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Espero que les guste, está escrito con mucho cariño.

Dedicado a todos quienes siguen conmigo.

Lxs amo infinito 😍💜

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Taehyung tenía su bolso listo a un costado de la puerta de la casa de la señora Moon.

Ya se había despedido de los nietos de la mujer que se habían ido a la universidad temprano esa mañana.

El rubio se pasó una mano por el cabello nervioso, había pasado un largo tiempo antes de volver a ver a Seokjin y eso lo tenía bastante intranquilo.

La puerta fue tocada y el chico casi salta en su sitio. La señora Moon le hizo señas para que se quedara en la sala mientras ella abría la puerta.

Un hombre serio y de cortos cabellos rubios fue lo que encontró frente a ella.

—¿Si?

—Hola, soy Min Yoongi, vengo por Taehyung.

Ella lo miró con los ojos entrecerrados y no se movió de ahí.

—Pensé que vendría Kim Seokjin, él es quien dijo que vendría a buscar a Tae.

—Lo sé, pero él tuvo problemas en el trabajo y me pidió venir por el chico.

Ella no muy convencida lo dejó entrar a su hogar.

Yoongi se quedó a un costado de la puerta y observó la acogedora casa. La decoración era bastante sencilla pero el ligero aroma a pan horneado le hizo recordar a la casa de su abuela.

Taehyung se acercó y un poco tembloroso a quien había cuidado de él todos esos días y le dio un abrazo apretado.

—Muchas gracias por todo, estaré siempre muy agradecido por su ayuda, me salvó la vida...

—No digas más hijo, nos volveremos a ver. Cuídate ¿sí?, no te olvides de esta vieja.

Taehyung la abrazó una vez más y tomó su bolso para seguir al policía que ya se había despedido y caminaba unos pasos delante de él.

Se subieron al automóvil del mayor y el silencio se instaló en el lugar.

Yoongi aclaró su garganta y miró al chico tembloroso al lado de él.

—Seokjin quería venir pero tuvo que quedarse y me envió a mi. No tengas miedo, yo no dejaré que nada malo te pase ¿si?

El chico respiró un poco más tranquilo pero de todas formas se sentía un poco intimidado por el hombre.

Y estaba casi seguro que aquel hombre con mirada severa era quien ahora estaba junto a Seokjin como pareja.

—G-gracias por venir.

—No te preocupes, iba a venir de todos modos. Ahora ponte el cinturón.

Taehyung hizo caso inmediatamente y el automóvil partió rápidamente rumbo a su antigua ciudad.

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Seokjin miraba inquieto la pantalla de su computador. Odiando estar atorado en el banco por lo menos por unas horas más mientras todos se preparaban para la reunión mensual.

¿Como lo había olvidado?

Todos los meses había una reunión para ver balances y las metas de los distintos departamentos dentro del banco central y Seokjin lo había olvidado completamente.

Con sus dedos picando por sacar su teléfono corrió hasta el baño apenas vio el mensaje de Yoongi.

Se encerró en uno de los cubículos y suspiró tranquilo cuando lo leyó.

"Tengo al chico conmigo, todo va bien, estamos comiendo en una gasolinera, estaremos llegando en dos horas".

Luego de eso se quedó mucho más tranquilo y volvió a su puesto de trabajo esperando que todo saliera bien y que Taehyung llegara sin novedad a casa de sus abuelos.

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—Gracias por la comida.

—Yoongi, dime por mi nombre.

Taehyung asintió sin mirarlo y siguió comiendo en silencio.

Yoongi lo observó un momento, deteniéndose en sus manos. El chico tenía unas manos muy grandes y suaves, su piel en general se veía suave y tersa. Eran sin duda muy bonitas.

—¿No vas a comer?

El rubio policía levantó la mirada y lo miró a los ojos.

Bonitos ojos color chocolate que lo miraban curioso.

Yoongi asintió, debía dejar de mirar así al chico frente a él, pero lo cierto era que le parecía un tanto atractivo, no tanto como Seokjin, pero era muy guapo con todo ese cabello rubio revuelto en ondas por todos lados.

Comenzó a comer y miró hacia la cafetería, su arma descansando en la parte posterior de su pantalón. No quería pecar de confiado, en cualquier momento podría caer el ex novio del chico, Yoongi lo había investigado a fondo sin encontrar nada que pudiera revelar si el tipo era peligroso o no.

Volvió su mirada a Taehyung, este ya había terminado de comer.

—¿Puedo hacerte una pregunta?

—S-si.

—¿Crees que él volverá por ti?

El chico abrió sus ojos y luego ladeó su cabeza tiernamente. —¿Quién?

Yoongi reprimió una sonrisa y volvió a formular la pregunta entendiendo que Taehyung todavía no estaba recuperado del todo.

—¿Crees que tu ex novio te buscará?, me refiero al loco que te dejó sin documentos y dinero.

—No lo sé, creo que en algún momento lo hará —Taehyung se abrazó a su mismo odiando la sensación de inseguridad que sentía.

—Deberías denunciarlo.

El chico negó en repetidas ocasiones —no puedo, ¿quién me creería?

—Entiendo, pero si lo denuncias yo podría asegurarme de que el tipo no vuelva a acercarse a ti.

—¿Tú?

—Soy policía Taehyung y estás mierdas que le causan daño a otras deberían pagar por lo que hacen. Seokjin me dijo que él te golpeó ¿es así?

—Si, me golpeó contra una pared.

—¿Fuiste al hospital?

—No.

—Bien, eso es lo primero que haremos.

—¿Que? —Taehyung se levantó de la silla torpemente siguiendo los pasos de Yoongi quien estaba caminando hacia la caja para pagar.

—Hospital chico bonito, tu salud es importante y ya sabes lo delicado que es que tengas un golpe en tu cabeza.

—¿Tú lo sabes?

Yoongi mantuvo la puerta abierta para que Taehyung saliera. Caminaron en silencio hasta el automóvil del policía y solo cuando estuvieron dentro de este es que el mayor respondió.

—Si, yo estuve en la investigación de tu accidente —Yoongi no lo miró cuando lo dijo, se encontraba extrañamente un poco incómodo con el tema. Él no había encontrado a quien había dañado al chico que estaba a su lado.

—Oh, mamá nunca me habló de eso —el menor se removió en el asiento y miró hacia fuera un momento, luego volvió su mirada al hombre tenso que estaba agarrando firmemente el volante con sus manos —¿Pudieron saber quién fue?

—No todavía, la investigación está en un punto muerto ahora mismo.

—Entonces... ¿no fue un accidente?

La voz apagada de Taehyung hizo que Yoongi sintiera pena por el chico. Ese accidente le había arrebatado su vida, le había hecho cambiar sus planes. No había sido justo.

Pero había algo más que tenía a Yoongi con el estómago revuelto.

Él se había quedado con Seokjin, él tenía lo que Taehyung había perdido y lejos de sentirse como un ganador, el policía se vio a si mismo como un maldito ladrón que sacó provecho de una terrible situación.

Aunque nunca fue esa su intención cuando se acercó a Seokjin...

¿O si lo había sido?

Yoongi no respondió a la pregunta del chico y simplemente hizo andar el automóvil para llegar de una vez a la ciudad y llevar a Taehyung al hospital.

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—¿Por que están en el hospital? —Seokjin se metió a su automóvil y encendió el motor con su corazón latiendo a mil por hora en su pecho.

—Es por ese golpe que le dio su ex prometido, me pareció que era necesario traerlo.

Seokjin cerró los ojos y trató de calmarse —¿Él está bien? —no quería sonar tan preocupado, pero si lo estaba. Malditamente preocupado de su ex pareja.

—Está siendo evaluado, lo traje al mismo hospital en el que estuvo cuando tuvo el accidente, creo que es el mejor lugar para él.

—Gracias Yoonie, no sé como te voy a pagar esto que estás haciendo por mi. Tienes un corazón de oro.

Hubo un silencio antes de que el policía volviera a hablar.

—Te avisaré cualquier cosa... aunque creo que deberías venir, yo entro a trabajar a las ocho.

Seokjin miró la hora en el tablero de su automóvil.

19:15.

—No lo sé Yoon... avísame si hay alguna novedad, enviaré a Jennie, le hará bien verla... para que no se sienta tan solo.

—Bien, entonces hablamos más tarde.

—Uh, ¿Yoonie?

—¿Si?

—Te quiero.

—Precioso... yo tambien. Llega bien a casa.

—Si —susurró Seokjin y luego la llamada se cortó.

Metió el teléfono en el bolsillo de su chaqueta y salió del estacionamiento, pensando en miles de cosas camino a casa. Con su corazón dividido en dos partes y rogando por que Taehyung estuviera bien y ese maldito golpe en su cabeza no hiciera más daño del que ya estaba hecho.

Cuando estacionó en su casa pudo revisar el celular. Por obvias razones no había podido ver los mensajes.

"Taehyung va a quedar hospitalizado"

"No te asustes, es solo por observación, le van a tomar unos exámenes mañana temprano, necesita útiles de aseo y un pijama. Dice que no le digamos a su abuela, no quiere preocuparla".

Seokjin tragó y miró hacia su casa. Lamió sus labios lentamente y bajó de su vehículo.

Mientras caminaba le envío un mensaje rápido a Yoongi y entró a su casa.

El aroma a comida llegó a él haciéndolo sentir enfermo.

¿Que le estaba pasando?

Jennie salió de la cocina y lo saludo de inmediato.

—Hola —dijo sin quitarse su chaqueta de traje negro —¿Dónde está mi princesa?

—Arriba, tengo lista la cena señor Seokjin.

El azabache suspiró, ya se había rendido a que la chica no usara el señor.

Miró a Jennie y se encontró debatiéndose si contarle que Taehyung estaba en la ciudad, si le decía obviamente ella iba a querer ir a verlo... eso no era nada raro, ni malo.

Entonces Seokjin se dio cuenta que él era quien quería ver a Taehyung.

Y eso lo asustó.

—Yo no cenaré... ¿puedes quedarte un rato más con mi pequeña?, debo salir a hacer algo importante.

—Si, por supuesto.

—Te voy a pagar por las horas que te quedes y te irás en taxi a tu casa ¿si?

—No se preocupe señor. Vaya tranquilo, yo cuidaré a la pequeña.

Seokjin murmuró un gracias y subió hasta la habitación de su pequeña para darle un beso y explicarle que no podía cenar con ella.

La niña pareció entender y lo dejó ir sin hacer más preguntas mientras dibujaba.

El azabache fue directo a su armario y tomó uno de sus pijamas limpios. Luego fue hasta el baño en donde tenía algunos artículos de aseo sellados.

Miró su teléfono y observó la lista que Yoongi le había enviado, habían cosas que no tenía en casa por lo que pasaría a la primera farmacia que encontrara a comprar lo restante.  

Metió todo en un bolso negro y sin cambiarse siquiera de ropa bajó las escaleras para luego despedirse de Jennie desde la puerta gritándole que volvería pronto.

No iba a negar que estaba muy nervioso, su corazón parecía correr una maratón en su pecho. Respiró para calmarse mientras manejaba por las tranquilas calles. A esa hora eran poco los vehículos que circulaban.

Después de comprar lo que faltaba Seokjin se encontró estacionando su automóvil en el amplio estacionamiento del hospital.

Se quedó mirando las puertas de entrada por un largo rato dándose ánimos, aunque no entendía porque estaba tan nervioso si lo más probable era que no podría verlo.

¿Y porque rayos quería verlo?

Finalmente tomó el bolso y se bajó de su automóvil. Puso la alarma y comenzó a caminar lentamente hasta el interior del hospital.

Luego de pasar por varios mesones de información lo dejaron entrar hasta el piso en donde se encontraba Taehyung.

Muy a su pesar la enfermera que lo atendió le dijo que podía él mismo pasar un rato a ver al paciente y entregarle las cosas.

Él solo asintió y se encaminó hasta la habitación del chico que tanto había amado alguna vez.

Entró a la sala y se encontró con Taehyung mirando por la ventana vestido con su ropa habitual.

Tragó al ver su espalda bien constituida, ese cabello rubio que caía casi hacia sus hombros. Seokjin pensó inmediatamente en que podía fácilmente amarrarlo... o tirar de él.

Cerró los ojos antes sus pensamientos y aclaró su garganta.

Taehyung se giró de inmediato y su boca se abrió un poco mientras lo miraba.

Su respiración se estancó y miró sus pies unos segundos para calmarse.

—Hola —dijo Tae acercándose de a poco.

—Hola, te traje unas cosas...

—Oh, muchas gracias, apenas pueda te voy a pagar lo que has gastado.

—No es necesario, no pude comprar un pijama nuevo, traje uno de los míos, espero que no te moleste.

Taehyung negó rápidamente. —Está bien, gracias de nuevo... pensé que vendría Jenn.

Seokjin miró hacia la ventana rogando que Taehyung no se diera cuenta que estaba avergonzado. Rogaba por que el chico frente a él no recordara esas cosas de él.

—Tus orejas están rojas Jinnie.

Maldición, Seokjin no sabía para donde mirar.

—Me tengo que ir Tae.

El rubio asintió mientras estiraba su mano para recoger el bolso que Seokjin le estaba ofreciendo. Sus manos se rozaron levemente haciéndolo estremecer.

Taehyung dejó el bolso bajo sus pies y sin pensar demasiado se lanzó a los brazos del azabache. Sintió el cuerpo tenso del otro, pero no dio pie atrás.

Escondió su nariz en su cuello y susurró otro gracias mientras se impregnaba de su fragancia.

Seokjin lamió sus labios y aunque no quería hacerlo terminó rodeándolo por sus brazos y acercándolo más hacia él. Una de sus manos se fue a acariciar sus cabellos rubios.

Todo se volvió más triste cuando Taehyung comenzó a temblar, gruesas lágrimas mojando su chaqueta.

Seokjin lo apretó aún más fuerte porque entendía esas lágrimas, él mismo había pasado un infierno sin tenerlo a su lado.

Y ahora que lo tenía en sus brazos una mezcla de sentimientos se apoderaron de él.

—Yo lo siento tanto Jinnie... perdí todo.

—Shh, no digas nada ¿si? —Seokjin cerró los ojos cuando sus labios rozaron la mejilla mojada del rubio cuando esté levantó un poco su cabeza.

—Necesito que me perdones... necesito saber que tanto daño le ocasione a la princesa por favor.

Seokjin abrió los ojos y tomó sus mejillas, ahora eran sus propias lágrimas que mojaban su chaqueta.

—¿La recordaste?

—Si, le regalé un tutú rojo.

—S-si... lo hiciste Tae.

—Me arrepiento de haberla rechazado, me odio mucho por hacerla llorar... lo siento —lloró de nuevo escondiendo su rostro en su cuello. —Lo siento, lo siento mucho...

—Lo sé, no digas más ¿si? —Seokjin acarició su espalda lentamente consolando. Su nariz rozó el cabello de Taehyung y se obligó a no cerrar los ojos al sentir su aroma.

Taehyung asintió y se aferró a su pecho.

—Dile que lo siento, por favor.

—No Tae, no le diré nada.

El rubio se separó lentamente sorbiendo por su nariz. Entendía completamente a Seokjin, si él estuviera en el lugar del azabache jamás dejaría que la persona que hirió a su hija en el pasado se acercara a ella.

—Lo entiendo...

—Se lo dirás tú.

Taehyung sintió su labio temblar y un enorme puchero se formó en estos al saber que Seokjin le estaba dando la oportunidad, la maravillosa oportunidad de remediar sus actos.

El rubio volvió a romper en llanto y Seokjin lo abrazó más fuerte.

Luego de varios minutos se separaron.

Taehyung tomó el bolso y entró al baño a cambiarse.

Seokjin no sabía si quedarse ahí y esperar. Los minutos pasaron y como nadie llegaba a sacarlo de la habitación se quedó allí mientras esperaba.

Se acercó a la ventana y observó las luces de la ciudad. Su corazón no dejaba de latir rápido en su pecho.

Dios, jamás se había sentido tan confundido antes en su vida.

Pensó en Yoongi y en lo que diría este al verlo tan cariñoso con Taehyung.

La puerta se abrió y el rubio salió con el pijama puesto y mucho más calmado que antes.

Se acostó de inmediato y Seokjin pudo ver lo cansado que se veía, por lo que decidió que era momento de volver a su casa.

Se acercó y lo arropó. Se miraron unos segundos antes de que Seokjin cerrara la distancia y le diera un beso en su mejilla.

—Descansa ¿si?, mañana vendré por ti cuando te den el alta.

Taehyung lamió sus labios y asintió.

Después de eso cerró los ojos y aunque llevaba varios días durmiendo solo unas cuantas horas, esa noche se durmió enseguida...

Con una mano cariñosa tocando su cabello y una voz suave susurrándole una cancion hasta que finalmente se dejó ir en un suelo liviano y sin pesadillas.

★☆★

¿Recuerdan que Jin en el capítulo anterior había decidido por Yoongi? Pues...

¿Se dan cuenta que siempre hay 3 estrellas en el final de la historia hace mucho rato? 😊.

En el próximo capítulo veremos en  que está Hoseok 😬.

Espero que les haya gustado y bueno tb espero que el giro que le daré a la historia sea del agrado de la mayoría.

Se vienen tiempos difíciles.

Lxs amo un montón 💜
Gracias x todo 💕

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A veces me gustaría jugar a preguntas y respuestas pero sé que moriré ignorada kahdjska