demás. Los profesores dicen que él es perfecto por sus calificaciones y su forma de trabajar, pero a mí me trata mal. Nadie me cree de qué él no es una buena persona conmigo. Es demasiado perfeccionista que ya no lo puedo aguantar.
Erina: (agotada) ¿Y cómo te vas en tus cursos? ¿Ya te entregaron notas? A mí me pusieron catorce en un examen que tomaban temas como la historia griega y romana. La profesora es muy estricta con las calificaciones, porque es su forma de ser. No hay forma de cambiarme de docente así que pues la tengo que soportar.
Lopio: (deprimido) No tengo muchas notas, pero me acaban de poner trece en una evaluación escrita que consistía en realizar un relato de terror. Orfiono me obligó a hacer el texto de forma perfecta. Intenté redactar lo mejor que podía, pero a él no le agradó cómo lo hice. El profesor le dió la razón, porque cree que es el mejor alumno de toda la clase.
(Ingresa Burta Bunel caminando al escenario por el pasillo derecho)
Burta: (intrigada) Hijos, ¿Por qué están hablando en el baño? Lopio, otra vez te olvidaste de comer. Por favor pon pausa a tus actividades académicas y empieza a ser más productivo. Puedes ir a dar una vuelta para sentirte tranquilo y volver a casa.
Lopio: (deprimido) Mamá, me siento tan triste en realidad. Mis clases de la universidad son agotadoras y encima debo seguir las reglas de Orfiono. Ese chico me ha hecho sentir muy mal, porque es tan exquisito con sus críticas. Me cuenta que no valgo nada y puedo matarme si yo quiero.
(Burta observa lo que Lopio hizo con el rollo de papel higiénico y le quita ese papel de su cuello)
Burta: (alterada) ¡Cómo se te ocurre malgastar el rollo de esa manera! Te estás haciendo daño tú solo por ninguna razón válida. Eres solo un joven que no sabe lidiar con la vida que supuestamente lo atormenta. ¡Ni siquiera ayudas con los quehaceres de la casa! ¡Es el colmo! ¡Deberías resolver tus problemas de una vez!
Lopio: (deprimido) Ni siquiera puedo sentirme bien en la universidad por sentirme tan inferior a mis demás compañeros. Si pudieras tener la oportunidad de renacer, lo haría para no cometer ninguna estupidez o equivocación en el camino. Sería feliz por el resto de mis días, madre.
Burta: (intrigada) Me haces recordar a mis años de joven, pero sabes que estarás equivocado y te darás cuenta tarde o temprano. Quitarse la vida no es la solución a tus problemas, porque nuestro crecimiento de los errores que vamos a aprender. Recuerda lo que te digo, ya que soy tu madre y solo intento ayudarte.
Lopio: (deprimido) No sé qué hacer conmigo. Tal vez no llegue a dar los exámenes parciales por mi estado de ánimo. No estoy seguro de que algún especialista me pueda ayudar, porque soy alguien difícil de entender para muchas personas. Quisiera pedirte si podría retirarme de la universidad por un tiempo para mantenerme calmado.
Burta: (intrigada) Mejor lávate la cara para intentar tranquilizarte. Tu hermana también anda en la universidad, pero ella no llora como tú, sino que enfrenta sus problemas de forma solitaria y madura. Te sugiero tomar agua o escuchar música agradable para relajarte. De todas formas, puedes bañarte y refrescar tus ideas.
Lopio: (deprimido) Me dices como si fuera sencillo eliminar mis pensamientos suicidas con solo asearme en la ducha, pero no es así. Si dejara de asistir a mis clases, entonces creo que me sentiría mejor y ningún problema pasaría excepto quizás que mis tías se aprovechen para agarrarme como empleado en la casa de los abuelos.
(Lopio empieza a llorar y se levanta del inodoro)
(Erina se lava la cara con el jabón del lavamanos y luego ella respira para sentirse aliviada)
(Erina mira a su madre y le sonríe para mostrar la tranquilidad que siente luego de haberse calmado)
Erina: (agotada) Madre, le he explicado a Lopio que su vida no va a ser siempre feliz, porque todos tenemos dificultades para resolver. Requiere que exista una persona que lidie con sus pensamientos depresivos. Ni siquiera puede hablar con armonía o serenidad, porque solo para llorando a cada rato.
Burta: (intrigada) Lopio, tu hermana está preocupada, porque ha tratado de orientarte en lo que podía. Sin dudarlo, pienso mandarte en una cita especializada con una psicóloga. Voy a necesitar que me ayudes lavando los platos de la cocina y los utensilios que utilizamos tu hermana yo para almorzar.
Lopio: (deprimido) Ninguna de ustedes dos me entienden y eso me hace sentir mal. Me iré a mi cuarto, porque veo que solo yo me comprendo totalmente. No puedo parar de llorar por la tristeza que siento.
(Erina Lonel se retira caminando del escenario mientras sigue sonriendo de forma alegre por el pasillo izquierdo)
(Burta Lonel coloca el papel higiénico en el lugar donde le corresponde ir y se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)
(Lopio se lava la cara con el jabón y se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Cierre del telón) (Fin de la escena XVII)
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top