Capítulo 9:

Tus recuerdos permanecerán como parte de un pasado, uno que con el paso del tiempo será llevado por las aguas turbulentas de un rió generado por el tiempo.

Me diriji al templo shaolin, había quedado con Anika para entrenar un poco junto a Kung lao y Liu Kang, pero me percaté de que había humo saliendo del lugar, preocupado me teletransporte al patio principal, donde estaba kung lao inconsciente y los pequeños shaolines agrupados y con varios maestros a su alrededor resguardándolos, mientras que Liu kang estaba con Kung lao auxiliándolo.

-¿Qué es lo que ha pasado aquí?, ¿Dónde está Anika, Liu kang?- le pregunte preocupado y mirando desesperadamente al mi alrededor, -no lo sé, vengo de ver al maestro when, está gravemente herido, Kung lao es quien estaba con ella, iba camino a reunirme con ellos pero escuche gritos y vi a todos los niños correr hacia acá, me diriji corriendo y encontré al maestro When en el piso, con una grave herida en un costado, está en su salón, me pidió que lo llevara ahí-. Asustado corrí a ver al maestro when, quien al encontrarlo estaba muy herido y uno de los maestros estaba a su lado, tratando de ayudarlo, me miro y me dijo que estaba muy herido, que estaba perdiendo mucha sangre, me acerque a él para sanarlo pero él se negó y pidió que todos salieran excepto yo.

Oscuridad, olor a humedad, gritos, sentimiento de miedo, el terror invade cada centímetro de mi piel, un líquido resbala de la comisura de mis labios, su sabor es metálico y dulce, creo que es sangre, toco mi frente, mi nuca, una punzada de dolor me invade, miles de pensamientos ruedan por mi mente, ¿Qué ha pasado?...

Salí del cuarto del maestro When con mi sombrero entre las manos y con una ira enorme, no podía ser que ese maldito se la haya llevado, no otra vez, debo encontrarla antes de que pase alguna otra cosa. Una voz a lo lejos interrumpe mis pensamientos, es Kung lao, quien viene corriendo en mi dirección, - Maestro Raiden, él tiene a Anika, se la ha llevado, no pude defenderla, ni tampoco al maestro When, ella se sacrificó por todos, maestro lo siento yo...-,-no te preocupes Kung lao, él lo va a pagar muy caro, ambos lo harán, han matado al maestro When, esto es la guerra, ambos sufrirán mi ira y serán juzgados por los dioses antiguos, es una promesa-.

Escuche un ruido, y una luz me segó, jalaron de las cadenas que me tenían atada las muñecas y por fin salí de aquel lugar, debí suponerlo desde un inicio, había vuelto una vez más aquella pesadilla, sabía que tiempos oscuros vendrían después del torneo, pero esto fue un ataque a traición, no tuve elección, pero el destino quería que volviera a este lugar maldito, escape, pero es momento de enfrentarlo de nuevo, el Netherealm, tan horrendo y lleno de dolor, cada vez peor que la última vez que estuve aquí. Caminamos por varios pasillos, mi opresor era un Oni, bastante horrendo, hasta que llegamos a la sala principal del trono, ahí estaba el, maldito brujo, un día de estos recibirás el peor de los tormentos, eso lo aseguro.

-Veo que ya despertaste Diosa del Agua, espero que hayas dormido bien-, -¿ya me tienes aquí, ahora que quieres maldito brujo-, sonrió tomando mi insulto como un alago, se acercó a mi y tomo mi mentón, -veo que has cambiado un poco, si querías vacaciones, solo me lo hubieras pedido y con gusto te hubiera dejado ir, pero como estúpida decidiste desobedecer e irte de refugiada con los de la tierra, ¿dime te gusto tu estancia haya arriba?-, solo me limite a mirarlo molesta y conteniendo mi ira, gracias al maestro When aprendí a contener bien mis emociones, ya no soy la misma niña indefensa, no ahora soy más fuerte.

-Quan chi, ¿Cómo te atreves a maltratar a nuestra invitada, deberías ser más cortes?-, esa voz, esa maldita voz, como lo odio, levante la mira y ahí estaba, caminando en dirección a su trono, sentándose con toda la calma posible, en cuanto me miro, sentí como una ola eléctrica recorría toda mi columna espinal, estremeciendo cada parte de mi cuerpo. –perdone mi impertinencia Lord Shinnok, pero no tuve opción, ella se resistía mucho-, -esa no es ninguna excusa como para que la trates así, quítale las cadenas y acércala a mi-. Quan chi me quito las cadenas y me empujo en dirección a Shinnok, quedando a unos metros de su trono. Pidio que nos dejara solos, se levantó y me miro –dime mi pequeña gota de rocio, ¿disfrutaste tu estadía en la tierra?, ¿te gusto ser la "mamá" de los shaolines?- me preguntaba mientras comenzaba a caminar a mi alrededor, -mi pequeña, no sabes lo mucho que te extrañe, me hiciste mucha falta, pero quisiste hacerte la valiente y hiur de mi, de tu protector, de quien te lo dio todo, dime ¿Qué tiene que decir en tu defensa?-, menciono posicionándose frente a mí,

-Eres un maldito bastardo, le dije a tu maldito sirviente que vendría de vuelta si dejaba en paz a los terranos, espero que cumpla su palabra- mencione firme y sin mostrar debilidad alguna, no iba a permitir que Shinnok me subestimara de nuevo, no esta vez.

-O, al parecer te volviste más rebelde de lo que ya era, mi pequeña gota de rocio, pero eso no te quitara el título de perra que te ganaste aquí en el infierno, al contrario, me gusta que seas asi, da a mostrar mucho más de tu encanto querida- camino a mi alrededor, pude sentir su mirada quemar cada poro de mi piel, profanando cada centímetro de mi cuerpo, -escucha pequeña, supe que estuviste con el dios del trueno, pero dime, ¿Qué hacias con el?, si no me mal informaron tu objetivo era llegar a tu antiguo puesto con los dioses antiguos, dime ¿Qué te detuvo?, acaso me extrañaste?, respondio retándome con tan solo acercar su horrendo rostro al mio; no dije ninguna palabra, solo sonreí burlona y mire como volvia a rodearme paso a paso, -¿yo, extrañarte?, es mas fácil que extrañe a alguno de los onis de este infierno que ha ti. –Oh preciosa, no te hagas la inocente, bien que gozabas cuando estabas a mi lado, incluso implorabas por mas, ¿Qué acaso no lo recuerdas?- menciono acercándose a mi oído y susurrando descaradamente cada palabra.

-Por favor, Raiden es mejor amante que tú, aunque en realidad, él es mejor en todo que tu- le escupí descaradamente, burlándome y disfrutando su ceño fruncido a flor de piel; molesto me tomo del cuello y me levanto, tratando de infligirme terror. – ¡No te pases de lista maldita perra, no sabes lo ansioso que estoy, tengo tantas ganas de profanarte completamente, y tu tratando de jugar con mi paciencia!-.

Me soltó y llamo a Quan Chi, se sentó en su trono y me miro con aires de superioridad –Quiero que la lleves a su antigua alcoba, que Sareena la prepare decentemente, esta noche cenaremos y le dare una bienvenida que nunca olvidara- Quan chi me tomo de ambos brazos y me llevo por los pasillos de aquel horrendo castillo, llegamos a mi antiguo cuarto y me arrojo dentro. –No intentes escapar, en un momento te enviare a alguien, te ayudara a arreglarte para Lord Shinnok, más te vale comportarte Anika- cerro la puerta y me derrumbe en el piso, recargándome en el borde mi antigua cama, comencé a llorar sin consuelo alguno, mi mente estaba siendo invadida por recuerdos horrendos, cada parte del cuarto tenia uno en específico, en ese instante deseaba más que nada que Raiden estuviera a mi lado, deseaba estar en la tierra, en el templo de Raiden, meditando, disfrutando de su compañía.

En la academia Whu shi, estábamos Sonya Blade, Jax, Sub Zero, Liu Kang, Kung Lao, Fujin y yo, planeando como rescatar a Anika y dar venganza a los héroes caídos, estaba deseperado, furioso y muy preocupado por Anika, pero justo a mitad de la reunión escuchamos un estruendo en la arena de combate de la academia, me teletransporte mientras los demás me seguían y observe como se abria un portal dejando entrar a varios onis y detrás de ellos venia el despreciable de Quan Chi.

Me acerque junto con mis aliados y Quan chi dio orden a sus demonios que se mantuvieran atrás. –Cuanto tiempo ha pasado, dios del trueno, esperaba que nos visitaras en el Netherealm en la final del torneo, los esperábamos con ansias, a ti y a tus mejores guerreros, pero note que el imbécil de Shang su nos falló y el estúpido emperador del mundo exterior también...-, -¿Dónde está Anika, Quan Chi?- le interrumpí furioso, preparando en mis manos una serie de rayos para torturarlo, -dime Raiden, acaso ella nunca te hablo de por qué escapo del reino, verdad, ahora ella se encuentra pagando el precio por su insolencia, así que tendrás que olvidarte de ella-, -¡¿maldito desgraciado que le has hecho?!-, -deberías preocuparte por mejores cosas Dios del trueno, por ahora, solo traigo un mensaje de Lord Shinnok, el pronto vendrá a reclamar lo que hace años le fue arrebatado y si intentan detenerlo, bueno, tú ya te diste cuenta de las terribles consecuencias que lo trae consigo-, recordé entonces el ataque que había hecho hace unos momentos.

-¿Qué es lo que quiere tu amo?, sabes incluso tu que no tienen oportunidad alguna de conquistar la tierra-, mencione con aires de grandeza, demostrándole a Quan chi que no nos dejaríamos vencer tan fácilmente, -Oh Raiden, no me hagas reír, solo te diré que si están dispuestos a enfrentarse a nosotros, créeme que será tu perdición, tus aliados se volverán mis esclavos, y la tierra será la nuevo reino del Netherrealm, así que es mejor que se presenten ante su verdadero gobernante-. Enojado comencé a sacar rayos en mis manos mientras observe como se dirigía de vuelta al Netherealm mediante el portal que había abierto. Debo pensar una estrategia para detener a Shinnok y poder salvar a Anika.

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Y estamos de vuelta,  @slenderjane esta libre y yo igual, adios a los trabajos por monton del semestre, y pues hoy habra maraton en esta historia, el dia de hoy subiremos doscapitulos, este y otro, y posiblemente la siguiente semana o a mas tardar el viernes se subira otro, aun falta muchisismo para esta historia.

Comente que tal les parece, aceptamos criticas de cualquier tipo, asi como tambien punteen en los comentarios las faltas de ortografia que tengamos, para continuar mejorando. 

Esperemos que siga siendo de su agrado la historia, que los dioses antiguos les protejan.