Bueno, la apuesta no se ve muy bien luego de una semana y aunque Niall y yo nos encontramos casi todas las noches, todo lo que él hace es hablar de Cenicienta. Si odiaba ese cuento de hadas antes, ahora no tengo siquiera palabras para describir mis sentimientos hacia ella. Sí, hablamos acerca de otras cosas también, pero no es lo mismo. Ese tema siempre logra hacerse camino hacia nuestras conversaciones y estoy cansada. Tan cansada que a veces pienso en solo gritarle en el rostro que soy la maldita chica que lo besó en el baile, pero eso significaría perder la apuesta. Así que muerdo mi lengua y desvío la mirada cada vez que tengo ese sentimiento.

Charlie piensa que es divertido y sigue diciendo que estoy celosa, y es todavía más divertido porque estoy celosa de mí misma. No entiendo su mente retorcida, no creo que sea para nada divertido.

-Todo esto estaría resuelto si solo se lo hubieras dicho, - Charlie comenta cuando estamos almorzando y ruedo mis ojos, lo que hace a Liv reír.

- ¿Qué no ves el problema? ¿Por qué le diría si él no gusta de mí? Ceni-jodida-cienta no es yo. La chica que habla con él en los establos, la chica que le está enseñando a cabalgar un caballo, no es la chica del baile y a él no le gusto de esta manera. Él quiere a la chica del baile, quien no soy yo, - explico por la millonésima vez. -Somos la misma pero al mismo tiempo no lo somos ¿qué tan difícil es eso de entender?

-Bastante- responde con el ceño fruncido y Olivia estalla en carcajadas.

-Ella quiere que Niall la invite a salir y deje de buscar a Cenicienta porque ella no se siente como esa chica, - Olivia explica.

- ¡Oi! Yo no quiero que me invite a salir, - protesto y ahora Liv rueda sus ojos. Hasta Charlie bufa.

-Vamos, hasta yo entiendo eso. A ti te gusta, mucho, pero estás enojada porque a él le gusta esa parte de ti, la cual a ti no te gusta, más ¿lo entendí ahora?- él trata y Liv suelta unas risitas pero yo frunzo.

-No.

-Entonces me rindo, - dice y avienta sus brazos al aire. -Esto se volvió demasiado complicado para mí.

Liv sigue riéndose cuando golpea su hombro con el mío. -Para que conste, yo sí pienso que deberías decirle. Solo para ver que hace. Nunca sabrás hasta que se lo cuentes. Si quieres puede ser después de la apuesta, - ella me guiña y sonrío porque eso es otro tema importante. En serio quiero ganar esa apuesta.

Supongo que mis amigos están en lo correcto, estoy algo celosa de Cenicienta, esta versión de mí que no me gusta. Ver a Niall tan obsesionado con encontrar a esta chica en serio me pone en un mal humor, aunque sé que técnicamente está buscándome a mí. Aún así me molesta. Pensé que verlo con otras chicas me haría superar cualquier sentimiento que tuviera por él, pero estaba equivocada. Solo me vuelve loca. Lo he visto con cada chica rubia ahí afuera, hablando, coqueteando, y siempre siento mis pullos tensarse. Y la peor parte es que Kimmy y Jenny se dieron cuenta de lo que Niall está haciendo y ellas están haciendo todo lo que pueden para captar su atención.

Aunque estoy impresionada. Mis hermanastras son ambas rubias pero Niall no las ha hecho probarse la máscara. Creo que es más inteligente de lo que pensé.

Así que no solo tengo a Niall diciéndome su progreso cada noche, también tengo a mis hermanastras preguntándome cada día porqué Niall está haciendo gente probarse una máscara y qué está haciendo. Tengo que mentir todo el tiempo porque me rehúso a dejarlas saber las reales intenciones de Niall. Sé que siempre las llamo estúpidas, pero no lo son, tal vez un poco despistadas. Muy bien, bastante despistadas, pero culpo a Rhonda por ello. De todas formas, temo que si ellas saben en realidad lo que Niall está tratando de hacer ellas puedan tal vez sospechar que soy la chica que él está buscando porque solo yo me escaparía de una celebridad en este centro de retiros.

Más tarde el día de hoy me topo con Niall y él está tan contento que no me ve yendo con todas las sábanas limpias y en efecto chocamos.

- ¡Oh, Ella! Eres tú ¿Estás bien?- pregunta, ayudándome a retener mi balance. Afortunadamente no boté las sábanas.

-Sí, no te preocupes, - respondo alejándome un poco.

-Genial. De hecho estaba buscándote, - dice y parpadeo sorprendida, mi corazón acelerándose en mi pecho. Nosotros normalmente solo nos encontramos en los establos porque él sabe que 'no puedo' estar cerca de celebridades -la manera linda en que se lo pongo para decirle que no me gustan las celebridades en general- así que es raro que esté buscándome antes de la hora de la cena.

- ¿Estabas?- pregunto y él asiente vigorosamente.

- ¡Sí! Estoy tan emocionado ¡Estoy un noventa y nueve por ciento seguro de quién es Cenicienta!- continúa y las esperanzas que se estaban construyendo en mi pecho se desploman tan rápido como crecieron. Siento como tirar las sábanas pero en vez de eso las sostengo más fuerte. -Así que prepárate para perder esa apuesta.

-Sí, claro, - respondo, rodando mis ojos y él ríe.

-Te lo estoy diciendo, lo tengo casi resuelto. Solo necesito una prueba más. - suspiro porque no puede ser cierto. Él no está cerca de encontrar que soy yo. Probablemente es otra chica siguiendo todo el juego de Cenicienta.

-Lo que tú digas, debo irme, - digo, mi humor en el suelo por esto.

-Oh- dice y no espero por otra palabra, solo paso frente a él.

¿Por qué no puede solo dejar ir a Cenicienta? Ella no está aquí, pero yo sí. Yo, Arabella, no una maldita princesa de un maldito cuento de hadas. Ya ni siquiera me importa que él sea una celebridad, bueno, al menos no tanto. El punto es que yo podría ver más allá de eso si él solo... ugh, ni siquiera sé. En realidad no sé qué es lo que quiero que haga. Sí, quiero que olvide todo acerca de Cenicienta y me vea, pero no sé si quiero algo con él.

Trato de enfocarme en todo el trabajo que tengo que hacer así no debo pensar en Niall y su estúpida búsqueda. Debería aceptar que perdí contra me, que Niall gusta de Cenicienta más aunque ni siquiera la conoce. Él no me conoce tanto tampoco, pero podría, si pudiera superar toda la cosa de encontrar a la chica del baile.

En un punto y en vez de ir a cenar con Liv y Charlie, me quedo en un pasillo, mi espalada contra la pared y cierro mis ojos, suspirando pesadamente. No estoy solamente cansada de todas las cosas que hice durante el día, pero también casada de toda esta porquería de Cenicienta. Solamente cansada en general y desearía que pudiera solo tener un día de descanso así podría dejar este lugar por veinticuatro horas para aclarar mi mente.

- ¡Hola!- una alegre voz interrumpe mi estado de paz y gimo. No puedo ni siquiera tener cinco minutos para mí.

Abro mis ojos solo para encontrar un sonriente Harry frente a mí, sus manos en su espalda mientras se inclina cerca para estar a mi altura. -Harry- digo, no exactamente saludándolo. - ¿Qué estás haciendo aquí?

-Estaba en mi camino hacia mi dormitorio cuando te vi aquí. Quería preguntarte si estabas bien o no, - explica y suspiro una vez más, mis ojos cerrándose por un segundo.

-No somos amigos, Harry. No tienes que preocuparte por mí, - le digo y lo escucho bufar.

-Oh vamos, no es como que creas eso. Sabes que puedo ser un gran amigo y podríamos hasta ver Harry Potter: El Musical, - sugiere y no puedo parar la sonrisa. - ¿Por qué no tratas de decirme lo que está en tu cabeza? Puede ayudar.

¿Debería decirle? No puedo exactamente hablar ya con Charlie y Liv sobre esto porque ellos solo piensan que debería decirle a Niall y terminar con esto, pero no quiero decirle. Harry no sabe nada acerca de esto y yo podría fácilmente omitir diagonal cambiar el nombre de su compañero de banda. Tal vez él puede ser una tercera parte imparcial en la historia y eso podría ayudarme.

-Es sobre este chico, - comienzo, aún un poco cuidadosa y él sonríe ampliamente cuando se da cuenta que realmente le voy a contar.

-Continúa- me invita parándose junto a mí, su espalda contra la pared también.

-Bueno, supongo que yo, uh, me gusta este chico, pero él en realidad no ve a la verdadera yo ¿sabes? Él está obsesionado con otra chica. Una chica que no está aquí y no quiere ser encontrada. Una chica que ni siquiera es real, - declaro y por el rabillo de mi ojo lo veo fruncir.

-Te refieres a Niall ¿cierto?- Harry pregunta y me ahogo con aire porque aparentemente no sé como respirar. Harry ríe por mi reacción pero yo no lo encuentro divertido ¡pude morir! -Eso pensé. Él me ha contado que ha estado pasando tiempo contigo, pero que también está buscando a otra chica. Tampoco lo entiendo, si me preguntas. - dice y suspiro bastante exhausta. -También pienso que es un idiota.

Parpadeo sorprendida, viéndolo fijamente, conmoción escrita sobre todo mi rostro. - ¿Qué? ¿Por qué?

-Porque como dijiste esta chica Cenicienta no quiere ser encontrada. Si ella sigue aquí, se está escondiendo de él y debe haber una razón. Apuesto a que es un mal besador, - me confiesa en un susurro y dejo escapar una risita. -De todas formas, él está obsesionado con una chica que no lo quiere mientras que ahí estás tú, linda, lista, divertida y eso sí bastante ruda a veces, - agrega y no puedo evitar reír. -Y claramente tú lo quieres pero él no ve eso. Se está perdiendo de una increíble chica y por eso es un idiota.

Río otra vez, deseando que Niall pudiera verme como Harry me ve, quien no está siquiera interesado en mí pero aún así el chico de cabello rizado me ve.

- ¿Debería hacer algo?- pregunto porque ni siquiera estoy segura de eso.

Harry me mira con una expresión seria, como si estuviera tratando de entender cómo funciona el mundo. -Podrías tratar de hacerlo celoso, - sugiere y le frunzo. -Sí, como hacerle ver que podría perderte, que alguien más podría ser lo suficientemente listo como para ver lo genial que eres y que si él no abandona toda la cosa de Cenicienta, entonces él va a perder su oportunidad.

Tan ridículo como suena, lo pienso. Podría pedirle a Charlie o hasta Harry que me ayudara con esto, o podría inventar a alguien solo para ver su reacción, pero entonces... ¿qué tan cliché es eso? Es como en cada libro diagonal película encuentras esa misma escena, de la chica tratando de hacer al otro chico celoso solo para que él se dé cuenta que ha sido ella todo ese tiempo. A veces ni siquiera funciona y la chica solo hace el ridículo, lo que se merece por usar ese truco.

Aún si fuese una buena idea, lo cual no es, no puedo hacerme hacer algo como eso. No soy de ese tipo. Mi vida ya tiene suficientes clichés, no necesito uno más y menos uno voluntario.

-Nah, no soy una amiga de los clichés y esto está encima del límite. Supongo que solo superaré todo esto sola y me olvidaré de él.

-Bueno, al menos traté de sugerir algo, - Harry dice y le sonrío. -Pero en serio, si él te deja ir, es el mayor idiota de la historia. Y patearé su trasero si lo hace.

Río otra vez, apreciando el acto considerado. -Gracias, Harry, - digo después con una sonrisa honesta la cual él responde con una de sus resplandecientes.

-Pare eso son los amigos, - es su comentario y yo meneo mi cabeza mientras me alejo, lejos de la pared donde nos estábamos recostando.

Le sonrío, realmente viéndolo a los ojos e inclinando un poco mi cabeza a la derecha.

-Sí, para eso son los amigos, - estoy de acuerdo y sus ojos se abren en sorpresa y deleite. -Te veo por ahí, Chico Polilla. - comienzo a caminar, más rápido de lo usual antes que él pueda decir algo y cuando estoy en frente de las puertas del elevador, me volteo justo para gritar: - ¡Y no pienses que por esto te dejaré ganar la copa este año!

Las puertas se abren cuando lo escucho estallar en carcajadas y entro pero antes que las puertas se cierren otra vez lo escucho. - ¡Hufflepuff ganará este año!

Río y meneo mi cabeza. Harry es seguro un chico especial.

Nota: ¡3 seguidas! Finalmente voy siendo responsable.