XIX

Deje la ligera maleta sobre el suelo del pequeño recibidor mientras a mi lado Anna me interrogaba lanzando preguntas a diestro y siniestro mientras gesticulaba exageradamente. Por otro lado sentía la mirada de Lucas taladrándome la mente mientras se cruzaba de brazos al lado de la otra.

-Me voy solo un finde semana, son tres días, no, solo dos y medio, ¿Qué problema hay?- dije cogiendo la chupa del cuero del colgador.

Anna, que aun llevaba el delantal lleno de harina y lo que parecía clara de huevo, se callo por primera vez en dos minutos y pareció pensar con detenimiento la situación.

-No lo entiendo, ¿desde cuando vas a visitar a tus padres?, ¿ahora os lleváis bien?, ¿nos vas a abandonar para irte a vivir con ellos?- las mismas ideas absurdas comenzaron a brotar de su boca.

Solté un suspiro de frustración mientras miraba a Lucas intentando expresar el: "Tu novia esta como una cabra". Porque si, después de quinientos años enamorados por fin eran novios. Para mi fortuna y desgracia.

-Dinos al menos donde estarás- dijo Lucas haciendo callar a su novia- así al menos si te escapas podemos ir a buscarte.

-Si, como si nos fuera a decir la verdad...- susurro Anna con un puchero y de manera dramática.

Sonreí antes de mirar fijamente el piso y a mis dos compañeros que parecían confusos. Nunca me había ido así de la nada, y mucho menos con mis padres con los que llevaba un esplendido año sin hablar.

-Os prometo que volveré, ya sabéis que no puedo sobrevivir sola mucho tiempo, solo se hacerme un huevo frito- Anna asintió recuperando la sonrisa- iré a Portland, están allí mis padres de paso, solo quiero hablar con ellos de unos tramites sobre la empresa. No me hace mucha gracia pero en nada estoy de vuelta.

Odiaba mentirles, pero aunque ambos sabían la historia completa decirles lo que estaba a punto de hacer supondría muchas conversaciones para las que no estaba preparada, y posiblemente para las que no tenia respuesta.

Tome el primer autobús a Chicago que encontré. Estaba más tranquila de lo que cabria esperar, una sensación de calma me invadía el cuerpo, como si un sedante me estuviera dejando paralizados los sentidos. Y a pesar de ello un arco curvaba todos los músculos de mi rostro que ya comenzaban a dolerme por estar tan tirantes. Y a pesar de ello mis palmas cosquilleaban nerviosas recordando su tacto.

Anna me había mandado ya cuatro mensajes en los que salía haciendo pucheros y poniendo cosas como: ahora tengo que comer en el enorme comedor sola. Yo me reía y le mandaba fotos contestándole cosas por el estilo, agradecida por estar entretenida las horas que me quedaban en aquel bus. 

Me acomode en el asiento contenta por tener los dos asientos para mi sola. Recosté mi cabeza sobre el húmedo cristal notando el retumbante movimiento del autobús. Tenia sueño, así que me permití cerrar lo ojos con la excusa de quitar las horribles ojeras que durante los últimos años habían acompañado mi rostro. Mientras las imágenes de Virginia me venían a la mente, con su amplia sonrisa y el pelo ondeante. 

¿Habría cambiado? ¿Y si no le gustaba a ella mi nueva imagen? ¿Y si en verdad eran todo desvaríos míos?

"La luz que entraba por la ventana me daba completamente en la cara haciéndome entrecerrar los ojos mientras miraba atontada un punto cualquiera de la mesa imaginándome escenas en las que Virginia me besaba.

-¿En que estas pensando que estas tan ida?-pregunto con una sonrisa mientras dejaba el bolígrafo en la mesa y cogía la botella de cristal del escritorio para luego beber un trago de agua.

-En nada-dije mordiéndome la lengua mientras pensaba que si pudiera leer los pensamientos estaría muerta de la vergüenza.

-Ya-dijo antes de dejar la botella y reírse- por eso te has puesto roja.

Aparte la mirada de su rostro y puse los ojos en blanco mientras me despatarraba en la silla y me cruzaba los brazos.

-Es por el calor, pero vaya, ¿me has castigado para reírte de mi o como?- pregunte mientras ella retomaba su tarea de corregir trabajos.

Virginia sonrió aun sin mirarme mientras comenzaba a escribir con rapidez sobre la hoja.

-No, te he castigado porque no parabas de hablar con Anna a pesar de las dos veces que te he dicho que te callaras.

-¿Y Anna que? Era ella la que no paraba de hablarme, habla por los codos dios,  y no le iba a dejar hablando sola que luego me lo hecha en cara y...

-Erin- me corto mirándome durante unos segundos- es mejor que no te quejes, no te voy a levantar el castigo.

Virginia volvió a lo suyo y yo suspire mientras volvía a perderme en mis pensamientos sobre porque era la única persona a la que ella castigaba. Que yo recordara solo había castigado una vez a Louis porque no paraba de montar alboroto, pero a nadie más.

-Por cierto- ella carraspeo antes de volver a dejar el boli, note su nerviosismo, algo que muy pocas veces había visto- me gustaría que no comentaras a nadie que a veces me paso bebiendo, ¿Vale? No es algo que me define, simplemente...

-Hey- le corte mientras me incorporaba en la silla y colocaba mi mano sobre la suya- no tienes porque darme explicaciones de nada, no le contare a nadie nada, no soy así.

Su mano había temblado bajo la mía. La tenia bastante fría para el día soleado que hacia, y el contraste me hizo querer darle un abrazo, pero me aguante sentada mientras nuestras miradas se mantenian con demasiada intensidad. Supe que no sabia que decirme.

-No quiero que nadie sepa que no eres tan perfecta como pareces- dije aligerando el ambiente antes de darle un apretón y apartar la mano con una sonrisa de burla.

Virginia se rio y vi el alivio en aquella sonrisa sincera, una sonrisa tan bonita...

-¿Y que soy entonces, vulgar?-pregunto.

-No- conteste con decisión-te podría definir de muchas maneras, pero vulgar no estaría entre una de ellas."

Me desperté con un movimiento brusco del autobús y al instante el dolor de cabeza se hizo presente. Últimamente tenia más jaquecas que de normal. Observe por la ventana mientras me sujetaba la cabeza con la mano como si eso me aliviara algo. Quedaba poco. Quedaba tan poco...























Se que estoy desaparecida, y aunque no hay excusa estoy pasando por un mal momento. Espero volver pronto. Muchísimas gracias por seguir ahí :)

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