~ Ups, cuando el personaje descubre que es parte de una historia homo. ~

"Estaba en primer semestre de preparatoria, tenía catorce años. Yo ya tenía tiempo que leía LGBT+ y me pareció buena idea escribir mi propia historia.

Ya tenía yo toda la trama estructurada, sólo me faltaba una descripción de un muchacho muy guapo para el personaje principal de mi historia.

Había un chico un año más grande que yo que me encantaba. Muy guapo, popular, con andar despreocupado. No sé, nunca hablé con él, pero me fascinaba.

Lo tomé prestado para mi historia. Escribí cómo diez capítulos y los subí a Wattpad.

Yo tuve problemas académicos y me tuve que cambiar de escuela. Y ahí quedó. Se me olvidó completamente la existencia de este chico.

Terminé la preparatoria y seguí con mi vida.

Tenía ya dieciocho cuando una vez me invitaron a la comida de cumpleaños del hermano del novio de la amiga de una amiga mía. Sí algo así...

Este muchacho resultó ser el mejor amigo del hermano del novio de la amiga de mi amiga. Yo estaba que no podía de la vergüenza. Él no entendía por qué cada vez que se acercaba a hablarme u ofrecerme algo yo me ponía nerviosa y me iba.

Pero no terminó ahí, porque el hermano del novio de... bueno eso. Él nos siguió invitando a fiestas y planes juntos. Nos hicimos muy amigos, y el chico guapo terminó siendo mi mejor amigo.

Una vez, después de muchas copas se me ocurrió contarle a este chico que había escrito una novela gay de él.

No. Al pobre hombre casi se le salieron los ojos de la cara. Me preguntó por qué había hecho eso, y yo sólo le pude contestar que me parecía un chico muy guapo. Por lo que restó de esa fiesta él no me volvió a hablar.

Sí, pero todavía no acaba. Efectivamente, me puedo humillar más todavía.

Pasó un año de eso, ya tengo diecinueve años. Y hace poco comencé a salir con este chico, y ahora somos novios.

Hace unas semanas estábamos en su casa, y él sacó su teléfono con una sonrisa burlona. "Mira, encontré una página en donde la gente escribe sus historias, wattpad. Me hice una cuenta y me sugirió que siga a mis amigos de Facebook". Y entonces comenzó a leer mi novela en voz alta.

Yo me quería morir. Estaba toda roja y le quería quitar el teléfono, pero él seguía leyendo y riéndose de la historia que escribí hace cinco años.

Todavía no acabo, no.

Entonces llegó su mamá del trabajo. "Mira, mamá. Deja te leo esta historia que encontré". Yo mejor me callé y me quedé enfurruñada en una silla lejana. Toda controlada y muerta de vergüenza.

Volvió a empezar la lectura. Pero ella sólo le dio el avión y se subió a su cuarto.

Terminó de leer todo el primer capítulo en voz alta. Al final él ya no podía con la risa, y yo lo quería matar.

La parte buena, es que me dijo que le había gustado mucho y que escribí bien, pero que no volviera a meterlo a él en mis cosas raras."

¡Muchas gracias a Paula por su anécdota! :D