La campana suena y gimo. Al contrario de todos mis compañeros, yo temía este día. Se que debería estar feliz, se terminó la escuela. Más que acabada ya que este era mi último año. Pero no puedo estar feliz porque eso significa otro verano trabajando tiempo completo para Rhonda. Otro verano con mis hermanastras fastidiándome y forzándome a ayudarlas a cachar el ojo de alguna celebridad, aún si esa celebridad les dobla la edad. Nada puede detener a esas trepadoras sociales. Ellas solo sueñan en casarse con una celebridad y vivir la ‘Vida soñada’. ¿Cómo la gente puede ser tan tonta? En serio ¿Quién quiere eso?

Se que este es mi último verano con ellas, porque después de esto me voy a la universidad y no planeo volver. Estudiaré medicina, obtendré mi título y luego viajaré alrededor del mundo ayudando todo cuanto pueda. Mamá siempre quiso que fuese una doctora y que ayudara a las personas, cuando papá abrió el centro de retiros esperaba que trabajara ahí, siendo la doctora del lugar. Ahora nunca volveré aquí, no planeo en ayudar gente famosa la cual solo me recuerda lo que este lugar solía ser.

— ¡Ella! Vamos ¡Deja tu asiento!— oigo una voz masculina y levanto mi mirada para encontrarme con los ojos de Charlie.

Charlie es mi mejor amigo, un lindo y divertido moreno con el pelo rapado  y cálidos ojos avellanados. Hemos sido mejores amigos desde niños y me ha ayudado a mantener mi cordura. Dios bendiga su alma. La hubiera perdido hace años de no ser por él.

—No quiero ir a casa— lloriqueo pegando mi cara contra el escritorio. Ouch, eso duele.

— ¡Lo se pero no puedes quedarte en la escuela cuando se acabó! Ahora mueve ese lindo trasero tuyo— bromea tirando de mi brazo.

— ¿Qué trasero?— pregunto y él suelta una risita. Pongámoslo de esta manera: mi trasero no es mi más grande atractivo, nadie lo nota y Charlie sabe eso. —Nunca tuve uno.

—Si que tienes uno y solo haces las cosas peor para ti quedándote ahí ¡Así que levántate! No me hagas usar la Fuerza— él insiste y río.

Podemos o podemos no ser fans de Star Wars.

—Está bien, está bien— acepto con un profundo suspiro. La clase está vacía y tomo mi libro de texto y mi cuaderno, los meto en mi bolso y me levanto.

Charlie me sonríe radiantemente, pero no puedo estar tan emocionada como él. Él ama el verano porque logra hacer muchas cosas con su familia, ellos salen y se divierten. Es tan suertudo, tiene una gran familia. Un poco sobre protectora, pero solo porque ellos adoran a Charlie. Él también es hijo único. Siempre he dicho que su familia debería adoptarme y seríamos felices.

—Por cierto, tengo una sorpresa para ti— agrega Charlie mientras hacemos nuestro camino fuera de la escuela. Extrañaré este lugar, era mi santuario. No era popular, apenas si tenía amigos, pero era libre de Rhonda y eso es lo más hermoso del mundo.

Con mi brazo alrededor del suyo arqueo mis cejas — ¿Y qué podría ser eso, oh amado Charles?— digo con mi más elegante acento, burlándome de él. Su familia es bastante rica. La mía tiene un gran ingreso, vamos, ¡Tiene un lugar de retiro para celebridades! Pero nunca veo una libra de eso.

—Papá dijo que si quería convertirme en un hombre antes de la universidad necesito actuar como uno, así que este verano trabajaré— él comienza y asiento para que sepa que le estoy entendiendo. Charlie nunca ha trabajado en su vida así que estoy bastante intrigada. Vamos a estudiar medicina juntos en la universidad. ¡Tenemos tantos planes para el futuro! No puedo esperar a que este verano termine.

— ¿Y qué tienes en mente?— pregunto mientras nos dirigimos a su auto, una vieja camioneta. Él dice que es un clásico, así que ten mucho cuidado en insultar a su bebé frente a él. Pasa mucho tiempo arreglando esa camioneta, seriamente, está obsesionado. Todo lo que veo es metal y caucho, mientras él ve un vehículo con alma y corazón. Mi amigo es bastante especial.

—De hecho, ya tengo un trabajo— me dice abriéndome la puerta como todo un caballero. Charlie tiene los mejores modales y todo se lo tenemos que agradecer a la Sra. St. James. Una linda mujer. — ¿Adivina qué? No estarás sola este verano. 

Me congelo, mirándolo fijamente con incredulidad escrita sobre todo mi rostro. Parpadeo un par de veces como si de esa manera pudiera hacer que todo cobre sentido. Pero no, seguimos en su camioneta y él sigue mirándome fijamente con una sonrisa divertida.

— ¿Me estás jodiendo?— exclamo y él se ríe. ¡Charlie se ríe! —No puedes trabajar para Rhonda ¡Cualquier cosa es mejor que eso! Corre lejos de ella y si puedes llévame contigo, ¡Hazlo! Yo estoy atrapada con ella, tú no tienes que— grito jalando su brazo en un gesto de desesperación.

Aún riéndose, él coloca su otra mano encima de la mía. —Relájate, va a estar bien. Solo es un verano y algo me dice que me necesitas más que nunca esta vez. No te quiero matando a alguien antes de que vayamos a la universidad. Además, tal vez llegue a tomarme algunas fotografías con celebridades— él me guiña pero yo sacudo mi cabeza. —Ya está hecho, Ella. Ya hablé con la Sra. Drennan y firmé un contrato. Comienzo mañana en la mañana.

— ¿Y qué vas a hacer, uh? ¿Limpiar habitaciones y baños como yo?—  Escupo. No puedo creer que él sea así de estúpido.

—Nope— responde explotando la P mientras comienza la ignición. —Sabes que soy bueno con los motores, así que trabajaré con todos los carros y esas cosas. También como salvavidas algunos días.

—Eres el más grande idiota que existe, solo quiero que sepas eso— señalo, cruzando mis brazos, enojada con él.

—Me agradecerás luego por tomar este trabajo. Además, si sobrevivo a tu madrastra, puedo enfrentarme a cualquier cosa en la vida. — Me rió porque es cierto. Solo espero que sobreviva.

• • •

Me quejo mientras camino dentro de la habitación ¿Cómo puede una celebridad ser tan sucia? Solo hacen mi trabajo más duro. Se que esto es un centro de retiros y que vienen aquí a relajarse y todo, pero son despiadados. Ellos solo tiran todo al suelo y créanme: los baños me dan escalofríos. La verdad no quiero saber lo que hacen ahí. He encontrado bastantes cosas para una vida en terapia. Pero este es mi trabajo y el verano ya empezó. Ya no hay nada para hacer en el colegio; ya recibimos nuestros resultados finales y fuimos aceptados en Oxford. Hasta me dejaron ir a una fiesta con Charlie. Fue bueno por una vez.

Charlie y yo hemos estado trabajando ya una semana y él lo está haciendo bien. Ha visto a Rhonda gritándoles a todos y sé que está asustado, así que trata de no cruzarse con ella. Literalmente no me puedo quejar. Pero Charlie estaba en lo correcto en una cosa: Es bueno tenerlo aquí. Podemos relajarnos juntos en las noches –porque todos los empleados del centro de retiros Drennan viven en el complejo de lunes a sábados–, beber un poco de té y burlarnos de algunas celebridades. Este verano tenemos varias y es bastante molesto porque esta temporada tenemos más celebridades jóvenes que en cualquier otra. Pueden imaginar como Jenny y Kimmy, mis dos monstruos llamados hermanastras, ya están enloqueciendo. Juran que este verano ellas encontrará a sus maridos.

Charlie estaba en lo cierto, estoy agradecida de que tomara este trabajo porque hace las cosas tolerables para mí.

Respiro profundamente antes de empezar mi trabajo en esta habitación. No estoy segura quien se hospeda aquí, pero es claramente un chico, de eso estoy segura, y no está solo. Muchas celebridades vienen con sus “amigos” y este muchacho no es la excepción.

Estoy apunto de empezar a recoger piezas de vestir cuando mi walky-talky suena y puedo escuchar la molesta voz de Rhonda.

— ¡Arabella!— grita y me horrorizo — ¿Dónde estás? ¡Necesitas venir abajo ahora mismo y ayudar a los nuevos huéspedes que estamos recibiendo! Esto es importante.

Ugh, más celebridades. ¿Por qué, Dios? ¿No es ya bastante? ¿Cuántas celebridades tiene el mundo?

—Ya voy— respondo y una parte de mí está feliz de que ya no tengo que limpiar esta habitación… pero luego recuerdo que tengo que volver y terminar esto. Solo estoy posponiendo lo inevitable.

Con un resignado suspiro, dejo el cuarto, cerrando la puerta tras de mí y con mi carretilla. La dejo en el cuarto del conserje y me dirijo a la recepción donde Melissa debe de estar registrando a los nuevos huéspedes. Me pregunto si conozco a estos. Tal vez vienen de América, o algún otro país, esta vez.

Pero cuando llego al salón me congelo y le reprocho al cielo. No, Dios, te suplico, ¡No ellos!

Sí conozco a estos chicos, yo creo que todos en el mundo los conocen, pero Jenny y Kimmy están literalmente obsesionadas con esta banda. Lo han estado por los pasados tres años, desde que estaban en The X-Factor. Recuerdo que votaban todo el tiempo y me forzaban a votar por ellos también. Aún cuando no quiero, siento que se todo sobre ellos porque mis dos hermanastras no se pueden callar.

Charlie no sabe esto, pero a veces me encuentro a mi misma cantando una de sus canciones o bailando cuando Kimmy pone a todo volumen el estéreo. Su música es súper pop y pegadiza, no puedes culparme, pero los odio. No solo porque son celebridades y esos son la obsesión de Rhonda y la razón por la cual ella arruinó el negocio de papá, si no también porque son lo que mis hermanastras adoran. No tendría nada en contra de ellos si no fuera por esos detalles.

Solo el pensamiento de Jenny y Kimmy descubriendo que One Direction está en el complejo me da escalofríos ¿Y que si salto del techo ahora y termino esta agonía antes de que empiece?

Pero Rhonda me ve antes de que pueda escapar y me llama. Los cinco chicos voltean a verme y vuelo a gemir. Nadie puede saber esto pero si pienso que todos ellos son atractivos. Veamos si puedo recordar todos los nombres. Zayn es el de piel oscura y esa exótica belleza. Harry es el de ojos verdes y cabello rizado, el hipster de la banda. Louis es el de los ojos azules y el de cara linda y adorable, pero ahora tiene un poco de vello facial y se ve mejor que en posters; tiene su brazo alrededor de la cintura de una hermosa morena, su novia supongo. No sé su nombre. El otro moreno es Liam, con gruesas cejas y ojos marrones. El rubio es Niall, él es el irlandés y tiene su mano entrelazada con la de una preciosa rubia. Oh, así que tiene novia. Jenny tendrá el corazón roto.

¡Genial!

De todos ellos, pienso que Louis es el más guapo.

Muy bien, así que sí recuerdo sus nombres. Tres años de escuchar a Jenny y Kimmy hablando sin parar sobre ellos ha traído algunos beneficios… creo. Trato de poner mi mejor sonrisa mientras me acerco a ellos y se que me están chequeando pero se decepcionan. No los culpo, nadie podría verse bien en este uniforme: Un pantalón beige con una camisa polo azul marino y  tenis; además, soy la definición de ordinario.

—Estás aquí. Por favor, escolta a nuestros invitados a sus habitaciones— me instruye Rhonda, dándome las tarjetas de acceso así puedo saber a donde llevarlos. Luego susurrando me dice solo a mí —No lo arruines ¡Son millonarios!

Ruedo mis ojos antes de falsamente sonreír a los cinco muchachos y las dos chicas.

—Por favor, síganme y bienvenidos al Centro de Retiros Drennan— les digo con una cortesía, llevándolos al elevador.

Ellos comienzan a moverse y tomo el carrito con todas sus mochilas y empiezo a empujar ¿Dónde rayos está Fred? ¡Se supone que él debe de hacer esto! Lo mataré cuando lo vea más tarde porque tengo que llevar a One Direction hasta sus habitaciones cuando debería ser él. Estúpido Fred.

Nota:

A un lado la foto de Ella. (¿Sabían que ella es la que hacía a Gigi en "Los Hechiceros de Weverly Place"? Busqué quien era ella y me quedé como "Woha")