Las semanas pasaron de forma rápida hasta que llego el verano, Dipper y Bill continuaron viéndose el uno al otro día tras día en el bosque, a veces el pequeño ciervo dejaba su disfraz atrás y mostraba al cazador algunos lugares dentro del bosque encantado, al igual, a veces Bill llevaba a Dipper al pueblo para mostrarle algunos lugares que hacían sorprender al pequeño ciervo... le divertía ver como Dipper podía parecer un niño pequeño cuando veía algo que era un misterio para él.

Seguía sin entender del todo la edad del pequeño ciervo, pues en su forma real aparentaba no más de 12 años pero cuando era humano juraba que tenía no menos de 15 años, una vez le había preguntado y este le había dicho que su edad equivalía a 12 años ciervos aunque no entendía sobre su edad humana.

- Ustedes son raros - dijo Bill riendo mientras estaba recostado en el lomo del Dipper ciervo - digo... escogen sus nombres por las estrellas, escogen a su pareja por medio de un ritual una vez que cumplen los 13 años para toda su vida y esas extrañas marcas de nacimiento en sus cuerpos... sin ofender, ese cucharon realmente me gusta.

- Es la Osa Mayor, tonto - bufo Dipper mirando a Bill - ustedes los humanos también son raros... incluso creo que son más complicados que nosotros, además, tu también tienes una marca de nacimiento en la frente - dijo mientras quitaba el flequillo de la frente del cazador, este se quejo apartando la mano del ciervo - parece un ojo...

- Se puede decir que es como un tercer ojo - rió Bill - pero no todos los humanos las tenemos... no creo que seamos complicados.

- Digo... ¿Por qué tienen que usar dos nombres para identificarse entre ustedes? ¿No basta con llamarse solo con uno?

- El apellido te identifica con tu familia, por ejemplo... la familia Gleeful, tienen una granja que provee a todo el pueblo, los NortWest son comerciantes y casi los dueños del pueblo y también estamos mi hermano y yo, los Clayton, somos una familia de cazadores... creo que es más fácil identificarse de esta forma.

- No lo creo...

- ¿Ustedes como identifican a sus familiares?

- Olor... somos mitad animal, conocemos el olor de nuestra familia y de otras, es algo así como el apellido para ustedes los humanos...

- Entonces tu hermano también huele a pino ¿no?

- Sirio... No lo sé, nunca le he prestado atención a eso, trato de estar lo más lejos que puedo de mi hermano la mayor parte del tiempo, por eso soy aprendiz de Ford... aunque ahora tampoco paso mucho tiempo con Ford.

Ambos soltaron un suspiro mientras continuaban mirando las nubes, Bill sintió como Dipper susurraba algo justo cuando una luz lo envolvió y sintió como la suave capa de piel de ciervo que tenía bajo la cabeza se convertían en las piernas de un adolescente, se sentó en el pasto al mismo tiempo que lo hacía el castaño, giro los ojos mientras ayudaba a Dipper a ponerse en pie.

- Vamos... me prometiste que me llevarías a un lugar para humanos donde guardan todos sus manuscritos o algo por el estilo.

- Se llama biblioteca, seguro te encantara - rio Bill - en serio, Pino... tengo que enseñarte a ponerte de pie.

- Aun no me acostumbro a usar dos piernas... tienes muchas cosas que enseñarme, Bill.

- Oh... cuidado...

Sin previo aviso, Dipper se había tropezado siendo sostenido por Bill, se miraron él uno al otro con un leve sonrojo en las mejillas, como si algo los hubiera llamado, se acercaron el uno al otro lentamente hasta que sus labios se tocaron. Para Dipper ese era su primer beso, ese suave y maravilloso contacto entre ellos le parecio increíble, le gustaba como se sentía... en el bosque encantado un beso significaba algo mucho más valioso que para los humanos, pero a Dipper no le importaba entregarle la virginidad de sus labios a un humano, por otra parte, Bill no sabía que estaba haciendo, le gustaba el pequeño ciervo, pero ambos eran hombres... sin mencionar que eran de especies diferentes, estaba prohibido que estuvieran juntos y ese beso significaba mucho más para el pequeño ciervo que para el cazador, Bill lo sabía... Cuando se separaron, se miraron a los ojos otra vez, Dipper estaba más sonrojado que antes, Bill abrió la boca para decir algo pero un fuerte estruendo en todo el bosque los interrumpió. Dipper casi cae al suelo otra vez junto con Bill mientras miraba a la dirección del bosque encantado.

- Tengo que irme - susurro Dipper separándose de Bill - Sirio... ha hecho una convocatoria.

- ¿Una convocatoria? - pregunto el cazador curioso - ¿Cómo lo sabes?

- Ese estruendo, es parte del conaclamatum, el líder llama a todos los seres del bosque encantado porque ha habido algún problema grave... normalmente sucede cuando uno de nosotros ha quebrantado una de las mayores leyes de nuestro mundo... la ultima vez... desterraron a un hechicero por darle poderes a un humano, él se volvió loco y el humano fue... ejecutado...

- Dipper - le detuvo Bill sujetándolo de la mano - ¿vas a estar bien?

- No te preocupes - sonrió el pequeño ciervo - Sirio no dejaría que nada malo me sucediese...

Bill estaba a punto de agregar algo más, cuando se escucho una sirena en el pueblo, al parecer los habitantes del bosque encantado no eran los únicos que tenían una convocatoria.

- Yo también tengo que irme - susurro el cazador - sucedió algo en el pueblo...

- Promete una cosa... pase lo que pase, digan lo que digan tu y yo estaremos juntos - Dipper sujetaba ahora con fuerza la mano del cazador - Bill... prométeme que no me dejaras solo...

- Te lo prometo - susurro besando las manos del menor - Pino... estoy enamorado de ti.

- Creo que... yo también estoy enamorado de ti, Bill - susurro Dipper sonrojado, nuevamente ambos sintieron un estruendo por todo el bosque - Tengo que irme... Sirio debe de estar enfadado...

- Nos vemos, Dipper...

- Nos vemos, Bill.

Se volvieron a besar rápidamente antes de separarse, Dipper volvió a su forma de ciervo antes de entrar al bosque mientras corría hacía el claro donde se hacían las convocatorias, se encontró con varios seres del bosque corriendo hacía el claro, parecía que Sirio estaba realmente molesto esta vez, corrió lo más rápido que pudo tratando de llegar a la montaña antes de que su hermano volviera a llamar, casi cae cuando llego a donde su hermano se encontraba, junto a él se encontraban Stan y Ford, no parecían estar muy felices fuera lo que fuera que hubiera sucedido...

- Dipper - le llamo Sirio cuando vio a su hermano menor llegando entre la multitud - ¿Dónde rayos estabas? ¡Es peligroso estar lejos del valle y lo sabes!

- Si lo sé, pero nunca me ha pasado nada - gruño el menor, odiaba que su hermano le gritara de es forma - sabes que los humanos no pueden entrar aquí fácilmente... no deberías de preocuparte solo por un par de cazadores.

- Al parecer encontraron la forma de entrar - susurro Ford.

- ¿Qué?

- Fuimos traicionados - continuo Sirio mirando a su hermano menor al mismo tiempo que hablaba a todos los seres que se encontraban presentes - un grupo de sirenas les enseño la entrada a un grupo de humanos... fueron engañadas y cazadas por ellos.

- ¿¡Qué!? ¿¡Mabel y sus amigas esta bien!? - pregunto Dipper buscando a su amiga en el río pero no había ninguna en este.

- Tranquilo, Dipper - llamo Stan - Mabel esta bien, ella estaba en otro lado junto con sus amigas en esos momentos, fue otro grupo de sirenas que estaban en los límites del bosque encantado...

- Fue gracias a Wendy y su manada que no llegaron más adentro - completo Ford - aun así... tomaron muchas cosas del bosque... entre ellos... mataron a una de las sirenas que capturaron porque trato de defenderse.

- Por eso no están las sirenas - susurro Dipper mirando otra vez hacía el río - están preparando un funeral...

- No solo eso, Dipper - continuo Ford - sabes lo que significa derramar sangre de uno de nosotros en nuestro propio territorio

- Es una declaración de guerra...

- Los humanos son peligrosos - continuo hablando Sirio mirando a todos los habitantes del bosque encantado - Tenemos que aumentar nuestras defensas ¡Ningún maldito humano volverá a entrar a estos territorios! ¡Nunca más! ¡Cualquier humano que se atreva a pisar NUESTROS territorios será asesinado en ese mismo momento! ¡Si quieren una guerra, tendrán una guerra!

Dipper no pudo decir nada, simplemente estucho la ovación que los habitantes del bosque hacían, miro a todos lados, todos gritaban y aplaudían, tuvo que salir corriendo de aquel lugar a plena vista de su hermano y otros presentes, Ford simplemente vio como Dipper escapaba del lugar... sabía que para este seria mucho más difícil que para otros, estar enamorado de un humano no era fácil. Sirio también se fijo en como escapaba su hermano, indico a Stan que se ocupara del resto antes de seguir a su joven hermano hacía el inicio del bosque donde este había dejado de correr.

- Dipper ¿Sucede algo? - pregunto.

- No todos son iguales - susurro el ciervo mirando a su hermano - ¡No todos los humanos son iguales! ¡Hemos podido convivir con los cazadores que entran a este bosque por muchos años! ¿¡No podemos dejar pasar algo así!?

- Dipper, estamos hablando de una declaración de guerra.

- ¡Ellos no saben nada de nosotros igual que nosotros no sabemos nada de ellos! - grito - tu... tu no sabes las cosas maravillosas que los humanos tienen en donde ellos habitan, son seres interesantes, tal vez debamos...

- No, no lo sé y es mejor - le interrumpió casi a gritos - ¿Cómo puedes saberlo tu? ¡Eres solo un niño!

- ¡No soy un niño y lo sé porque yo he estado ahí! - volvió a gritar, miro a su hermano molesto - he estado visitando el pueblo humano junto con el cazador, Bill Clayton, y ¿Adivina qué? ¡Estoy enamorado del cazador! ¡De un humano! ¿¡Qué vas a hacer ahora al...!?

No lo había esperado, su mejilla comenzó a arder después de la cachetada que su hermano le había propinado, miro a Sirio asustado... era la primera vez que lo golpeaba en mucho tiempo y la mirada de su hermano no tenía descripción... era como la mirada del mismo demonio... por un segundo, Dipper temió por su propia seguridad... al mismo tiempo en que pensaba en la seguridad de Bill, había cometido un grave error.

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Mientras tanto, Bill y Will estaban a punto de darle una buena golpiza a los idiotas que estaban en la tarima junto con el alcalde del pueblo, el señor NorthWest parecía incluso sorprendido de lo que esos cazadores novatos - en palabras de Bill - tenían en sus manos, eran las escamas de una sirena y otras plantas que solo se conseguían cerca del rio de estas más allá del límite del bosque, todos los del pueblo se encontraban sorprendidos por lo que contaban los cazadores sobre lo que habían hecho dentro del bosque encantado y como tuvieron que salir de ahí por una jauría de hombres-lobo o algo parecido a eso (Will estaba seguro que eran zorros, pues no habían lobos en ese bosque).

- ¿¡Es que todos están mal de la cabeza!? - grito por fin Bill subiendo al escenario - ¿¡Tienen una maldita idea de lo que acaban de hacer!? ¡Acaban de declarar la guerra a los habitantes del bosque!

- Clayton, te recomiendo que bajes de esta tarima ahora mismo - ordeno el hombre mirando al cazador - ellos han hecho en un día lo que a ti y tu hermano les lleva semanas hacer...

- Hay un motivo por el cual Bill y yo nos tardamos tanto en esto - gruño Will - Nosotros conocemos las reglas del bosque encantado ¡Y una de ellas es que si llegas a matar a uno de sus habitantes en su territorio esto es una declaración de guerra!

- Bueno, si ellos quieren una guerra, no veo porque no aceptar - se burlo NorthWest sonriendo - Somos superiores a ellos, podemos ganarles con los ojos cerrados.

- No crea que porque ellos viven en un bosque somos mejores que ellos - gruño Will.

- Nosotros tenemos muchas cosas que ellos no tienen...

- Por lo menos ellos son más civilizados que nosotros - gruño Bill - vámonos, Will... no quiero ser parte de cualquier tontería que esos idiotas quieran comenzar...

- Te tengo malas noticias, Clayton - le detuvo NorthWest - Si ustedes no son parte de cualquier cosa que planeemos, ustedes serán los primeros en morir junto a las bestias de ese bosque... así que, sugiero, que comiencen viendo que propiedades tienen estas plantas y las escamas.

Los hermanos se miraron los unos a los otros, al final, Will acepto llevar aquellas plantas y escamas, las metio en una bolsa de cuero sin tocarlas como lo habían hecho esos cazadores, sabía que aquellas cosas era posible que fueran venenosas... es más, ellos sabían lo venenosas que eran las escamas de sirena por la dieta que estas llevaban, pero tal vez no era momento de decir nada... si esos tres cazadores idiotas se morían, pues mejor para ellos, tres idiotas menos en el pueblo.

- William - la voz del mayor de los Gleeful detuvo al de cabellos azulados a mitad del camino hacía la cabaña, Bill hizo señas a su hermano que él se adelantaría - William... no tienes porque hacer lo que ese idiota te dice.

- Ripper... sabes que tengo que hacerlo, las deudas de mi padre...

- Tu padre esta muerto - le detuvo Ripper Gleeful tomándole la mano - no tienes porque pagar por lo que él hizo, si ellos quieren morirse al entrar a un bosque del que ustedes dos conocen casi todo y ellos absolutamente nada además de las leyendas, que lo hagan ellos.

- Creo que tu eres el menos indicado para decirme eso - eran pocas las veces en las que el Clayton menor se ponía serio, Gleeful apenas había visto esa fase de Will un par de veces en su vida... y le daba miedo - ¡Te vas a casar con la hija de NorthWest por un trato que hicieron tus padres con él cuando ni siquiera tu o Rabel habían nacido para luego abandonarlos a ustedes dos cuando eran unos niños en este pueblo a su suerte con un hombre que es más avaricioso que cualquier otro! ¡Acaso no es lo mismo que yo estoy haciendo!

- Es diferente... yo...

- ¿¡En que sentido es diferente!? ¡Es lo mismo que Bill y yo estamos haciendo! ¡Estas pagando las deudas de tus padres con ese idiota con tu cuerpo y alma! ¡No eres diferente a mi, tu no entiendes lo mucho que yo te...!

- ¿Tu qué, William?

- Te amo... ¿¡Oíste!? - Will no lo soporto más, cayo de rodillas al suelo con los ojos llenos de lágrimas - estoy enamorado de ti... soy un idiota... puedes golpearme si quieres...

A pesar de lo que Will esperaba que este hiciera, que lo golpeara, que le gritara que era asqueroso o que simplemente se fuera dejándolo solo a mitad de aquel camino desierto... pero no fue así... sintió como el castaño le halaba del chaleco, levantando su rostro y estampando un beso en sus labios. Para Will, ese era su primer beso, era un simple contacto, dulce y suave, se separaron pronto, los ojos llorosos de Will se encontraron con los ojos azules de Ripper Gleeful quien le sonreía calidamente.

- Yo también estoy enamorado de ti, William - le susurro acariciando sus cabellos - al contrario de lo que crees... si acepté el compromiso con Pacifica fue por ti...

- ¿Por mi?

- NorthWest me tiene amenazado - gruño - Por culpa de mi tío sabe que estoy enamorado de ti y me dijo que... si no aceptaba casarme con su hija, te mataría a ti haciendo que pareciera un accidente... no quiero que nada te suceda, por eso acepté el compromiso.

- ¿Qué? - Will bajo la mirada recordando las amenazas que ese hombre le había hecho a Bill y a él durante toda su vida - ese hombre... desearía poder ser libre de él.

- Podemos serlo... podemos... escapar de este pueblo - Will miro sorprendido a Ripper por un segundo ¿Estaba diciendo lo que creía? - Esta noche, Rabel me hablo de una pequeña ciudad que están construyendo no muy lejos de aquí, Gravity Falls, pasando el bosque por el camino a un par de días a caballo...

- Pero... ¿Qué hay de Rabel y Bill? No puedo dejar a mi hermano solo...

- Rabel sabrá vérselas sola, lo ha hecho antes... en realidad... fue ella quien me sugirió que escapáramos, en cuanto a Bill... yo sugeriría que él también debería de escapar, puede hacerlo con nosotros si quieres... quedarse aquí es peligroso para cualquiera de nosotros ¿Qué dices?

- Yo... - Bajo la mirada pensando en las palabras de Gleeful, recordó las palabras que su madre le había dicho hacía mucho tiempo atrás "si quieres lograr algo... tendrás que lugar por ello" - esta bien, escapare contigo... hablare con mi hermano.

- Pasare a tu cabaña dentro de una hora con un par de caballos.

- Te estaré esperando.

Gleeful beso los labios de Will por ultima vez antes de despedirse y tomar caminos diferentes. Will se trato de apresurar para llegar a la cabaña para encontrar a su hermano, por su suerte, no tuvo que llegar tan lejos hasta que encontró a su hermano en medio del bosque mirando a la nada.

- Bill - le llamo tomándolo por el hombro - me alegra encontrarte... yo...

- Sé lo que piensas hacer - le interrumpió, se giro para verlo con una sonrisa - No te preocupes, estoy de acuerdo con lo que has decidido, hermano...

- ¿En serio? - pregunto sonriendo el menor - Gracias, Bill... deberías venir con nosotros, podríamos...

- Lastimosamente, no puedo ir con ustedes - le interrumpió provocando que la sonrisa del menor se borrase por completo - No me mires así, Will, voy a estar bien, pero aun hay algo que tengo que hacer aquí... no puedo irme aun... pero te prometo que nos volveremos a ver más pronto de lo que tú crees.

- ¿Estas seguro de esto, Bill?

- ¿Alguna vez me has visto dudar de lo que hago?

- No - Will se lanzo a los brazos de su hermano quien lo abrazo con cariño, escucho unos leves sollozos de su hermano, sabía que estaba llorando - te voy a extrañar tanto... te quiero, hermano.

- Y yo a ti, Will - beso rápidamente los cabellos de su hermano, desde que sus padres había muerto, solo se tenían el uno al otro, se querían como los hermanos que eran - prométeme que... tendrás cuidado y si ese idiota de Gleeful llega a tocarte un cabello, le darás una buena paliza de mi parte.

- Te lo prometo - susurro secando sus propias lágrimas con su manga - gracias... Bill.

- Vamos, apresúrate... aun tengo que hacer algo en el bosque, espero poder verte antes de que te vayas, sino - Bill saco de su bolsillo un antiguo reloj de bolsillo, al abrirlo se podía ver una fotografía de la familia Clayton, sus padres y ellos dos cuando Bill tenia solo 3 años y Will meses de nacido - quiero que te quedes con esto...

- Es el reloj de papá - susurro Will tomándolo en sus manos - pero... es tuyo... papá lo dejo especialmente para ti...

- Y ahora yo te lo doy a ti - sonrió Bill - es un regalo de bodas, tómalo.

- Muy gracioso - rió Will levemente sonrojado - gracias...

- Vamos, vete... aun tienes que preparar un equipaje.

Bill se despidió de su hermano empujándolo levemente en dirección a donde estaba su cabaña mientras él caminaba dentro del bosque, cuando se encontraba dentro de saco de su bolsillo aquel diamante rojo que aquel extraño ser le había dado hacía unos minutos atrás.

¿Qué había sucedido antes de que Will lo encontrara? Bill se había adelantado varios pasos pensando en lo que había sucedido, si las cosas ya estaban complicadas desde un principio aquella tontería solo lo complicaba mil veces más, desde que había comenzando a ser cazador había una regla que ni él ni su padre habían incumplido; NUNCA asesinar a un habitante del bosque encantado dentro del bosque... eso era una declaración de guerra y lo sabía.

- ¡Todo esto es una maldita...! - grito mientras tiraba una piedra a uno de los arbustos cercanos.

- Auch! - se quedo quieto al escuchar el quejido, tomo su arma listo para disparar a cualquiera que estuviera ahí escondido, aunque se sorprendió al ver que lo que salía del arbusto era un sol flotante de un solo ojo - oye, Tres ojos ten más cuidado, eso dolió y mucho.

- ¿qué eres? - pregunto bajando el arma, nunca había visto nada como esa cosa en el bosque.

- Ten más cuidado con tus pensamientos, Bill Clayton - regaño el ser - y, para tu información, soy un demonio de la luz, mi nombre es Soul Eclipse - extendió la mano frente al cazador que se cruzo de brazos mirando al demonio con una ceja levantada, Soul rió - imagine que no eras de los que confía tan fácil.

- Y ahora, dime... ¿Qué hace un demonio por este lugar?

- Muy buena pregunta, triángulo - se burlo Soul volando alrededor de Bill - Soy de los que les gusta "ayudar" si le dan algo bueno a cambio y veo que tienes un problema, ¿Quieres hablar de ello?

- No, no quiero.

Bill paso de largo del demonio, si había algo que sabía mejor que muchos otros idiotas de aquel lugar, era que no podía confiar en cualquier cosa que te ofreciera una buena oportunidad, la ultima vez que había hecho eso, se había usado una especie de liana para pasar el rio de las sirenas sin ahogarse y había terminado con un sarampión horrible por culpa de esa cosa... hacer un trato con ese demonio parecía ser lo mismo.

- Oh vamos - insistió el demonio deteniéndolo a unos pasos más lejos - déjame adivinar... tienes problemas porque tu novio es mitad ciervo, tu un humano y los idiotas del pueblo acaban de iniciar una guerra contra los habitantes del bosque encantado - Bill miro aun molesto al demonio, pero había llamado su atención - mira, te puedo hacer un pequeñísimo favor para remediar esto, claro, si tu quieres.

- Te escucho...

- Bien - rió el demonio apareciendo frente al cazador una especie de diamante rojo - este diamante puede convertir a tu pequeño ciervo en un humano a cambio de un pequeño precio, la sangre del jefe de los ciervos, ya sabes... el ser más poderoso y puro de ese bosque - Bill miro al demonio interesado, lo único que tenia que hacer era sacar un poco de sangre de Sirio, el hermano de Dipper - a cambio de esto, ustedes serán libres de estar juntos y felices para siempre. FIN.

- Bien, pero ¿Qué tendrás tu a cambió?

- Eres listo - volvió a reír Soul - bueno... no soy de los que dicen su precio a la primera.

- Entonces olvídalo, no haré un trato con una COSA que no me dice que es lo que quiere de mi... debe de haber algo que quieras a cambio y sé que no me gustara.

Bill había vuelto a tomar su camino cuando una pared de espinas se interpuso entre él y su camino, miro al demonio otra vez.

- Esta bien, te dire que es lo que quiero - dijo el demonio pasando su brazo por los hombros de Bill - lo único que quiero es la sangre de ese ciervo, del jefe de ese bosque, tengo mis razones para ello... así que no preguntes más.

- No me gustaría darte algo que, seguramente, tiene mucho poder...

- No eres tan tonto como creí que serias, triángulo, pero si... tienes razón, la sangre de ese ciervo tiene mucho poder, el poder suficiente para que esta guerra termine antes de que comience - Bill miro sorprendido al demonio - deberías estar agradecido, te estoy dando la oportunidad de que tu querido ciervo y tu vivan felices mientras yo destruyo a todos los idiotas de este pueblo y del bosque ¿no te parece justo?

- Bien, lo haré - acepto el trato tomando el diamante - pero, con una condición, quiero que mi hermano sobreviva también y no puedes tocar a Dipper...

- Oh... no debes preocuparte de tu hermano - Soul mostró a Bill una escena donde Ripper y Will se besaban y luego hablaban sobre escapar - ellos pretenden escaparan antes que tu, así que no debes preocuparte por tu hermano, pero, dejando eso de lado y antes de que tu hermanito nos encuentre ¿tenemos un trato?

- Trato hecho.

La mano de Soul se ilumino por unas llamas negras, Bill dudo por un segundo tomar la mano de este o no, al final tomo la mano del demonio antes de que este desapareciera dejando en la mano del cazador el diamante rojo... justo en ese momento sintió como su hermano menor le tomaba del hombro, guardo el diamante en uno de sus bolsillos antes de girar a su hermano con una sonrisa... no estaba tan seguro de lo que había hecho pero... por Dipper... haría lo que fuera para que ese amor prohibido que había entre ellos fuera posible, incluso un trato con un demonio.

.

.

.

Sirio soltó un suspiro mientras miraba el interior de aquella cueva otra vez, no podía creer lo que estaba haciendo... no quería hacerle daño a Dipper, tal vez lo mejor era dejarle ir, dejar que se quedara con ese cazador, hacer como si nada de eso hubiera sucedido, simplemente...

- ¿En serio dejaras que tu querido hermano menor se quede con el hijo del cazador que mato a tus padres? - escucho una voz que lo hizo saltar girándose - pensé que eras más inteligente que eso, Sirio... tenemos un trato.

- Esto no es lo correcto, Soul... Dipper es...

- A veces lo mejor no es hacer lo correcto, amigo mío - se burlo abrazando al ciervo por los hombros, este retrocedió un poco - vamos, te prometí que esos humanos no le harían nada a tu lindo hermanito si hacías lo que yo te dije...

- Estoy lastimando a Dipper... tal vez lo mejor sea...

- ¿Quieres que tu hermano muera en manos de ese cazador al igual como sus padres una vez lo hicieron? - Sirio se sobresalto ante esa pregunta - vamos... responde.

- No...

- Entonces ya sabes lo que tienes que hacer... simplemente quítate la vida al cazador y todo estará bien con tu lindo hermanito, Sirio... todo estará muy bien...

La risa de Soul hizo enfadar a Sirio... de alguna forma se estaba arrepintiendo del trato que había hecho con ese demonio, pero haría lo que fuera para proteger a su hermano menor, incluso un trato con un demonio.

Continuara...

Hola gente hermosa!!!

Wow... creo que este es el capitulo más algo que he escrito en este fic .-. pensé en dividirlo en dos partes un par de veces pero al final mejor lo deje completo, bueno... solo quedan dos capitulos más para el final de este arco y regresamos a lo normal ;D ¿alguien ya adivino porque Bill y Soul se odian? Dejeme decirles que muchos de ustedes estuvieron cerca pero nadie adivino XD y si... tiene algo que ver con Dipper.

Bueno, no tengo mucho que decir esta semana, el próximo capitulo hay lemon DippWill *inserte cara zukulenta* Sé que lo quieren... lo veo en sus ojos (?) jaja ok no... espero que les haya gustado el capitulo y nos leemos pronto!!!