"Es un arma, es el arma más poderosa de todas"

Luego venía un beso. Ella no pudo ver que tan profundo era pero si pudo ver la carga emocional que llevaba. Podía significar mucho, podía significar nada; pero para ella era un golpe en el estómago, y una sensación ácida en el pecho.

Connie volvió a girarse en su cama.

- Técnicamente le pidió el beso - pensaba Connie. Y él, por estar en lo que parecía un lecho de muerte se lo dió. Debe ser sólo eso.

Ella sabía que no era tan simple. Sólo quería convencerse para poder dormir.

Connie nunca tuvo dudas de su relación con Steven, que si bien sólo eran amigos, ella sabía que no era indiferente al chico.

- Yo le gusto, y el a mí - pensaba. Volvió a girar en la cama, se puso una almohada en la cabeza.

El baile en su cumpleaños. Los momentos en la playa. Los libros y los juegos. Stevonnie misma, era la representación de sus sentimientos.

Excepto esta última vez. Esta vez había sido diferente. Si bien ella estaba fuera de sincronía pensando en el beso que había visto, pudo sentir una baja en los sentimientos de Steven. Ya no fue igual, y eso le asustaba.

- Me esta dejando de querer - pensó tristemente Connie y en sus ojos aparecieron dos perlitas de agua.

- Me está olvidando...por ella - sollozó y abrazó la almohada.

Connie era una chica fuerte e inteligente, pero se enfrentaba a algo que la superaba. No sabía nada de la naturaleza de Steven, no sabía si en realidad crecería o no, y más importante aún... ¿Steven era mortal? O Inmortal como las gemas.

- Yo soy solo una humana. Ella es una gema...es obvio que elegirá a una gema - una lágrima cayó pero se la limpio con la mano y se puso seria,

- seguiré adelante como siempre, veremos que nos depara el futuro - pensó recobrando su valor - sólo me alejaré de Steven si él me lo pidiera. Al fin de cuentas,

Soy su guardián. -

-----------Casa del Templo-----------

Steven veía la gema de Peridot. Esta ya estaba fría al tacto, así que como es su costumbre, la puso en un pequeño cojín y bajo una lámpara.

Era ya bastante entrada la noche, desde la ventana de su cuarto podía ver el mar negro sólo partido por un haz de luz que la luna, inmensa en el cielo, dejaba caer sobre las aguas inquietas.

- Aún despierto Steven - preguntó Perla que llegaba desde su cuarto y subía las escaleras.

- no logro dormir, pasaron muchas cosas hoy - respondió Steven.

Perla llegó y se sentó en la cama viendo la gema de Peridot, luego lo vio a él.

- Steven, ¿quieres hablar de algo? - preguntó Perla con voz suave y dulce.

El chico seguía viendo la ventana, suspiro y preguntó,

- ¿Peridot estará bien? -

- no lo sé, sólo suponemos que si por que su gema parece estar bien. Tendremos que esperar a que se regenere y confiar en que estará bien - respondió la blanca siendo lo más sincera posible.

Perla lo miraba, él aún veía al mar desde la ventana.

- Steven - el chico volteo a ver a Perla con cara triste, ella prosiguió,

- Hoy te vi besar a dos chicas, te estás haciendo popular - ella habló como una hermana mayor condescendiente, sin nada de burla. Steven agacho la cabeza.

- Eso no volverá a pasar - dijo el joven de cabello crespo.

- Nadie más saldrá lastimado por mi culpa - agregó.

- Tal vez no deba meterme, pero a mi me da la impresión de que ambas van a querer besarte de nuevo. ¿Acaso tu no quieres repetir un beso...con alguna de ellas? -

- Considero que hay cosas más importante que pensar en eso ahora. Creo que hay que mantener la armonía entre nosotros y no quiero una disputa que deje tres heridos. Por ahora Perla, sólo habrá amistad - respondió Steven.

Perla se admiró de la madures que estaba mostrando Steven, pero sentía que eso no era todo,

- Estoy de acuerdo que la primicia es acabar con esta plaga de gemas monstruo, aún hay mucho trabajo por hacer, pero - Perla lo miró intensamente - de una vez te digo que, tomes o no una decisión, alguien va salir lastimado igual. Por que por lo que vi y oí hoy, hay sentimientos muy fuertes involucrados -

- lo entiendo - dijo Steven mientras iba a su cama a recostarse - lo tomaré en cuenta. No quiero lastimar a nadie -

- mi Steven - se acercó Perla, lo arropó y le beso la frente - buenas noches mi pequeño.

- ya no soy tan pequeño -

- para mi siempre lo serás - Dijo Perla y bajó a la sala.

- No lastimaré a nadie más - pensó Steven - es hora de ser serio, adulto, firme, a si tenga que cambiar mucho, mantendré mi distancia con ellas - bostezo profundamente - Steven el serio parte...3... - y se quedó dormido.

----MAÑANA SIGUIENTE, 7:35 am----

Perla despertó de golpe.

- Increíble, me quedé dormida - dijo, se talló los ojos y bostezó, no era su costumbre - debo estar más cansada de lo que creí - se levantó, se estiró y fue hasta el portal para ir un momento a su cuarto, la siguiente vigilancia para la gema de Peridot era de Garnet, Amatista había vigilado el perímetro esa noche. Desde abajo vio el cabello de Steven, aún dormido. Se metió a su cuarto tranquila.

El joven Steven dormía inquieto. Estaba soñando que una gato galleta que se iba a comer se hacía de su tamaño y lo estaba aplastando, cada vez más pesada, más y más...

- ¡no puedo respirar! - pensaba el Steven del sueño - que hago ¡que hago! - entonces se le ocurrió una deliciosa idea que se manifestó con un foco arriba de su cabeza,

- Bien, todo sea por salvar mi vida, ¡llegó tu fin gato galleta gigante! - Steven abrió enorme la boca y...mordió la gato galleta dispuesto a comersela toda...-

¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAH! - Chillo una voz al lado de Steven, el cual se despertó alarmado y asustado con un delgado brazo en su boca que estaba pegado a un cuerpo verde a su lado...

Steven vió a su compañera de cama y gritó soltando el brazo,

¡AAAAAAAAAAH!

A su lado estaba Peridot quien se sobaba el brazo mordido,

- ¡¿Por que me muerdes?! ¡¿Acaso me quieres comer tu también?! -

- Pe..Pe..Pe..Peridot - término de decir un muy asustado Steven - ¿estas bien? -

- ¡No! ¡Me duele el brazo no ves! - se quejó Peridot.

- ¿Que... haces en mi cama? - preguntó Steven, ambos estaban tapados con la misma sábana.

- aaaam, no sé, no recuerdo a que hora me regeneré -

- ¡Que es lo que está pasando! - gritó Garnet llevando con sus puños, Perla y Amatista igual llegaron listas para el combate, pero lo que vieron fue a dos sonrojados chicos tapados hasta la mitad.

Las tres gemas se quedaron perplejas. Luego, Garnet estalló en risas. Tocó el hombro de Perla y dijo

- Peridot esta bien, ese peligro pasó -

- ¡claro que no estoy bien! - dijo la verde - ¡Steven me mordió! - alzó el brazo mostrando unas marcas de dientes.

- Como si eso no te gustara - dijo Garnet - por cierto, estas libre de tu promesa, has lo que debas hacer -

Peridot se sonrojo.

De pronto, Connie entró corriendo por la puerta principal

- ¡Oí que alguien gritó desde afuera! - dijo la Morena.

- Hola Connie, ¿que haces tan temprano? - preguntó Amatista.

- Bueno, hoy no tengo clases y... - Connie vio a Peridot en la cama con Steven.

Amatista, Perla y Garnet esperaron la reacción.

- Peridot, volviste, ¿Estas bien? - subió las escaleras y se acercó.

¡No!, Steven me mordió - y alzó nuevamente su brazo con las marcas.

- Es cierto eso Steven - preguntó Connie con los ojos entrecerrados.

- e...estaba soñando, no me di cuenta cuando lo hice - dijo el chico preocupado.

Connie se dirigió a Perla y compañía,

- Chicas, creo que Steven puede estar in-fec-tado - dijo maliciosamente.

- si - participó Garnet - quizá debamos ponerlo en una burbuja con las demás -

¡Nooo! - gritó el joven y todas rieron, luego el Steven también se rió.

- Steven, vine temprano por que supe que hoy llegan tortugas a la playa, ¿vamos a verlas? - dijo Connie animada y se dirigió a Peridot - ¿quieres venir?

Peridot sonrió y volteó a ver a Garnet.

- tienes una hora Peridot, recuerda que "eres un técnico muy ocupado" y tienes deberes como todos - sentenció Garnet.

Peridot, Steven y Connie salieron de la casa haciendo un gran escándalo.

- ¿Que son tortugas? -Preguntó Peridot

- las tortugas son...- contestó Connie y ya no se oyó más.

Una vez que salieron Amatista volvió a su cuarto, Perla le dijo a Garnet.

- Garnet, ¿que acaba de pasar? -

- es el arte de la guerra - se acomodó los lentes - ambas saben que Steven esta indeciso y que odia los conflictos. Están tomando una actitud permisiva entre ambas. Sondearán el terreno y avanzaran lentamente -

- Y Steven que creía anoche tener la situación controlada - dijo Perla agarrándose la barbilla.

- Esta muy lejos de eso, la situación lo va a controlar a él, y ni cuenta se va a dar - dijo Garnet y remató diciendo,

Hombre al fin...

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Gendou dice:

Después de tanto gore y drama decidí relajar la situación o por lo menos eso parece.

El siguiente capítulo es gregxperla y se cierra el primer arco argumental con 25 capítulos. Los siguientes serán ya el desarrollo de la guerra que se viene. Obviamente igual de las parejas.

Saludos a todos, en especial a GabrielaBautista829 quien pidió ser etiquetadaaa.

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