El proceso de una celebración hecha por y para un Nakahara no era sencillo, se debía mostrar la etiqueta perfecta, decir las palabras adecuadas, vestir según el evento y, sobre todo, al menos aceptar una pieza de baile. Por supuesto, Chuuya se manejaba en cada uno de esos aspectos, no era de menos, después de todo era hijo de Kouyou, aun así, el pelirrojo tenía una mueca llena de molestia, si eso no demostraba su disgusto, solo había que observar su cola erizada

-Es mi cumpleaños – era el argumento que había estado utilizando el pelirrojo los últimos diez minutos, aunque puede que un poco más de tiempo, incluso mientras se vestía había estado discutiendo ese tema en particular

- Es tu cumpleaños – Kouyou en ningún momento había tratado de refutar algo que era cierto - Pero también es una celebración para la manada, celebraremos bien cuando volvamos a casa

- No hay modo de que baile – gruño el muchacho, queriendo quitarse la corbata del terno, pero, optando por mantenerla, solo podía discutir una cosa a la vez - ¿No hay otro modo?

- ¿Estás haciendo un berrinche, Nakahara Chuuya?

El muchacho se cruzo de brazos ante eso, las palabras utilizadas habían golpeado su ego

- Mamá, ¿No es mejor pelear alguna batalla para demostrar la unión que hay en la manada? – debatió este, tapando con sus manos sus orejas, no quería parecer que estaba haciendo un berrinche infantil y sus orejas erizadas por el disgusto no lo ayudaban a demostrar eso - ¿No se hacía eso antiguamente?

- Si, pero es muy coloquial – la bella mujer no estaba de acuerdo con algo tan poco elegante – Asi que, en los tiempos actuales, un baile es menos salvaje

- Somos animales, es mejor lo salvaje – se defendió el pelirrojo rindiéndose con controlar sus orejas

- No vas a ganar esto, cachorro, tuve que debatir en muchas reuniones para que dejaran de ensuciar todo con sangre, no dejare ir mi victoria aun si eres mi hijo – fue difícil convencer a todos, el trato final fue que al menos un vals en cada celebración y las batallas en luna llena para que aprovecharan el aumento de salvajismo que experimentaban – Si te hace sentir mejor, Chuuya, no eres el único que le disgusta el tener que bailar, casi toda la manada esta de tu lado

Chuuya la miro confundido

- Pero… si a nadie le gusta ¿Por qué lo siguen haciendo?

Kouyou sonrió brillantemente

- Porque yo así lo quiero, hijo mío – No fue fácil ganar el apoyo de Mori, pero Fukuzawa había sido una buena carta a jugar en su momento

- Eso es terriblemente injusto -murmuro por lo bajo el muchacho, en realidad, el problema para Chuuya no era el que tuviera que bailar con alguien al menos una canción de vals, el problema era que nadie nunca quería tocarlo. Una idea brillante nació en su mente ante ese pensamiento – Al menos ¿Puedo bailar con Atsushi? O ¿Con alguien de la familia? – su mirada inmediatamente se dirigió a su hermano, a Atsushi no le molestaría tocarlo

El tigre también estaba vestido de gala, aunque a diferencia del traje negro de Chuuya el de él era blanco, cosa que destacaba más mientras comía un pan dulce, que seguro había sacado de la gran la mesa llena de aperitivos que habían puesto en la improvisada sala de espera en la que estaban antes de partir al evento principal. Aunque, al escuchar al lobo dejo de comer el pan

. - Oh, yo… no tengo… que bailar… – comento el tigre un poco aliviado de ese hecho, era un peso menos el no tener que tocar a nadie

Chuuya lo miro confundido, ¿Las indicaciones para ambos sobre la celebración habían sido distintas? Eso explicaría por que su madre les hablo por separado

- ¿Por qué? – sus orejas cayeron con fuerza ante eso, no se suponía que su hermano estuviera lejos durante su cumpleaños.

- No tengo la edad para participar en eso – le sonrió avergonzado, comprendía un poco que su hermano no quisiera hacer eso, creció con él, y aun cuando la gente dejo de insultarlo a la cara por que recibirían la paliza de su vida, aun lo rechazaban bastante por su defecto

El pelirrojo lo miro confundido, antes de enfocar su mirada a Kouyou

- ¿No tiene la edad? – repitió las palabras de Atsushi a su madre

- Atsushi aún es muy joven para estar en el evento oficial - Los niños no deben estar en la misma área que los adultos, como el pelirrojo no creció en la manada no sabía ese pequeño detalle – Si tuvieras dos años menos no hubieras tenido que bailar, y, la idea de esto es que convivas con los demás, no puedes bailar con alguien de nuestra familia

Chuuya frunció el ceño, ¿Y si los demás no querían convivir con él? Sabia que no le faltarían el respeto, pero eso no significa que no fueran a tratar de evitarlo, sin mencionar que no sabía como iban a reaccionar cuando supieran que su compañero era un vampiro. Por otro lado…

- ¿Atsushi no estará en la fiesta? – se le hacia un poco extraño no tener a su hermano cerca en su cumpleaños

- Tiene que ir a la primera parte, toda la manada debe escuchar las noticias – Kouyou se acercó a Atsushi entregándole una servilleta para que se limpiara las migajas de pan, el tigre le sonrió agradecido, Kouyou le revolvió el cabello con cariño antes de volver a hablar con el pelirrojo – Pero, a la celebración posterior tendrá que quedarse con los más jóvenes

Chuuya suspiro, al menos su hermano no tendría que enfrentarse a los adultos de la manada, no quería verlo sufrir por lo que sea que pudiera percibir en el lugar.

- ¿No hay una cláusula para no bailar con desconocidos al tener un compañero? – Chuuya dijo esto con esperanza

- Si ambos compañeros estén de acuerdo con eso, supongo que si – Kouyou dijo esto basándose en la perspectiva de si alguien se acercara a pedirle un baile a Mori o Fukuzawa con el otro presente, los cambiantes eran algo… posesivos

- ¡Dazai no querría que bailara con alguien más! – Chuuya dijo esto determinado, no había modo de que dejara ir esta oportunidad

La pelirroja alzo una ceja ante eso

- Tu compañero estuvo de acuerdo con que crecieras a tu ritmo y sin presiones, al decir eso estuvo de acuerdo con que pasaras por todas las experiencias de tu edad y esto es una tradición en la familia, no hay modo de que no forme parte de una experiencia que tengas que vivir, cachorro

- Bien, me rindo – espeto al fin Chuuya, iba a bailar un maldito baile, pero, nadie iba a querer bailar con él de buena gana y no iba a estar rogando que alguien lo aceptara.

Kouyou sabia que su hijo no le diría sus verdaderos pensamientos, pero solo tuvo que mirar las orejas rojizas agachadas de manera triste

- Hey -la bella mujer le sonrió, agarrándolo con suavidad por ambas mejillas – Todo estará bien, te prometo que cuando regresemos a casa haremos un cumpleaños sin tantas etiquetas

El pelirrojo se encontró con los ojos llenos de cariño de su madre, no podía decepcionarla luego de todo el esfuerzo que había puesto para que todos estuvieran bien, además, solo sería una vez, no es como si eso lo fuera a dañar o algo

- No estaría mal… bailar…no es que me disguste – no estaba muy convencido de sus palabras, pero mantuvo una sonrisa para su madre- Quizás a Dazai le gusta bailar…

Kouyou hizo una imperceptible mueca, era difícil imaginar a ese vampiro bailando vals, seguro sabia hacerlo, pero, solo lo conocía en los campos de batalla. Aunque, tampoco hubiera imaginado que ese vampiro podría sonreír con alguna emocion buena

- Incluso si no le gustara y tu se lo pidieras, no podría negarse, cariño -comento en cambio Kouyou soltando las mejillas de Chuuya. Luego hablo para sus dos hijos – Esten listos en 10 minutos, iré a vigilar que los preparativos estén listos

Una vez que la puerta estuvo cerrada Chuuya se sentó al lado de Atsushi, miro con anhelo los dulces que habían puesto en la mesa, una gran variedad, de los cuales solo pudo probar jaleas y cosas sin chocolate, evitando de este modo que los medicamentos perdieran su efecto en su sistema

- ¿El pan dulce es rico? – pregunto sacando uno, dándole un mordisco para probar, aunque se arrepintió cuando el desabrido sabor se apoderaba de sus papilas gustativas, tosió dejando nuevamente el pan sobre la mesa – ¿Cómo te puedes estar comiendo esto? Sabe a café, no creo que sea pan dulce – miro confundido a Atsushi, su hermano siempre lo acompaño en el camino de lo dulce y ese pan sabia a café puro, sin una pisca de azúcar

El tigre le sonrió dando otro mordisco bajo la sorprendida mirada de su hermano

- Esta rico cuando te acostumbras – explico Atsushi sin perder su sonrisa, en realidad, en un principio no lo agarro por gusto, cuando tuvo que regresar a su forma humana y vestirse adecuadamente, noto como su madre se le acercaba para preguntarle algunas cosas sobre lo que pudo ocurrir la noche anterior, así que, tomo lo primero que encontró para mantener su boca ocupada para no decir más de lo necesario, resulto que fue ese amargo pan con sabor a café, y ahora, la verdad, le gustaba – Creo que será mi postre favorito desde ahora

Chuuya ladeo la cabeza ante eso, mirando como Atsushi comía feliz el pan amargo

- Eres muy extraño – comento el pelirrojo con una sonrisa agarrando un vasito de jalea de fresa  

Atsushi frunció el ceño dejando de morder su pan, antes de sonreír con broma hacia su hermano

- Seré extraño, pero al menos no tengo que bailar un vals

Chuuya suspiro ante ese recordatorio, jugando con el vaso de jalea en sus manos

- Si tengo la oportunidad correré lejos – bromeo el pelirrojo mirando hacia el suelo – Sera aburrido sin ti por ahí – le dio una sonrisa triste a Atsushi - ¿Crees que todo…salga bien?

El tigre miro a su hermano a los ojos, no quería poner nervioso a nadie, no luego de todo lo que ya había advertido

- Mientras mas lejos estemos de aquí, mejor – susurro dando otra mordida al pan amargo

El pelirrojo no le quito la mirada de encima ante esas palabras, Atsushi parecía muy triste de un momento a otro, así que palmeo con suavidad la espalda de su hermano

- Mañana estaremos fuera de aquí – consoló con una sonrisa emocionada, encontrándose con la mirada ansiosa de su hermano - Así que aguanta esta noche y yo podre aguantar ese maldito baile

Atsushi le regreso la sonrisa, su hermano era genial

- ¿Con quien bailaras? – pregunto regresando a comer el pan con sabor a café

El pelirrojo suspiro, pensando en ello, si iban a estar personas de su edad. Frunció el ceño ante eso, que desagradable pensar en ello, esperaba no encontrarse con nadie de la fatidica fiesta a la que asistió cuando cachorro

- Con Dazai – bromeo en cambio comiendo una cuchara de la jalea de fresa, pero, eso era imposible, realmente habían tentado su suerte al permanecer tan cerca el uno del otro hace unas horas, no quería sufrimiento innecesario para su compañero -Pero, como eso no es posible, solo te diré que aceptare a cualquiera que quiera -no iba a ser quisquilloso al respecto

Atsushi asintió ante eso, esperaba que no hubiera problemas

- ¿Estas nervioso? – pregunto finalmente el tigre jugando unos segundos con el pan en sus manos

Chuuya ladeo la cabeza ante eso

- ¿Nervioso?

Atsushi asintió, mirando de reojo a su hermano

-La manada hoy sabrá que la paz es porque… Chuuya tiene un compañero vampiro - No dijo que eso podría provocar rechazo o admiración hacia su hermano, mas de una respuesta en contra podría haber, pero, el pelirrojo lo comprendió sin necesidad de que las palabras fueran dichas

- No lo estoy – tenia una sonrisa suave mientras decía eso – Es un poco emocionante, no quiero seguir fingiendo que no tengo un compañero- Dazai, sin importar que fuera un vampiro, no era alguien que quisiera mantener en secreto, en realidad, tenerlo como compañero se sentía como un gran orgullo – Y, mientras las personas que me quieren no me rechacen, estaré bien

Atsushi le regreso la sonrisa mas calmado, mientras su hermano estuviera bien, él también lo estaría.

En esos momentos la puerta de la habitación se abrió con suavidad. Kouyou ingreso mirando entre Atsushi y Chuuya. Observo cada detalle, desde la vestimenta hasta si el pelirrojo podía presentar algún síntoma del resfriado momentáneamente controlado, cuando noto que todo estaba en orden, asintió satisfecha

- Se ven genial, cachorros – comento con una suave sonrisa, indicándoles con la mano que la siguieran, ya era hora de ir al evento principal de esta noche

Gracias por leerrrrrrrr y por todo el apoyo que siempre me dan ❤️❤️🦇🦇🦇🦇🦇🦇🐾🐾🐾🐾🐾