- ¡¡Ahí estas, niño!! – ese grito irritado se escuchó a lo lejos - ¡¿No te dije que esperaras!??!! ¡Es que quieres que te ponga un collar!

A los pocos minutos aparecieron Mori y un sujeto de lentes, este último estaba realmente enfadado, no dejaba de regañar al niño. Este en cambio, no parecía asustado del sujeto con lentes, pero si parecía aterrado por la presencia de los otros adultos

El niño miro con miedo a Fukuzawa y luego a Mori. Su llanto ya estaba pareciendo un ataque de pánico.

Mori suspiro, recordando lo que lo había llevado a esta situación

Flash back

Siempre habían dicho que Mori era un líder aterrador. Su reputación en el pasado aun no lo dejaba, pero no pudo evitar sorprenderse al ver al niño aterrado en la sala de reunión.

Lo observo por solo unos segundos y este comenzó a llorar en silencio.

Lo más rápido que había visto a alguien llorar

- Ese niño está llorando - Mori lo dijo sin tacto. La verdad estaba sorprendido ante la forma en que estaba reaccionando el pequeño tigre. Chuuya nunca había reaccionado así ante su presencia, quizás era porque eran familia

Las manos del pequeño tigre temblaban y no dejaba de moverse nervioso por la habitación. De los nervios sus orejas y cola se habían expuesto

- Ese niño siempre está llorando- Kunikida lo dijo como regaño hacia el tigre que de inmediato miro espantado a los dos adultos.

- ¡Lo siento! - su tono de voz salió de tono por los nervios. Hizo una reverencia apresurada.

Kunikida se arregló los lentes malhumorado.

- Siento las molestias que Atsushi está causando, aún está en entrenamiento

Mori observo al niño fijamente el cual al encontrarse con su mirada dio varios pasos hacia atrás asustado.

- No me mate - murmuro el niño aterrado

El pelinegro suspiro ante eso. La reunión no iba a avanzar con el niño en la habitación.

- Espérenme un segundo - comento Mori saliendo de la sala de reuniones.

Fue directo a la habitación de Chuuya.  Aunque para su sorpresa el niño no se encontraba ahí. Suspiro aliviado, así que Fukuzawa-dono lo había convencido de salir de la habitación.

Se asomo por la ventana del niño, encontrando de inmediato al pequeño. Este tenía una sonrisa mientras entrenaba con su compañero, sabía que si los dejaba a ambos juntos lograría que el cachorro se recuperara un poco y, que por, sobre todo, le contara sus preocupaciones a su compañero. No los había juntado antes debido al apretado horario de Fukuzawa, pero ahora veía que era una excelente idea

Cuando entraron volvió, encontró al serio Kunikida revolviendo el cabello al pequeño tigre que no había parado de llorar. Sus orejas y cola también ya se habían escondido

Aunque ante la presencia de Mori volvió a poner su cara profesional.

- Me gustaría dejar al niño con alguien más – comento Mori dirigiéndose directo al punto, quizás la mutua compañía de ambos niños no fuera del todo malo.

- ¿Me dejaran con alguien más? – el murmullo del niño resonó en la habitación, su rostro se había tornado cada vez más blanco. Parecía ser que esas palabras habían activado aún más el pánico en el niño.

Kunikida frunció el ceño al ver la reacción que conocía muy bien en el niño

- No te atrevas, Atsushi – le gruño Kunikida con seriedad

Pero ya era muy tarde, el niño había salido corriendo de la sala. Aunque, era una reacción normal al miedo que estaba sintiendo en su cuerpo. Nadie podría haberlo detenido

Fin flash back

- La espada… la espada…la espada – repetía este aún más asustado, mirando como pedazos de mármol continuaban cayendo

- ¡Eso te pasa por correr mientras los demás entrenan!

El niño miro con los ojos llenos de lágrimas a Kunikida. De golpe sus orejas y cola habían salido de nuevo

- ¿Por qué ese niño llora? – Chuuya se había acercado con curiosidad a los adultos, aunque sin poder ver al niño, los adultos le tapaban la vista al haberse colocado frente a Chuuya los cuales rodeaban al niño sin saber qué hacer con el

Mori miro de reojo a Chuuya antes de sonreírle. El cachorro lo miro sin comprender

- Chuuya-kun, te acabo de hacer una cita de juegos con este niño- Mori señalo al niño que no dejaba de llorar

El pelirrojo hizo una mueca de desagrado. No pudo evitar hacerla...la última vez que lo habían juntado con niños de su edad

- Tío...- su tono de negación era claro

Mori negó con la cabeza. Hasta parecido avergonzado por un segundo. Él también tenía claro lo que había pasado la última vez

- En realidad te estoy pidiendo un favor para la manada- aclaró con seriedad el pelinegro

Chuuya lo miro sorprendido

- ¿Un favor?  

Mori asintió con seriedad

- Tengo algunos asuntos que conversar y no puedo hacerlo con ese niño en la sala ¿Podrías enseñarle los alrededores? Distráelo un tiempo

Chuuya parecía reacio a convivir con alguien de nuevo. ¿Y si se burlaba como todos los demás?  

- ¿Es de nuestra manada? - susurro el cachorro curioso por la respuesta, si era de su manada, no iría por ningún motivo. Ya había tenido suficiente con los lobos de su manada

- Es un tigre - Anunció Mori con simpleza. Chuuya lo miro algo emocionado

- ¿Un tigre? - repitió algo más interesado en esta cita de juegos

- Uno blanco

Eso recuperó por completo la atención del niño. Había escuchado de Tigres blancos, pero eran tan extraños como atrapar una estrella. Se apresuro a mirar al niño, notando su cola y orejas blancas

- ¡Iré! Pero lo golpeare si se burla de mí - comento en cambio sin importarle que todos estuvieran escuchando

Mori asintió ante esa respuesta  

Kunikida miraba sorprendido al niño al lado de líder de la manada. Cabello pelirrojo...orejas y cola rojizas...

- Soy Doppo Kunikida, es un honor poder conocer al príncipe - comento con una pequeña reverencia.

- Me llamo Nakahara Chuuya, es un gusto señor - murmuro recordando sus modales – Pero no me llame príncipe – comento finalmente enfurruñado

Kunikida asintió ante eso para dirigir de inmediato su atención al aterrado Atsushi

- ¡Niño! ¡Saluda! – lo incorporo por la camisa

Atsushi no dejaba de temblar, pero hizo una reverencia

- ¡Hola! Soy Atsushi, y yo...yo ¡Hola! - dijo con su voz temblando por los nervios. La situación lo estaba superando

Se creo un silencio ante ese saludo tan informal. Él humo parecía estar saliendo de la cabeza de Kunikida, en cualquier momento iba a explotar.

Pero este silencio se detuvo cuando Chuuya se rio divertido. No se esperaba eso

- ¡Hola! - contestó algo más confiado ante la personalidad del niño

Mori miro sorprendido la reacción de su sobrino...Había pasado un tiempo desde que no lo escuchaba reírse tan feliz.

- ¿Porque trajo al príncipe, Mori- San? - pregunto Kunikida más calmado

- La reunión no avanzará si veo a ese niño llorar - lo dijo con un suspiro. Se sentía malvado viendo a ese niño tan aterrorizado

- Comprendo- Kunikida asintió en acuerdo a eso

- Nakajima-kun - el tigre miro nervioso a Mori - Chuuya te mostrará los lugares donde le gusta ir ¿Lo puedes acompañar?

El pequeño tigre trago con fuerza. Mirando al niño frente a él, estiro su mano. A simple vista ese gesto parecía un saludo, pero Kunikida vio las intenciones que se escondían detrás de eso

- Atsushi – Kunikida lo dijo en tono de advertencia al ver el gesto de su protegido.

El tigre dejo de estirar su mano hacia a Chuuya dándose cuenta de lo que estaba a punto de hacer. Pero antes de que pudieran detenerlo, el cachorro le agarro la mano pensando que era algún tipo de saludo

- Te mostrare mis juguetes, así que deja de llorar – le dijo Chuuya sonriente sin soltar la mano del niño. Luego miro a Fukuzawa – Luego seguimos tío

El nombrado asintió sin quejarse, de todos modos, ya habían terminado de entrenar

Atsushi había dejado de temblar, miraba sorprendido la mano del al pelirrojo. El miedo se había esfumado de su cuerpo. Poco a poco las lagrimas dejaron de recorrer su rostro.

- Iré – murmuro el tigre devolviendo el apretón de mano al pelirrojo.

Chuuya le sonrió, guiándolo dentro de la casa.

- No tienes que asustarte de mi familia – comento el pelirrojo con sinceridad – Se que pueden parecer aterradores, pero no te harían daño

- Color negro –susurro Atsushi como respuesta al lobo

- ¿Negro? ¿Te gusta ese color? – pregunto el pelirrojo confundido por la respuesta

El tigre negó con la cabeza. Aunque sonrió un poco

- Me gusta el amarillo – respondió en cambio, calmándose por cada paso que daba lejos del color negro

Iba a estar bien… el niño que sujetaba su mano no tenía un color feo

Chuuya, que no podía escuchar estos pensamientos, simplemente continúo parloteando sobre cualquier cosa.

Kunikida miro la situación extrañado, su protegido se había ido con un desconocido…eso no ocurría, no desde que Atsushi…

Sacudió la cabeza ante el desagradable recuerdo que surgió, mirando a los dos cambiantes que se habían quedado a su lado

 - Lo siento, no sale mucho – su tono de voz era el de alguien agotado

- ¿Es el niño del que habías informado hace algunos meses? – pregunto Fukuzawa cuando vio que los niños se habían alejado lo suficiente

- Si, está a mi cargo por un tiempo

Mori recordaba bien el caso de ese pequeño. Habían asesinado a toda su familia de una manera brutal, a tal punto que tuvieron que unir partes para reconocer los rostros. Él niño fue obligado a ver todo eso para luego ser secuestrado por un mes. Todo esto debido a su estatus de Tigre blanco, había algo especial con estos seres, podían ver los corazones de las personas, lo cual los hacía increíblemente solicitados. Pero al ser Atsushi solo un niño, sus dones no despertaban del todo por eso había sufrido golpizas interminables para que despertara sus dones para utilizarlo

- Chuuya lo mantendrá entretenido - comento con seriedad Mori. Esperaba que está fuera una buena idea

Kunikida hizo una mueca nerviosa. Se acomodó los lentes

- Quizás deba advertirle, Mori-san - dijo con seriedad Kunikida- Era algo que iba a conversar en la reunión

- ¿Qué cosa?

- El niño despertó parte de su habilidad - comento logrando que Mori se sorprendiera

- ¿No tiene solo 6 años?

- Lo que lo hicieron pasar lo llevo a despertarlos en parte… aún no sabe utilizarlos bien, pero, están activos

Mori miro con seriedad hacia la casa, ¿Por qué había estirado la mano voluntariamente hacia su sobrino?, bueno, fuera que lo que sea que haya visto en Chuuya lo motivo a confiar. Quizás era lo bueno de seguir siendo un niño.

Gracias por leer hermosas personas, apareció un personaje nuevo XD que puedo decir, me encanta Atsushi 💖💖💖

Por otro lado, ¿Cómo están? ¿Cómo está la cuarentena? ¿Cómo están sus clases online toxicas? (Odio las clases online, tengo pésima recepción de internet donde estoy y no puedo ver bien las clases, estoy que me uno al paro online (Cuando lo hagan)) 💖💖

En el prox cap sale Dazai, calmados

Cuídense mucho mucho mucho mucho

Nos vemos pronto
💖💖💖