Los días de aprendizaje de Leslly habían pasado. Ya estaba lista para todo. Ya habían pasado un mes y Leslly se hacía más profesional en el área. Su destreza comunicativa era excepcional en su puesto. Leslly hablaba con más confianza y estaba más relajada que la primera vez. Siempre hay una primera vez, luego todo se vuelve rutinario. En el trabajo las personas que trabajaban con Leslly eran muy amables y simpáticas, casi todos allí amaban a Leslly y ella se sentía valiosa cuando estaba con ellos.

Eran la 1:02. Leslly y sus amigos comían en el comedor en el mismo edificio, en una sala de comida especialmente para ellos. Leslly les había contado a ellos sobre su problema o enfermedad que padece y otras cosas más de su vida ya que ellos querían conocerla al cabo. Ellos le aconsejaban al escuchar lo que Leslly le había dicho de ella. También ellos hablaban de su vida y lo que han pasado en sus día a día.

—... Eso era cuando yo era niño. Cuando veía algo que me gustaba y no tenía plata, esperaba que nadie me viera y... San. Me lo robaba.

—Ja ja ja.

Se reían de lo que contaba aquella persona.

—Ja ja ja. ¿Y nunca te vieron?

Le preguntó una mujer.

—Una vez. Y el mismo hombre que me agarró, me bajó los pantalones y me pegó con una correa. Nunca dije nada en casa.

—Ja ja ja.

Se reían y se reían.

—Podre de ti. Ja ja ja.

Decía Leslly.

Así se la pasaban hablando de todo un poco en las horas del almuerzo.

Después del almuerzo Leslly desde que entro tomaba todo tipo de llamadas atendiendo los clientes en sus necesidades. Así se la pasaba, hasta que atendía un cliente en la línea:

—Los proveedores (aerolíneas, hoteles, compañías de autobuses, restaurantes, guías, etc.) A precio todo incluido, es decir una tarifa plana o un paquete, así mismo, se les ofrece a todos nuestros clientes todos los servicios turísticos necesarios para que disfrute durante sus vacaciones. También déjeme decirle, que va a tener los conocimientos de todo tipo de actividades turísticas. ¿Le ha quedado clara la información señor Altuve?

—Eh, sí.

—Bien. Espero que le vaya bien en su viaje, le aseguro que tendrá unas vacaciones inolvidables para usted y su familia.

—Gracias señorita.

—Estamos para servirle. Suerte en su viaje a Europa.

—Gracias.

Cerró. Cuando hubo cerrado, el teléfono sonó en ese mismo instante, lo tomó, diciendo:

—Si buenas, Leslly Hoss Operación Turística le asiste. ¿En qué podemos ayudarle?

—Hola, ¿Cómo estás? Quiere reservar un viaje en cruceros turísticos para la próxima semana. ¿Crees que sea posible?

—Por supuesto que sí. Podría ser tan amable de darme su nombre señor.

—Sí claro. Brandon Canon.

—Brandon... Canon. Bien, señor Brandon. De me su número de identidad por favor.

Leslly escribía cada información que le daba el cliente en su computadora.

—4-557324-2.

—Bien. ¿A qué lugar se le ofrece viajar señor Brandon? Si deseas saber algunos lugares, le puedo facilitar algunos lugares que tenemos para usted y para sus gustos.

—Sí. Pero, quiero ir a Alaska y quiero el crucero más lujoso que haya.

Leslly al escuchar aquello se quedó un poco en silencio, luego dijo:

—Le saldrá muy caro señor, pero... ¿Está dispuesto...?

—Si señorita, claro que sí.

—Bien señor. Su identificación me dice que usted es de Yersia del Sur. Y... si. Tenemos un lujo crucero allí. ¿Para cuantas personas desea reservar?

—Cuatro.

—Bien señor. ¿Ha viajado antes?

—Toda mi vida.

Leslly se queda en silencio y luego le preguntó.

—¿En cruceros lujosos?

—Sí. En aviones y otro transporte más, pero nunca he viajado a Alaska.

Leslly guardó silencio por unos segundos, luego dijo:

—Bueno, entonces le he reservado el crucero para el sábado 11 de aquella semana. También déjeme informarle que ha seleccionado el momento ideal para conocer Alaska y las bellezas que ofrece es el verano, y hacerlo en un crucero será realmente impresionante para usted y los demás. Los paisajes del ártico y la fauna del lugar, convertirán sus viajes en una experiencia inolvidable y escenarios perfectos que le sorprenderán en cada...

—Oye...

—¿Sí? Dígame señor Brandon.

—Me encantas como hablas...

Leslly se quedó paralizada al escuchar aquello, mientras la otra persona continuaba hablando.

—.... No cómo te expresas, sino tú voz. Me parece que detrás de este móvil hay un dulce pétalo de rosa. ¿Cómo dijiste que te llamabas?

—Leslly Hoss señor Brandon. Permítame informarle que...

—¿De casualidad, hablo con un ángel? O ¿A caso lo eres?

—Discúlpeme señor Brandon. Me parece que me está coqueteando y creo que no estamos en el momento apropiado. Esta llamada está haciendo grabada por motivos de la empresa y seguridad del operador, a si qué, lo lamento señor. Permítame a ser mi labor y terminar de atenderle.

—No está mal que un cliente varía tus llamadas y haga tú día diferente.

—Sah. Bueno, entiendo. Pero por estos momentos no.

—Púes podemos hablar por otra parte. Si deseas.

Leslly se quedó pensando, se llevó un lapicero que tenía en mano a la boca y dijo:

—Uuuuh. Púes dígame su Facebook y así le busco. Quizás hablemos.

—Aah, muy sabía. Tienes mi nombre completo con la identificación que le di.

Leslly reacción dejó de chupar el lapicero y miró la pantalla de la computadora.

—Aah si verdad. Ja ja ja. Gracias por acordármelo.

—Bueno púes... Gracias por tú servicio...

—Esperé... Aún no he terminado en darle la información completa...

—Tranquila. No hace falta. Sé que quieres hacer bien tú trabajo, pero ya me has dado más información de la que necesito. Gracias señorita Leslly, hasta luego.

—Espere señor Bran... Don.

Le colgó. Leslly miró el teléfono y se quedó mirándole. Luego lo puso en su lugar y se quedó pensativa.

Cuando Leslly llegó a casa, fue directamente a su habitación y se encerró allí. Empezó a buscar el nombre de:

Brandon Jais Canon Alazar.

En la computadora, fue el primer nombre que le salió en el Facebook de Leslly. Como ella no había visto aun aquella persona, solo había visto una foto en su cedula; lo más posible es que ese sea su Facebook, pensaba Leslly. La cara de cada una de las fotos era diferente, en la cedula y la del Facebook de aquella persona.

En la foto de perfil estaba la persona (Brandon) con dos personas más a parte de él en un restaurante lujoso, los tres sentados en una mesa bien decorada y adornada. Los tres hombres sonreían en la mesa mientras que uno de ellos hacia un selfi. Detrás de ellos había más personas bien representadas, al igual que ellos. Aquel lugar parecía caro por los detalles que había detrás de ellos en las paredes del lugar.

Leslly se detuvo a observar la foto de perfil, pero... ¿Cuál de ellos sería el que le llamo? Hay una forma de saberlo. Viendo todas sus fotos en su álbum de publicación.

En la foto, el hombre que así el selfi era él que estaba a la izquierda; aparenta de algunos 50 años, es de pelo un poco largo y rubio que le daba por la nuca, media Melena. Es de piel clara, no tenía barba y estaba en corbateado. El del centro estaba inclinado hacia delante de la mesa sonriendo al igual que el de pelo rubio. Este es de piel clara, de color de ojos marrones y estaba con sus brazos cruzados encima de la mesa; este de pelo oscuro, de corte Hípster.

Éste mismo estilo también se podía decir que su moda era como una combinación de corte Undercut largo, que consiste en que llevaba los laterales muy cortos, pero en esta ocasión la parte central era más larga de lo normal, dando efecto de pelo largo con una pollina que cae a un lado. Su barba tenía un estilo Heleno lo cual le hacía más elegante, un estilo clásico.

El chico que estaba en la parte derecha de la foto es de piel clara al igual que los otros dos. Este es de pelo oscuro y de estilo Undercut rizado, es el mismo estilo del chico anterior, pero estaba vez su pelo era rizado y el pelo no tan largo. Su barba oscura también al igual que el anterior, pero menos barbudo. Las tres personas se parecen, pero lo sabremos luego.

Leslly después de observar la foto principal deslizó hacia abajo la flecha del mouse para ver las demás fotos. Vio otra foto más y no tenía más foto. Le dio un clic para ver más fotos y no. No había más. Parecía que tenía su Facebook privado. Leslly al ver que aquella persona la tenía de ese modo, le envió una solicitud de amistad. Aunque, ella no estaba muy segura de quién de los dos últimos chicos era el que hablaba con ella por el teléfono en el trabajo mientras ella le daba servicio. Solo él tenía dos fotos, la de perfil y una en la que él salía con un grupo de personas en sacadas y, allí estaban las mismas tres personas de la foto de perfil.

Leslly no salió de su habitación, bueno, sí. Solo bajaba a la cocina, buscaba en el frigorífico todo lo que podía llevar para su habitación y allí se volvía a encerrar.

En su habitación había tremendo desastre. Pequeños cubos de helado, por un lado, funda, botellas plásticas de coca cola, cartones de leche, la mitad de un sándwich, un cartón de jugo, chocolate Nutella, etcétera. Tenía de todo allí. ¡Qué chica que come! ¡Bastante!

Leslly esperaba que su solicitud fuera aceptada para ver las demás fotos, si era que tenía varias fotos. Mientras esperaba, se puso a mirar una película de terror, donde se podía apreciar como un hombre con una sierra eléctrica descuartizaba a una mujer por la cintura. La sangre corría por todas partes y el sonido de los efectos especiales hacia la película puro terror y suspenso.

En el momento que Leslly se concentraba en la película su móvil sonó, en ese instante se espantó y miró rápidamente el móvil. Vio quién le llamaba. "Kendry." Lo tomó y deslizó la pantalla del móvil bajando un poco el volumen de la película.

—Hola Kendry.

—Hola mí vida. ¿Qué haces?

—No soy tu vida. Aún que, no sé lo que soy para ti. Pero, nada. Estoy aquí viendo una peli. ¿Y tú?

—Ja ja ja. No digas eso. Porque nunca sabes lo que la vida mañana te traiga. Púes estoy aquí en casa en nada. Te llamaba para ver si gustas ir al cine hoy.

—No. Mi vida es la misma de siempre. Pero, ya estoy viendo una de terror.

—Ha, Pero... ¿No te gustaría ir al cine, para que veamos una juntos?

—No quiero salir hoy.

—¿Y eso por qué? ¿Estás de castigo aun?

—No. Bueno, sí. Pero, que no quiero ir.

—Y, ¿No quieres salir en la moto hoy?

—Nooo more, no quiero salir te dije.

Dijo Leslly un poco molesta mirando aun la película.

—Estas rara hoy. ¿Es el período que te tie...?

—No preguntes tanto, solo ve con Paola hoy no quiero salir.

—Bueno, está bien. Felices sueños. Te quiero.

—Sí, está bien.

Leslly le colgó. Del otro lado Kendry se quedó pensativo; como quién dice "que le sucede."

Leslly tiró el móvil a un lado mientras miraba la película. En una esquina de la computadora se presentó una notificación que decía: "Brandon Jais Canon Alazar acepto tu solicitud." En ese momento cuando Leslly vio que su solicitud fue aceptada tomó el mouse, detuvo la película y abrió la pestaña a Facebook. Fue directamente a las notificaciones y abrió. Bajó el perfil para saber más de aquella persona. La curiosidad le mataba en saber quién era el que hablaba con ella por el teléfono en el trabajo.

Cuando observó las fotos, solo había tres fotos que posiblemente no daba nada específico de la persona. Una de las fotos había cuatros personas que al parecer estaban en un bar y entre los cuatros había una mujer, pero entre los tres hombres estaban los dos chicos que estaba en la foto de perfil anteriores; el del lado derecho y el que estaba en el centro. En esa foto no se veía nada claro, ya que todo estaba muy oscuro y solo algunas luces de puntos se posaban en ellos. Pero la cara de uno de ellos se parecía a la de Kendry. El amigo de Leslly.

—Rayos.

Dijo Leslly esperanzada de encontrar algo más, pero no fue así.

Se dirigió a una esquina dónde decía "familia." Dio un clic derecho allí y se abrió, saliendo... Nada.

Leslly arrugó su cara, pensó por unos minutos mientras miraba en una esquina la gran cantidad de amigos que tenía: 4,967 amistades. Quizás Leslly se convertiría en una más de esos amigos y, quizás ahora era una de las 4,967. En el momento que Leslly miró la gran cantidad de amigos que tenía dijo:

—Como puede tener tantas amistades sino tiene casi nada de foto.

Leslly salió del perfil del chico y siguió buscando con el mismo nombre.

Luego de un buen rato buscando, le empezó a escribir a todos los que ella creía que podría ser aquella persona. Esperó por horas. Leslly le había escrito a todo haciendo una copia y pega a cada uno:

HOLA. ¿COMO VAN LOS PREPARATIVOS DE SU VIAJE CON DESTINO ALASKA?

Mucho respondían estupideces, y otros preverías e idioteces. Leslly al ver sus respuestas no le respondía; los bloqueaba y los borraba. Leslly espero hasta la 2:23 de la madrugada y nadie respondía como tenía que ser. Aún que, había algunos que decían: "Si ya estoy listo"; y cuando Leslly veía que le respondían algo parecido, Leslly le escribía diciendo:

¿EN CUANTO FUE EL PRECIO DEL VIAJE, QUE LE DIJE?

Ellos no respondían correctamente a lo que Leslly preguntaba. Algunos no decían nada. Leslly espero y espero hasta que cayó en sueño.