Otro día comenzó, y antes de notarlo llegaron las horas de los clubes

Iida por su parte al escuchar el timbre de salida sólo podía pensar que otra hora de horror llegaba a manos de su compañera de club

Al llegar al aula del club, observó a Mei trabajando en uno de sus tantos dispositivos

— Buenas tardes Hatsume

La pelirosa lo observó y saludó

— Qué hay de nuevo viejo?

Tenya omitió haber escuchado eso y simplemente se dirigió a llenar formularios y los papeles que necesitaba el comité de clubes y el consejo estudiantil

Entonces Mei dijo

— Oye grandote

— Qué?

— No crees que podrías ayudarme hasta tarde?

— Bueno, supongo que por un día no pasa nada

— No, me refiero a que siempre después de clases vengas hasta tarde, unas pocas horas extra, ya sabes por si necesito alguna cosa puedes ayudarme o conseguirme algo

— Hatsume, lo siento, pero no dejaré mis responsabilidades académicas a un lado sólo por ayudarte con el club tanto tiempo

— P-Pero si no trabajamos juntos, cómo haré para mantener el club, tu mismo escuchaste que necesitamos hacer papeleo y esa basura burocrática además de conseguir un buen lugar en la Expo de ciencia

Iida tenía muy poco de conocerla, pero a juzgar por su despreocupada actitud sabía que sólo buscaba convencerlo para conseguir lo que quería

— Lo siento, pero no puedo venir toda la tarde aquí, si quieres que te ayude sólo podré hacerlo las horas establecidas para los clubes, no más

Ella se cruzó de brazos y bufó algo molesta, cosa que sin quererlo le parecía lindo al peliazul

— Bien, pero espero que cumplas con tu palabra de ayudarme con la selección de miembros y el papeleo

— Está bien, haré lo posible, no te preocupes

Entonces ella se dirigió hacia un extraño dispositivo

Éste parecía un enorme tubo colocado de forma vertical, poseía una pequeño panel dentro y alguien podría entrar fácilmente en el, aunque no era lo suficientemente grande como para que Iida cupiera en él, pero si como para que ella pudiese entrar

— Hatsume qué es eso?

— Es un prototipo de un transportador de materia, hice varios a escala antes para objetos pequeños y funcionaron, así que hice este para probarlo

Él se impresionó pues jamás había visto algo como eso, sólo en historias de ciencia ficción y otros cuentos de fantasía

— Es genial.... Y funciona?

— Voy a probarlo

Entonces ella puso un muñeco de pruebas dentro de la máquina y después caminó hacia otro lado del salón donde tenía otra máquina exactamente igual, era en donde se supone que terminaría el objeto una vez iniciada la secuencia de transferencia

Ella iba a bajar una palanca de la máquina donde se encontraba el muñeco, pero se veía atascado, y se notaba que ella estaba esforzándose demasiado

— Necesitas una mano?

— S-Si.... Ven y ayúdame a b-bajar esto

Con demasiado esfuerzo en su voz dijo esto, a lo cual Iida respondió poniéndose detrás de ella y tomando la palanca para tratar de bajarla

— Vaya.... S-Si que está atascada

Con el esfuerzo de ambos lograron bajarla, y la máquina comenzó a hacer un ruido extraño

— Creo que debes retroceder un poco
Dijo Mei quien comenzaba a caminar hacia otro lado

— Por qué?

— No sé si ese sonido sea por la inestabilidad, o porque debe hacer ese ruido.... En cualquier caso, la falla siempre es una opción, se debe aprender de los errores
Orgullosamente decía estas palabras confiada de sus habilidades, éxitos y fallas

— Ok.... Supongo que tienes razón

Entonces un destello azúl los cegó momentáneamente, por al menos 2 segundos, y al recuperar la visión, ambos observaron que, en efecto, el muñeco se había transportado, el problema era que no estaba en la otra máquina

— Bueno, al menos no explotó

— Si, al menos no.... Espera, debía explotar?

— No.... Pero existía la posibilidad de que si lo hiciera

Mei caminó hacia el artefacto e Iida le dijo

— Y dónde está el muñeco?

— No lo sé, debo ajustar los parámetros de posicionamiento para así sincronizarlos al 100% con los del bebé receptor

Ella tomó una llave inglesa, un desarmador, un taladro y distintas herramientas más

— Y qué hago yo?

— Puedes intentar reclutar personas para el club aunque no las necesitamos, pero como sabes dijeron que desintegrarán el club si no hay más miembros, así que supongo que deberías ayudarme con eso

Iida no quería formar parte de sus alocados experimentos, ni ser su conejillo de indias, así que acató la petición de Mei y salió a buscar personas que no tuvieran clubes para intentar reclutarlas

Existían días especialmente hechos para el reclutamiento para los clubes aunque para su mala suerte, ese día no era uno, pero ya que no tenía muchas cosas que hacer con Hatsume en el salón, prefirió buscar personas interesadas en entrar

......

Después de no conseguir resultado alguno tras casi una hora de búsqueda, regresó derrotado al salón, en dónde observó que Mei dejaba otro muñeco de pruebas en la máquina de transferencia

— Ya arreglaste esa cosa?

— Si

Ella volteó y tenía la cara manchada de aceite y con algo de suciedad, se notaba algo transpirada pues al parecer estaba esforzándose demasiado, incluso tenía unos cuantos rasguños en sus brazos, pero aún así su típico tono de voz y su sonrisa no desaparecían ni por un instante

— Y cómo es que terminaste así?

— Bueno, es una tarea algo cansada trabajar con estos bebés, sobre todo cuando son tan grandes, pero no te preocupes grandote, no es nada que no sepa manejar

Él la notaba algo agitada y cansada, su respiración estaba acelerada y Tenya se percató

— Creo que deberías descansar sabes?

Ella negó con la cabeza y dijo

— Aprovecho ese tiempo de "descanso" para trabajar con mis bebés, así que no gracias

Iida ahora sabía que ella era demasiado necia, así que no trataría de meterse en problemas con ella por eso

Entonces ella volvió a tomar la palanca, esta vez tampoco podía bajarla, pero no solicitó la ayuda de Iida, aunque obviamente éste al darse cuenta, le fue a ayudar y comenzó a tirar de la palanca

En un momento, Mei hizo demasiado esfuerzo y al bajar completamente la palanca, ella se tropezó haciendo que Iida por inercia también cayera al suelo

El destello los cegó un poco al igual que antes, y cuando recuperaron la visión, Iida notó que sus manos estaba tomando algo suave, más de lo que pensaba

Se percató que estaba tocando el trasero de Hatsume, quien estaba recostada en el pecho de Iida, ella levantó la mirada hacia él y le dijo

— Si querías tocar, me lo hubieras pedido antes velocista

Un tono carmesí lo invadió completamente y quitó sus manos del suave lugar donde se encontraban

— N-No, H-Hatsume yo.... Fue un accidente.... No fue...

Ella soltó una risilla y se levantó diciendo

— Solo bromeaba, no tienes porqué ser tan serio

Entonces caminó hasta la segunda máquina, Iida se levantó avergonzado

~ Pero qué he hecho, acabo de tocar un lugar prohibido de una chica.... Soy una vergüenza para todos mis conocidos y familia.... Cómo pude caer tan bajo

Iida se reprochaba a sí mismo mentalmente, hasta que Mei lo sacó de sus pensamientos

— Hey velocista, mira esto

Entonces él fue hasta donde Mei y observó que el muñeco estaba intacto en la máquina

— Hatsume.... Es impresionante.... Lo lograste

Ella sonrió de forma característica y rascando su nuca dijo

— Vamos.... Sé que soy genial y toda la cosa.... Pero no tienes que halagarme por eso..... Bueno hazlo, se que soy una eminencia

Ella no paraba de elogiarse mientras Iida seguía pasmado, pues no creía que algo así fuera posible

— Te das cuenta de que acabas de crear algo que puede beneficiar a la humanidad en muchas formas?

— Oh vamos, sé que este hermoso bebé será de gran utilidad para la sociedad.... Soy una belleza y una chica inteligente, así que soy el paquete completo, no lo crees Lida?

— Es Iida no Lida
Dijo susurrando algo molesto

Entonces ella lo abrazó, fue algo extraño ya que su transpirado cuerpo lo tocaba y se sentía algo incómodo, pero a la vez, era reconfortante para Iida, no sabía por qué, pero su corazón se aceleró con ese abrazo

— Gracias por el apoyo, ahora qué te parece si lo pruebas?

— Qué?, Yo?

— Anda no seas tímido
Dijo la pelirrosa arrastrándolo hacia la máquina

— Me niego rotundamente, qué tal si desaparezco como el primer muñeco?

Ella lo soltó y aún sonriendo dijo

— Está bien, yo lo haré

Entonces ella entró en la máquina y le dijo

— Baja la palanca Yida

— Es Iida... Y no creo que sea buena idea probarlo en personas tan pronto

Aunque no lo pareciera, él estaba bastante preocupado de que algo le sucediera a Mei, pero dada la insistencia por parte de Hatsume, se acercó a la palanca no sin antes decir

— Segura que no te pasará nada?

— Tranquilo, si llego a morir será a favor de la ciencia, así que no hay problema, adelante, baja la palanca

Iida tragó saliva, pues incluso ella estaba consciente de que podría morir, pero lo que más le asustaba era el hecho de que lo tomara con tal naturalidad, y después de un dilema mental, bajó la palanca y el destello azúl lo cegó una vez más

~ Por favor que aparezca, por favor que aparezca, por favor que aparezca

Eran los pensamientos que surcaban la mente del peliazul

Entonces un ruido lo hizo prestar atención a la otra máquina, en donde observó a Hatsume.... Bueno.... De una forma que jamás imaginó

— Lo ves?, Todo funcionó a la perfección

Iida quedó boquiabierto y con un tono carmesí en todo su rostro.... El cerró sus ojos y dió media vuelta

— Eh, qué sucede grandote?

Entonces ella bajó su mirada y desvergonzada y despreocupada como siempre dijo

— Oh.... Creo que esto no lo tenía contemplado

Resultó que Mei se había transportado a la otra máquina de forma exitosa, pero le hacía falta la parte de arriba de sus prendas, dejando a la vista sus enormes pechos

— Vamos velocista, acaso no habías visto unos antes?

Iida se negaba a responder y se mantenía con los ojos cerrados a pesar de estarle dando la espalda a Hatsume

— Anda, incluso puedes tocarlos si te portas bien

Algo de sangre brotó de la nariz de Iida al pensar en ello, y dijo

— N-No, p-por supuesto que yo no....

— Te dije que debes dejar de ser tan serio, sólo bromeaba

Entonces Mei le dió una palmada en el trasero a Iida, y después de un armario de metal, sacó sus prendas superiores y procedió a colocarselas

— Listo, ya estoy vestida

Iida dudaba si voltear o no, pues conocía a Mei, y sabía que tal vez lo engañaría, pero a la vez, la curiosidad lo llevaba a querer saber si decía la verdad o no, así que volteó y lentamente abrió los ojos

— Lo ves, ahora sólo necesito ajustar ciertos problemas que surgieron con la programación..... Veamos.....

Ella continuó ignorando a Iida, quien pensaba

~ Esta chica me va a matar