LXX
Seokjin entró a la ducha de su nueva casa y suspiró ante lo cansadas que sentía sus extremidades. Ese día habían salido muy temprano a comprar todo lo que Rachel necesitaría para un nuevo año escolar, había sido una verdadera suerte que todo lo que pasó con ella y Taehyung hubiera pasado luego de que ella finalizara su año escolar. No había perdido su año y eso había estado muy bien.
Se aplicó el shampoo y masajeó suavemente quitando luego la espuma de su cabello un tanto largo a esas alturas.
Escuchó un golpe a la puerta y cuando esta se abrió Seokjin sonrió de lado. Había dejado a Yoongi en la sala descansando, no lo había invitado a la ducha a pesar de que lo había pensado en su momento, sus heridas no sanaban lo suficiente y él sabía las ganas que tenían de estar uno encima del otro, pero al parecer el policía no se había aguantado las ganas de acompañarlo y él no estaba para nada enojado al respecto.
—Solo traje una toalla adicional, digo, por si necesitas una —dijo Yoongi apoyado en la puerta.
—Muchas gracias, no se que haría sin ti, amor.
Yoongi mordió su labio y se quitó la camiseta, luego fue el turno de su ajustado pantalón negro. Al estar sin calcetines fue más fácil el proceso y antes de quitarse el reloj observó la hora. Era temprano todavía, Taehyung llegaría en una hora por lo que él podía besar y acariciar a su hombre antes de avanzar un poco más en los planes que tenían ellos tres.
Se quitó su boxer azul marino y tal cual como vino al mundo avanzó los pasos que lo separaban del hombre de su vida y se metió en la vaporosa cabina que inusualmente era lo bastante amplia para…
—Aquí entraríamos perfectamente los tres ¿No crees?
Seokjin asintió de inmediato y cuando quedaron frente a frente el azabache lo besó.
Yoongi deslizó sus manos por toda la espalda del menor y cuando llegó a sus glúteos los amasó fuerte mientras bajaba sus labios hasta el cuello del otro. Su lengua se deslizó por todas las gotitas de agua en el maravilloso cuerpo de Seokjin quien estaba jadeando mientras acariciaba el cuerpo ajeno.
—Yoonie —susurró con los ojos cerrados y su corazón martillando fuerte en su pecho.
—Te extrañé tanto, cariño.
—Yo también, amor. —Seokjin abrió los ojos y llevó sus manos hasta el rostro del rubio, acarició despacio a causa de las heridas que cada vez se hacían más pequeñas. El rostro de Yoongi inevitablemente quedaría marcado de por vida y sería para siempre el recordatorio de lo cerca que estuvo de morir. Y un recordatorio constante para él de lo cerca que estuvo de perderlo —Cuando estábamos en ese lugar yo…
—No Jinnie —su voz tembló y mientras miraba al hombre frente a él Yoongi confirmó una vez lo mucho que amaba a Seokjin —no recordemos cosas tristes, ahora estamos aquí.
—Si. Tienes razón, solo que estoy tan agradecido por tenerte, por que estamos juntos —los ojos de Seokjin brillaron por las lágrimas que estaba reteniendo.
—Y yo estoy feliz de que me hayas dado la oportunidad de entrar en tu vida, de conocerte.
—Yoon —Seokjin hizo un puchero y luego las lágrimas comenzaron a caer una tras otra —yo no sabía si iba a poder esperarte, cuando no sabía nada de tu estado luego de todo lo que te hicieron, cuando estabas inconsciente… Yo no estaba seguro si podía pasar por eso nuevamente. Yo no quería perder de nuevo —el azabache cerró los ojos y se dejó mimar por las cariñosas caricias de su novio por toda su espalda y cabello —me siento mal por pensar así, ni siquiera te iba a dar la oportunidad, yo estaba tan asustado.
Yoongi no lo dejó seguir por que sus labios lo hicieron callar. Besó al maravilloso hombre que era Kim Seokjin. Tragó uno a uno las inseguridades que pudo haber sentido cuando él estaba en coma. Con ese beso Yoongi quería decirle que el pasado no importaba, que él entendía sus miedos, jamás podría reprocharle eso. Jamás podría reprocharle nada por que Yoongi lo amaba con todo su pasado, con todos sus miedos y demonios.
—Yo quise irme en algún momento, así que creo que estamos a mano ¿No?
Seokjin movió su cabeza —yo jamás he querido competir contra su recuerdo, ni siquiera sé lo que él pensará de mi, pero quiero creer que él quiere que tú seas feliz... A mi lado —sentenció.
Yoongi mordió su labio inferior y un suspiro se escapó de sus labios al recordarlo. Claro que su ex pareja ya fallecida, Thomas, querría que él fuera feliz y pudiera rehacer su vida. Y eso era justamente lo que Yoongi estaba haciendo.
Rehaciendo su vida y no solo con un hombre en ella, sino que con dos que necesitaban tanto como él vivir plenamente, ser felices y amados.
—Te amo Kim Seokjin.
—Y yo a ti Min Yoongi.
Se besaron nuevamente para sellar la conversación y salieron de la ducha para arreglarse antes que llegara Taehyung.
Se secaron en silencio y Seokjin de tanto en tanto miraba a su novio y su cuerpo lleno de marcas. Trató de no pensar demasiado en ello, pero todavía tenía en su memoria toda la sangre sobre su cuerpo y las heridas.
—¿Jinnie? —llamó Yoongi.
—Estoy listo.
El rubio se acercó y puso sus manos en las mejillas ajenas —deja de mirarme así, cariño. Estoy aquí, estoy contigo.
—Lo siento —el azabache agachó la mirada —lo lamento en serio.
—¿Algún día dejarás de verme de esta manera?
Seokjin asintió —nunca pensé que verte así se convertiría en lo único que puedo pensar en las noches.
Yoongi lo abrazó fuerte por la cintura —te entiendo mucho, lo sabes. Pero eso es un mal recuerdo, uno que dejaremos atrás en algún momento ¿Si?
—Si, si. Tienes razón, estoy siendo dramático —Seokjin quiso alejarse pero Yoongi se lo impidió.
—No tengas miedo, ambos estamos aquí y Tae también.
El azabache lamió sus labios y cerró sus ojos un momento para disfrutar de aquellas palabras, Yoongi tenía tanta razón, todos ellos estaban vivos y lo mejor de todo era que estaban juntos, o al menos trabajando para que eso se realizara.
—Es un poco repentino lo de él ¿No crees?
Yoongi se alejó unos pasos —si, estoy pensando en que quizás antes de avanzar en todo esto deberíamos hacer que vea un médico y ver en que estado está.
—¿Crees que se agravó?
—No puedo estar seguro, pero fue todo muy rápido… No lo sé la verdad, nunca puedo saber con exactitud lo que pasa con él.
Seokjin sonrió —bueno entonces dejemos que el tiempo nos diga, no apresuremos nada.
—Si, será lo mejor.
Salieron del baño y se dirigieron hasta la cocina.
La casa en sí era un poco más pequeña que la anterior. Solo tenía un piso pero era lo bastante acogedora para él y Rachel. Tenía un patio delantero amplio y otro trasero de parecidas proporciones. Habían tres habitaciones en la propiedad, estaba situada a pocas calles de la escuela de Rachel y un tanto alejado del banco central. Y eso era algo que Seokjin tendría que arreglar pronto.
Yoongi aún con su cabello húmedo se movía por la sala que ya estaba casi equipada, pero todavía había mucho por desempacar, las cajas estaban por todo el lugar.
—Tengo que entregar la casa en una semana, luego de eso me vendré aquí con Rach. —Seokjin estaba en la isla de la cocina cortando uno trozos de pollo para saltearlos en el sartén.
—Vas a necesitar ayuda para desempacar y ordenar todo
—No, osea si, pero no lo haré de un día a otro.
—Hay personas que pueden hacerlo por ti, cariño —Yoongi se paró detrás del azabache y lo abrazó por la cintura descansando también su mejilla en esa amplia espalda —yo te ayudaría pero no puedo forzar mis heridas.
—Por supuesto que no, amor —Seokjin se giró y llevó sus manos hasta el cuello del rubio —recién saliste del hospital y sobre lo otro la respuesta es no, también. No le vamos a pagar a otras personas para arreglar esto.
—¿Por que no?, yo puedo hacerlo, incluso no serían cualquier persona, podrían ser los muchachos de la academia —se encogió de hombros —ni te imaginas cuentas casas pinté para mis superiores cuando era un aprendiz.
Seokjin se rió y besó a su hombre con una sonrisa en los labios y con su corazón contento.
Yoongi se acercó un poco más hasta que estuvieron pecho con pecho. Sus manos tomaron la fina cintura del menor y ambos cerraron sus ojos. Sus labios no dejaron el otro, sus manos no dejaron de tocarse en todo momento y sus corazones no dejaron de latir mientras se amaban un poquito más en ese nuevo lugar.
El beso se detuvo cuando la puerta fue golpeada. Yoongi lo dejó ir y Seokjin sintió su estómago pesado mientras abría la puerta.
Taehyung estaba frente a su puerta con su cabello castaño peinado hacia atrás y en su frente un cintillo negro que no dejaba caer los rebeldes cabellos. Su sonrisa calentó el cuerpo de Seokjin quien no aguantó y lo tomó de la chaqueta para darle un beso húmedo y caliente en los labios.
—Tan jodidamente sexy, Tae —los ojos de Seokjin brillaron mientras veía al castaño lamerse los labios luego del beso.
—Hola Jinnie. —Sonrió y levantó la mirada por sobre el hombro del azabache y tragó al ver a Yoongi sonriendo de lado mientras lo miraba.
—Pasa —Jin cerró la puerta y se quedó un momento ahí para calmarse, había dicho que tomarían las cosas con calma con Taehyung pero él a la primera oportunidad que tuvo se había tirado encima. Él sabía que todo esto era nuevo, que no podían apurar las cosas pero Taehyung era tan importante para su vida como lo era Yoongi.
Y los quería a ambos a en ella.
Taehyung se quitó su chaqueta y bajo esta una bonita camisa blanca les dio la bienvenida.
A Seokjin se le hizo agua la boca mientras veía lo bien constituido que estaba el castaño, su cuerpo realmente había cambiado desde que ellos habían sido novios. Y cuando Seokjin miró a Yoongi supo que su novio estaba pensando lo mismo.
—Hola Yoon —dijo el chico mirando al policía.
—Hola, Tae. —Yoongi metió las manos en sus bolsillos y mordió su labio cuando el menor se acercaba a él.
—Te ves bien. —Se paró justo frente al rubio y miró en dirección a Seokjin que estaba paralizado al lado de la puerta —¿Puedo besarlo? —preguntó hacia el azabache.
Seokjin asintió despacio con su boca entre abierta mientras los miraba a ambos.
—Claro que puedes besarme si también besas a mi novio —Yoongi se burló.
Taehyung volvió su mirada a él y sin decir nada más plantó un beso en los labios del rubio quien jadeó al sentir la lengua ajena contra la suya.
Seokjin lamió sus labios mientras veía a esos dos hombres besándose como si la vida se les fuese en ello. Bajó su mano hasta su entrepierna y se masajeó con la palma de su mano.
Cuando Taehyung soltó a Yoongi volvió a mirar a Seokjin con una sonrisa lasciva en sus labios.
Yoongi miró a su novio y cuando todos estuvieron mirando a los otros se dieron cuenta que quien tenía todo el poder dentro de la inminente relación era nada más ni nada menos que Taehyung.
Y esa fue una caliente revelación que daba el inicio a una inesperada noche.
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—Estuve revisando los cursos de mi antigua universidad y creo que podría regresar solo que ahora me enfocaría en otra cosa.
Seokjin asintió mientras tomaba un sorbo de vino, estaban cenando los tres en su nuevo comedor y habían conversado de muchas cosas. Ahora mientras terminaba él su vino, Yoongi su vaso de agua y Taehyung su té, Seokjin se tomó un momento para observar a esos dos maravillosos hombres que lo acompañaban.
—¿Por que no quieres volver a teatro? —Yoongi dejó su vaso y se acomodó en la silla para mirar al chico frente a él.
—Uh, ya perdí todo un año y la verdad es que ya no quiero eso, ahora quiero algo tranquilo. —Taehyung resopló y miró la bonita taza que tenía entre sus manos —eso es la fotografía pero no estoy seguro si me pueden becar.
—Eso de las becas es una verdadera mierda —Seokjin dejó su copa sobre la mesa —trámites y más trámites para dar una beca que a veces ni cubre el monto mensual.
—Cierto, por eso son mejores las instituciones —Yoongi se levantó de la silla y caminó hasta donde tenía su chaqueta. —¿Son las diez, cierto?
Sí, contestaron Seokjin y Taehyung.
—¿Son tus medicinas? —Taehyung observó al policía mientras esté volvía a su lugar en la mesa.
—Si, para el dolor y todo eso. El lunes tengo terapia —su ceño fruncido indicaba lo mucho que odiaba el estado en el que se encontraba. —Me dieron dos semanas de reposo y luego de eso podría volver al trabajo.
—Tienes que recuperarte antes de poder volver, gatito. —Seokjin resopló —Yo lo único que quiero es volver a trabajar.
—¿Cuando vuelves, Jinnie?
—Cuando mi psiquiatra crea que estoy listo.
Taehyung asintió y luego mordió su labio —hay algo que quiero decirles a ambos.
Yoongi y Seokjin se miraron. El azabache sintió su pulso acelerarse por lo que no pudo decir nada y fue Yoongi quien más tranquilo, como siempre, respondió por ambos.
—¿Que es Tae?
El castaño lamió sus labios y se dio todo el ánimo para hablar con esos dos hombres que tanto causaban en él.
—Uh, bueno… Quizá no es lo que quieren escuchar de mi esta noche pero es necesario, creo yo. —Taehyung se dio un momento y prosiguió —estos días han sido una mezcla de emociones y sentimientos, hace mucho que no me sentía así y ciertamente que volver a verte Seokjin ha sido lo mejor que me pudo pasar. También el conocerte un poco más Yoongi fue un gran descubrimiento y me gustó mucho, pero necesito tomarme esto con calma y alejarme de ustedes por un tiempo.
Ambos abrieron sus bocas para replicar pero Taehyung alzó una de sus manos para que no lo interrumpieran.
—Entiendo la idea de amarnos todos, es algo maravilloso ¿No?, pero aún así no quiero matar a mi abuela de un paro cardíaco, yo no podría tener una relación y quedarme callado, ni siquiera sabemos cómo funcionaría. He estado pensando en la niña y ella ya no necesita más cambios en su vida, es tan pequeña… Me gustaría decir que esto que queremos formar se verá bien pero no es así. Ustedes están juntos y eso está bien para mi —Taehyung entrelazó sus dedos y tragó saliva —siempre he pensado en que debes ser feliz Jinnie y Yoongi es lo mejor para ti.
El silencio se instauró en el lugar. Seokjin quien estaba mirando a Taehyung sintió dolor por sus palabras, podía entenderlo pero aún así le daba tristeza.
—Ni siquiera hemos llegado a conversar de lo que sería esta relación ¿y tú ya no quieres intentarlo?
Yoongi movió su cuello y llevó su mano hasta la de Seokjin para calmarlo. Luego miró a Taehyung y le sonrió sin mostrar sus dientes.
—Tienes razón en todo lo que dijiste, quizás esto fue muy apresurado y nuevo. Lo sé, también es algo diferente para mi y para Seokjin, no te sientas culpable o mal por eso.
Seokjin apretó su mandíbula y se levantó de su silla —recogeré los platos.
Taehyung agachó la mirada y la culpa lo azotó —lo siento —dijo bajito.
—No lo sientas —Yoongi suspiró —Seokjin te quiere con él, creo que no se esperaba esto de ti. No después de lo que hemos hecho estos dias.
—Lo sé, es que —castaño tragó —tengo miedo. —Taehyung alzó la mirada hacia la cocina y como Seokjin no estaba cerca él dijo: —tengo miedo de salir herido, ustedes se aman, no quiero sentirme como un intruso entre medio de algo que están formando.
El rubio rió bajito —Tae, jamás podría ser así, ¿Tú llegas a dimensionar cuanto te ama Seokjin?
—Yo no lo sé, le hice mucho daño en el pasado.
—Y él te perdonó.
—Si —murmuró bajito.
—Mira, sé que esto es inusual y por supuesto que no es normal o para lo que todos llaman normal, hemos querido tomarlo con calma pero cada vez que estamos cerca de ti olvidamos por completo que no llegamos todavía siquiera a conversar sobre esto. Pero si tú decisión es pensarlo mejor yo no voy a insistir, quiero que estés tranquilo y que no sientas que estás haciendo algo indebido o algo así.
—Pero ¿y Jinnie?
Ambos miraron hacia la cocina, no podían ver al azabache en el lugar.
—Creo que deberías hablar con él, yo iré a descansar un momento, esas pastillas me dejan un poco imbécil, pero antes necesito saber que estás bien.
—Lo estoy, gracias por escucharme.
—Gracias a ti por confiar en mí, Tae—Yoongi se levantó y cuando llegó hasta donde el castaño dejó un beso en su mejilla y luego se alejó hasta la habitación principal.
Taehyung respiró y se levantó de la silla para buscar a Seokjin. No sabía como iría a terminar todo con él, Seokjin estaba claramente molesto por su decisión.
Pero se dio el ánimo suficiente para llegar hasta el hombre que amaba y cuando lo vio su corazón dio un vuelco en su pecho.
—¿Jinnie?
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No hay estrellas hasta que Taehyung se decida. No es algo que se pudiera decidir de un momento a otro ¿No? Una cosa es que le gusten estos dos hombres y otra es que quiera el cambio de vida que ellos le ofrecen.
Se que hay personas que no les gusta como está terminando esto pero yo no puedo hacer que cambien de parecer, solo espero que sean respetuosas con sus comentarios. Y sólo acotar que no todos los All terminan con el protagonista con una pareja, si seguimos la línea del all, es un poco más lógico que el protagonista pueda quedarse con dos personas.
Ahora me despido y les deseo que tengan un buen fin de semana a pesar de todo lo que está pasando ❤️
Gracias x tanto ♥️
Nos leemos pronto.
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