Capítulo 64: Tranquilidad
- ¡No! – el muchacho lucho contra el agarre de Akutagawa con todas sus fuerzas
- No me muerdas– espeto este mirando como Atsushi abría la boca con sus dientes transformados – Ya no eres un niño, Jinko – termino por decirle
Aunque el tigre solo le gruño, tratando de morderlo antes de ser lanzado de regreso a la habitación de la que había escapado, fulminando con la mirada a Akutagawa
- 5 minutos mas no te hubieran matado – señalo el tigre, no necesitaba mucho tiempo para leer unas cuantas hojas
- Seguramente si – espeto Akutagawa con los puños apretados
Ambos se estaban mirando fijamente con enfado contenido, al menos hasta que Atsushi noto como el brazo de Akutagawa sangraba, por su ropa negra no se notaba del todo, pero seguramente su brazo no era lo único que estaba sangrando. Las heridas que se había hecho el día de ayer no se habían sanado por completo
Atsushi lo miro preocupado ¿Por qué no sanaban? Su sanación natural ya debería haberlas hecho desaparecer
- Estas b... – el muchacho rápidamente cerro la boca, mirando de reojo las cámaras, no sería bueno que supieran que de vez en cuando su relación no era mala, frustrado se sentó en el lugar en donde todo esto había comenzado – En estos momentos no me caes bien – susurro justo en el momento en el que el altavoz volvió a funcionar
- Supongo que sabes lo que pasara cuando termine esta sección – la voz monótona no parecía en lo más mínimo interesada en que Atsushi hubiera huido, casi como si fuera rutina
Atsushi dejo caer su cabeza contra la mesa, con fuerza, quedándose recostado sobre esta con un rostro lleno de tristeza, pero, termino por asentir
- No me... siento bien – espeto sin levantar su rostro de la mesa, era extraño, pero sentía que el mundo se le había venido encima, quedándose sin fuerzas para enfrentar todo lo que ocurría a su alrededor – Me duele mucho... la cabeza – Desde que había encontrado esos papeles había algo susurrándole que si se rendia al dolor le mostraría algo interesante – Y quiero ver a mi... hermano – termino por decir con los puños apretados y la mirada cristalizada
Atsushi sabia que solo se estaba quejando en vano, siendo sus quejas, más para él mismo que para los que estaban en la habitación
- Mientras no interfiera con las pruebas, no es de importancia tu dolor – le señalaron a través de altavoz
Atsushi comenzó a temblar, su cabeza si estaba doliendo mucho ¿Era otra visión? Normalmente podía ver cosas que iba a pasar a corto plazo, pero no duraban mas de 2 minutos, pero, cuando se sentía de ese modo, era porque vería algo a mas largo plazo. El susurro en su mente era cada vez mas fuerte, causando que se cubriera los oídos. Siendo distraído un segundo cuando Akutagawa le hizo un gesto imperceptible, sin más le lanzo un pañuelo
- Límpiate la nariz
El tigre lo miro confundido antes de notar que su nariz seguía sangrando, extrañado se limpió, encontrándose con la mirada de Akutagawa por un segundo, casi diciéndose que después hablarían.
Luego, Atsushi solo cerro sus ojos, esperando que su compañero de celda se marchara, mientras más rápido terminara esto más rápido podría regresar a su celda, bien, si es que lo liberaban en menos de una semana de su castigo
Aunque su espíritu apagado solo duro unos minutos, elevando su mirada hacia el espejo que ahora no mostraba a las personas tras él, sus manos empezaron a temblar. No era de extrañar, allí no había nadie
- ¿Quién morirá? – la pregunta llego tal como lo espero Atsushi, quien a pesar todo, lentamente quito su mirada de la ventana encontrándose con la mirada de Akutagawa con terror
- No quiero que este aquí – espeto con su mirada desenfocada, sus manos no paraban de temblar – Dejen que se vaya y responderé
- Responde a la pregunta – fue toda la respuesta que recibió
Akutagawa se encontró con la mirada de Atsushi, comprendiendo lo que estaba tratando de decir, aunque solo se encogió de hombros, casi diciéndole que no le importaba lo que iba suceder, logrando que el tigre comenzara a temblar en su puesto
- Ah...yo...no... - parecía estar en shock, la pregunta era más difícil que responder que otras veces – No... No...yo...no
Atsushi negó rápidamente con la cabeza, ¿Admitir su habilidad o dejar que lastimaran aún más a Akutagawa? ¿No llevaría ambas decisiones por un mal camino?
- No lo hagas – Atsushi se sobresaltó al escuchar la voz de Akutagawa, extrañamente parecía estar calmándolo
- Te van a disparar – susurro imperceptiblemente el muchacho no atreviéndose a mirarlo – Una y otra vez
Akutagawa se encogió de hombros, Atsushi casi pudo escucharlo decir "Como si eso me fuera a matar, Jinko" Aun así, la respiración del tigre se volvió desigual ¿Cómo podía decidir sobre la vida de alguien? Si respondía mal, dañarían fatalmente a Akutagawa, y si respondía bien...si respondían bien lo iban a destruir, no, no era un final tan malo, de todos modos, lo iban a castigar. Sintió como su nariz nuevamente comenzaba a sangrar, rápidamente lo cubrió con el pañuelo
- ¿Quién morirá? – repitieron dando a entender que le quedaba poco tiempo para responder
Atsushi levanto la mirada encontrándose de frente con la cámara
- Yo – espeto con seguridad, seguramente las personas tras al altavoz pensaron que nuevamente había contestado de manera errónea, incluso Akutagawa pensó por un segundo que le había hecho caso, al menos hasta que recordó que Atsushi era un idiota
Se escucharon tres disparos e incluso cuando se preparo para el impacto, no espero que Atsushi interpusiera cayendo contra Akutagawa por el impacto, este se apresuró a atraparlo
Rápidamente se creo un gran lio en la habitación detrás del altavoz, estaba prohibido lastimar a Atsushi, al menos de manera fatal. Y, por otro lado, estaba Akutagawa que no podía dejar de mirar al chico en sus brazos
- Estúpido - espeto, aunque sus manos temblaban al ver cómo la sangre de Atsushi comenzaba a empapar su ropa, sin poder evitarlo lo abrazo más cerca
- Un poco - admitió por primera vez el chico apoyando la cabeza contra Akutagawa con un suspiro de alivio – Al menos ahora...no me duele tanto... la cabeza
- Porque tienes tres disparos, Jinko – gruño Akutagawa demasiado enfadado como para reaccionar con normalidad – Yo no iba a morir por eso
Atsushi lo miro con el ceño fruncido ante eso
- Pero te iba a doler – espeto a la defensiva, sin preocuparse por el hecho de que su cuerpo estaba lastimado – además... necesito...dormir...un rato – sus ojos se cerraron agotados – Es...parte del plan
Con un suspiro aliviado se dejo llevar por lo que sea que su habilidad quisiera mostrarle. Akutagawa sabia que no iba a morir, los disparos no habían sido mortales, pero, eso no significaba que no estuviera enfadado, muy enfadado
Una de las personas tras el altavoz fue la primera en entrar con un botiquín de primeros auxilios, encontrándose con la mirada de Akutagawa
- Tú no ibas a morir, no es como si pudieras – se excusó por los disparos que le iban a dar a él – Nadie se espero que decidiera salvarte a ti – ante eso le sonrió – Pero fue una buena idea ¿Verdad? Parece ser que despertó su habilidad, Shibusawa-sama estará feliz
Las personas que llegaron después solo vieron como a esa persona se le hacia un agujero en el corazón, casi como si se hubiera quemado desde dentro.
Akutagawa no dijo nada al respecto y nadie se atrevió a cuestionarlo, simplemente espero a que atendieran a Atsushi, sin soltarlo, recordando lo que este le había mencionado hace algunos años
Atsushi se abrazó a sí mismo, no dejaba de temblar, no estaba sintiendo frío ni mucho menos miedo, tampoco podía decir que fuera dolor, sin embargo, no dejaba de escuchar y ver cosas que no quería. Era casi como si estuviera viendo muchos extractos de películas a toda velocidad, quedando solo ese sonido de muchas voces hablando al mismo tiempo.
Su habilidad había estado evolucionando sin parar desde que llegó a ese lugar, el dolor sin duda era un método efectivo para potenciarlo, pero ¿De que servía? Todos esos rostros que veía eran desconocidos y no podía hacer nada por salvarlos
Se cubrió a los oídos con fuerza en un vano intento de dejar de ver todo.
- No es la primera vez que te pasa eso, Jinko - escucho que le decían
Atsushi elevo un poco la vista, respirando un poco mejor cuando lo escucho hablar, casi como si su mente se pusiera en pausa. Desde que llegó a este lugar, había notado que Akutagawa era liberado en ciertas ocasiones, aunque, este nunca trataba de huir. Sospechaba que tenía algo que ver con qué obedeciera al pie de la letra las órdenes que le daban
- ¿No...tenías...una...misión? - le murmuró agotado, notando solo ese momento la venda que cubría el cuello de Akutagawa - ¿Qué...te paso? -
Para su sorpresa no camino hacia su celda, sino que se acercó dónde él, apoyándose de espaldas contra la reja
Atsushi dudo un segundo, pero con su cuerpo temblando se acercó a su lado, ninguno de los dos lo admitirán mucho, pero en el último tiempo, tendían a buscar la cercanía del otro
- ¿Por qué no les dices? - fue el susurro que Akutagawa dijo con frialdad, sobresaltando a Atsushi
- No sé...de que hablas - espeto en cambio apoyándose contra las rejas, de tal modo que, Akutagawa no logrará ver su rostro
Atsushi pensó que le dejaría de hablar, era extraño que fuera tan conversador, pero continuo en ello
- Antes de que me fuera... - Akutagawa estaba pensando en todo lo que le había sucedido - Me dijiste que "me dejara caer y estaría bien" - al principio pensó que eran palabras para irritarlo, pero, momentos antes que tratarán de degollarlo del todo, tuvo la opción de caer por un pequeño barranco, fue una casualidad, nadie hubiera preferido morir en esa caída, pero "se dejó caer" y termino en arbusto, solo con rasguño en su cuello
Atsushi sonrió ante eso
- ¿Akutagawa ya confía en mí? – espeto con una risita, era la primera vez que obedecía algo que le decía
- Cállate – espeto este sin negar lo que Atsushi le estaba diciendo – No es la primera vez que lo noto
Atsushi suspiro un poco aliviado al escucharlo, era extraño, pero su mente se calmaba cuando lo escuchaba hablar e incluso, parecía ser que su simple cercanía ayudaba a que todo quedara en un hermoso silencio
- ¿Desde cuando lo...sospechas? – Solo quería seguir escuchando su voz
Akutagawa pensó en ello
- Siempre has sido raro – termino por decir con una mueca
- No eres la mejor persona para decirme eso – Atsushi lo miro con el ceño fruncido, pero termino por sonreírle - ¿Entonces? – insistió
- Cuando mataron al cambiaformas – termino por decir, recordando como Atsushi había hecho todo lo posible por decirle que no comiera lo que estaba en su plato, fue extraño, incluso con el avanzado olfato de un cambiaforma nadie podía decir porque Atsushi se esforzaba tanto por detenerlo, sin embargo, el pasar hambre por tantas semanas no pudo detener chico, solo puede decir que tuvo una muerte horrible
Atsushi dejo de sonreír ante eso, sus ojos se tiñeron de una gran tristeza
- Jaja...fui un inútil – comento finalmente con sus manos temblando, aunque, poco a poco el dolor y los susurros lo dejaban en paz
- Siempre – comento de inmediato Akutagawa – Pero, al menos eres un inútil que trato de hacer algo - no como el que solo esperaba el tiempo para que los compañeros de celda que tenían fueran muriendo
Ya se había acostumbrado a que cada persona que trajeran muriera, así que optaba por ignorarlos, pero, desde un principio le había costado ignorar a tigre llorón que habían traído, el verlo provocaba una emocion desconocida que solo termino por irritarlo
- Gracias – susurro Atsushi con una gran sonrisa – No eres tan gruñón cuando te necesito
Akutagawa se sobresaltó ante eso, se sentía incomodo cerca de este chico, así que comenzó a alejarse, al menos hasta que Atsushi, con su mano temblando lo agarro por el brazo
- ¿Qué quier..? - aunque sus palabras interrumpidas al ver los ojos transformados de Atsushi, quien, por primera vez en mucho tiempo tenía una sincera sonrisa en su rostro
- Realmente no...hay nada – para sorpresa de Akutagawa con su otra mano le toco el rostro – Tampoco... escucho nada
Atsushi escaneo con su mirada cualquier rastro de aquellas sombras que lo agobiaban desde niño. Nunca había tenido la oportunidad de tocarlo de ese modo, así que solo tenia una cierta idea respecto a la inexistente sombra de Akutagawa
- ¿Por qué no hay nada? – espeto dejando ir la transformación de sus ojos, luego dirigió su mirada a su agarre sobre Akutagawa – Tampoco...me desagrada tocarte
Akutagawa hizo una mueca ante eso
- A veces... Eres muy raro, Jinko - comento con sinceridad , quitando la mano de Atsushi de su rostro, aunque permitió que lo siguiera agarrando del brazo
Atsushi sonrió, suspirando aliviado ante el silencio que había en su mente. Antes de hablar en un pequeño susurro, uno que Akutagawa solo pudo escuchar
- Yo...no puedo decirles - susurro encontrando - Será un desastre si ellos se enteran de que puedo hacer... Eso - Akutagawa pensó en ello, si, lo sería, quien sea que obtuviera esa habilidad sin duda ganaría la guerra si sabían dirigirla bien - Entonces...- el muchacho se mordió el labio antes volver a hablar - ¿Me delataras?
- No es mi asunto, Jinko, no tengo tanto tiempo como para andar hablando de la vida de los demás - espeto tratando de que Atsushi lo soltará, pero este inconscientemente se aferraba a su brazo casi con alivio
Aunque se detuvo cuando Atsushi le sonrió con una felicidad rara de ver en ese lugar
- A pesar de todo, eres genial, Akutagawa - espeto riéndose en voz baja, dejándolo ir casi con dolor - Mi habilidad es extraña, antes solo tenía que...dormir...y me mostraba cosas, pero desde que...- trago con fuerza pensando en todo lo que le habían hecho - Desde que...llegue aquí , se ha potenciado...puedo ver todo y no logro apagarlo...ni siquiera logro...enfocarme en una sola visión - Akutagawa no dijo nada pero parecía estar escuchándolo con atención - y bueno...Mi madre...me regaló un cuaderno - susurro luego de unos segundos - Escribía en ellos...las cosas que veía... Así...podía evitar colapsar
Akutagawa lo miro esperando el punto de todo eso
- Pero...- pareció algo extrañado de decirlo – Un día... me di cuenta – parecía avergonzado de decir lo siguiente - Tu voz oculta lo que veo...incluso tu toque... Por muy raro que suene - El tigre no lograba darle una explicación a eso ni a la falta de sombra de ese chico – Yo creo que...Si me sigues...hablando, dejara de ...doler
Akutagawa lo miro igual de extrañado, terminando por suspirar
- Cuando se pueda - no sería bueno demostrar algo parecido a la amistad entre ellos dos, más cuando las debilidades allí eran aprovechadas al máximo, en cambio, al siguiente día, hizo que le entregaran un cuaderno
Atsushi se levanto de golpe, respirando con dificultad, procesando por un segundo todo lo que había pasado. Miro las vendas que ahora lo cubrían antes de levantarse de la cama sin importarle cuanto daño le pudiera hacer
- Me voy – fue lo primero que dijo Atsushi luego de varias horas inconsciente, su voz sonaba ronca, no necesito evaluar donde estaba para notar que lo trajeron a la celda, mucho menos necesito mirar quien lo estaba vigilando – Y tu vienes conmigo – gruño molesto buscando algo debajo de su cama hasta dar con su libreta – No tengo mucho tiempo, van a venir por mí , así que escúchame
Akutagawa de inmediato lo miro con una mueca, no estaba encerrado en su celda, en cambio estaba apoyado en la reja de Atsushi vigilándolo, pero ante esas palabras se giro para mirarlo
- ¿Ah? ¿Qué te hace creer que puedes irte, estúpido? Tu plan ya empieza mal si me cuentas que vas a escapar – espeto aferrándose a los barrotes con ambas manos - ¿Y por que me incluyes en tus planes?
Atsushi lo miro con una mueca antes empezar a escribir en una hoja a toda prisa
- ¡De ninguno modo te voy a dejar atrás! ¡Ni siquiera te gusta estar aquí!– dijo gruñón arrancando la hoja en la que había escrito, su mirada se encontró con la Akutagawa – Lo vi, vi el modo de salir de aquí, pero solo tenemos esta oportunidad
- Jinko, no puedo – las palabras hicieron que Atsushi lo mirara fijamente
- Puedes - susurro sacando la mano para entregarle el papel arrugado, agarrando en ultimo segundo la mano de Akutagawa – Y si no es así, este es el ultimo día que te veré – termino por decir con una sonrisa temblorosa
El gesto temeroso no paso desapercibido para Akutagawa, su mano estaba fuertemente sujetada, pero no es como si pudiera quejarse, ya se había acostumbrado a la extraña costumbre de Jinko de buscar contacto físico
- ¿Me van a matar? – pregunto con una mueca por ese tono de voz que ya había reconocido como el de alguna visión de Atsushi
Este negó rápidamente con la cabeza, aferrándose con mas fuerza a la mano de Akutagawa
- A mí – termino por decir cerrando los ojos por todo lo que había visto
Ambos se sobresaltaron al escuchar como varios pasos venían a buscarlo, rápidamente soltó la mano de Akutagawa, dejando en ella el pedazo de papel, sonriéndole antes de comenzar a gritarle al mismo tiempo que lo empujaba lejos
- ¡Espero que te vayas al infierno! – le grito al mismo tiempo que algunos guardias llegaban a sujetarlo, esta vez no habían enviado personal normal, sino que, a personas capacitadas en la guerra, es decir, lo suficientemente fuertes como para frenar a Atsushi - ¡Suéltenme! ¡Te odio Akutagawa! ¡Siempre has sido un cobarde debilucho! – En momentos como esos agradecía haber escuchado a Chuuya maldecir
- ¿¡Ah?! – fácilmente fue irritado por Atsushi - ¡Mira quien viene a hablar, estúpido!
De un momento a otro, ambos fueron contenidos para que no empezaran sus típicas peleas, mas de una vez tenían que separarlos, así que no fue de extrañar la situación, al final terminaron por llevarse a Atsushi entre forcejeos de este, dejando a Akutagawa solo en esa ala
Espero unos minutos antes abrir la nota que le había dejado
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