005.
Mi castigo estaba a cargo del profesor Snape, mientras que a Malfoy lo habían mandado con Filch a quien sabe dónde.
Por un lado, me alegraba no tener que lidiar con Malfoy, pero por otro me encontraba bastante aburrida al estar ordenando el salón de pociones. Y mientras ordenaba he sentido como algo caía sobre mi cabeza, donde al ver de lo que se trataba he podido ver un cuaderno que se encontraba un tanto maltratado.
Al ver la portada de aquel cuaderno he podido ver un nombre el cual decía: Evans.
Querido diario:
Hoy James había molestado nuevamente a Severus, algo que me había molestado bastante por lo que he ido a enfrentarlo.
Sin embargo, aquello no había sido de ayuda debido a que él simplemente se burló de Severus diciéndole que no podía defenderse solo y que debía de venir una niña a ayudarlo.
Severus se ha enojado conmigo por aquello por lo que no me habló durante todo el día y eso había sido un tanto doloroso para mí, ya que, Severus es mi mejor amigo.
He leído en una de las paginas para luego pasar a la siguiente.
Querido diario:
Nuevamente el grupo de James ha ido a molestar a Severus, pero esta vez no he hecho nada, ya que, no quería que él dejara de hablarme nuevamente.
Aunque luego he hechizado en secreto el jugo de James Potter y cuando él lo ha bebido no ha dejado de babear por unas horas. Sin embargo, una compañera de Severus en Slytherin me había descubierto por lo que me ha acusado con uno de los profesores.
He recibido el castigo de ordenar de manera alfabética los ingredientes de pociones por aquella venganza, pero no me sentía mal, ya que, Severus había venido a ayudarme con mi castigo en secreto.
A veces me pregunto si...
Inesperadamente el cuaderno que había comenzado a leer ha sido arrebatado de mis manos y al ver al profesor Snape mirándome fijamente con una expresión seria me ha asustado.
Si las miradas mataran yo ya me encontraría bajo tierra.
—No deberías leer las pertenencias de otros, Weasley.
—¿Quién es la chica Evans, profesor? —pregunté, pero eso solamente lo hizo molestar.
—Si ya has terminado de ordenar, puedes retirarte.
He preferido no mencionar nada sobre la chica Evans, ya que, al mirarlo he comprendido que aquello era un tema bastante delicado para él.
Salí de aquel lugar para dirigirme a mi sala común y mientras me dirigía hacia allí, no he podido dejar de pensar en el diario de la chica Evans. ¿Quién era y por qué Snape se ha colocado así?
✧✧✧
Los días pasaron volando y finalmente los exámenes habían llegado por lo que nos habían entregado unas plumas nuevas, especiales, que habían sido hechizadas con un encantamiento anti trampa.
El examen con el profesor Flitwick trataba de hacer que una piña bailara claqué encima del escritorio mientras que el examen con la profesora McGonagall trataba de convertir un ratón en una caja de rapé.
Aquellos exámenes no se me han complicado tanto por lo que he sentido un gran alivio.
Sin embargo, cuando ha tocado el examen con el profesor Snape he comenzado a sentirme bastante nerviosa. Ya que, él se mantenía mirándome constantemente mientras traía consigo el libro de la chica Evans.
Nuestro examen trataba de recordar cómo hacer una poción para olvidar, algo muy extraño a mi parecer.
¿Acaso quería hacerme beber mi propia poción?
Afortunadamente he sobrevivido al examen del profesor Snape y mis recuerdos estaban intactos, por lo que he soltado un suspiro de alivio al momento de abandonar aquel salón.
—Estoy seguro de que repruebas, Weasley. —me dijo Malfoy, pero lo he ignorado. —¿Estás escuchándome?
—¿Acaso hay un fantasma del cual no conocíamos? —he preguntado mientras caminaba, pudiendo escuchar los pasos de Malfoy siguiéndome.
—Mas vale que te detengas o...
—¿O qué? —pregunté desafiante mientras le dejaba ver mi varita. —¿Qué piensas hacer, Malfoy?
Malfoy se encontraba algo asustado al tener mi varita tan cerca de su rostro por lo que ha mirado hacia un lado, pero al no ver cerca a sus dos gigantescos amigos que siempre lo acompañaban me ha mirado fijamente.
—Aléjate...
—¿Qué sucede, Hurón? —pregunté con una sonrisa arrogante. —¿Acaso tu ida al bosque prohibido te ha quemado tus últimas neuronas?
El chico no me ha dicho nada por lo que he seguido con mi sonrisa al momento en que alejaba mi varita de su rostro para así luego alejarme de su vista.
✧✧✧
El gran comedor se encontraba decorado con los colores de Slytherin, verde y plata, para celebrar el triunfo de ganar la copa durante siete años seguidos.
En ese momento he podido ver como el profesor Snape traía consigo aquel diario de la chica Evans a lo cual él al notar que me encontraba mirando aquel diario lo ha escondido entre sus ropas para luego dirigirme una mirada seria, algo que me ha ligeramente asustado.
Desde hace unas semanas me he preguntado si aquel diario contenía algo importante, algo que el profesor no quería que se descubriera.
Y debido a que me encontraba tan metida en mis pensamientos no me he percatado de que el director Albus Dumbledore había dado un pequeño discurso para luego anunciar que Slytherin había quedado en primer lugar, algo que alegraba a todos los Slytherin y aunque no lo admitiera por completo, yo también me sentía contenta.
Después de todo había ayudado a ganar algunos puntos y reponer los que se me habían quitado cuando he sido atrapada por la profesora McGonagall.
—Sí, sí, bien hecho, Slytherin. —dijo Dumbledore. —Sin embargo, los acontecimientos recientes deben ser tenidos en cuenta.
Las sonrisas de Slytherin habían comenzado a apagarse poco a poco al escuchar como el director le daba puntos a Ron, Hermione, Harry y Neville; dejando de esa forma a la casa Gryffindor como ganadores.
—Si tan solo no hubiéramos perdidos puntos por culpa de la Weasley. —dijo Pansy mientras me miraba con desagrado.
—Me pregunto si mirarás a Malfoy de la misma manera en la que lo haces conmigo. —dije. —Después de todo él ha perdido tantos puntos como yo.
—Eres tú la que provoca a mi Draco.
—Como digas, bestia.
—¿Cómo me has llamado?
—Al parecer aquí tenemos a otra persona que no se lava los oídos. —le dije con burla notando, así como Malfoy nos miraba bastante interesado. —Eso está muy mal.
—Retira tus palabras.
—No me apetece.
Pansy ha sostenido firmemente uno de los vasos que se encontraba sobre aquella mesa y por un momento he creído que me lanzaría su contenido, pero inesperadamente el contenido del vaso había caído sobre ella. Provocando que pequeñas risas de parte de Slytherin y las de las otras casas comenzaran a llegar a mis oídos.
Sabía que aquello había sido un hechizo y al percatarme de que lo había lanzado el profesor Snape me he quedado bastante sorprendida. ¿Por qué ha hecho eso?
—Debo admitir que eso ha sido impresionante, Comadreja. —oí la voz de Malfoy, lo cual ocasionó que me percatara que todos habían comenzado a abandonar el Gran comedor. —¿Cómo lo has hecho?
¿Acaso estaba oyendo bien? ¿Malfoy me estaba hablando sin arrogancia en sus palabras?
—¿Importa? —pregunté mientras tomaba una manzana verde de la mesa. —Es mejor irme.
—El próximo año serás expulsada de Hogwarts. —me dijo, y ahí estaba de nuevo su tono arrogante. —Yo mismo me encargaré de eso.
Malfoy se ha levantado de su asiento para luego quitarme de las manos la manzana verde que tenía en mi mano derecha y así finalmente comenzar a irse.
Aquello me ha molestado un poco, ya que, aquella había sido la última manzana verde. Sin embargo, no le he prestado demasiada atención para así comenzar a dirigirme a mi cuarto y arreglar algunas cosas para así finalmente terminar el primer año.
Año donde he vivido una que otra aventura, pero más que nada año donde he peleado con Draco Malfoy y estaba segura que los siguientes años sería lo mismo.
Es que él y yo no podemos llevarnos bien.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top