Viejos rencores
Hiro
La vida laboral me empezaba a afectar mentalmente, todo el tiempo me sentía cansado, todo por un ataque de celos para que Karmi no me superará. Claramente no valío la pena por el modo en lo conseguí, pero todavía me faltaban nueve meses para que se terminará mi pasantía.
Por suerte esté día era jueves y lo tenía libre, lo único malo era que debía asistir a la universidad. Cada clase me resultaba igual a la anterior: teoría, proyectos finales, tareas interminables y demás. Todo esto mientras me sentaba sólo al principio de la fila del salón.
El sonido del timbre que antes me provocaba un alivio reconfortante ahora solo me entristecía más. Recorría los pasillos con el pesar de mi mochila acompañado de Baymax a mi lado. En la hora del almuerzo no hacía más que mirar mi comida y si comía era únicamente por lo que mi amigo robot me decía.
- Hiro saltarse la primer hora de comida afecta notablemente tu rendimiento en el resto del día, así como hacerlo con frecuencia te puede ocasionar un transtorno alimenticio.
En la última hora del día ya me estaba durmiendo pero estuve tratando de mantenerme despierto hasta que concluyo la clase. Lo único que quería era llegar y acostarme en mi cuarto.
Luego de una larga caminata por la cuidad llegamos a la cafetería, cruzamos la puerta y saludé a mi tía Cass y a Kyle. Le había avisado a mi tía que me sentía muy cansado y no podía ayudarle el día de hoy, ella lo comprendió y me dejaría tranquilo.
De inmediato subí a mi habitación tirando mi mochila en el suelo, dejándome caer de clavado en mi cama esperando recuperarme todo lo posible.
A lo mucho pasaron tres horas de mi leve siesta cuando sentí un ronroneo en mi cama, era mochi quien se había infiltrado en mi habitación. Lo empecé a acariciar mientras se me quitaba lo soñoliento, cuándo tocaron mi puerta.
- ¡Pasé! Grite sin moverme un centímetro.
- Hiro que bueno que despiertas, necesito que bajes ahora mismo, Megan te está esperando allá abajo. Dijo mi tía apenas entró a mi habitación.
- ¿Megan? Sabes que no quiero verla tia Cass, dile que se retire.
- Eso sería mal educado Hiro, además debes dejar el rencor el cuál no te dejará nada bueno en la vida.
- Lo sé tía Cass, pero de verdad no quiero hablar con ella.
- Comprendo lo que sientes hiro, pero entiende que ella es una niña todavía, apuesto que no tiene malas intenciones contigo. Además sino bajas en cinco minutos, vendré a bajarte de la oreja jovencito.
Mi tía se marchó molesta y no me quedo más remedio que bajar con mi supuesta amiga, sólo esperaba que realmente tuviera algo importante que decirme para atreverse a venir a mis dominios.
- Hola Megan. La saludé de mala gana en cuanto baje las escaleras.
- Hiro, siento mucho haberte hecho sentir usado, realmente lo lamento mucho, he vendido a disculparme. Hablo apenada en cuánto estuvimos frente a frente.
- Disculpa rechazada, puedes retirarte. Respondí sin prestarle atención. Quería que se fuera y nunca más volviera.
- Quiero que seamos amigos de nuevo.
- ¿Porque me interesaría volver ser tu amigo?
- No debería decirte ésto, pero la próxima semana mi papá y yo vendremos a cenar con ustedes y quería arreglar antes las cosas contigo. Además mi papá parece ir enserio con tu tía en su relación y creo que piensa casarse con ella, lo que nos convertiría en primos. ¡Y sería muy grato que nuestra relación fuera buena desde ahorita!
Sus palabras me dejaron callado.
Mi tía Cass comprometida, Megan y yo primos, era mucha información que procesar. Por lo que al final acepte sus disculpas y accedí volver a ser su amigo, volví a pedir que se retirará pero de manera más educada, porque necesitaba tiempo para reflexionar.
Siempre me preguntaba que le depararía en el futuro a mi tía y ahora esa pregunta parecía responderse sola, mi pequeña familia crecería en número. Ya le había arruinado oportunidades anteriores a mi tía de ser feliz pero está vez no lo haría de nuevo. Supongo que era algo inevitable que me negaba a aceptar por la posibilidad de que también ella me dejara sólo como lo hicieron mis padres y Tadashi.
Me seguía preguntando cuántos más cambios tendrían que pasar en mi vida.
Seguro está no es la mejor historia hiroguel que hallan leído pero la escribo con mucho aprecio a esta pareja, aparte de que quiero profundizar más en los dos protagonistas y quienes los rodean. Solo aguanten el próximo capítulo y finalmente se conocerán. ¿Como esperan que se conozcan?
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