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Yoongi entrelazó sus dedos con los de Jimin, sintiendo como su corazón reaccionaba ante el inocente contacto con su omega a su lado.

Estaba feliz, se sentía tan dichoso de poder tener a su lado a quien por tanto tiempo había esperado a años atrás con la esperanza de volver a verle, no podía creer hasta el momento en donde llego.

Ambos caminaron hasta acercarse a un pequeño lago, mientras ambos se sentían tímidos y la vergüenza no abandonaba sus mejillas.

Habían denominado esa salida como su 'primera cita' por lo que tanto como Yoongi y Jimin no podían evitar que el nerviosismo los traicionará.

─Estoy nervioso ─Confesó Jimin con la mirada abajo, viendo el lago que estaba a unos metros de ellos ─, todo es tan nuevo para mi.

El viento movía las hojas, algunos ruidos de la naturaleza estaban presentes y las estrellas no dejaban de brillar por encima de ellos.

─Y para mi ─Yoongi también se unió a la causa ─, simplemente no se que hacer, nunca antes hice algo así y temo arruinarlo.

─Pienso que es porque ambos somos inexpertos en el tema ─Reconoció el castaño, sacando la comida del canasto que había preparado con ayuda del contrario ─, pero pienso que debemos ser nosotros mismos.

─Te doy la razón ─Se acercó al menor para abrigarlo con la sábana que trajo. Yoongi deseaba proteger de todo peligro a Jimin, su omega y pareja destinada.

La noche era fría y sentados en el pasto, bajo la luz de la luna se sentía aún más pesado.

─¿Quisiera comer o hacer algo antes de hacerlo? ─Sus ojos veían con curiosidad al pelinegro, admirando cada detalle de su atractivo rostro.

Yoongi se quedo en silencio unos segundos, pensando en alguna actividad que pudieran hacer los dos.

─Pienso que podríamos hacer algo que te guste.

─¿Seguro? Porque hay algo que me gustaría hacer contigo hyung.

Jimin acercó su manita hacía la de Yoongi para entrelazar sus dedos.

─¿Qué es lo que te gustaría? ─Yoongi acercó su rostro para besar los labios del menor con timidez.

Jimin acuno el rostro del pelinegro para profundizar el beso, degustando de esos nuevos sentimientos y sensaciones que le proporcionaba su amante.

─Quisiera escuchar una de tus historias ─Murmurmó entre sus labios.

─¿Quisieras escuchar una de mis historias? ─Yoongi se sorprendió, no se imaginó que a Jimin le gustarán esas historias, porque pensó que tal vez le resultarían aburridas.

─Si hyung.

─No pensé que te gustarán.

─Pues me encantan demasiado hyung ─Afirmó Jimin, asintiendo y cubriendo a Yoongi también con la sabana para que no pasará frío y ambos estuvieran calientitos ─, tus historias siempre son interesantes para mi, aprendo mucho de ellas y de ti.

─Entonces será un gusto poder contarte una leyenda que alguna vez leí en un libro.

─Soy todo oídos ─Jimin recargo su cabeza en el hombro del mayor, para luego cerrar sus ojos, disfrutando del momento.

Deseaba quedarse así para siempre, porque era como estar soñando despierto y sentirse volar, pero quien iba a pensar que todo cambiaría tan drásticamente.

Porque nada sería igual después de ese día.

Ese sería el principio de un final.

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El trabajo había vuelto con la llegada del otoño, así que ese día Jimin había salido temprano de su casa para ir directamente a las hectáreas y empezar la cosecha.

Nunca podías detenerte, todo el tiempo había trabajo y así de esa manera el día avanzó.

Así que cuando Jimin llevaba de regreso algunas papas en la carretilla, en el centro de la ciudad escucho varios gritos que le resultaban familiares.

Y cada vez eran más fuertes y escandalosos.

─¡Eres un monstruo!

─¡No mereces vivir!

─¡Hiciste mucho daño a tantos inocentes!

─¡Mereces la muerte por tus pecados!

─¡Fuera de aquí escoria inhumana!

Todo eso era lo que gritaban la mayoría de ciudadanos del pueblo mirando a un pelinegro quien estaba en silencio, con la mirada en el suelo.

─¡Ojalá te pudrás en el infierno de todo lo que has hecho!

Sus ropas estaban sucias por la tierra del suelo y sus rodillas se encontraban lastimadas, al igual que su labio inferior herido roto y su mejilla. Yoongi sabía que se merecía todos esos insultos y golpes del mundo que venían encima de él, porque no fue alguien del cual se sintiera orgulloso en el pasado.

Por lo general era un pueblo tranquilo y tenía muchísimos años que no tenían ese tipo de conflictos en el lugar, ¿Qué pasaba ahora? ¿Por qué tenían de esa manera su hyung?

─Tenía dudas al principio si eras ese maldito alfa que vino con su manada hace años atrás ─Expresó Seo Joon en voz alta y desprecio ─, pero veo si lo eres...¡eres un maldito enfermo, gustarte mi hijo! -

¿Manada enemiga?

Jimin miro a la dueña de aquella voz, se trataba de su madre quien tenía lágrimas en sus ojos.

¿Alfa? ¿Qué era eso? ¿Por qué le gritaban esas cosas a su hyung?

─¡Es solamente un jovencito! ¿Cómo te atreves tener esos pensamientos sobre mi hijo?! ─El señor Park apoyaba a su esposa mientras seguía gritándole al pelinegro, el cual trataba de enfocar su mente en otra cosa que no fuese el padre de su destinado.

Yoongi no miraba a los ojos a ese hombre, porque sabía que si lo hacía, podría atacarle y era lo que menos quería. Su alfa interior era alguien demasiado agresivo, podría asesinar a sangre fría a quien le estaba gritando de esa manera tan despreciable, por eso trataba de calmarse.

Jimin se acerco a la muchedumbre con el sentimiento de tener el corazón en sus manos por la adrenalina en sus venas, dispuesto a llegar al lado del mayor para defenderlo, puede que le estuvieran todos inculpando de algo que ni siquiera tuvo que ver.

Min Yoongi no era malo y le estaban haciendo daño cuando él es bueno, no hizo daño a nadie.

─¡Alto! ─Exclamó lo más alto que sus pulmones le permitían, llamando la atención de todos los pueblerinos.

Todos miraron al chico con duda y su madre corrió en su dirección para abrazarle.

Jimin miró extrañado a su madre, ¿Por qué todos querían alejarle de Yoongi?

─¡Alejate de aquí, Jimin! ─gritó el alcalde y tío de Jimin ─. No queremos que te acerques a esté hombre, es peligroso.

─¿Pero por qué? ─Jimin pidió que alguien le diera alguna explicación ─, ¡¿Por qué son así con Yoongi hyung?!

No podía detenerse, Jimin estaba cansado de que fueran así con el mayor, haciéndole menos, temiendo de él.

─Hijo, hay algo que debes saber y esté hombre de aquí ─señaló a Yoongi, quien miraba a Jimin, aquellos ojos tristes perforaron el corazón de Jimin, quien sintió una punsada en su corazón ─. Es un maldito enfermo que no merece piedad o misericordia.

─Él es bueno, no entiendo por qué le dicen esas cosas horribles, Yoongi es buena persona, ¡Déjenlo tranquilo! ─exigió Jimin enojado.

El alcalde hizo una seña para que todos los habitantes del pueblo se retiraran del lugar para poder explicar la verdad a Jimin, así todos se fueron directamente a las oficinas presidenciales, llevando a Yoongi sostenido de algunos ayudantes del alcalde.

Aquella verdad habían ocultado por tanto tiempo al fin saldría a la luz.

─¡Eres un maldito un pedófilo! ─Expresó el padre de Jimin con el ceño fruncido, queriendo abalanzarse sobre aquel hombre, porque tan solo pensar que había tocado a su hijo con sus manos llenas de sangre del pasado, le enfermaba.

─¡Basta papá! ─Pidió Jimin con cansancio ─, deja de decir estás cosas feas sobre Yoongi hyung, no lo voy a permitir aunque seas mi padre ─bramó Jimin sin poder contener su enojo al escuchar esas feas palabras que salían de la boca de su padre.

Seo Joon se asombro de ver la manera en que su hijo había defendido a ese enfermo. Ahora todos habían llegado a la oficina, la reunión empezaría en ese mismo momento.

─Quiero que alguien me explique ¿Qué es lo que esta sucediendo aquí? ─Les preguntó Jimin, esperando a que alguien dijera algo.

La mayoría de la familia no sabían como comenzar a contar algo tan complicado, a lo que el alcalde Park Hyung Sik tomó de los hombros a su sobrino, mirándolo con seriedad.

─Jimin, hay algo que ha ido de generación en generación en nuestras familias, por lo que la mayoría del pueblo no lo sabe.

Su hermano le miraba desde un metro de ellos, también sabían que nada sería igual después de eso.

Yoongi no le había dejado de mirar en ningún segundo a Jimin y éste obviamente sintió la mirada penetrante de su hyung en su espalda como si le quemará, poniéndolo nervioso.

─A lo que quiero llegar Jimin, es que no somos humanos como todos los pueblerinos ─reveló el alcalde mirando a su sobrino con seriedad ─. Somos una raza de lobos silvestres de montaña y tu, b-bueno.

─Mi pequeño ─Se acercó la señora Park abrazando con fuerza a su hijo ─, a lo que tu tío quiere llegar es que eres un omega de raza pura, los cuales solamente llegan a este mundo cada trescientos años por una familia con la bendición de la luna. Fuimos bendecidos con ese privilegio por ella al tenerte con nosotros.

Jimin sintió cómo sus piernas se debilitaban ante aquella revelación, no podía ser ciergo todo eso, era imposible. Él no era un omega, por mucho tiempo leyó acerca del tema pero siempre pensó que solamente era algo ficticio, fuera de la realidad.

─U-Ustedes están mintiendo, dejen de jugar, ya estuvo buena la broma ─gritó el pequeño Jimin sin poder creer aquellas mentiras que le estaban diciendo, su cabeza estaba dando vueltas y trataba de calmarse, sentía tantas ganas de vomitar ─, porque y-yo no soy nada de eso que estan diciendo ¡Soy solamente un pequeño campesino!

La señora Park se acurrucó en los brazos de su esposo, tratando de recibir apoyo de parte de su marido.

─Hijo, la razón por la cual nunca viste un cambio, fue porque tu abuela nos hizo una recesa para dormir a tu lobo interior y ocultar a tu omega de todo ─Seo Joon no sabía donde mirar porque se sentía indigno de mirar a su hijo a los ojos ─. Básicamente ella preparó todo para que no tuvieras que presenciar tus instintos de omega y aunque ella no estuvo de acuerdo con ello, lo hizo porque yo se lo pedí.

Jimin miró a sus progenitores sin poder creerselo. No creía ser de esa especie, siempre creyó ser un humano común y corriente, incluso aquellos recuerdos de su niñez, pensó que eran un sueño, cuando era un bebé y se convertía en cachorro. Sólo eran visiones.

─Están mintiendo, no puedo creer que me hubieran hecho todo esto ─musitó Jimin, con la mirada perdida ─. Que me hubieran ocultado mi identidad por tanto miedo, debe ser un error.

─No es una mentira hijo nosotros ─aclaró Chungha con la mirada baja ─. Decidimos que siguierás tomando aquella posición que hacía tu abuela para protegerte.

─No queríamos que este hombre ─dijo con repudio el señor Park mirando a Yoongi, quien también le desafío con la mirada ─, te hiciera algo.

─Hace años Min Yoongi siendo un hombre mayor, puso sus ojos en ti ─agregó Hyung Sik ─, sabiendo la inocencia que habitaba entre tus ojos.

─¿Hombre grande? ─Preguntó confundido el menor ─. Aquí debe haber una equivocación, no tiene sentido, realmente debe ser un error, esa persona no podría ser Yoongi hyung.

─Min Yoongi fue una mancha en la historia cuando asesinó a miles de inocentes hace 30 años atrás y la mayoría de nuestra familia lo sabe, porque nunca se olvidaron de recordarnos que debíamos tener cuidado el día de mañana en lo que ocurriera ─Reveló Hyung Sik con seriedad.

Según Min Yoongi, lo que tenía entendido Jimin era que actualmente tenía 23 años, era mayor que él por unos cuantos años, pero no demasiado, no entendía que había sucedido.

─Hijo ¿Acaso no te lo contó? Pensé que así había sido ─Se burló sarcásticamente ─. Min, ¿Por qué no le dices que fuiste el desgraciado que se atrevió a poner ojos morbosos y pecadores en un pequeño bebé? ─Seo Joon aniquiló con la mirada a Yoongi ─. Que cuando llegaste al pueblo a atormentarnos, te quisiste llevar a mi hijo pero luchamos por él, ¿Lo recuerdas?

─Tuvimos dudas cuando llegaste al pueblo si se trataba de ti ─Se acercó Hyung Sik al alfa mientras estaba en el suelo retenido por sus guardaespaldas ─, porque no detectabamos tu aroma y tu apariencia en aquel entonces era una barba, así pensamos que estabamos alusionando y eras otra persona.

─Que tonto fuimos, no debimos haber bajado la guardia ─Se maldijo Seo Joon ─, nuestra ignorancia fue mayor y tu fuiste aún más astuto, Min.

─En ese entonces eras un bebé ─Explicó Chungha con temor en su mirada al recordar el pasado ─, pero eso no le había importado a Min Yoongi que aún así había querido arrancarte de mis brazos, sin importarle lo que nosotros sentíamos. Ese día casi tu padre pierde la vida por ese hombre, pero al final pudo recuperarse.

─Y-Yoongi hyung ¿De que están hablando? ─preguntó Jimin mirando al pelinegro con tristeza, reteniendo sus lágrimas de impotencia ─, ¿Me ha mentido todo este tiempo? ¿P-Por qué lo hizo? ¿Por qué me hicieron esto?

Los señores Park junto al alcalde, se retiraron unos metros para que ambos hablarán y luego proceder a la decisión final.

Los guardaespaldas del alcalde cuidaban al pequeño Park desde lejos, por si Min decidía atacarlo o algo similar, no tendrían piedad si fuera el caso.

─Yo no quise hacerlo desde el principio por temor a que algo pudiera pasarte y cual pudiera ser tu reacción ─Yoongi suspiró pesado, tratando de calmar el dolor que sentía por las heridas de su cuerpo.

¿Cómo debía empezar? Era muy difícil empezar algo tan complicado y tan largo.

─Todo lo que han dicho es cierto Jimin ─confesó Yoongi mirando a Jimin, el cual en frente de sus ojos trataba de llorar de la impotencia ─. Empezando por mi edad que te conté que tenía, no es cierto.

Jimin se acercó al pelinegro, negando ante aquella respuesta. ¿Acaso no tenían piedad? Eran tantas verdades ocultas que habían mantenido en secreto.

─Pero cuando hablamos por primera vez, u-usted me dijo que tenía 20 años, hyung ─susurró Jimin confundido, ¿Tanto Min Yoongi le había mentido?

Años atrás Yoongi jamás imaginó que el menor se enterará de esa manera tan inesperada, no tenía ni como responder ante esos ojos tristes.

─Hay muchas cosas que quisiera que mejor no las supieras, porque son verdades horribles me gustaría que fueran enterradas, pero ahora no puedo hacerlo, ya es tarde ─Desvió la mirada con impotencia.

Jimin sintió sus ojos aguadarse y una opresión en su pecho instalarse, tenía tantas ganas de llorar como un bebé.

─Pero quiero que me lo digas ahora ─Trató de ser fuerte ─, porque estoy harto de preguntar y que nadie me responda.

Un silencio se hizo presente que duro pocos segundos.

─Te lo diré, pero debes mantener discreción a todo lo que voy a decir, ¿Lo prometes? ─Yoongi aclaró su garganta para poder revelar tantas cosas que jamás espero decirle al menor.

─Claro que lo mantendré y sí, lo prometo, hyung ─Desvió la mirada, tratando de calmar los latidos de su débil corazón.

─¿Recuerdas aquella historia del lobo solitario? ─Yoongi quería ser sincero, así que trato de sonreír, pero su sonrisa estaba combinada con tristeza. Era algo vacía y tan nostálgica.

Jimin asintió y su corazón dolió al notar que aquella sonrisa era demasiado triste y profunda, miles de sentimientos podría trasmitir Yoongi con tan solo una mirada que le daba, eran soledad y necesidad de amor.

─Minnie, esa historia es la mía ─articuló Yoongi, dejando por fin, las lágrimas salir de sus ojos de la impotencia. Además, un dolor en su corazón se posicionó, tal vez era porque su alfa estaba muriendo poco a poco y no podía tener reacciones tan fuertes, porque podrían llevarlo al otro mundo muy pronto.

El rostro de Jimin perdió color y sintió sus piernas debilitarse.

─No puede ser ─Jimin no podía creerl o asimilarlo.

─Tus padres tienen razón, tu eres ese bebé de la historia y yo soy aquel enfermo que están culpando ahora ─Yoongi no espero tener que confesar ese secreto luego de haber logrado un paso con el menor.

Por las mejillas de Jimin se deslizaron algunas lágrimas que salieron de sus ojos, su corazón dolía, tomó su cabeza entre sus manos mientras sollozaba de dolor por el impacto que tenía toda esa información en su mente.

─Yoongi hyung, dime una cosa ¿Quién eres? ─cerró sus ojos, tratandonde disminuir el dolor que sentía mientras seguía mirando al mayor.

─Mi nombre si es el verdadero que conoces, aunque mi edad verdadera es de 135 años, aunque no lo demuestre ─Aclaró sintiendo vergüenza de su apariencia ─. Yo soy un alfa, ex-líder una manada que tuvo el nombre BlackSide hace bastantes años atrás, somos los cuales causaron terror por tanto tiempo Jimin, prácticamente tus enemigos.

Jimin sintió sus piernas flaquear debido al asombro, ¿135 años? ¿Acaso su hyung era tan mayor? No lo creía, estaba perplejo, Yoongi aparentaba la edad que le dijo al principio, 20 años, no esa edad que decía así que no podía ser cierto.

─¿Por qué decidió callar tanto tiempo? Me hubiese gustado que me dijera la verdad desde el principio cuando nos conocimos, creí que teníamos la confianza para decirnos de todo ─Expresó dolido ─. Viví toda mi vida creyendo que sólo era un humano común y corriente, es tan irreal.

─Porque tus padres eran los que debían decirte del tema primero, no debía cometer ese error de meterme en una situación que no solamente era mía, sini que también les correspondía a ellos decidir ─Un quejido se escapó de su boca luego de señalar el 'por qué' de la situación ─. Lamento tanto que tuvieras que enterarte tan de repente, pero fue algo que no se pudo evitar.

─Yo hubiera sido feliz al saber la verdad, debido a que siempre me ocultaron cosas, ahora todo cobra sentido ─Bajo la mirada, sintiendo un dolor en su pecho ─, ¿Por eso trataban de ocultarte de mi? Me dicen que soy un omega, pero no entiendo por qué no pude ser como debía ser.

─Tus padres hicieron lo mejor que creían para ti ─La voz de Yoongi era amable y suave ─, yo no era bueno en aquellos años, es normal que ellos quisieran protegerte de un demonio.

─Quiero que me diga una cosa hyung ─Jimin se acercó más a Yoongi y con su mano acarició la mejilla del alfa, importándole poco que su familia estuviera a unos metros mirándolo ─, ¿Cómo fue su vida antes de conocerme? ¿Qué era lo que hacía para que todos huyeran de su presencia? ¿Quién fue aquel general que causo tanto terror?

Ambos se sentaron en unas sillas aún más alejados de los mayores, para tener su propia privacidad.

─Antes lo que hacía mi manada tan única y hablaba es que tratábamos de ganar la confianza de algún pueblo, para después traicionar y asesinar a todos a sangre fría ─Dijo sin filtro, recordando cómo era su vida hace años atrás ─. Y no solo fueron adultos los que pasaron por mis manos, sino también niños, bebés, no teníamos piedad con nadie, pero yo era el peor de todos, porque algunas veces mis hombres dudaron, pero yo nunca lo hacía.

El castaño solamente se dedicaba a escuchar en silencio.

─Cuando llegamos aquí por primera vez para hacer lo mismo que en los pueblos anteriores, fue cuando te vi por primera vez ─Sonrió inconscientemente y Jimin al verlo también lo imitó ─, al verte en los brazos de tu madre, tuvme miraste con una mirada cálida, tan llena de vida y caí a tus pies.

─No pudiste avanzar con tu plan ¿Por qué descubriste que era yo a quien tanto buscabas? ─Le preguntó con asombro y Min asintió.

─Simplemente no pude hacerles nada a ustedes esa noche, no cuando te había encontrado ─Dibujo una pequeña sonrisa mientras jugaba con sus dedos ─. Eras tú lo único que necesita en este mundo tras tantos años de soledad, fue por eso que en un arranque de impotencia quise llevarte conmigo. Así que es por eso que tu familia me odia.

Un silencio torturoso se hizo presente después de eso y Jimin trato de acercarse al mayor, para tomar su rostro entre sus manos.

─El tiempo terminó, joven Park ─Dijo uno de los guardaespaldas acercándose a ellos.

─Tenemos que llevarnos al señor Min, órdenes de su tío y su padre.

Jimin no quería alejarse de Yoongi, ¿Qué importaba el pasado cuando tenían el presente?

─Yoongi hyung, antes de que te vayas dime una cosa, ¿Morirás? ─preguntó Jimin con temor el menor ─. Responde por favor, quiero saberlo.

No quería que el mayor muriera, no deseaba eso sobre todas las cosas.

La historia de aquel lobo solitario seguía en la cabeza del menor sin irse y temía perder a su amado por el egoísmo que le rodeaba.

─Tu omega ha sido dormido por tantos años Jimin ─Yoongi temía de la vida de Jimin ─, incluso tú también podrías dormir en un sueño eterno, al igual que yo. Han pasado muchos años en los que te estuvieron suprimiendo, no has sido como normalmente dicta tu naturaleza, todo a causa de tus padres. Ellos han dormido a tu lobo, del cual hace mi alfa tenga el tiempo contado, porque no siente a quien es su pareja destinada.

Todos los miembros de la familia Park comenzaron a acercarse a ellos en compañía de algunos hombres bajo el mando de Hyung Sik, por eso Jimin sabía que ellos sacarían a Yoongi del pueblo, porque el exilio era permanente y no podías volver jamás una vez se te daba.

─Yoongi ─musitó Jimin olvidando el formalismo, llorando de la impotencia que sentía en esos momentos ─. Y-Yo no quiero que se vaya.

─Volveré por ti, lo prometo ─Decretó el alfa acariciando el fino rostro del más joven con sus manos, antes de ser agarrado con brutalidad por los hombres del alcalde.

Yoongi había grabado cada parte del rostro de su destinado en su memoria, tal vez, solo tal vez esa sería la ultima vez que lo vería antes de ser sacado de la oficina del alcalde.

Las despedidas eran frías, crueles, y dolorosas y Jimin se dejo caer en el frío suelo para llorar, dejando salir todos sus sentimientos a flor de piel que estuvo aguantando por tanto tiempo.

Su pareja destinada, su alfa se le fue arrebatado de una manera muy cruel y silenciosa, a causa por sus padres y el pueblo que lo aborrecía.

La abuela Park se acercó a su nieto para llevarle a casa, habían sido muchas emociones juntas en tan solo un día.

«Regresaré por usted, Yoongi hyung.»

Eso fue lo que pensó Jimin en sus adentros, porque una vez que recuperará a su omega, iría por su pareja.

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