Leyna - Preparense para el siguiente raromagedon, Criz ha publicado durante tres días seguidos!!!

Criz - Que linda, Leyna *suspira* Pues bien... a pesar de que a muchos les gusto el capitulo especial anterior, les tengo malas noticias... la continuación del drama con Will sera hasta dentro de... uno... dos... creo que dentro de unos siete capitulos más, así que... Disfruten este especial sobre el pasado de Bill y Ford!!! *Sale huyendo otra vez*

Leyna - Bueno... al parecer nos quedamos solos otra vez, quiero aclarar que hay una escena completamente citada del capitulo de Gravity Falls "The Last Mabelcorn", así que aclarar que todos sus derechos a su respectivo creador, Alex Hirsch y que la autora hace esto sin fines de lucro... así que... nos leemos abajo... 

Solo un trato

Para Bill era interesante trabajar con alguien como Stanford Pines, no lo negaría, una de sus partes favoritas de los humanos era esa curiosidad que los llevaban a tal punto de querer conocer todos los secretos del universo donde vivían... secretos que él tenia al alcance de sus manos, pero había algo en Stanford Pines que le llamaba la atención aun más que en otras personas con las que había hecho tratos antes, y era como este estaba decidido a conocer esos secretos a pesar de todo... no había sido tan difícil engañar a Stanford a pesar de que este era uno de los humanos más inteligentes con los que había trabajado en toda su existencia, bueno... eso también era otro punto a su favor. Claro, los humanos son débiles sacos de huesos y caen fácilmente ante cualquier cosa; sueño, hambre, sed, enfermedad... libido... Y es que esa ya era la tercera vez que se encontraba a Ford masturbándose en su estudio.

- Oye... seis dedos... sabes que puedo ayudarte con tu frustración sexual cuando quieras – se burlo Bill cuando el joven Ford de 30 años salía del baño secándose las manos – solo tengo que poseer un cuerpo por ahí y...

- Eso seria violación – respondio Ford mirando al demonio triangular – y no lo hare con cualquier persona que me pongas enfrente, Bill.

- Oh vamos... creo que es mejor que tener que encontrarte haciéndolo manualmente otra vez... tal vez incluso puedas llegar a disfrutarlo al igual que yo, solo piénsalo Sixer – insistió abrazando a Ford por los hombros – puedes elegir a quien quieras, yo la poseeré y no recordara nada de lo que hicieron... claro... eso significa que lo harás conmigo, así que espero que no te importe.

- No lo hare.

- Vere como te puedo hacer cambiar de opinión, Sixer.

Tras soltar una carcajada, Bill desaparecio del lugar dejando a Ford solo otra vez... este solto un suspiro mientras regresaba a su trabajo, tenia que hacer algo para detener su libido... era vergonzoso que ese demonio lo encontrara en esa situación por una cuarta vez. Mientras tanto, Bill estaba planeando una sorpresa para Ford, tal vez era verdad que había aceptado el encontrar a su Ágape hacia muchos años atrás... pero eso no significaba que no tenia derecho a buscar un Eros, siempre y cuando no usara su cuerpo real no había problema alguno, guardaría su cuerpo humano para su Ágape...

Y tenia la presa perfecta, se encontraba en otro lugar del mundo, uno que estaba seguro que Ford nunca conocería o esa persona conocería Gravity Falls, sonrío al ver a la mujer de cabellos castaños rizados y piel morena que estaba con el vestido rojo, era notorio que se encontraba ebria, a penas podía sostenerse sobre sus tacones de aguja y los tirantes de su vestido iban cayendo poco a poco no dejando mucho a la imaginación de los hombres que pasaban a su lado... Solto un suspiro tomando su forma humana, por lo menos le haría ese pequeño "regalo" a Ford... con el favor que ese fenómeno de seis dedos le haría el convertirlo en su Eros era algo que no le quitaba nada.

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Ford paso la tarde tratando de resolver algunas operaciones en su estudio, era una forma de olvidar lo que había pasado con Bill esa tarde, realmente era vergonzoso que alguien lo viera de esa forma... pero era hombre, tenia una suerte horrible con las mujeres y, admitámoslo, estaba necesitado... pero esas eran simples excusas que tenia, tal vez hubiera sido mejor aceptar el trato con Bill... ¿¡Qué estaba diciendo ahora!? Es decir, aceptar meterse con cualquier persona en el mundo, seguramente terminaría con más de alguna enfermedad por culpa de ese demonio idiota.

- Oye, sabes que te escucho – Ford se sobresalto al escuchar la voz de Bill, pero esta se escuchaba algo... extraña, se giro encontrándose con algo que nunca hubiera esperado – ¿Te gusta lo que vez, Sixer? La escogí especialmente para ti.

- Bill... en serio, NO tenias que hacerlo – gruño el científico – Saca a... tu nueva marioneta de aquí ahora mismo.

- Pero lo hice – rio el demonio dentro del cuerpo de la mujer morena con el vestido rojo, su cabello castaño rizado y rebelde, si no hubiera sido por los ojos amarillos que Ford conocía muy bien no hubiera reconocido al demonio – vamos... sabes que lo quieres y lo necesitas... Solo necesitas pedírmelo y te lo dare.

- No quiero saber que sucedería si dejara embarazada a esa mujer o si la encontrara en la calle algún día... por todos los cielos... ¡Demonio idiota! ¡No es tan fácil tener sexo con una desconocida como tu crees!

- De eso me ocupo yo, Sixer – paso los brazos por el cuello del científico – no te debes preocupar por un embarazo, esta mujer vive al otro lado del mundo y es casi imposible que la vuelvas a ver en tu vida además... estoy 100% seguro que no habrá otros problemas de los que te debas preocupar.

- ¿Por qué haces esto? – suspiro posando las manos en la cintura de la marioneta.

- Es un simple trato... te dare todo el placer que tu desees siempre que quieras.

- ¿Qué quieres a cambio?

- Pronto lo descubrirás, Sixer.

Bill beso a Ford metiendo la lengua en la boca del contrario mientras Ford comenzaba a deshacerse del provocativo vestido de la marioneta, claro, eran los labios de esa prostituta que había encontrado en algún lugar de ese mundo... no le importaba lo que le sucediera o lo que Ford hiciera con ella... incluso el sentir lo que los humanos llamaban "placer" estaba bien para él de vez en cuando.

Los meses fueron pasando y, mientras que Ford y Fiddleford trabajaban en lo que Ford llamaba "el trabajo de su vida", Bill seguía consiguiendo marionetas para tener sus encuentros sexuales con Ford cada vez más seguido... había notado que era mucho más placentero hacerlo con el cuerpo de un hombre, claro, sentía lastima por el pobre idiota al que poseía porque siempre terminaba con un fuerte (pero placentero) dolor de espalda y, por supuesto, a Ford parecía gustarle más estar con hombres que con mujeres.

Claro... había algo que ni Ford ni Bill habían tomado en cuenta cuando el demonio propuso aquel trato, para Bill, Ford era simplemente un Eros, un amante... pero Ford había comenzado a disfrutar de aquella relación que tenia con el demonio, incluso habían veces en las que pedía una marioneta con ciertas características, Bill había notado que a Ford le gustaban las personas de cabello oscuro.

- Me parece que te estas volviendo mejor en esto, Sixer – rio Bill sentándose en la cama, esta vez llevaba el cuerpo de un hombre joven de cabello negro algo largo y tez morena clara, no era la primera vez que usaba esa marioneta en realidad, Bill solto una risotada – A este tipo le volverá a doler la espalda cuando despierte mañana.

- Realmente eres masoquista cuando se trata del cuerpo de otra persona – gruño Ford colocándose las gafas nuevamente – Si tuvieras un cuerpo humano dudo que te reirías...

- Me gusta el dolor, pero ver a otros es más divertido – volvió a reírse mientras se sentaba al lado de Ford y lo besaba – tal vez tengas razón, Sixer, si fuera mi cuerpo no dejaría que te sobrepasaras tanto...

- Hablas como si realmente tuvieras un cuerpo humano – se burlo Ford.

- Lo tengo – aseguro Bill sonriendo – pero eso es otra historia.

- ¿Lo tienes? ¿Por qué nunca te he visto en él? O... acaso...

- Para tus caballos, Sixer – le detuvo Bill – mi cuerpo "humano" tiene un uso específico, y aunque esto suene demasiado cursi hasta para un humano, guardo lo que seria mi... "virginidad" para mi Ágape, así que ni lo pienses.

- ¿Ágape?

- Oh... es verdad, no te he dicho nada – se burlo Bill poniéndose de pie para vestir el cuerpo de la marioneta y devolverlo pronto – Son términos que se usan en el inframundo desde hace un tiempo, Platón describió tres tipos de "amor" en los humanos, Ágape, Filia y Eros... Yo actuó como tu Eros, es decir en quien tú buscas placer.

- Ya veo... ¿Qué hay del Ágape?

Bill simplemente sonrió sin darse cuenta de ello... tal vez su memoria de antes de convertirse en un demonio eran nulas, pero había algo que lo hacía sentir una extraña y cálida sensación en su interior cuando se tocaba el tema del Ágape, incluso la borrosa imagen de esa persona le hacía sentirse extraño... Ford noto como la actitud del demonio había cambiado rápidamente en ese momento.

- Esa es información que no te interesa, Sixer – sentencio Bill – y si me disculpas... tengo que regresar a este idiota a su apartamento en Toronto antes de que tenga que "despertar"...

- Oye, Bill – le llamo Ford antes de que este desapareciera – Tu... ¿Sabes quien es tu Ágape cuando lo ves?

- No... pero ten por seguro que no eres tu, eso también era parte del trato... yo te daría todo el placer que quisieras siempre y cuando no te enamorases de mi, Sixer... al parecer estas a punto de romper el trato.

Luego de la respuesta Bill chasqueo los dedos y desapareció dejando a Ford mirando a la nada... de alguna forma... esa respuesta tan directa le había hecho abrir los ojos, no había notado cuando había cambiado todo, como de tener simplemente sexo con Bill había pasado a ser algo diferente para él... no había notado cuando se había enamorado del demonio y esa respuesta había dado la primera puñalada para desatar el odio hacia este... la segunda la daría unos días después... cuando llego a conocer las verdaderas razones por la que construían el portal...

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Las pantallas del ordenador se habían roto, Dipper trato de coger el láser borra memorias y la apertura dimensional rápidamente hasta que Ford le sujeto por el chaleco elevándolo a su altura, Dipper trataba de luchar, las gafas de Ford continuaban nubladas.

- ¡Sueltame! – exclamo tratando de zafarse o golpear a Ford.

- Oye Amigo ya cálmate, calmado – pidió Ford arreglando sus gafas – mírame a los ojos, mira mis pupilas ¡Soy yo Dipper! – sonrío al mismo tiempo que el chico de 12 años dejaba de luchar y soltaba un suspiro – soy yo.

- Trate de borrarte la mente – Ford le bajo al suelo – lo lamento...

- Oh... tranquilo Dipper – le calmo Ford – además, mi mente no puede borrarse con nada ¿Lo olvidas? – dio un par de golpes en su cabeza haciendo un ruido metálico – si en realidad hubiera sido Bill, habrías estado genial. Debí ser más como tu cuando era joven...

Bajo la mirada recordando todos los engaños que había sufrido por parte de Bill... cada día se arrepentía más de haberse "enamorado" de ese demonio idiota que, simplemente, le uso... odiaba admitirlo, pero había llegado a conocer bastante "bien" a Bill como para saber de que estaba atrás de su sobrino en esos momentos, no sabía cuales eran las intensiones de Bill hacía Dipper... pero no dejaría que lo usara al igual como hizo con él...

- Dipper, fui un torpe al tratar de ocultarlo – claro... Dipper no tenia que conocer toda la historia – La razón por la que te preparo para los trucos de Bill es porque Bill me engaño a mi... fue el mayor error de mi vida...

Por lo menos... se saltaría la parte en donde Bill y él habían sido amantes... como se había convertido en el Eros de Bill... aunque ninguno de los dos sabía en ese momento que, a quien preparaba para no ser engañado por el demonio, era el Ágape de este mismo... y quien muy pronto le detendría...

FIN

Will - ¿Saben? Despues de leer esto me hace pensar que fue Bill quien uso a Ford y no al contrario...

Bill - Ambos nos usamos de alguna forma *suspira* Solo espero que Pino no lea esto o estoy perdido.

Leyna - Aunque a mi me parece tierno que hayas guardado tu virginidad para nuestro querido Dippy *corazoncitos... reacciona* Espera... ¿Eso significa que no solo Dipper perdio su virginidad esa noche? wow... no me sabía esa.

Bill - si... gracias por resaltar esa parte *gruñe* solo despidamos este capitulo de una vez por todas antes de que Pino o Estrella Fugaz aparezca y termine por armase otro lio...

Will - B-bien... espero que les haya gustado el capitulo, gracias por leer este especial y...

Leyna - no olviden dejar su sexy comentario que nos hace tan felices y tal vez logremos hacer que Bill vaya a sus casas y les haga un stripper en privado, claro, solo si dejan su sexy comentario, recuerden, es gratis y solo cuesta un par de minutos de sus hermosas vidas, gente hermosa.

Bill - y eso es todo por esta semana, nos leemos... ¡Espera! ¿¡Por qué me estas ofreciendo a mi!? *Leyna huye al bunquer con Criz* ¡Cuando te atrape me las pagaras todas!

Will - N-Nos leemos pronto *Se escucha que algo se rompe* Oh... ¡Bill! ¡No mates a Leyna! eh... re-recuerden... La realidad es una ilusión, el universo un holograma... compren oro... y... *se escucha un grito* ¡Bill! Y yo tengo que ayudar a Leyna... ¡Nos leemos pronto! ¡Adiós! *Sale corriendo*