7. Alemania.
Agradecería mucho sus comentarios de qué les parece la historia hasta este punto.
Todos estaban sentados en el avión esperando ya el aterrizaje, Arthur estaba sentado al lado de la ventana solo mirando por esta con unos auriculares conectados a la pantalla frente a él, en los asientos de atrás tenía a Stefany y a Lizzy cual niñas hablando de lo que harían nada más aterrizar, ambas parecían muy emocionadas por aquel viaje al igual que no dejaban de mirar el avión fascinadas por como estan viajando. Isaac y Rachel por otro lado se encontraban en los asientos de adelante muy poco atentos a todo y ensimismados con pasar el cálido momento juntos, Rachel parecía estar algo emocionada por algún motivo.
-¿Crees que nos recibirán muchos?.-
-Claro que lo harán, si no es así no habrá problema, con tiempo posiblemente llegarán más.-
Rachel miró a su asiento de atrás mirando a Arthur quién solo escuchaba una música con sus ojos cerrados, él tenía dos asientos para sí solo. Solo por que quería más comodidad, ella volvió a su asiento con su pareja y le tomó la mano.
-Art no parece muy contento con este viaje, ¿estará bien que lo hayamos traído?.-
-Tranquila, él es así.-
-Él siempre está más feliz que eso, ¿de verdad eres su mejor amigo?.- Al decir esto último señaló hacia atrás de su asiento.
-Un poco, si, déjalo ser. Hay momentos en donde todos sólo queremos charlar con nuestra conciencia.-
-Va a terminar esquizofrenico si habla mucho consigo mismo.-
-Él a diferencia de ti, no le gusta la fama y no busca el dinero.-
-¿Y por qué le pago tanto?!...-
-Shhhh. Silencio boba. Si no recompensas la experiencia superior, no esperes respeto digno de ti. Él sabe más que tu de como ser escritor pero se conforma con ser tu editor, recompensa eso y nutrete con su experiencia. Es lo mínimo que puedes hacer.-
-Él se lleva un 15% de mi dinero.-
-Le das un día para corregir quince mil palabras mientras él tiene un trabajo de once horas aparte. No me sorprende que él tenga ojeras con una chica como tú de jefa.-
Rachel golpeó a Isaac en la cabeza. Tardaron alrededor de treinta minutos para que el avión empezara su aterrizaje, Lizzy y Stefany casi saltaron de sus asientos, al terminar su aterrizaje todos empezaron a sacar sus cosas de los maleteros y a guardarlas para luego salir en orden del avión, Isaac fue el primero en salir caminando por los pasillos llegando hasta la recepción del aeropuerto donde un par de aplausos se alzaron.
-Comentaste en público que vendrías, ¿verdad?.- Arthur estaba junto a Rachel esperando unos segundos.
-Si no lo hiciera todos se enojarian conmigo.-
Arthur salió por el pasillo y los gritos y aplausos se alzaron de una manera tenue y cuando Rachel salió todo se descontrolo aún más, Arthur sólo camino algo apresurado pasando por el registro de pasaportes con Isaac y recogiendo su maleta. Stefany y Lizzy estaban entre confundidas, emocionadas y nerviosas. Veían a Rachel firmar autógrafos y estas se acercaban curiosas a ver cual niñas viendo a su madre cocinar. Arthur y Isaac las esperaron ya con todas las maletas recogidas, una vez saliendo del aeropuerto todo parecía ser igual, muchas personas estaban tras unas pequeñas cercas junto a varios vigilantes conteniendo a las personas.
Muchos gritaban con euforia el nombre de Rachel quien se detenía nuevamente a firmar libros que las personas le daban, Stefany y Lizzy seguían a Arthur quien por inercia seguía a Isaac quien sólo quería llegar al auto que los esperaba. Un par de chicos llamaban a Arthur y este se detuvo un momento a verlos, estos agitaba un par de libros pero Arthur solo siguió su paso dejando aquellos chicos atrás. Rachel al ver esto se acerco a los chicos y firmó por él en aquel libro, ella hablaba Alemán ligeramente fluido.
-Disculpenlo, él no firma libros.-
-No se preocupe, gracias por su autógrafo.-
-¡Rachel, Vámonos rápido!.- Grito Isaac quien estaba mas que agotado y... ¿enérgico?.
Ella devolvió el libro y camino rápido hasta su grupo, todos se subieron a una minivan. Isaac de copiloto, Rachel, Lizzy y Stefany en los asientos traseros y Arthur quien estuvo guardando las maletas notó el gran detalle de que no había espacio ya que el taxi tenía un chófer.
-¿Y ahora?.- Él estaba algo enojado y camino hasta el asiento delantero del copiloto tocando la ventanilla de Isaac quien bajo la ventanilla para charlar con su amigo -¿Dónde voy yo animal?, las chicas tienen todo lleno de bolsos y nuestras maletas.-
Podía ser verdad que había mucho espacio pero entre todos reunían cinco maletas grandes aparte de los bolsos de mano que ellas llevaban.
-¿Y qué quieres que haga?, no soy científico, resuelve esto.-
-¿Cómo?, puedes irte a la mierda Isaac.-
El carro se fue con gran rapidez, Arthur había quedado a la deriva sin mucho por saber y solo con una localización del departamento en su celular. Maldijo en silencio haber tenido que ir a ese viaje.
Rachel al ver que lo habían dejado tomó la oreja de Isaac desde su asiento y la retorcido tan fuerte como podia.
-Pídele un taxi, no seas tan cruel con él.-
-Déjalo, él quería pensar ¿no?, pues que piense mientras camina a casa.-
Lizzy al ver aquello no pudo quedar callada, la intriga y el ansía de chisme la llamaban.
-¿Usted tiene algún problema con él?.
-Por supuesto que no, él y yo nos entendemos niña, no te preocupes, él puede estar por estas calles tranquilo.-
-Tengo hambre.- Y aquí seria donde una actitud importuna lo cual ya no era raro vino de Stefany.
Rachel suspiro con pesadez y se acarició un poco la cabeza.
-Bien, vamos a comer algo, tenemos tiempo.-
El tiempo del día pasó con rapidez dejando caer la noche, después de unas horas de paseo y comer, el grupo de visitantes llegó a su departamento el cual parecía un área residencial pero no, era un departamento accesible de cuatro estrellas. Después de pasar por la recepción con esa exagerada cantidad de maletas, todos subieron por el ascensor muy agotados. El ascensor se detuvo en el piso16 y Isaac fue el primero en bajarse guiando a todos los demás, pocas eran las habitaciones de aquel piso tan amplio, Isaac se detuvo frente a una puerta y entró calmado mirando todo sin cuidado.
-Es muy grande todo esto, parece el departamento de Arthur.-
Las chicas entraron tras de él mirando todo fascinadas. Había una gran cocina que conectaba con la sala donde estaban tres sofás y un gran televisor. Isaac se lanzó al sofá más grande y Stefany y lizzy lo imitaron lanzandose a los más pequeños.
-Me duelen mucho los pies. Hmmm ahsh~- Stefany estiraba sus pies y leves gemidos de relajación salían de sus labios tan alegre de descansar de aquella manera.
-¿Qué hora es?.- pregunto Lizzy ya más relajada.
El sol ya se estaba ocultando sin cuidado a dejar alzarse la noche, Rachel miró su celular sentada en el borde del sofá de Isaac.
-Son las ocho y cuarenta.-
-Aún no puedo creer que tu seas una escritora.- Comento Stefany ya quitándose sus medias.
-Parece una broma que hayamos viajado contigo sin saber eso.- Acompaño Lizzy mientras veía por leves segundos su celular.
-Jajaja, tranquilas, no es para tanto, todo eso fue gracias a Isaac y Arthur, ellos me ayudaron a tener mis escritos.-
-Arthur te sigue ayudando, no te olvides de lo más importante.- Explicó Isaac quien ya parecía estar callendo en los brazos del morfeo.
-Si, jaja, un día lo encontramos sangrando por la nariz dormido sobre su computadora portátil, había estado trabajando treinta y seis horas editando libros atrasados.-
-No fue sólo por eso cariño, recuerda que ese día trabajó doce horas por fechas festivas. Se va a matar un día de estos por trabajar demasiado.-
-¿Y tú con qué derecho dices eso?, acaso no eras el que se tragaba doce pastillas de cafeína para no dormir.-
-Buen punto, ¿pido pizza?.- En un aire de energía y aburrimiento Isaac se levantó del sofá un poco más despierto.
-Mejor hamburguesas.-
Lizzy y Stefany habían quedado embobadas de como aquella pareja hablaba tan unida y complementaria, es como si de piezas perfectas unidas se tratase.
Lizzy ya un poco más intrigada no pudo evitar preguntar -¿Y quién le enseñó a Arthur a editar? O ¿dónde estudió?.-
-Isaac le enseño.-
Ambas chicas quedaron calladas ante escuchar esto. ¿Aquel desastre de persona fue el tutor de un editor?.
-Él ya era escritor para cuando yo le daba clases,era un completo asco, solo lo corregi hasta que entendió todo mejor, solo fue cuestión de meses hasta que no me necesitará. Todos comen hamburguesas completas ¿verdad?.-
-Sin cebolla la mía.- Y claro, Stefany era un poco delicada con su comida.
-Claro, una sin cebolla y otras cuatro de niños.-
-¿Quién coño come hamburguesas de niño ya estando mayor?.- Recalcó Stefany algo intrigada.
-Arthur, jajajajaja, odia muchas de las verduras, nunca se acostumbro a ellas.- Comento Rachel quien parecía ya saber demasiado del chico.
Todos al terminar de hablar caminaron por el departamento tomando las habitaciones que les gustaba, el aún mayor problema nació cuando notaron algo imperdonable para Isaac... Solo habían dos habitaciones.
-Te dije que pidieras una habitación para cada uno.-
-Ya, ya, calmate princesa. A ver, Arthur no tendrá problemas en dormir en un sofá por un par de días, está acostumbrado.-
-Ese no es el punto, se supone que esto era un viaje cómodo para todos, no sólo para nosotros Isaac.-
-Vale, tranquila. Mañana lo resuelvo, solo relájate un poco.-
-Me vuelves a decir que me calme y de verdad me vas a ver enojada.-
Todos los presentes guardaron silencio sabiendo que eso significa. (Callate o te callo a bofetadas), el timbre del departamento sonó y Stefany fue cual chica más feliz del mundo abriendo la puerta y para su gran sorpresa era la comida que había llegado, como ya estaba pagada solo tomó las bolsas y cerró la puerta esperando que el chico se fuera. Todos cenaron más calmados mientras charlaban de que harían el dia siguiente, todos con gran cansancio al terminar de cenar solo se fueron a sus habitaciones teniendo que compartir Stefany y Lizzy una de estas, ellas no tenían problema, ya lo habían hecho en ocasiones pasadas pero esta vez era diferente. Aquella cama en la que estaban era el doble de grande que una cama normal para ellas, después de una ducha en el baño de la habitación y una platica sobre que querían hacer ambas ya estaban preparadas para dormir... Aquella noche parecía ser tan diferente como emocionante.
Agotado y hambriento, dos características las cuales definen a Arthur casi perfectamente en aquel momento, estaba llegando a la habitación con completo cuidado, ya pasaban las once de la noche y él sabía que despertar a alguien más no era necesario.
-Vaya, te tomaste tu tiempo.-
Arthur dio un pequeño salto viendo a Rachel sentada en el sofá con su celular en mano.
-Veo que no me equivoqué de departamento... ¿Qué haces despierta?.-
Arthur se quito sus zapatos con sus pies ayudándose a si mismos y camino hasta la cocina estirando su cuerpo.
- No podía estar dormida sin saber que estabas bien, ¿tienes hambre?.-
-Tengo mucha hambre. Gracias por esperarme pero no era necesario, puedo esperar a mañana para comer, ve a dormir tranquila Rachel.-
-Deja de preocuparte por mi cuando me preocupo por ti idiota. Aquí Isaac te compró unas cuantas hamburguesas y hay algo de gaseosa en la nevera... ¿No quieres tomar una ducha primero?.-
-No, creo que sólo cenaré e iré a dormir.- Arthur tomó la gaseosa de la nevera y camino hasta el sofá dejando la gaseosa en una pequeña mesa donde estaba también la bolsa con las hamburguesas -Ve a descansar, mañana será un día ocupado para ti.-
Ella solo lo pensó por unos segundos y se levantó respirando con gran pesadez.
-Buen provecho y que sueñes lindo, espero que mañana amanezcas de un mejor humor.-
Ella dio un par de pasos hacia la habitación de ella y Isaac pero la voz de Arthur la detuvo.
-Rachel... Podrías retorcerle los huevos a Isaac cuando tengas la oportunidad, dile que es de mi parte.-
Rachel no pudo evitar reír un poco notando aquello tan inesperado.
-Siempre me a sido difícil entender el humor de ustedes.-
-Creeme, a mi también.-
Ella terminó de entrar a la habitación y Arthur estiró sus pies sobre la pequeña mesa y colocó la bolsa de hamburguesas en sus piernas ya más relajado.
-Esperó no tenga cebolla o está noche nadie va a dormir.-
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Gracias por leer.
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