11. Cambio de planes
—¿Soy Romeo? — repite Christian — ¿Romeo? Soy Romeo.
Roberto rueda los ojos mientras caminan por el patio de la escuela. Desde que llegó esta mañana, su amigo no ha hablado de otra cosa.
Y es que Christian jamás vio el papel en la pizarra de anuncios, de haberlo hecho no se hubiera asombrado al escuchar la lista de personajes que leyó la maestra en la clase. Ya ha pasado mucho tiempo y él aún no lo supera.
—Si hubieras revisado...
—¡Es que no puedo ser Romeo! — interrumpe a su amigo — ¿Sabes quien es Julieta?
—Valeria — contesta simplemente.
—Vale... ¡¿Qué?! — Christian lo observa confundido.
Si bien ha pasado quejándose lo que va del día, no recuerda haberle dicho quien representará a Julieta.
—En esta escuela todo se sabe — explica Roberto —. Además, pase leyendo la lista cuando iba a mi club.
—Eso tiene sentido. ¿Pero entiendes lo que significa que ella sea Julieta? — dramatiza nuevamente.
—¿Que los dos mueren al final? — contrapregunta sonriendo.
Christian lo observa serio. Al ver que Roberto no deja de sonreír, decide seguir con sus quejas.
—Escuché que Valeria dijo que le dará gusto matar a Romeo... ¡Julieta ni siquiera mata a Romeo!
Roberto suelta una carcajada sin poder evitarlo, Chris se queja de la actitud de su amigo.
—Christian, no creas todo lo que dicen en los pasillos — aconseja intentando lucir serio — Julieta no mata a Romeo, al menos no directamente, y no creo que la maestra cambie la obra solo para que eso pase.
—Eso no lo sabemos — argumenta Chris.
—Relajate Romeo — pide sacudiendolo por los hombros — Julieta no te va a matar.
Y sin querer evitarlo, vuelve a reír.
—Si Sandy se entera...
—Sandy ya lo sabe — lo interrumpe Ro, al ver que su amigo lo mira asustado, continúa su explicación — Recuerda que Iker está en el club de teatro, además el papel está a la vista de todo el público. Pero no te preocupes, son cosas de club, ¿qué puede hacerte Sandy?
—Tal vez la pregunta sería, ¿qué no puede hacerme Sandy? — lo corrige.
Roberto niega sonriendo mientras se sienta en una banca vacía.
—No la conoces, esa chica no te hará nada — cometa Beto.
—¿Ahora hablas de Sandy o de Valeria? — pregunta Chris parándose frente a él.
—De ambas — responde viendo detrás de Chris —. Y hablando de ella...
—¡Chris! — se escucha un grito detrás de él.
Christian voltea para descubrir quien gritó su nombre. Sandy lo saluda con la mano, mientras avanza rápidamente hacia él.
—Hola Chris, hola Beto — saluda llegando a ellos —. ¿Qué hacen? — pregunta sonriendo.
Roberto la observa con desconfianza.
—Solo hablamos — contesta Chris regresandole la sonrisa.
—Escuché que vas a ser Romeo, ¿es verdad? — pregunta sentándose junto a Beto.
—Sí. Es muy loco, yo ni siquiera quería ser Romeo — responde Chris.
—Es genial, ¡vas a ser el protagonista de la obra! — exclama emocionada.
—¿Dónde están Iker y Dafne? — pregunta de repente Ro.
—¿Ah? Ellos están en el salón, no querían salir, y yo no quería estar adentro — comenta sonriendo —. Vi que ustedes salieron y me dije, Sandy, deberías hacerles compañía.
—Claro, por que tu compañía es tan...
—Genial... Es genial que quieras pasar tiempo con nosotros — dice Christian interrumpiendo a su amigo.
—Sí, me gusta pasar tiempo con ustedes — responde ella.
—Como mucho lo haces — murmura Ro.
—¿Qué? — pregunta amablemente Sandy.
—Que... Bueno que lo haces — completa fingiendo sonreír.
—También venia por otra cosa — comenta jugando con un mechón de su cabello —. Hoy es viernes y con los chicos habíamos acordado comenzar el proyecto de historia, recuerden que somos equipo.
—Y como equipo, ¿no deberíamos discutir juntos el día para reunirnos? Yo no puedo hoy — asegura Beto.
—Bueno, es que lo hablamos ayer en el receso, los buscamos pero no los pudimos encontrar — contesta ella —. Además, estoy segura de que no tienes nada importante que hacer hoy, y solo no quieres ir porque te molesta que no los hayamos tomado en cuenta. Pero tu si irás, ¿no es así Chris? — finaliza viendo a Christian.
El chico le lanza una mirada a Roberto, quien solo se encoge de hombros sin saber que decir. Chris observa como lentamente se desmorona la esperanza que tenía de que su amigo le contara algo sobre Valeria, pero si de tarea se trata, debe ir. Aunque puede que la esperanza no se disuelva totalmente.
—¿A qué hora es? — pregunta Chris.
—Saliendo de la escuela, iremos a la biblioteca — informa Sandy.
La campana suena anunciando el final del receso. Roberto se coloca en pie y comienza a caminar a su salón, Christian y Sandy lo siguen.
—¿Entonces si irán? — pregunta para asegurarse.
—Si es por tarea, claro que voy — contesta Chris.
—Yo igual — dice Ro sin mucha emoción.
—¡Súper! — festeja Sandy — Los alcanzo en el aula, iré por una botella de agua.
Dicho esto sale corriendo con rumbo a la cafetería.
—No sé, pero para mí que esto fue muy extraño — comenta Roberto.
—Bueno, Sandy no siempre habla con nosotros, pero no es tan raro — dice Chris.
—Me atrevo a decir que ella fue la persona que nos espió ayer — susurra para que solo Chris lo escuche.
—¿De qué hablas Ro?
—Conclusiones mías — dice restándole importancia.
—¿Cuánto crees que escuchó? — cuestiona Chris siguiendo el hilo de la teoría.
—Tal vez algo sobre nuestra reunión de hoy. Aunque no me explico como nos encontró.
—Tal vez es bruja — bromea Chris.
Roberto sonríe negando con la cabeza. Al entrar a su salón, se encuentran con algo inesperado, Valeria está hablando con Iker y Dafne. Christian se detiene en la entrada y Roberto lo imita.
—¿Pero qué...? — comienza a decir.
—¡Christian! — lo saluda Iker al notar su presencia.
Valeria voltea hacia ellos y les sonríe.
Chris observa en cámara lenta como la chica camina hacia él, con su característica sonrisa.
—Christian, la maestra me pidió que te diera esto — dice la chica tendiéndole un papel.
Roberto le da un codazo a su amigo para que reaccione, ya que Valeria se quedó con el brazo extendido. Chris sonríe recibiendo el papel, un tanto apenado.
—Gracias — es lo único que se le ocurre decir.
Valeria sonríe y sale del salón. El silencio que había en el lugar se hace evidente, pero es interrumpido por la entrada del profesor. Todos se acomodan en sus asientos esperando a que el maestro hable.
—¿Qué acaba de pasar? — pregunta Chris en voz baja.
—No sé — contesta su amigo sin prestarle mucha atención escribiendo algo en su libreta.
Christian intenta descubrir que es lo que su amigo está escribiendo, pero no logra descifrarlo. Observa como Beto arranca la esquina de la hoja y la dobla por la mitad.
—Ya que Sandy arruinó los planes, debemos buscar otras medidas — susurra Ro entregándole el pedazo de papel.
Chris lo desdobla lentamente para descubrir su contenido, sonríe al leer lo que su amigo escribió, y guarda el papel para comenzar a prestar atención a su clase.
¡Hola multitud enfurecida!
Antes que todo... ¡Perdón por desaparecer!
Como deben saber, esta historia es parte de un reto, junto a mi grandiosa amiga Susan, y citando sus palabras, nos dimos un no merecido descanso.
¡Pero ya hemos vuelto!
Las publicaciones serán cada dos semanas, retando nuevamente nuestra responsabilidad. (No los culpo si no me creen)
Les invito a que se pasen por Un Trato de SusanLovers, y disfruten también de su hermosa historia, y otras que pueden encontrar por ahí.
Sin más, solo me resta decir... Nos leemos pronto
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