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Un escrito breve antes de seguir con la historia:

Muchísimas gracias por sus comentarios diciéndome que siga con la historia, no les he podido responder por que en verdad estaba muy ocupada, pero como hoy tengo día libre ya me tome el tiempo para escribir otra parte. Lo que he escrito ha estado muy breve, pero conforme tenga mas tiempo prometo escribir mas. Y muchas gracias a los que me siguieron y le dieron estrellitas a la historia :)

También,  no voy al día con la serie, hasta ahorita voy donde luna reprueba su examen.

Gracias! L@s quiero :*

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M

"Estas aquí!" fue lo primero que escuche al entrar al Roller

"Si, Ámbar... solo vine a decirte que no puedo ensayar hoy" le dije desinteresado, últimamente ámbar y yo no andamos tan bien y si estamos siendo perfectamente honestos, su actitud posesiva me estaba molestando un poco.

"Pero porque no Matteo! Tenemos que estar listos para-- "

"Mi padre llego de España y vamos a comer juntos" No pude evitarlo, se me escapo una sonrisa.

"Ah, entiendo" dijo algo sorprendida "Bueno, pero mañana tenemos que ensayar el doble, no podemos concursar sin estar súper preparados"

"Obvio"

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Llegue a la mansión y la sirvienta me abrió la puerta.

"Donde esta mi padre?" pregunte entusiasmado. "Hace mucho que no lo veo ni hablo con el"

"Esta en la cocina" me dijo, extrañamente su expresión era de tristeza...probablemente esta teniendo un mal dia.No pensé mucho en ello y me dirigí a la cocina.

"Hola papa" dije esperando que me volteara a ver.

"Hola" murmuro desinteresado.

"Acabo de llegar de con Ámbar" platique mientras me servía un vaso de agua "El open es pasado mañana, sabes? y-"

"Quieres dinero?" respondió sin mirarme

"Ehh...no papa, sólo te estaba contando de mi día"

"Ah" suspiro

"Lo que pasa es que la ultima vez no quedamos en primer lugar en la competencia y ahora con el open es importante que gan-"

"Matteo por favor, estoy ocupado y extremadamente cansado, ya sabes que lo que haces con tu tiempo libre no me interesa" interrumpió exasperado

"Bueno...Ya esta la comida?" trate de cambiar el tema

"Tu comida?...no se"

"No vamos a comer juntos?" pregunte confundido

"Ya comí"

"Claro" conteste en voz baja y cruce la cocina hacia la puerta "Chau, pues"

El sentimiento era insoportable, esto siempre pasa. Desde que era pequeño no recuerdo un solo momento agradable con mi padre; siempre está de viaje o cuando no, está demasiado cansado o ocupado para querer saber de mi. Empecé a recorrer el largo pasillo de mármol que llega hasta mi habitación cuando vi a mi perro sentado afuera de mi cuarto.

Se emociono mucho al verme, su cola se meneaba con felicidad y no pude evitar el nudo que se me formo en la garganta

"Simba" le dije con voz quebrantada "Quieres salir a pasear?"

Su única respuesta fue correr en círculos a mi alrededor

Le sonreí un poco "Supongo que si...vamos"

Simba siempre me ha seguido a todos lados, por eso nunca he sentido la necesidad de ponerle una correa, lo único que necesita es una pelota y un espacio para correr tras ella, la verdad es que es muy amigable y siempre me hace sentir mejor;  esa es la naturaleza de los Golden Retrievers .

Caminamos por un largo rato, nos tomo un buen tiempo antes de salir por fin de los terrenos de la mansión de mis padres. La brisa era fresca y caminar sin rumbo empezaba a relajarme, pero el sentimiento no se iba.

"Tu que crees ,simba?" exhalé "no le importa lo que haga con mi tiempo libre, así que porque no nos vamos a pasar la tarde por Europa?"

Simba ladro y se fue corriendo, habíamos llegado a un parque con un lago.

"Aquí veníamos cuando estaba aprendiendo a patinar, lo recuerdas?" Dije al aire, en parte era para seguir mi conversación con simba, pero también para evitar las lagrimas que se me habían juntado en los ojos.

"Ey...con quien hablas?" Su voz me tomo por sorpresa, pero por suerte estaba atrás de mi así que no pudo ver mi cara. Me pase rápidamente la mano para limpiarme los ojos de cualquier tristeza que pudieran reflejar y respire hondo.
"Con Simba" le respondí sin mirarla, espere a que estuviera a mi lado.

"Simba?" Dijo confundida

"Mi perro, Chica Delivery" Rei un poco, tratando de espantar el nudo en mi garganta "Nunca viste el rey león?"

"SI!" rio "apoco eras fan?"

"ERA!?" fingí estar ofendido "El rey león es un clásico."

Solto una carcajada y le tomo un tiempo calmarse "Oye...pero hablando en serio, estas bien?"

Mis sentimientos me traicionaron por un momento y le tuve que apartar la mirada "Porque no habría de estarlo?"

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L

Sus ojos aun se veían brillosos, como si hubiera llorado; y aunque el trataba de esconderlo, podía ver que no estaba bien

"Oye! y si jugamos al ratón?!" Dije lo mas entusiasmada que pude, tratando de distraerlo de lo que sea que lo hacia sentir mal.

Me miro rápidamente ,una media sonrisa en su rostro "A que?"

"Si! Mira! " empecé a correr de un lado a otro "En México jugábamos así"

"Pero que estas haciendo chica delivery?"

"Mira, préstame la pelota" le extendí las manos y el me lanzo la pelota ligeramente para que pudiera atraparla.

"Imagínate que tu y yo somos unos gatos y simba es un ratón, tu y yo nos aventamos la pelota y simba corre para agarrar la pelota antes que nosotros"

Me miro por un momento, su expresión era una mezcla entre divertido y confundido "...y porque somos gatos?"

"Porque tenemos el queso" le mostré la pelota

"Es un juego muy extraño ,chica delivery"

"Nooo!! Mira!!" avente la pelota lo mas alto que pude y simba y yo empezamos a correr para tratar de atraparla

"La avientas así" le grite mientras miraba hacia arriba "y cuando caiga yo la a--" la pelota me pego en la nariz

Matteo corrió rápidamente hacia donde estaba y yo me tape la cara con las manos, tratando de esconder mi vergüenza.

"Ey! Cuidado" Escuche que grito

No vi que había una piedra atrás de mi y cai de espaldas, el aire se me salio de los pulmones. Matteo se arrodillo a mi lado y yo trate de agarrar aire, no me podía enfocar en nada; el sol me daba en los ojos y no podía hablar del impacto.

Alce la mano y matteo la agarro, se acerco a mi y me dio palmaditas en los cachetes. Mi mirada se enfoco en su cara y vi que el sol estaba directamente alineado con su cabeza, el brillo del atardecer lo hacia ver luminoso.

Estaba tan cerca que podía sentir su respiración "Estas bien?" dijo, sus ojos chocolatosos llenos de preocupación.

Trate de responder, pero no juntaba suficiente aire para hacerlo

"Vamos, respira profundo" inhalo y exhalo un par de veces tratando de ayudarme.

Tu mano es mas grande que la mía, pensé

Su mirada se relajo un poco "Y eso que tiene?"

"Que?...lo dije en voz alta!?" semi-grite

Cerro los ojos y se empezó a reir, bajo su cabeza un poco y nuestras frentes se tocaron. Los dos nos quedamos muy quietos.

"Que me estas haciendo, chica delivery?" susurro

"HIP!"