Siendo las 2 de la tarde Perla salía del templo con una sensación de alegría. Peridot estaba sana y, aunque refunfuñó un poco, estaba trabajando en unos planos para una nave de escape de emergencia. Steven y Connie seguia jugando en la playa (causa de que Peridot no quisiera trabajar).

El peligro no había pasado pero sentía paz y también una necesidad de platicarselo a él. A ese extraño ser que hace relativamente poco había cambiado para ella. Al pensarlo ella sonreía y se sorprendía sonriendo y se sorprendía de sorprenderse y era la locura las emociones que la embargaban.

Se ruborizaba y seguía su camino al hospital. El día era hermoso, el sol brillaba y las nubes caminaban perezosas bajo el cielo azul.

Ella llegaría y le comentaría la batalla, el Steven con sus nacientes momentos románticos. No profundizaría en el terror que vivió Peridot, le preguntaría como se siente.

- y yo ¿como me siento? - se preguntó la blanca gema - cuando él salga del hospital, quizá...quizá caminemos por la playa y hablemos de nuestros sentimientos más abiertamente. ¿Que cosas estoy pensando? -

Dió la vuelta en una esquina y llegó al hospital, se acercó y la puerta se abrió automáticamente. Ella pasó.

- Greg y yo nos atraemos - pensó mientras andaba por el pasillo principal - pero, ¿que tanto? Yo nunca había sentido esto así de intenso; me marea, me emociona, me hace sentir cosas que nunca imaginé. Todo a partir de que él me salvó - giró hacia las habitaciones - y puedo, atreverme a seguir con esto. Quiero hacerlo. Pero ¿y él?. Creo que es hora de saberlo. -

Perla llegó hasta la puerta 07 tomó la perilla y giró.

Una señora de cabello blanco miraba espantada a una chica delgada que acababa de abrir la puerta del cuarto. La señora al parecer cuidaba a un hombre joven que dormía en la cama.

¿Se le ofrece algo señorita? - preguntó la señora.

Perla se quedó pasmada un momento, checó el número de la puerta y preguntó

- ¿no estaba aquí el señor Greg Universe? -

- No señorita, estamos aquí desde ayer - contestó la señora.

Perla cerró la puerta y con un paso rápido que no lograba disimular nerviosismo fue hasta la recepción. Una joven enfermera de piel morena y cabello castaño le preguntó

- ¿se le ofrece algo joven? -

- Si, estoy buscando al paciente del cuarto 07, Greg Universe, acabo de ir y ya no está -

- Déjeme revisó el historial - contestó amable la enfermera.

Perla sentía una sensación de inconformidad - ¿se habrá complicado su situación? ¿Y si se puso grave? - se ponía cada vez más nerviosa.

- aquí está, Greg Universe fue dado de alta -

- ¿Dado de alta? Pero...el estaba bastante lastimado -

- eso dice el historial señorita, si gusta puede preguntar al médico que llevaba su caso. La Dr. Maheswaran. Pero sólo le da información a familiares cercanos -

- ¿Donde la encuentro? - preguntó Perla.

Perla se dirigió a donde le indicó la enfermera
Encontró a la Dra. Sentada en un escritorio en una oficina.

- Dra. Maheswaran, buenas tardes - dijo Perla

- Buenas tardes, ¿que te trae por aquí Perla? -

- bueno, yo venía a ver a Greg pero el no está, me dicen que fue dado de alta, ¿es eso cierto? - preguntó la gema sin poder disimular su ansiedad.

- así es - respondió la dra. sin alterarse mucho - fue una gran sorpresa para todos. Él no debía salir de aquí en varios meses pero sus huesos y órganos estaban, pues, totalmente curados. Sinceramente no hay explicación. El sólo decía que su gran amor lo había curado -

Eso último tomo por sorpresa a Perla

- gran amor - pensó.

- bien doctora, eso era todo, gracias por su atención - se despidió Perla y procedió a salir.

Perla se dirigió con rapidez hacia el auto lavado de Greg, el tendría que estar allí. ¿Como se había recuperado tan pronto? Pensaba Perla. En el fondo de su corazón tenía una oculta alegría que, quizá había sido ella quien lo había curado, esa última noche en la que estuvieron juntos

- su gran amor- pensó.

Llegó hasta el auto lavado pero este estaba cerrado, se acercó a la puerta de entrada e iba a tocar pero escuchó unas voces que venían del interior.

- necesito hacer esto - era la voz de Greg - no importa lo que cueste -

- si yo te recomiendo, te será más barato, pero aún así es caro - dijo la voz de una mujer

- ¿quien es? - pensó Perla

Sonó nuevamente la voz de Greg -sé que es caro, tengo unos ahorros y los voy a usar y a ti, bueno te daré lo que me pides, pero necesitaré algo de tiempo para hacerme a la idea, es penoso ¿sabes? Accedo sólo por que se trata de ti y por qué nos conocemos bien -

Lo que Perla comenzó a sentir si lo conocía bien, un enojo en forma de bruma en el pecho, un escalofrío por los brazos. Eran celos. ¿Quien era esa mujer? ¿Que quería de Greg?

- perfecto - habló la mujer - entonces toma estos boletos, con esto te cobrarán 75% menos, sólo menciona mi nombre - y agregó de forma pícara - Y preparate sr. Universe, sabes que no te lo pediría si no necesitara tu cuerpo.

- jejeje - rió Greg - nadie se resiste a un Universe.

Perla corría a una velocidad impresionante hacia el templo, no quería escuchar más. Se sentía engañada, traicionada, usada
- ¡te odio Greg! - decía mientras se dirigía a la playa con lágrimas en los ojos

- ¡nunca debí dejarme llevar! ¡Nunca debí besarlo! - Perla sintió de vuelta su decepción de la vida, su soledad.

- me uso como un objeto, sólo jugo conmigo, ¡no le importó a quien besara! - Perla se dejó caer de espaldas en la arena. Había dejado el templo atrás. Ella miraba el cielo que comenzaba a oscurecerse, dos lágrimas cayeron de sus ojos llegando a la arena, comenzó a llorar abiertamente. Sollozaba y sentía un dolor en el pecho.

- ¿por que me hizo esto? ¿Se estaba vengando de lo que le hice en el pasado? - pensaba mientras secaba unas lágrimas. Perla estaba sufriendo el dolor de la traición amorosa, algo que nunca había sentido.

- me quiero morir - dijo en voz alta y se quedó quieta sin saber cuánto tiempo.

- ¿perla? - dijo una voz

Perla se levantó quedando sentada en la arena. Ya era casi de noche.

- Perla ¿estas bien? - entonces ella lo vió, era Greg con una sudadera manga larga, su pantalón de mezclilla y tenis.

- ¿Que haces aquí? - respondió ella cortante.

- bueno, vine a despedirme de Steven y de ustedes, me voy a ir unos meses. Y quería hablar contigo. - dijo el con un poco de pena

- ¿asi? ¿Y de que quieres hablar? - Perla se puso de pie y cruzo los brazos. Quedaron frente a frente separados como por dos metros.

Greg estaba bastante desconcertado, no esperaba encontrar esa actitud de ella, sobre todo después de los últimos encuentros.

- bueno, pues...de nosotros - dijo él con una mano en su nuca

Ella no soportó más

- eres un cínico - le dijo viéndolo con odio - si no fuera por que te debo la vida, te lastimaría con mi lanza por decir tantas tonterías. ¡No hay un nosotros! Sólo eres tú y tu ego -

Greg no creía lo que oía, no entendía que pasaba. Se puso serio

- Perla, ¿me puedes explicar que es lo que te pasa? ¿Por que me hablas así? ¿Te hice algo? -

- dímelo tú. Al final no te importa quién te bese ni quien te toque. ¡Y yo de estúpida cediendo a cosas que en realidad nunca me gustaron! ¡Creí en ti! - y gruesas lágrimas bajaron - ¡tu sabes lo delicada que soy para tocar a la gente y cedí a ti y me haces esto! - sollozo llevándose una mano al pecho

Greg cambio de actitud, entendió que lo que le pasara a Perla era algo muy fuerte aunque no supiera que era. Dio un paso hacia ella y extendió la mano

- Perla, calmate yo en verdad no se... -

¡NO ME TOQUES! ¡ME DAS ASCO! ¡Ve con esa mujer que si te permite todo sin problemas! ¡Que no es delicada y hace lo que tu quieres! - sollozo y sacó su lanza, la agitó y el retrocedió

- ¡¿de que mujer estas hablando?!Yo no he tenido ni tengo a otra mujer. Yo, te quiero a ti -

¡MENTIRA! - y siguió agitando su lanza - ¡Te has acostado con ella! Esa...esa...¡que necesita tu cuerpo!

Greg se quedó quieto - me espiaste - dijo - escuchaste lo que hablé esta tarde y ahora crees que ando con alguien más...y encima crees que te bese y te trate bien sólo por el gusto y el placer de hacerlo ¿cierto?

- hasta que lo reconoces - dijo la blanca con mirada fuerte, parada bien derecha, viéndolo.

Las olas rugían, el viento aumento el oleaje de golpe. La noche era casi toda. El silencio dolía.

- Si eso crees de mi, no tengo más que hacer. Sólo venía a despedirme por que me voy de 4 a 6 meses, todo depende.

- no me importa, por mi muerete - Perla estaba muy dolida.

Greg suspiro - voy a un entrenamiento para mejorarme físicamente y obtener algunas aptitudes que necesito. Espero al volver serles de ayuda -

- ya te dije, sólo estorbarás - dijo Perla viéndolo esta vez altivamente, ella desapareció su lanza.

- si es todo largate - sentenció la blanca.

- ya me voy Perla - Greg dió media vuelta y comenzó a caminar con la cabeza gacha y su pecho lleno de una inmensa decepción -

- y llévate a tu mujercita, no se vaya a morir sin ti - dijo con una carga fuerte de veneno Perla.

- Vidalia no va a venir - dijo Greg deteniéndose un momento - ella ya tomó ese campamento - y siguió caminando.

- ¿Vidalia? - Perla abrió los ojos desmesuradamente - ella...ella esta casada. - miro al hombre y agregó - ¿Te metes con mujeres casadas Greg? - he hizo una mueca.

- Allí estás - dijo Greg quien dio la vuelta para verla - la antigua Perla. Al final no somos diferentes de hace 25 años - volvió a dar la vuelta, subió a su camioneta y se fue. Su mirada era de un hombre ausente y ella lo notó.

Se quedo parada un momento mientras el viento movía la estola de su moño en la espalda. Luego se hecho a correr.

-----CASA DE VIDALIA----

TOC TOC TOC

Sonó la puerta de la casa.

- Ya voooy - gritó una mujer de cabello color crema, en la sala cenaba un joven delgado con audífonos puestos y un niño extraño que movía su pasta con el dedo.

Vidalia abrió la puerta sin quitar el seguro con cadena y se asomó.

- Que deseas Perla - preguntó

Quisiera, hablar contigo de algo urgente - dijo Perla. Vidalia hizo una mueca, quitó el seguro con candado, salió y cerró la puerta.

- Es por lo de Greg ¿verdad? Yo le dije que era una tontería, que no iba a funcionar -

- entonces es verdad - pensó Perla volviendo a sentir furia y decepción. Vidalia continuó

- le dije que está grande para el entrenamiento que quiere, va a quedar inválido cuando termine, pero estaba decidido a hacerlo. Quiere convertirse en guerrillero cuando todos aquí sabemos que el es un artista, no un luchador. Técnicamente me suplicó que le diera los boletos de descuento, incluso le pedí algo vergonzoso y accedió -

Perla respiro hondo, sus ojos se abrieron enormes y tembló.

- que...fue lo que le pediste -

Vidalia se rió un poco y dijo - él es penoso, y desde hace años tengo un proyecto en mente, quiero pintar un cuadro con el Greg joven y el Greg actual en pantalón de mezclilla descalzo y sin camisa pero él siempre se negó, le da pena posar sin camisa. Debe de querer mucho este entrenamiento como para acceder a algo que le vengo pidiendo hace años.

Perla se llevó una mano a la boca.

- ¿te pasa algo? - preguntó Vidalia

- no, gracias...nos vemos luego - y Perla hecho a correr.

- Gemas locas - dijo Vidalia y se metió a su casa.

Perla corria por la ciudad rumbo al auto lavado

- aún puedo alcanzarlo - se decía a si misma - tengo que alcanzarlo -

Llegó al auto lavado pero la van ya no estaba allí, comenzó a desesperarse. Respiro, se concentró y logró oír un vehículo a algunas cuadras y corrió. Comenzó a brincar sobre las casas y divisó a lo lejos la Van que ya salía de la ciudad.

- te voy a alcanzar - dijo y se dirigió a su objetivo

- ¡Greeeg! - gritaba Perla mientras brincaba de casa en casa - ¡Greeg espera! -

Perla llegó a la carretera y aceleró pero era por demás, el vehículo una vez en carretera comenzó a ganar terreno y la fue dejada atrás

- no - pensaba angustiada Perla - ¡noo! -

Entonces divisó una curva y corto camino por el monte ganando ventaja. Metió toda su velocidad para salir a carretera antes de que pasará la Van.

Perla salió justo enfrente de la Van, era su única oportunidad. Greg la vió y giró el volante sin lograr librarla completamente; impactó a la gema con la esquina de la camioneta.

Perla salió disparada hacia el monte y Greg se salió de la carretera. Una vez que el vehículo se detuvo, se bajó y corrió rápidamente. Al llegar con ella la tomó en sus brazos y la llevo a la van preocupado.

La colocó en la parte de atrás y prendió la luz de la van. Greg revisó su gema y estaba bien. Suspiro.

Perla abrió los ojos.

- ¡que diablos te pasa! ¡Estas loca o que! ¡Pude haberte matado! - Gritó Greg bastante afectado y con unas perlitas de agua en sus ojos.

Ella lo abrazo del dorso, ambos estaban sentados en la parte de atrás de la camioneta.

- perdoname - dijo mientras sollozaba - soy una tonta.

- ¿como te enteraste de la verdad? -dijo él serio.

- fui con Vidalia - dijo Perla sin soltarlo.

- Perla, creiste que andaba con una mujer casada y que, andando con ella me había propasado contigo. ¿De verdad crees que soy así? -

- Yo escuché...-

- Las charlas ajenas no se escuchan o se escuchan bien - la interrumpió

- y ahora casi te mato, dime, que le hubiera dicho a Steven, que le hubiera dicho a las chicas,

dime Perla, ¿que hubiera hecho yo, sin ti?

Ella alzó la mirada, lo vió acarició su cabello y puso su cabeza a la altura de la de Greg.

- Siento muchísimo todas las cosas horribles que dije - dijo Perla bajando la mirada

- también yo fui tonto, debí decirte que pasaba - dijo Greg, luego sintió el aroma de Perla, suave, dulce, como a flores recién cortadas. Inhaló suave y profundamente.

- ¿Te he dicho que me encanta como hueles? - dijo él.

Luego la besó.

El sintió como temblaba la blanca gema, la abrazó y la pegó a su cuerpo. Paso su mano por su hombro y su brazo, su piel era suave y tersa.

Ella suspiro al sentir la mano de Greg y cerró los ojos, luego Greg le beso la mejilla, debajo de la oreja y por fin el cuello. Ella se estremeció con ese contacto alzando la cabeza y colocando una mano en la cabeza de Greg empujándolo hacia ella. Él acarició su espalda desde su nuca hasta su moño, ella arqueo la espalda al contacto,

- Ah...Greg -

y lo abrazo volviéndolo a besar con furia en la boca, la naciente pasión de la blanca comenzaba a desbordarse. Sólo pensaba en lo que sentía y lo muy bien que se sentía.

El le beso nuevamente el cuello, bajó su mano y acarició desde su rodilla hasta su muslo, ella gimió y se estremeció. Luego, Perla le dijo al oído

- Greg, puedes...puedes hacerlo...-

Y él, jaló el olan del moño en la espalda de la gema blanca, deshaciéndolo totalmente, aflojando de esta manera, su celeste blusa.

----------------------------------------------

El capítulo más largo que he escrito.

Se pusieron tensas las cosas entre Perla y Greg pero el sexo de reconciliación es el mejor.

Se cierra el primer arco con este cap. En el próximo se enterarán de por qué los estoy separando en dos.

Saludos desde coahuila chicos y chicas.

Bye

....¿como? ¿Que si va haber un capítulo que describa que pasó entre el rockero y la gema elegante? No lo sé, son muy jovenes. XD

Saludos.