Después de varios meses de reconciliación, Error e Ink habían decidido mudarse juntos a un departamento mucho más apto para los dos, ya habían dejado las cosas del apartamento del moreno en su nuevo hogar, ahora quedaba buscar las cosas de la casa de Ink.

El albino estaba poniendo su ropa en las maletas mientras Error arreglaba la cama, aunque todo movimiento propio se detuvo al quedarse suspendido frente a la puerta con muchas manchas de pintura. Allí había ocurrido el principio del conflicto, donde ciegamente provocó que su novio estuviera afectado por su trastorno; tomó el picaporte y lo giró, estaba sin llave.

Al entrar vio el suelo manchado de pintura, muchos lienzos sin terminar estaban esparcidos por la habitación, las paredes tampoco estaban limpias, era un desastre creativo. 

Ink se acercó tímido donde su pareja, esperando que aquel cuarto fuera nuevamente culpable de sus diferencias.

— ¿Está todo bien?

Las palabras del mayor hicieron que Error girara la cabeza para mirarle sobre el hombro, no podía dejar que su molestia fuera culpable del sufrimiento ajeno, entre ambos debían apoyarse, pues ninguno era perfecto. Así había aprendido.

Se giró para estar frente a frente y llevó su mano hasta la mejilla clara de Ink, ahí su pulgar acarició su piel, siendo afectivo.

— Pintas muy hermoso, deberías seguir tu sueño. 

Los ojos del más bajo parecieron brillar.

— ¿Puedo pintar en nuestro nuevo hogar?

— ...Pero tendrás que tener cuidado de no manchar las paredes de pintura, ¿Ya?

— Ay... ¡Eres el mejor!

Ink le abrazó por sobre sus hombros y le besó muy contento, Error no se lo esperó pero abrazó su cintura correspondiendo, ambos debían hacer de sus vidas una bonita experiencia.

* • • ◕◕════♣ Fin ♣════◕◕ • •*

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Muchos besitos para ustedes y nos vemos en próximos fanfics.